Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Hagamos el amor por Naruke

[Reviews - 24]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

¡Hola! ¡Hola! ¡Hola! 

¿Como están personitas bonitas? Espero que muy bien, y sino pues... ¡animo! ^3^

Hoy les traigo a ustedes, personas valientes que han tenido el suficiente coraje para leer este fan fic, el cual espero que les guste n_n

Este fic va dedicado a una persona que es muy especial para mi, y que bueno... yo... ammm... me dio pena -////-u

Bueno, bueno como sea espero que les guste, y perdónenme por las faltas de ortografía que tenga u_u|||

¡Disfruten! ^o^

Notas del capitulo:

Los personajes no me pertenecen, son de Masashi Kishomoto.

¡Espero que les guste! 

Por cierto horrible resumen el mio... es la primera vez que hago uno, los otros me los hicieron ._.u

Mejor lean, sino seguiré diciendo tonterías 

XD

Título: Hagamos el amor.

Pareja: Sasuke x Naruto

Categoría: Shonen ai

 

Acostados, y cubriendo sus desnudos cuerpos, mientras que en sus rostros cansados una pequeña sonrisa se asomaba, mostrando la satisfacción que tenían después de una deliciosa sesión de sexo, era como dos jóvenes se encontraban.

 

En silencio disfrutaban de la tranquilidad del momento, inspirando aquel olor embriagador del otro, recordando con deseo el momento en que sus cuerpos se habían vuelto uno, y como sus gemidos resonaban en toda la habitación.

 

Juntaron mas sus cuerpos, abrazándose el uno al otro, siendo tenuemente iluminados por la luz de la luna, que se filtraba por las cortinas que se ondulaban ante la suave brisa nocturna.

 

Un leve suspiro escapo de uno de ellos, quien acomodo su cabeza en la rubia de su acompañante, empezó a cerrar con lentitud sus ojos que eran tan oscuros como la noche, estaba apunto de cerrarlos por completo para dejarse llevar por Morfeo, pero la cantarina y alegre voz de Naruto, le impidió que aquello sucediese.

 

-Sasuke baka- llamo el rubio moviendo su cabeza provocando un quejido en el otro que lo abrazaba con mas fuerza, tratando de volver a acomodarse, pero un movimiento algo brusco de su novio, lo dejo con el rostro clavado en la almohada.

 

-Teme, te estoy hablando- hablo de nuevo, ahora sentado en la cama, cubriendo su desnudez con las sabanas, mientras miraba como el azabache se quejaba por la acción de hacia unos segundos, el rubio sonrío, a veces Don amargado, parecía un niño pequeño, un niño que años atrás le había hecho una pregunta algo inusual, y que en ese momento se la quería recordar, después de todo esa pregunta los llevo a cometer su primera vez.

 

-Sasuke hazme caso, y deja de quejarte, además la noche es joven, no es hora de dormir- hablaba un emocionado Naruto, en su corazón estaba la esperanza que el otro se acordara.

 

Un nuevo quejido se volvió a escuchar acompañado de simultáneos insultos dirigidos al rubio, segundos después se comenzó a incorporar quedando sentado al igual que Naruto, quien le miraba con una sonrisa zorruna.

 

-¿Qué es lo que desea el señorito Uzumaki a altas horas de la noche? Porque para su infor…-su nueva queja se vio interrumpida al ser besado rápidamente por su alegre e hiperactivo novio, quedando en silencio y con un muy leve sonrojo, que no fue visto por el de ojos azules, ante la escasa luz.

 

-¿Ya dejaste de quejarte baka?- le pregunto burlonamente, le encantaba hacerlo enojar, pero si seguía así el otro le ignoraría y sin mas soltó lo que le iba a decir con un tono de voz infantil e inocente…

 

-Hagamos el amor-…que no iba con lo dicho.

 

-¿Qué?-pregunto el otro sorprendido por aquella proposición, pues bueno no es que no quisiera tomar ese cuerpo acanelado de nuevo, pero mañana, mejor dicho en unas pocas horas empezarían las clases.

 

-Que… hagamos… el… amor- repitió lentamente el rubio con el mismo tono de voz, haciendo la figura de un corazón con sus manos, guiñándole un ojo al otro, esperando que entendiera su indirecta, que no era mas que una forma que recordara aquel día cuando ambos eran unos niños de apenas nueve años.

 

Sasuke solo le miraba sin entender, su ceja alzada y labios un poco torcidos, fueron suficientes para que el chico de ojos azules entendiera que no había entendido, sonrío con tristeza, quizás había sido muy tonto de su parte pretender que el baka ese, recordara lo que hacia tantos años atrás había sucedido.

 

-Olvídalo, mejor durmamos, la noche no es tan larga como pensé- termino de decir acostándose en la cama quedando de espaldas al azabache, soltó un suspiro.

 

-Naru…

 

-Olvídalo Sasuke, mejor duérmete, mañana hay clases.

 

Ante esas ultimas palabras dichas por el Uzumaki la habitación quedo en total silencio. La duda se hizo presente en la mente del joven de ojos negros, preguntándose que había sucedido, estaba confundido.

 

Tras varios minutos de tratar de encontrar alguna razón lógica por la actitud tan extraña de su novio, sin encontrar respuesta, decidió mejor entregarse a los brazos de Morfeo, con lentitud se acomodo en la cama, vio de reojo a Naruto, para cerrar sus ojos.

 

Que… hagamos… el… amor

  

Sin poder evitarlo aquellas palabras resonaron en su mente, junto la imagen de su rubio haciendo el agraciado corazón con sus manos.

 

Sonrío, amaba a ese chico.

 

Y con aquel pensamiento en su mente estaba dispuesto a dormir, pero el recuerdo fugaz de una situación similar a la de hacia unos momentos invadió su mente, llevándolo a  un momento determinado de su infancia….

 

---Flash Back---

 

Con su mirada recorría aquella elegante sala mientras que balanceaba sus piecitos de un lado a otro al no alcanzar el suelo, estaba esperando junto con sus padres, que la familia Namikaze hiciera acto de presencia.

 

-Sasuke, mi amor, ¿En que piensas?- le pregunto una hermosa mujer  al pequeño que sin darse cuenta se había quedado tan metido en sus pensamientos que no había escuchado los llamados anteriores de su madre, hasta ese momento.

 

-¿Eh? En nada Oka-san- contesto el pequeño azabache mirando con una pequeña sonrisa a la mujer, que le miro enarcando una ceja sin creer lo que le decía su pequeño, para luego sonreírle, su niño crecía a gran velocidad.

 

-Fugaku, Mikoto, ¡Bienvenidos!- se escucho resonar en la estancia apareciendo por la puerta un hombre de cabellos rubios rebeldes, alto y de unos enigmáticos ojos azules, que era acompañado por una mujer de cabellos rojos quien con una sonrisa de oreja a oreja le daba la bienvenida a los otros dos, eran amigos desde su adolescencia.

 

El pequeño Sasuke solo veía desde aquel cómodo sillón como sus padres se acercaban a abrazar a los otros dos,  esperando que en cualquier momento le indicaran que podía ir con Naruto, el hijo de Minato y Kushina.

 

No paso mucho para que eso sucediera.

 

Sintió como alguien le tomaba el hombro, para luego ser calidamente abrazado en conjunto con un dulce beso en su mejilla, sonrío levemente ante aquellas acciones.

 

-Hola Sasuke-kun, mi hijo esta en el patio te anda esperando.

 

Y sin pensarlo dos veces se bajo del sillón de un salto, dando una leve reverencia a Kushina, la madre de Naruto; con rapidez salio corriendo hacia donde estaba su amigo rubio, escuchando a lo lejos como los adultos comentaban lo poco comunicativo que era, rodó los ojos un poco molesto, típico de ellos hablar sobre lo que hacían y no hacían los niños.

 

Ya casi al llegar al patio, detuvo su andar, preguntándose a si mismo si su hiperactivo amigo tuviera respuesta a aquella duda que tenía respecto a una platica que su Aniki tuvo con uno de sus compañeros de escuela, y que al preguntarle, lo único que hizo fue reír, para luego acariciarle sus cabellos azabaches, alegando que era muy pequeño para saber.

 

Al recordar eso frunció el ceño, el era un Uchiha, y como tal tenía que saberlo, el no podía tener menos conocimientos que su tonto hermano mayor, ¡Eso no!

 

Y con una leve mueca de inconformidad prosiguió con su andar, esperando encontrar la respuesta que tenía con Naruto.

 

Tardo unos escasos dos minutos en llegar hasta donde estaba el patio, hubiera tardado menos, pero había cometido el pequeño error de ir por el pasillo equivocado, un pequeño error, que no volvería a cometer, se decía así mismo. Estaba a punto de abrir la puerta corrediza que daba para el patio, cuando alguien mas lo hizo antes que el, escuchando su nombre en la voz infantil de Naruto.

 

-¡Sasuke!- grito un niño de la misma edad que el azabache, que tenía un gran parecido con Minato, mientras que su carácter era similar al de su madre.

 

-Hola Naruto- saludo Sasuke secamente. Era cierto que el carácter de ambos era muy diferente, y que por ende casi siempre estaban peleando, alegando lo muy amargado que era uno y lo muy tonto que era el otro, pero al final eran los mejores amigos, y se tenían la suficiente confianza para preguntarse cosas que a sus padres no, y en esta ocasión el pequeño Uchiha se veía en la necesidad de preguntarle algo al niño Uzumaki.

 

-Sasuke, Sasuke, ¡Sasuke reacciona!- llamo el rubio repetidas veces al ver como el otro se había perdido pensando no sabía que cosa. Una burlona sonrisa se poso en sus labios al ver como su amigo, se sobresalto un poco, parpadeando repetidas veces, volteándolo a ver.

 

-Por fin reacciones teme- le sonrió, el otro solo le miro mal, mirada que paso inapercibida por el pequeño, quien siguió hablando preguntándole que si que quería hacer.

 

Media hora estuvo escuchando hablar al rubiecito de ojos azules que de una u otra forma cambiaba de tema cada treinta segundos, en todo ese tiempo solo contestaba a sus preguntas, sin sentido alguno, con un “no”, “si” o un simple “hm” .

 

-¿Y que me cuentas Sasuke?- pregunto el pequeño, guardando silencio por fin, para suerte del Uchiha que encontró el momento de preguntarle lo que desde hacia unos tres días daba vueltas en su cabecita.

 

-Naruto-hizo una leve pausa, mirando seriamente al pequeño, quien ladeo su cabeza, preguntándose porque estaba tan extraño elteme- quiero preguntarte algo muy importante.

 

-¿Olvidaste de nuevo mi cumpleaños?- interrumpió el niño, haciendo un gesto gracioso de molestia, cruzándose de brazos, mientras que miraba con los entrecerrados a su amigo tratándolo de intimidar, cosa que no funciono.

 

-No me interrumpas- le devolvió la mirada Sasuke, la cual si causo efecto en el de ojos azules, quien sonrió nervioso rascándose el cuello.

 

-Como decía, tengo algo muy importante que preguntarte, no es que tú seas mejor que yo, ni nada de eso, pero puede que tú me ayudes a…

 

-¡Ya dime de una vez que es lo que quieres preguntarme! Perdón- se disculpo al interrumpir a su amigo azabache, pero, ¡le desesperaba que le diera tantas vueltas al asunto!

 

Un suspiro escapo de los labios del más pequeño de la familia Uchiha, el rubio era muy impaciente.

 

-Naruto tu sabes que significa, ¿Hacer el amor?- pregunto sin mas el azabache.

 

-¿Hacer… el amor?-repitió el pequeño poniendo un dedito en su boca, en un gesto que atribuía que estaba pensando.

 

Pasaron varios segundos en los cuales lo único que se escuchaba era el cantar de los pájaros, en conjunto con el casi inaudible sonido de la risa sus padres.

 

-¿Y?-pregunto el pequeño de ojos color negro, intrigado de lo que le podría responder el otro niño.

 

-Estoy pensando, ya casi lo tengo, así que no me distraigas baka- el otro solo rodó los ojos molesto, en su interior la curiosidad le carcomía aunque no lo demostrara tanto.

 

En ningún segundo aparto la mirada del cuerpo de Naruto, esperando que pronto le dijera que era lo que significaba Hacer el amor, en su mente infantil no encontraba respuesta a esas tres palabras juntas, ¿Cómo se suponía que el amor se hacia?

 

-¡Ya lo tengo!- el grito de victoria que dio hizo que el Uchihita saliera de sus pensamientos.

 

-¿En serio?-pregunto, su voz sonaba emocionada, podía ser muy serio, frío, calculador, pero eso no le quitaba el hecho que tan solo fuera un niño.

 

-¡Si! Tras varios minutos de pensar y pensar, al fin se que es- dijo haciendo la señal de la victoria con sus dedos, para luego sonreír de oreja a oreja, mostrando su dentadura blanca.

 

-Y… ¿Qué es?- ya no podía aguantar mas la curiosidad.

 

-Es…-se quedo callado unos segundos, torturando más al pequeño Uchiha, pensando mejor como explicárselo- tenemos que ir a mi cuarto y entre los dos lo podemos hacer, es que no se como explicártelo, es algo complicado.

 

Un bufido de molestia, fue lo único que escucha el ojiazul por parte del otro, para ser tomado con fuerza de la muñeca, y dirigido con rapidez a la que era su habitación. Le encantaba ver a Sasuke así, era tan divertido.

 

Sus pequeños piecitos hacían eco en aquellos largos pasillos; cuadros, floreros, puertas, puertas y mas puertas es lo que podía ver, nunca antes se le había hecho tan largo el camino para llegar al cuarto del Uzumaki, la curiosidad a cada segundo, a cada paso aumentaba. Una sonrisa de alegría e inocente se asomo en sus labios al ver por fin la puerta perteneciente al cuarto del niño que en ese momento era quien lo jalaba, entrando ambos por ella.

 

Ya adentro Sasuke volvió a preguntar que era hacer el amor.

 

La sonrisa del Uzumaki se ensancho, para contestarle, pero no lo que esperaba el otro.

 

-Te lo diré solo si lo hacemos entre los dos-sentencio el de ojos azules.

 

-¿Qué?

 

-Hagamos el amor, Sasuke-repitió el rubio dándole una sonrisa tierna.

 

-Esta bien-acepto el pequeño azabache con el ceño fruncido.

 

-Solo espérame voy por las cosas que necesitamos- dijo el rubiecito emocionado, yendo a buscar las cosas que iban a utilizar.

 

Media hora después…

 

-¿Estas seguro que así se hace el amor?-cuestiono Sasuke al otro, no estando muy seguro que eso era a lo que se refería su hermano. Se encontraba muy cerca de Naruto, tenía calor, el clima estaba apagado.

 

-Claro que así se hace-respondió ya fastidiado de la desconfianza de su amigo- y cuando terminemos le podemos ir a decir a nuestros padres lo que hicimos, de seguro se sorprenderán, ¡Vamos genial Sasuke! ¡Sigue así!

 

-¡Cállate dobe, no me concentro!

 

-Amargado, es la ultima vez que lo hacemos juntos-dijo enojado, tirándole en la cara un poco de pintura roja; enojando al otro, quien contraataco de misma forma.

 

En la habitación una guerra de pintura se desato, dejando de hacer el amor, que según el pequeño rubio no era otra cosa que… dibujar un corazón.

 

-¡Sasuke acabas de echar a perder el corazón, lo manchaste! ¡Ahora si, nunca, pero nunca vamos a volver a hacer el amor juntos!- le grito con fuerzas al ver como el pequeño Uchiha había tirado por accidente el botecito de pintura roja en el corazón que desde hace media hora llevaban haciendo.

 

-¡Pues no me importa! Además fue tu culpa por tirarme pintura-respondió el otro, defendiéndose.

 

Ni dos minutos más duraron en la habitación, cuando ambos niños corrían con gran velocidad, manchados totalmente de pintura, hasta donde estaban los adultos, dispuestos a acusar al otro.

 

-¡Papá!-fue el grito que lanzaron ambos niños en unísono al entrar a la sala, llamando la atención de los cuatro adultos quienes abrieron sus ojos de gran manera al ver el estado en el que estaban los dos; sus infantiles rostros mostraban un gesto de molestia, siendo cubiertos por pintura roja.

 

-¿Niños que sucedió?-pregunto Minato intrigado del saber porque estaban así, no esperando escuchar lo que grito su pequeño.

 

-¡Sasuke no quiso hacer el amor conmigo!

 

Todos los adultos ahí presentes abrieron sus ojos asustados, sorprendidos por aquella respuesta por el pequeño rubio.

 

-¿Qué?-pregunto con voz seria Fugaku, el padre de Sasuke- ¿Eso es verdad?-volteo a ver a su hijo, este se sobresalto e inmediatamente contradijo a su rubio amigo.

 

-¡No, no es cierto! Yo si quería hacerlo, pero Naruto me tiro pintura, y el fue el que dijo que ya no lo quería hacer conmigo.

 

¿Cuándo fue que ambas familias se encontraban discutiendo tan fieramente? El ambiente en aquella estancia se había vuelto muy tenso, mientras ambos niños miraban fijamente aquella escena, todo eso porque no quisieron hacer un dibujo juntos.

 

Soltaron un suspiro juntos, dejando discutir a sus padres, ya se les pasaría. Ambos niños se marcharon de ahí, mejor iban a terminar su dibujo, mejor dicho a volverlo a hacer.

 

Hacer el amor, era entretenido.

 

----Fin del Flash Back----

 

Sin poder evitarlo una pequeña risa escapo de sus labios al recordar aquel acontecimiento; tenía tanto tiempo que aquella sensación de nostalgia no se hacia presente en el.

 

Cerro por un momento sus ojos, aquellos recuerdos le daban tanta gracia, su sonrisa se ensancho más al recordar como había puesto en evidencia a su hermano, al decir que Itachi era quien había hablado de eso. Aquel día lo disfruto al máximo, Itachi, el chico perfecto, el genio de la familia, era castigado por su padre.

 

Abrió sus ojos ónices clavando su mirada en el cuerpo adormilado de su rubio, con quien a los nueve años disfruto de una forma inocente su primera vez.

 

Sin poder evitarlo, se acerco hasta donde este estaba, atrayendo su cuerpo en un abrazo, depositando un beso en la curvatura de su cuello, estremeciendo a Naruto, quien abría con lentitud sus ojos azules, pronunciando mecánicamente el nombre de su novio.

 

-Sasuke.

 

-¿Qué significa hacer el amor?- pregunto a su oído el azabache, estremeciéndolo a un mas, quedo unos segundos en silencio, sintiendo el calido aliento del otro en su oído.

 

-Necesitaremos una hoja grande y pintura para que te enseñe, no se como explicártelo- hablo sensualmente el Uzumaki, volteándose quedando cara a cara con el baka ese, acerco peligrosamente sus labios a los del contrario, quien sonrío, apegando más en un abrazo sus cuerpos.

 

-Ummm…entonces comencemos, estoy ansioso de aprender- término de decir juntando sus labios en un ardiente beso.

  

Como había dicho antes Naruto la noche era joven, y habían muchas cosas por hacer, y…

  

¿La escuela? La escuela era lo que menos les importaba en esos momentos.

 

El placer se apoderaba de cada parte de su cuerpo de nueva cuenta, disfrutando el cuerpo, el sabor del otro, sin duda Naruto era el mejor papel y Sasuke un estupendo plumón, que no dudaba en pintar de rojo al otro.

 

----- 

Fin

Notas finales:

 

Etto... etto... o//O

Espero que les haya gustado este fan fic tan extraño >.<

Esta basado en una situación real, cuando mi mente era tierna e inocente y pensaba que el amor se hacia con un lápiz y papel ^^u

Espero que dejen comentarios, recuerden que esto esta hecho por y para ustedes ^u^

Ya me voy, cuídense mucho.

Adiós.

>.<


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).