Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Perdona el pecado de amarte... por Hikaru-kun

[Reviews - 7]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Este fanfic trata sobre el fuerte amor de una gangster que se enamora de una chica varios años menor que ella. Es fuerte, pero también es lindo >.< Y constará de cuatro capítulos máximo. No deseo alargarla demasiado.

Se lo dedico a Valerys. Wow, chica, me inspiraste para que siguiera con este fic gracias por el review que me dejaste. Espero te guste, y acepto críticas constructivas.

Título: Perdona el pecado de amarte.

 

 

 

  Amor, pasión, comprensión, lujuria…. Palabras que complementan una de las partes importantes del ser humano. Esas palabras abstractas crean un sentimiento que ayuda a la conciencia a seguir el camino aunque hayas cometido errores irreversibles.

 

  Ésta es mi historia… Una que contiene drama y suspenso, pero lo más importante contiene amor y dulzura…Claro, a su manera.

 

  Espero que estas palabras los inspiren a enamorarse y a encontrar a la persona de sus sueños, que aunque no estés toda una vida a su lado, puedas disfrutar de las dulces memorias que hayan creado…

 

 

 

Xxxx

 

 

 

  -Por favor, señora… No lastime a mi padre. Si quiere, golpéeme a mí.

 

  Mis ojos verdes se cruzaron con su mirada asustadiza, pero a la vez, con un valor que nunca había apreciado en ningún ser humano… Me vi pequeña nuevamente, observando a la sombra de mi pasado en su carita aniñada. Dispuesta a cualquier cosa para lograr mi cometido, lo que deseaba hacer.

 

  Retrocedí del hombre ensangrentado, y me acerqué a ella, rozando con suavidad sus cabellos negros.

 

 -Así que estás dispuesta a recibir una paliza por un hombre dispuesto a venderte para pagar sus deudas… Tienes agallas, eso me gusta – la observé con fuerza, comenzando a hacerme la idea de que sería algo bueno cancelar aquella deuda por un bombón como esa chica…

 

 -Yo…Por favor, si eso libera a mi padre de una muerte asegurada, tómeme a mí y yo pagaré por la deuda.

 

  Sus ojos grandes y del color de la miel, me observaban con madurez, con esperanza… Una sonrisa cruel y despiadada marcó mis labios…

 

 -Si eso es lo que quieres, eso es lo que haremos – la agarré por los largos cabellos, pegando su rostro al frío cemento de la pared. Adentré mis sangrientas manos por su pantalón, rozando la suave piel que cubría la sedosa tela de su ropa interior.

 

 -Estás dispuesta a soportar esta clase de cosas por ese hombre? – le susurré airada al oído, perdiendo la poca paciencia que los dioses me habían otorgado.

 

 -Por favor… - me suplicó con lágrimas desprendiéndose de sus ojos, y fue cuando colé la mano bajo la tela e introduje un dedo en el caliente de su cuerpo, rompiendo la virginidad que ocultaba. Y fue cuando noté mi propia excitación, satisfaciéndome la entrega de su dulce pie, y su joven cuerpo.

 

 -De acuerdo… Me le entregaré pero si libera a mi padre… - nuevamente me volvió a observar con esa mirada tan dulce pero tan ahogante, y me molesté. Perdí la razón de mis sentidos, y se la lancé a mis muchachos, ordenándoles que la llevaran a mi apartamento y no la dejaran escapar.

 

 -Señora! Por favor, no asesine a mi padre!

 

  Ignoré sus palabras por completo, perdiéndome en el viaje que me causaba agarrar mi nueve .milímetros para su uso. Sus dulces ojos grabaron la memoria de mi mano agarrando los cabellos de su progenitor y colocando el frío metal en su sien. Apreté el gatillo que trajo la muerte de aquel ser despreciable, y la sangre fresca empapó mi rostro blanquecino por la pérdida de días. Observé a su dirección, con ojos perdidos, y su mirada llorosa me afirmó lo que yo supe desde el día de mi nacimiento…. Que soy un monstruo sin razón de existir, una persona sin sentimientos ni un corazón para latir… Pero como siempre, todos nos equivocamos. Y aprendí de la peor manera como una persona puede lograr tener sentimientos nuevamente… Lo aprendí a la fuerza, y acosta del sufrimiento de ella…

 

 

 

Xxxxxx

 

 

 

  Esa misma noche, luego de haber desaparecido el cuerpo, llegué a mi apartamento cansada, y con el olor metal de la sangre ahogándome el olfato. Al entrar, mandé a mis muchachos lejos de mi hogar, y la encontré sentada en el suelo, llorando con fuerza la muerte de su padre. Le di su momento, metiéndome a bañar para sacar la pesadez de un fuerte día de trabajo de mis músculos.

 

  Al salir, la encontré esperándome en la cocina con un cuchillo en manos, y como lo esperé, se lanzó sobre mí para clavar aquel metal en mi cuerpo. De una bofetada la lancé lejos, y arrebaté el arma de sus manos.

 

 -Si me quieres matar, necesitarás mucho más que eso… Cuál es tu nombre, pequeña?...- me observó con la mirada perdida, pero aún así me contestó.

 

 -Alexandra…

 

 -Alexandra… - saboreé su nombre – Si deseas escaparte de aquí, te diría que ni siquiera lo intentes. Tan solo te dejaré ir cuando hayas saldado la cuenta. Y eso comienza esta noche – me le acerqué peligrosamente, posicionándome sobre su cuerpo extendido en el suelo.

 

 -Qué es lo que quieres de mí? – me preguntó en un tono bajo, que reflejaba el terror que la estaba abarrotando.

 

 -Tú eras la que estaba dispuesta a recibir una paliza… De ahora en adelante serás mi perra, y te encargarás de darme placer y no quejarte. Si alguna vez me haces molestar, te mataré sin pensármelo dos veces – luego de mis palabras la besé a la fuerza, introduciendo mi lengua en el calor de su boca.

 

  Poco a poco, los deseos oscuros que me habían hecho, se apoderaron de mí, y la levanté del suelo para tenderla en la cama. Arranqué la camisa de su cuerpo, apreciando las pequeñas montañas que ocultaban el encaje blanco… Sonreí maliciosamente. Después de todo era una niña de quince años…

 

  Rocé el centro de sus piernas con la rodilla, a la vez que con el mismo cuchillo con el que me hubiera intentado asesinar, cortaba el encaje que me molestaba.

 

  Ella no se resistió, ni siquiera gritó. Me apoderé de su cuerpo, tomando aquellas partes vírgenes y marcándolas con mi nombre….

 

  Introduje dos dedos dentro de su cuerpo, y noté como sangraba al morderse los labios para no dejar salir los sonidos que yo deseaba escuchar. Y fue cuando perdí la fuerza de voluntad que la salvaba de mi lujuria. Mordí uno de sus pezones, lamiéndolo con deseo, y con un grito de placentero dolor, me dijo que lo estaba disfrutando. Seguí bajando hasta llegar al centro de su placer, y la probé gustosamente hasta lo profundo de su ser.

 

  Esa noche la hice mía reiteradas veces, y aunque me escondía el placer que experimentada, alcanzó el orgasmo en todas nuestras secciones. Quedó dormida a mi lado, aún con los ojos rojos de tanto llorar. Y mientras me fumaba un cigarrillo,  pensé en qué demonios era lo que estaba haciendo…

 

  Era la primera vez que yo hacía algo como eso. Mujeres nunca me faltaron ya que el hecho de ser gangster, me llovían aunque no fueran lesbianas… No la necesitaba. Pero había algo en ella que me llamaba la atención, algo que mi alma buscaba y aún no entendía lo que era… Esa noche no concilié el sueño fundida en pensamientos…

 

  Después de todo, yo, la mujer más temida del bajo mundo, nunca iba a entender lo que el estar enamorándose era… Siempre tenía que dar con mi cabeza en el pavimento para captar esas cosas llamadas sentimientos… Y ésta vez, iba a sufrir las consecuencias del camino que escogí…

 

                                                   Continuará….         

 

    

 

 

 

   

Notas finales:

Gracias por leer, y por favor, necesito saber si les gustó para así continuarla. Nos leeremos luego!


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).