"No entiendo por qué reaccioné de esa forma", pensaba el joven rubio mientras esperaba que la luz del semáforo cambiara de rojo a verde para permitirle el paso. ¿Quién iba a decir que la dirección donde debía entregar el pedido era el departamento de su más grande ídolo, Takuya? "Debe ser el destino... Pero... preferiría no haberlo visto de esa manera... Estaba... con una mujer... ¿Eh?...", los conductores de los vehículos a su alrededor comenzaban a perder la paciencia con él la no avanzar y lo demostraban haciendo sonar bocinas o gritándole. Al darse cuenta de ello, se apresuró en acelerar aún con sus pensando en sus dudas. "No sé por qué pero... pareciera que me decepcionó un poco... ¿Por qué? Se supone que es algo normal, ¿no? Takuya es muy popular, no es de extrañarse que esté rodeado de mujeres..."
-¡Es verdad!- gritó- ¿Cómo no lo noté antes? Takuya es una celebridad y puede tener a todas las mujeres que quiera... Claro, eso es normal... Si yo fuera como él también podría hacerlo... Tener muchas mujeres para mí solo... Eso suena bien... Ja...
Llegó al restaurante. Para su suerte, Hyde le dijo que por ese día había sido suficiente. Feliz de la vida, tomó sus cosas para irse. Antes de que saliera del lugar, Maya y Waka lo detuvieron. Lo invitaron para ir a tomar algo juntos, ya que, al día siguiente, no trabajarían los tres en el mismo turno. Ya estaban por cerrar el restaurante, así que le preguntaron a Hyde si se podían quedar más tiempo. Aceptó pero como condición tenían que invitarlo a él también. Pasaron dos horas charlando y tomando cerveza.
-Así que quieres ser cantante, ¿eh?- preguntó Maya.
-Si... y si puedo ser vocalista-guitarrista, mejor.
-¿Sabes tocar la guitarra, Miku-kun?- preguntó Hyde.
-Aun soy un principiante.
-¿Y a quién admiras, Miku-kun?- le preguntó Waka.
-A...
-¿A?
-Ta... Takuya de Moonless.
-¡Wa!
-¿Oíste eso, Hyde-san?- le dijo Waka.
-Si.
-¿Qué tiene?- preguntó Akiharu.
-Hyde-san y Tetsu-san, el bajista, son amigos.- explicó Maya.
-¿¡En serio!?- lo miró al mayor.
-Si, es una larga historia.
-Cuéntamela, por favor, Hyde-san.
-Está bien, Miku-kun, te lo diré.- cambió la posición en la que estaba sentado, colocando su espalda contra el respaldo de la silla y cruzando los brazos- Verás, hace unos años.
-Demasiados.- rió Maya.
-Tampoco son tantos.- lo regañó Hyde- Bueno, yo tenía una banda.
-¿Si?- Akiharu lo miraba como un niño pequeño al que le contaban un cuento.
-Si, yo era el guitarrista. Un día, el vocalista se enfermó, así que tuve que sustituirlo yo.
-Deberías escuchar a Hyde-san cantar, Miku-kun.- sugirió Waka.
-Algún día, tal vez... Bueno, esa noche debíamos presentarnos si o si. Al terminar, Tetsu, que había estado presente, fue a hablar conmigo, me dijo que lo mío era cantar y no ser guitarrista.
-Y tenía razón.- dijeron los empleados más antiguos que Akiharu.
-¿Me van a dejar terminar lo que estoy contando?
-Si, perdón.
-En fin... Tetsu fue varias veces más a vernos y tratar de convencerme de que me uniera a la banda que estaba tratando de formar.
-¿Y qué pasó?
-¿No me ves aquí?
-¿Lo rechazaste?
-Si. Varios años después, me volví a encontrar con él. Hablamos por mucho tiempo y me dijo que ya tenía la banda completa, aunque todavía no eran muy conocidos. Aun estaban grabando demos en ese entonces.
-Vaya...
-Lo que más me sorprendió fue la diferencia de edad entre los miembros, especialmente por uno de los guitarristas.
-Takuya.
-Si, él. Era muy joven, todavía estaba en la secundaría cuando se unió a la banda.
-Increíble.- dijo Maya.
-Si que lo es...- Akiharu quedó pensativo.
-A tan temprana edad y ser un gran guitarrista... Eso me trae recuerdos.- dijo Waka.
-Es verdad, Waka-chan tenía una banda también.- dijo Hyde.
-¿En serio, Waka-san?- le preguntó Akiharu.
-Si, cuando estaba en la escuela, con unas amigas.
-¿Y lo dejaron?
-Si, es que cada una quería seguir con lo suyo: buscar un empleo, estudiar, tratar con otras cosas... La música es algo que toma mucho tiempo de tu vida.
-Más para una mujer.- dijo Hyde- Pareciera que a las mujeres se les complicara todo el doble.
-La vida no es fácil.
Por un buen rato, Akiharu se quedó callado. Ya se hacía tarde, así que terminaron con su charla para ir cada uno a su hogar. Para el pobre Akiharu pareciera que el universo le jugara en contra últimamente. Primero sus amigos diciéndole que continuara con sus estudios o, por lo menos, que encontrara un trabajo para conseguir dinero; luego sus compañeros de trabajo recordándole cuán dura es la vida con los soñadores; y, por último, había algo más que trataba de no darle mucha importancia pero sabía que, muy en el fondo, no lo dejaría en paz tan fácilmente.
Todo comenzó a parecerle monótono, siempre igual: levantarse, desayunar, tal vez ir con sus amigos un rato o trabajar, hacer compras, pagar facturas, seguir trabajando y regresar a casa. Lo que un adulto normalmente hace en su cotidiano vivir.
-Odio esto...- dijo a medida que se dejaba caer en su cama- Necesito algo nuevo en mi vida, todo está muy aburrido.- suspiró- Me pregunto... si alguien más se está sintiendo como yo en este momento... Eh... ¡Eso es!- se sentó de golpe para luego ponerse de pie. Fue hasta su escritorio- bastante desordenado, por cierto- y allí encontró un cuaderno en blanco. Lo había comprado hacía bastante tiempo pero no lo había usado para nada- Si quiero triunfar como cantante, lo primero que necesito es una buena canción.- tomó un bolígrafo- Veamos... ¿Qué sería bueno?... Una canción con la que muchas personas se sientan identificadas... Una con la que exprese cómo me siento y que los demás puedan entenderme... Creo que ya lo tengo...- así comenzó a escribir lo que se convertiría en su primer canción. Se entretuvo bastante tiempo haciendo eso hasta altas horas de la noche.
Su primer canción se llamaría "Nyappy in the Parallel World"
-¿Qué es lo que quieres saber?- le preguntó Waka al día siguiente en el trabajo.
-Si en este momento hay alguien que esté interesado en mí.
-¿Por qué?
-Porque... "La verdad que no sé muy bien"... es algo que me intriga hace un tiempo.
-¿No será que...?
-¿Qué?
-¿Miku-kun está enamorado?
-¿E-enamorado? ¿Yo?- la miró sorprendido- N-no, no, claro que no.
-¿Seguro?
-Segurísimo.
-Vamos, no tienes de qué preocuparte, estás en confianza, yo no le diré nada a nadie.
-Es que...
-¿Tienes a alguien en mente, verdad?
-No...
-No me mientas, Miku-kun.
-Bueno... es que... no lo sé...
-¿Tienes dudas?
-En realidad no, pero es que me resulta un poco incómodo.
-¿Incómodo? ¿Por qué?
-Ese es el problema: no sé en qué pensar.- se estiró unos cuantos mechones de cabello rubio- Yo... últimamente... me he estado replanteando muchas cosas.-suspiró.
-¿Cómo qué?
-Verás... mis amigos dicen que trate de pensar un poco más en mi futuro... por eso conseguí este empleo... Cuando terminé la escuela entré en la universidad.
-¿En serio?
-Si, de arquitectura.
-Increíble, Miku-kun.
-Pero... me di cuenta de que eso no era lo mío... Al ver a mis compañeros me sentía muy raro, como que no encajaba... Así que opté por renunciar a eso luego de un año.
-Es frustrante renunciar a algo que siempre quisiste... Yo lo sé muy bien... ¿Recuerdas que Hyde-san mencionó que yo tenía una banda con mis amigas?
-Si.
-Al principio, todas estábamos muy felices construyendo nuestro sueño... pero con el tiempo nos dimos cuenta que nada es tan fácil como esperábamos.- Waka bajó la mirada con melancolía.
-Pero sabes qué, Waka-san, yo creo que si tus amigas y tú no pudieron con su banda es porque el destino les tenía preparado algo completamente distinto.
-¿Otra cosa?
-Si. Tú naciste con un objetivo en este mundo pero no era crear una banda, debe ser algo más.
-¿En... serio?
-Si. Pero todo ese tiempo que invertiste con tus amigas para tratar de hacer realidad su sueño no será en vano. Piensa en los buenos momentos que pasaste con ellas y todas las experiencias que viviste y que tal vez te ayuden algún día.
-Miku-kun...
-No sabía que podías llegar a ser tan profundo, Haru.
-¿Eh? ¡¿Shinya?! ¿Qué haces aquí?
-Teruki me dijo que habías conseguido empleo y quería verlo con mis propios ojos.- le respondió un chico, un poco más alto que Akiharu pero que no llegaba al metro setenta, de cabello negro- Te queda bien ese traje.
-A mí todo me queda bien.
-Lo que digas.
-Miku-kun.- le dijo la pequeña Waka.
-Ah, si. Shinya, ella es Waka, una compañera. Waka, él es Shinya, un amigo.
-Mucho gusto.- dijeron al unísono acompañaos de una reverencia. En ese momento, un nuevo cliente llegó a Boyaboya.
-Otro cliente.- dijo Akiharu- Esta vez voy yo, Waka-san.
-Está bien.
-Enseguida regreso.- se fue a atender al cliente. Shinya y Waka se quedaron en silencio, hasta que uno de los dos decidió hablar.
-¿Te llamas Shinya, verdad?
-Eh, si.
-¿Hace cuánto eres amigo de Miku-kun?
-¿Miku?... Ah, Akiharu.
-Si, el mismo.
-Pues desde la secundaria.
-Oh, bastante tiempo.
-Más o menos.
-Y dime, ¿Miku-kun era un chico popular?
-Si que lo era, no había nadie que no supiera sobre Akiharu Tsukiyama, especialmente al ser la estrella del equipo de básquet.
-Ya veo... ¿Y qué tal con las chicas?
-¿Tienes algún interés por mi amigo?
-No, él no es mi tipo. Es sólo que me intriga.
-¿Te intriga?
-¿Sabes si Miku-kun está interesado en alguien?
-Si.
-¿Si?
-Aja, últimamente está obsesionado con las artes marciales y quiere conocer a un maestro de judo muy bueno.
-No me refiero a eso.- suspiró- Me refiero si está pensando en iniciar una relación con alguien.
-Ah... Eso... Pues... creo que no.
-Qué raro. Hace un momento vino a preguntarme si habrá alguien que esté interesado en él.
-¿Eh?
-Yo tampoco le entendí muy bien.- se quedaron en silencio- Creo que Miku-kun está enamorado.
-¿Enamorado? ¿Haru?
-Si.
-¿De quién?
-Eso es lo que me gustaría saber. ¿Tú no conoces a nadie?
-No se me ocurre nadie... Deberías preguntarle a Teruki.
-¿Teruki?
-Es el mejor amigo de Akiharu desde hace años. Si hay alguien que debe saber es él.
-Pero no lo conozco.
-Si quieres yo puedo presentártelo.
-¿Lo harías?
-Claro, no hay problema, si es para ayudar a Haru.
-Gracias. Si quieres algo de comer yo te invito.
-Comida gratis por ayudarte a descubrir si Akiharu está enamorado... nada mal.
Shinya se quedó un buen rato en Boyaboya leyendo mangas. Había quedado con Waka en llevarla a conocer a Teruki para preguntarle lo de Akiharu. Para desgracia del rubio, rompió unos platos y Hyde lo obligó a quedarse trabajando por más tiempo. Así que mientras él trabajaba, Waka y Shinya fueron a buscar al baterista. Lo más probable sería que estuviera en la tienda de música junto con Yuuki.
-Hola, Yukiki.- saludó Shinya.
-Hola. ¿Quién es ella, Shinya? No me digas que conseguiste novia.
-¿Eh? No. Se llama Waka, es compañera de Haru en el trabajo.
-Mucho gusto.- saludó.
-Igualmente.- respondió el rizado.
-¿Dónde está Teruki, Yuuki?
-¿No sabías?
-¿Qué cosa?
-Hoy Teruki tenía que ir a la segunda audición de Moonless.
-¿Eh?
-¿Moonless? ¿Su amigo se presentó a la audición para tratar de ser el próximo baterista?
-Traté.
-¡¿Teruki?!- se sorprendieron Shinya y Yuuki al verlo entrar.
-No sé de qué se sorprenden tanto, si trabajo aquí.
-¿Ya terminó la audición?- preguntó el rizado.
-Si.
-¿Cómo te fue?
-¿¡Qué!?- gritó Akiharu.
-Lo que te dije.- le respondió Teruki quien había ido a verlo al trabajo.
-¿¡En serio!?
-Si.
-No... no lo creo...
-Pues créelo.
-Teruki...- sus ojos comenzaron a humedecerse.
-No me digas que vas a llorar.
-Pero... es que...
-Está bien, puedes llorar si quieres.- le dijo mientras lo abrazaba de manera protectora- Gracias... por confiar en mí.
-Yo... nunca dudé de ti...
-Lo sé. Si tú no me hubieras dado tu apoyo...
-No puedo creer que quedaste como baterista de Moonless.
-Yo tampoco.
-Mi mejor amigo... baterista de Moonless... Es increíble.