Por un voto de última hora (apareció apenas 10 minutos antes que yo publicara el capítulo anterior) el Sasunaru ha empatado con el Narusasu, por lo cual habrá de los dos en el fic.
Ciertamente, no esperaba tantos comentarios y se los agradezco mucho, creo ya haber mencionado a todos con anterioridad y espero poderles sacar de dudas.
Quién es ese
Heero se quedó mirando a Naruto y tocó su hombro tratando de ver si había algo más en el pergamino, porque eso no les decía mucho.
- Eso tiene chakra – dijo al ver que las manos del ninja temblaban un poco – al parecer es más de lo que señala.
- Creo que si – dijo Naruto – pero necesitamos salir de aquí para saber qué es, al parecer el chakra que dejó Orochimaru impide que mis técnicas de detección del de Sasuke funcione bien.
Dúo, Harry y Draco los miraron con curiosidad y salieron afuera. Tan pronto el pergamino abandonó el laboratorio, la entrada desapareció.
- ¿Qué fue eso? – dijo Draco sobresaltado.
- Seguramente el pergamino de Sasuke mantenía a la vista el laboratorio, es sabido por todos los ninjas en este mundo que Orochimaru mantenía ocultos sus laboratorios con poderosas técnicas prohibidas a fin de que nadie supiera a ciencia cierta dónde estaba y qué pretendía.
- ¿Qué es eso de técnicas prohibidas? – dijo Dúo.
- Bueno, son técnicas que pueden arriesgar tu vida o que necesitan la vida de un tercero para realizarlas, estas últimas también las llaman malditas y a la serpiente esa le encantaba utilizarlas – dijo Naruto enojado.
- Debe ser algo parecido a la magia negra – dijo Harry pensativo – excepto que las maldiciones imperdonables afectaban más bien el alma del usuario que acabar con su vida en sí.
- En la magia negra hay cosas peores que las imperdonables – le dijo Draco.
- Eso lo sabrás tú, porque de magia negra sé muy poquito.
Naruto volvió a abrir el pergamino y notó una tercera línea escrita:
“Kushina Uzumaki fue secuestrada, estando inconsciente después del agotador parto, a una aldea en el país del Arroz…”
- ¡En el país del Arroz había otra base de Orochimaru! – exclamó Naruto mirando a sus amigos – es bastante lejos de aquí, nos tomó tres días llega de Konoha a uno de esos pueblitos, y estamos alejados de allí – miró al bosque – necesito orientarme.
- Con esto – le dijo Dúo sacando una brújula del bolsillo.
Naruto lo tomó y sacó un mapa de su bolsa.
- Nosotros estamos más o menos aquí – señaló un punto sobre el mapa – y el país del Arroz está aquí – dijo luego de unos instantes – no estamos tan lejos, sólo hay que dar la vuelta a la montaña para llegar a la frontera.
- En tu mundo nadie pide documentos para nada – dijo Harry extrañado.
- Será porque en este mundo los documentos sólo los tienen ninjas calificados y los bandidos, quien es un simple ciudadano no los necesita a no ser que tenga grandes sumas de dinero y cosas así.
- O sea que tú tienes una identificación – le dijo Dúo.
- Esta es mi identificación – se sacó la bandana y les mostró el interior – allí está mi nombre y mi rango actual. Si ustedes ven a un ninja con un símbolo extraño y que tiene una tachadura en frente, es mejor evitarlo, es un ninja renegado.
- ¿Acaso no todos los ninjas son iguales? – dijo Dúo.
- Es obvio que no – le dijo Heero divertido de la ingenuidad de su compañero – Naruto ha mencionado que existen otras aldeas ninjas y que ellas pertenecen a distintas naciones, por lo tanto su símbolo ha de ser diferente también.
- Si – accedió Naturo volviendo a colocársela – Por ejemplo, los ninjas de la aldea oculta de la Niebla pertenecen al país del Agua, así que el símbolo de su bandana está relacionado con ello, los del país de la Tierra, son de la Aldea oculta de la Roca, tienen una roca de signo y así cada aldea.
- De todas maneras este mundo está dividido.
- Y hemos tenido muchos problemas por ello, cuantos más y cuantos menos han atacado a Konoha por ser la aldea cuyos ninjas son los mejores cotizados de los países ocultos, también somos los mejor evaluados y los más poderosos, sin embargo, no muchos entienden que el poder debe usarse para proteger y no para destruir.
- No me extraña – dijo Heero – desde que el hombre se hizo un ser pensante es que le gusta dominar a los otros mediante el uso de la fuerza, mientras mas bruta, mejor.
- Díselo a Wufei – sonrió Dúo – ese entiende tan solo de esa clase de “justicia”.
- Es mejor que comencemos a caminar – dijo Harry – no creo que sea agradable pasar la noche en el bosque.
El camino había sido más difícil de bajar que de subir, Draco había dicho que lo mejor era aparecerse como lo hicieron con la entrada, pero Naruto se había negado, al momento de adentrarse en las boscosas laderas del bosque sentía que una presencia extraña los vigilaba.
Y comenzaba a oscurecer cuando llegaron a un pueblito muy pequeño y rural en donde habitaban prácticamente sólo ancianitos, excepto por su exótico alcalde. Si de solo verlo a Naruto le había dado un ataque de risa que después de un rato tanto Dúo como Harry habían secundado y Draco había tenido que pensar en otra cosa para no imitarlos. A Heero pareció no afectarlo su extraña apariencia, se había topado con cada espécimen durante la guerra, que a otro más no le daba importancia.
- Somos viajeros y simplemente nos gustaría saber si hay alojamiento para nosotros – le dijo el castaño con mucha tranquilidad – ya, Naruto, deja de reírte como tonto – lo regañó – lo mismo va para ustedes dos – amenazó a Dúo y a Harry.
- ¿Dijiste Naruto? – dijo el albino de dientes de pescado – ¿Conoces a Sasuke Uchiha? – el rubio lo miró intrigado calmándose a la mención del nombre del moreno – Vaya, al fin te conozco.
- ¿De donde conoces a Sasuke?
- Formé parte de Taka, Juugo y yo lo abandonamos cuando se volvió loco frente a los guerreros del país del Hierro.
- Ya nos encontramos con Juugo, esta a cargo de un pueblo minero – le dijo Heero – estamos buscando al tal Sasuke.
- Sasuke estuvo aquí hace unos días, dijo algo acerca de una pista, creo que estuvo en algunos de los escondites abandonados de Orochimaru y se dirigió hacia el país del Té, no sé mucho más dado que no habló conmigo sino con un anciano que vive cerca de una ruinas, pero no les recomiendo ir allí ahora.
- ¿Por qué no? – dijo Naruto preocupado.
- El ancianito es malas pulgas, tiene cientos de trampas alrededor del camino que no puedes ver en la oscuridad, incluso ataca a cualquiera que se acerque de día si piensa que son ninjas.
- Bien, iremos por la mañana – sentencio Heero – no reclames, Naruto – le dijo antes que este pudiera abrir la boca – parece ser que soy el más indicado para dar órdenes.
- ¡Si, mi general! – le dijo Dúo cuadrándose recibiendo en respuesta una mirada asesina – no te enojes tanto, te vas a poner viejo.
- Contigo no hay caso, Dúo.
- Veré donde pueden alojarse esta noche, aunque no esperen demasiado, somos bastante pobres aquí.
- ¿Se puede saber por qué no fuiste con Sasuke?
- A Sasuke le falta un tornillo, cuando se obsesiona con algo no hay quien lo saque de allí, y si le dices algo, de seguro te mete a Kusanagi por el trasero – se estremeció.
Harry movió la cabeza sin comprender y los cinco siguieron al albino por el pueblo mientras este les conseguía alojamiento.
Definitivamente aquel era un pueblo fantasma de esos que se veían en las películas del Oeste Americano, al menos eso le parecía a Harry, así que caminaron con mucho cuidado por entre las antiguas casas abandonadas, Naruto había enviado varios clones de sombra por delante de ellos y habían descubierto muchas trampas, así que permanecían alerta.
- Esto es como caminar sobre campo minado – dijo Dúo.
- ¿Qué es eso? – dijo Draco deteniéndose.
- Draco no conoce nada fuera del mundo mágico – explicó Harry – es bastante lógico ya que fuera de este no existe.
- ¿Cómo que no existe?
- Bueno, Naruto, el mundo mágico existe secretamente en medio del mundo humano, generalmente los magos que descienden sólo de magos no son conocidos en el mundo normal, sólo lo son aquellos que nacieron en una familia no mágica, e incluso a ellos se les pierde el rastro.
- Es como si fueran fantasmas de carne y hueso – dijo Naruto.
- Algo así. Además, hay mucha gente no mágica, a la que llamamos muggles, a los que no le gusta nada que tenga que ver con la magia.
- Entonces, debo decirte que caminar en un campo minado es andar sobre terreno sembrado de explosivos que estallarán si los pisas – le dijo Heero.
- ¡NINJAS DE KONOHA! – gritó una voz cascada y su dueño atacó directamente a Naruto que de un salto lo esquivó quedándose de pie contra una pared – que es lo que buscan.
- Simplemente saber hacia donde se fue Sasuke Uchiha – le dijo Naruto.
- Él anda buscando a una persona muy importante y no dejaré que Konoha interfiera – le dijo molesto.
- Soy Naruto Uzumaki, último Sanin de Konoha y mi intención no es detener a Sasuke, al contrario, mis amigos y yo solo queremos ayudarlo.
- ¿Naruto Uzumaki, dijiste?
- Ese soy yo – le dijo poniéndose a su vista.
- Los Uzumaki eran todos pelirrojos – le dijo este en un gesto taimado.
- No conocí a nadie con mi apellido en Konoha y soy rubio porque mi padre lo era – le replicó.
- Minato Namikaze – dijo el anciano suspirando al fin – él se ganó el corazón de la niña más hermosa de esta aldea, Kushina Uzumaki.
- ¿Usted conoció a mi padre? – le dijo contento – al fin alguien que me pueda decir algo de él.
- ¡Vendió a la señorita Kushina!
- ¿Cómo la iba a vender si murió al detener la destrucción que Kyuubi estaba haciendo en Konoha? – le dijo Naruto molesto – ¡mi padre es un héroe de mi aldea!
- Era un oportunista, se llevo a la joya más valiosa del país del remolino.
- Mi padre era un gran ninja – le dijo Naruto con los ojos hechos una línea vertical – no se robó nada, de seguro ella ase quiso ir de aquí por su propia cuenta.
- Si, la engañó para que se uniera a su aldea y se convirtiera en ninja – le dijo el anciano aún más furioso – la embarazó y tres días después que ella dio a luz unos hombres pasaron por aquí, él la había vendido el día anterior a un poderoso feudal.
- Mi papá no la vendió – insistió en su defensa – él murió la misma noche en que nací yo – caminó hacia el hombre – no pudo haber sido el cuarto hokage quien entregó a mi madre a esos hombres.
- ¿Minato Namikaze era el cuarto hokage?
- Lo fue por apenas dos años y eso es todo lo que sé de él, aparte que el murió el día 10 de octubre hace 17 años entregando su vida por darme un mejor futuro – hizo un gesto – y si no me puede contar algo que no sean mentiras acerca de él, prefiero seguir sin saber.
- Estas son las ruinas del que fuera el País del Remolino, un lugar devastado por la guerra entre el país del Viento y el país del Agua, quedando sus restos finalmente dentro de las fronteras del país del Arroz. Cuatro grandes clanes habitaban esta nación, pero sólo uno de ellos sobrevivió, el Uzumaki. Se dice que sólo nacían niñas dentro del clan, quien se casara con una de ellas debía estar dispuesto a que su apellido se perdiera para perseverar el del clan. Antes de la segunda guerra ninja apareció una profecía, finalmente nacería un dueño del viento y sin embargo, su alma no le pertenecería a esta aldea – señalo el pueblo fantasma – Lady Kuhina se marchó de aquí siendo apenas una niña entusiasmada con la idea de ser tan fuerte como aquel mocoso rubio que pertenecía a Konoha. Casi sin darnos cuenta, ella se volvió toda una mujer y su corazón le perteneció a la aldea de su amado. Varios años mas tarde ella volvió siendo una jounin de Konoha, su novio era el mismo niño que se la había llevado de aquí, un ninja muy poderoso y temido entre los demás de su clase, muchos lo conocimos como el Rayo Amarillo de Konoha. Ella lo adoraba y estuvo feliz de anunciarnos, a los pocos que quedábamos, que estaba embarazada y que su hijo seria varón, un rayito de luz para las naciones, pero fue atacada, ninjas renegados querían el poder que ella dominaba.
- Pero ella regresó a Konoha – dijo Naruto.
- Su novio apareció de la nada y venció a los ninjas que eran de la aldea de la Roca y no supimos nunca más de ella – miro a Naruto – dices que él está muerto desde hace casi 18 años, entonces ¿Quién la vendió?
- Y por qué – intervino Heero pensativo – ¿Qué es lo que buscan de ella?
- Bueno, los dueños del viento manejan este elemento a su antojo, tienden a aprender rápidamente cualquier técnica que las contenga, pero no sólo eso, sino que también tienen la habilidad de fortalecer el poder del fuego, debe de juntarse con alguien que tenga ese elemento, está dentro de ellos el poder usar taijutsu con viento, una técnica de corto alcance mezclada con viento que se vuelve mortal al alcanzar más distancia que las batallas de cuerpo a cuerpo normales.
- Tengo una sospecha de quien pudo haber vendido a mi madre, es decir, a la esposa del cuarto hokage – dijo Naruto recobrando la calma – alguien que quería que yo fuera un arma, sin una familia que me acogiera, quien asumiera como Hokage estaría obligado a entregarme al orfanato, de allí podría sacarme y entrenarme como un ser sin sentimientos que le diera el máximo poder – dijo pateando el suelo haciendo una grieta – pero nunca estuve a su alcance, sin embargo, con mi madre presente se pudo haber destapado su engaño y nunca habría podido hacer todo lo que hizo mientras estuvo vivo.
- Pero se llevó sus secretos a la tumba – dijo Harry.
- Eso creía él, pero alguien sabía de sus planes y tenía buena información, o sino Sasuke no habría ido por ella – le dijo Naruto.
- Bien, ya sabemos qué es lo que pasó – dijo Draco fastidiado al fin – pero no sabemos aún por donde buscar a tu amigo.
- Iba hacia el país del Té – le dijo el anciano – si tú eres un Uzumaki, entonces esto es tuyo – le entregó una cajita – medio país del Arroz es tuyo.
- No me interesa, mi patria es Konoha – le dijo Naruto – vamos, chicos, el país del té está muy lejos de aquí, está cerca del país del Fuego, pero del otro lado.
- A caminar se ha dicho – se quejo Dúo.
A dos días de su salida del país del Arroz, Draco sentía que los pies lo mataban y Dúo se quejaba del maratónico viaje ¿acaso aquí no había medios de transporte? Naruto lo miro pensativo y se detuvieron en una granjita en donde Heero consiguió una carreta y dos caballos más o menos viejos a cambio de un montón de alimentos y con el compromiso de Naruto de enviar desde Konoha animales más jóvenes.
- Así se viaja mejor – dijo Dúo sentado adelante junto a Heero que guiaba a los animales – al menos no te matan los pies.
- Nosotros siempre viajamos a pie – le dijo Naruto desde atrás – a donde sea.
- Pero ustedes están acostumbrados – le dijo Harry colocando la cabeza de Draco en su regazo dado que él se había quedado dormido – en mi mundo existe el metro, hay autobuses y coches.
- En el nuestro también – dijo Dúo – incluso los transbordadores y todo tipo de naves, no es necesario cansarse.
- En ambos mundos son flojos – dijo Naruto – es bueno hacer ejercicio para el organismo, casi tanto como comer sano.
- Si, tienes razón – le dijo Heero – pero no se puede empezar con todo de golpe, ten en cuenta que eso puede causar problemas al corazón.
- Se ve un claro – los interrumpió Dúo.
- Estamos por llegar a la frontera del país del agua – Naruto se acercó a Heero.
- Así parece – Heero hizo un gesto.
- Hay gente a nuestro alrededor – dijo Dúo en voz baja.
- Harry – dijo Naruto y este asintió sacando su varita, estaría obligado a defenderse y defender al dragón a punta de hechizos.
Naruto liberó su kunai y siguieron avanzando evitando hablar, el rubio presentía que eran muchos los que los rodeaban, era gente extraña, su chakra parecía haber sido alterado con una especie de droga poderosa como de esas que alguna vez usó Chouji cuando trataban de evitar que Sasuke se fuera.
Salieron al claro y Heero y Dúo sacaron sus armas, no tenían muchas municiones a mano, así que tendrían que tratar de hacer los menos disparos posibles, darían de golpes, pero los disparos sólo podían ser ocho por cada uno, no contaban con tiempo para buscar y recargar.
Naruto estaba totalmente alerta, pero igual le cayeron en medio consiguiendo tomar a Draco pese a lo hechizos con que Harry los repelía lanzándolos lejos y desmayándolos. Saltó detrás del renegado y consiguió hacer que lo soltara pero había otros tipos esperándolos y se lo lanzaron a alguien más.
- ¿Cómo que no se despierta con tanto zarandeo? – dijo Harry preocupado.
- Le hicieron un genjutsu – le dijo Naruto parado en una rama – necesita que alguien lo saque de allí para despertar.
- Tratemos de evitar que se lo lleven más lejos – dijo Heero apuntando a uno de los tipos dándole en una pierna – Naruto, tu velocidad.
Naruto asintió rogando a los cielos poder controlarla y no matar al otro rubio en el proceso, además de no caer en el genjutsu, aún no era lo bastante decidido como para no ser presa de ellos.
Avanzó a toda velocidad y consiguió recuperar a Draco, sin embargo, algo extraño los golpeó y los cinco perdieron el conocimiento al mismo tiempo. Pero Heero consiguió ver a un hombre alto, de cabellos oscuros y ropajes extraños antes de perder totalmente la conciencia.
Heero, por el simple hecho de no ser tan humano como los demás, despertó antes que nadie. Estaban en una celda extraña, las paredes parecían ser de vidrio, pero no lo eran, su contacto era calido. Miro a los demás y vio a Dúo recostado no muy lejos, quiso acercarse a el, pero la misma clase de barrera se interponía entre ellos, lo mismo que con los demás.
- El se alegrará de saber que los tenemos, aunque aun falta uno – dijo una voz de mujer – si ellos están aquí de seguro vendrá por ellos.
Heero se sentó en el suelo y se dejó caer fingiendo seguir inconsciente, no seria tan difícil engañarlos, si podía hacerlo con las máquinas, con seres humanos lo conseguiría también.
- Vaya, siguen inconscientes – dijo uno de los tipos acercándose a la barrera.
- Dormirán por horas con el hechizo de Fei Wong – dijo ella.
- Mi lady Chronos, ¿nos pagara bien el señor Reed?
- Pobre de él si no lo hace – dijo alejándose – tengo información valiosa que no le gustaría que llegase al círculo celestial de magos.
- ¿Por qué no, mi señora? – pero ya no pudo escuchar más dado que estaban muy lejos.
Molesto, volvió a sentarse ¿cómo despertar a los otros? La barrera no le permitía llegar hasta ellos. Se quedo un minuto pensativo e intento llegar a Naruto proyectando chakra de la misma manera en que este le enseño a Harry, quizás no fuera tan potente como si había contacto directo, pero cabía la posibilidad que eso bastase para despertarlo. Pero no se sentía muy seguro ¿y si sus captores lo descubrían? No le quedaba de otra que arriesgarse. A los pocos segundos Naruto abría los ojos, sobresaltado.
- ¿Dónde estamos? – le dijo sentándose poniendo una mano en su frente – ¿y mi bandana?
- No lo sé, a ninguna de tus preguntas – le dijo – no trates de acercarte, hay una especie de barrera entre los cinco.
- Nos atacaron con una poderosa fuerza, no era un genjutsu, de eso estoy seguro – dijo molesto – no me gusta esto.
- Sean quienes sean nuestros captores trabajan para un tipo llamado Fei Won Reed, aunque creo que pretenden atrapar a alguien más.
- El nombre no me suena para nada – dijo el rubio cruzándose de piernas en posición de loto – lo que nos rodea no es chakra, no al menos de la manera en que se suele usar entre los ninjas.
- Quizás debiéramos despertar a los otros – señaló a Dúo.
- Intentaré algo, una energía menos detectable – le dijo y cerró los ojos, a los pocos segundos su aspecto estaba cambiado y una leve bruma pareció traspasar la barrera que los separaba llegando hasta los demás despertándolos poco a poco.
Dúo se enderezó violentamente, sobresaltado y trató de llegar hasta Heero pero cayó sentado al estrellarse contra la barrera.
Draco, que estaba más cerca de él, miró a su alrededor preocupado, conocía ese tipo de magia, era la misma que protegía los jardines de Malfoy Manor, sólo que esta era más agresiva con quien la tocaba, la de su casa simplemente confundía a quienes se acercaban y los hacia volver por donde habían venido sin saber a que había ido ni que había pasado.
- Esta es una magia muy poderosa – señaló Harry apoyando la mano sobre la barrera – no es del mismo tipo que usamos en nuestro mundo, tiene otro tipo de esencia, casi podría decir que es magia pura pero con malos sentimientos.
- Le decía a Naruto lo que escuché decir a unos tipos extraños – les dijo Heero sentándose en la misma forma que Naruto y les dio el nombre.
- Nunca lo había oído nombrar – dijo Harry – de seguro es oriental por el nombre ¿no te parece, Malfoy?
- Mi padre siempre se ha relacionado con magos extranjeros, he visto a todo tipo de magos de oriente y occidente, incluso magos rusos, pero nunca escuche a un mago con ese nombre.
- Quizás sea de otra dimensión, después de todo, él debe habernos mezclado ¿no? – dijo el moreno pensativo – su magia es poderosa.
Escucharon ruido de pasos y los cinco se pusieron de pie dispuestos a dar batalla si era necesario.
- Vaya, vaya, el hechizo del sueño no era tan poderoso como el señor Reed creía – dijo un hombre con la bandana de Naruto en la mano – quizás los hemos menospreciado – agregó agitando la bandana caminando entre ellos, se notaba que sabía donde había energía y donde no.
- ¿Qué diablos es lo que quieren de nosotros? – le dijo Naruto molesto.
- ¿Dónde esta el otro? – le replicó el hombre.
- ¿Qué otro? – dijo Naruto frunciendo las cejas.
- No me respondas con otra pregunta – le dijo el hombre dándole un golpe en la cara con la bandana que Naruto tomó por las puntas de la cinta y recuperó.
Heero lo miró ocultando la sorpresa y volvió su mirada hacia Dúo. Este sonrió y se saco de la bota el cuchillo que lanzó contra la mano del ninja renegado consiguiendo herirlo. Heero echó su mano atrás y sacó su pistola, las balas rebotaron en las paredes de metal y consiguió romper la barrera el tiempo suficiente para agarrar por el cuello al enemigo.
- Nos vas a decir que diablos quieres y como salir de aquí – le dijo sujetándolo por el cuello – No creas que no tengo la fuerza para romperte el cuello si lo considero necesario – le dijo de una manera tan fría que el hombre se estremeció asintiendo.
Heero pateó el cuchillo devolviéndoselo a Dúo.
- La barrera sólo puede contener a los seres vivos – le dijo – puedes romperla con algo que no la tenga.
Naruto empuñó la diestra e invocó su kunai especial e hizo un movimiento de arriba abajo como si dibujara una puerta por la que salió. Dúo hizo lo mismo y entre ambos liberaron a Harry y a Draco.
- Bien – dijo Heero aún con la voz de hielo.
Dúo se estremeció, hacía tanto que no escuchaba la voz asesina de Heero que ya se había olvidado de lo que era capaz el soldado perfecto.
- Eras un ninja del país de la Roca – le dijo Naruto – tu país se ha mantenido distante de las buenas relaciones del resto de las naciones ninjas.
- Muéstranos la salida – ordenó y este los sacó del lugar.
Dúo se mantuvo atento, al parecer los habían trasladado bastante lejos desde donde los capturaron. Miró a su alrededor mientras Harry y Draco mantenían sus varitas en alto, las paredes eran diferentes de las del laboratorio del tal Orochimaru, aunque la prisión parecía ser igual de laberíntica.
- ¿A quién pretenden capturar?
- A los seis guerreros de luz y sombra – le dijo.
- ¿Y quienes son esos? – le dijo Dúo viendo que ya estaban afuera.
- Dos ninjas, dos soldados y dos magos – le respondió al sentir que Heero lo presionaba por el cuello por el silencio.
- ¿Quién es el otro ninja? – dijo Naruto.
- Un moreno de ojos… - pero cayó muerto al suelo.
- ¡Heero! – le reclamó el trenzado al ver que este soltaba al renegado.
- Yo no fui – le dijo este moviendo al hombre – tiene algo extraño en la lengua.
- Un sello de atadura de lengua – le dijo Naruto – los he visto con anterioridad.
- Además, el golpe que lo mató fue de magia negra – dijo Draco.
- Sea quien sea nuestro enemigo, es un mago muy poderoso.
Chronos veía divertida la furia del mago chino, al parecer habían menospreciado a los cinco muchachos.
- ¡Idiotas! – les gritó a dos de sus ayudantes – ¡ni siquiera fueron capaces de poner el sello espía entre sus cosas!
- Señor Reed, no esperábamos que estuvieran despiertos – se defendía uno de los ninjas – por eso sólo fue Bacchio.
- ¿Acaso se les olvida que ellos son los guerreros de luz y sombra? El ninja es una leyenda viva ¡Debieron tener más cuidado!
La bruja miraba al hombre, era divertido verlo perder los estribos, aunque era verdaderamente peligroso en ese estado, podía matar a cualquiera sin ninguna clase de remordimiento. Ciertamente era muy especial, alto, de cabellos oscuros, ojos oscuros y vestido con una túnica azul marino con una capa por encima de los hombros. Por años había pertenecido a uno de los clanes más poderosos de Asia, sin embargo, cuando su medio hermano había llegado de occidente luego de largos años de estudio, había sido desplazado como sucesor del liderato del clan, cosa que lo había enfurecido. ¡Clow Reed era medio inglés! Pero ello no había cambiado el hecho que era más poderoso y centrado que él.
- ¡Malditos, síganlos sin que se den cuenta y pongan eso en donde corresponde o los matare de la misma forma que a su compañero!
Fei Won necesitaba de los seis guerreros sí quería obtener el control total del circulo celestial mágico y conseguiría ese poder a costa de lo que fuera antes que su querido medio hermano se diera cuenta.
Naruto se detuvo en lo alto de la montaña a ver el camino y reconoció el lugar, era famoso por sus termas, así que estaban ni más ni menos que en el País del Té, o sea que habían recorrido una gran distancia de donde los habían apresado, incluso estaban del otro lado del país del Fuego.
- ¿Sabes en dónde estamos? – le dijo Harry y Naruto asintió.
- Es el país del Té, este pueblito es famoso por sus baños termales – señaló hacia un sector – no hay nada mejor para tomar un descanso y reponer fuerzas que quedarse un par de horas en sus aguas.
- Allí quizás podamos conseguir más datos – dijo Heero – recuerden que no dijeron que Sasuke venía para acá.
- Vamos, tengo un lugar especial en donde nos podemos quedar – dijo Naruto retomando el camino – estuve aquí tantas veces con Jiraiya entrenando – dijo con nostalgia – la mitad del tiempo no le hacía caso o él no me lo hacía a mí porque estaba espiando a las chicas en el baño de al lado – sonrió – ah, en cuantos líos nos metimos juntos.
- Al parecer tenías mucha cercanía con tu maestro.
- Ero-senin se consideraba mi abuelo, aunque en algunas aldeas dijo ser mi padre – dijo riendo – lo escuche decir en mas de una ocasión que estaba orgulloso de mí, tal como lo había estado del cuarto, que quizás no tenía su talento pero que yo superaría a todas las leyendas, lástima que no vivió para verlo con sus propios ojos.
Heero se detuvo al ver que varias mujeres se acercaban corriendo hacia ellos.
- ¡Naruto-kun! – gritaban desaforadas y lo abrazaban pelándose por él – que gusto volver a verte ¿ya decidiste con quien vas a casarte?
- Venga, que aún soy menor de edad para ello – se evadió.
- ¿Y Quiénes son ellos? – dijo una de ellas – son muy guapos.
- Ellos son mis amigos: Harry, Draco, Heero y Dúo.
- ¿Quieren tomar un baño? Hoy no hay turistas, es la fiesta del Té y le toca a la aldea vecina, ya mañana nos tocará a nosotros hacer la feria.
- ¿Por qué no? – dijo Heero – podemos descansar un poco, creo que lo que nos pasó nos hizo ganar un poco de tiempo.
- Si, y tengo hambre – dijo Dúo – ni siquiera recuerdo cuando fue la ultima vez que comí – le sonrió a una chica a su lado.
Heero notó la mirada y el coqueteo del trenzado a su lado y se tuvo que tragar los celos, un día de estos Dúo llegaría al tope de su autocontrol y terminaría violándolo por hacer esas cosas en su cara.
- Claro, mientras se toman el baño les prepararemos la mejor de las comidas – dijeron ellas y los llevaron casi a la rastra al pueblo.
El agua estaba deliciosa, en eso estaban todos totalmente de acuerdo. Era algo sumamente relajante el poder darse un buen baño de esa forma.
- Ahora sé que me he perdido de grandes cosas – dijo Harry sentado en el agua caliente – es mejor que un baño de espuma.
- Eso se debe a que las aguas termales tienen minerales de forma natural y equilibrada – le dijo Draco – y en nuestro país hay muy pocas y son prerrogativas de los muggles, normalmente los magos no vamos a esos lugares.
- Y mis tíos jamás me hubiesen llevado con ellos a un lugar como ese ¿saben que no iban a la playa porque no les gustaba llamar la atención?
- Yo tampoco sabia lo que me perdía – dijo Dúo que tenía el cabello suelto – en nuestro mundo existen pero son algo que sólo los ricos se pueden procurar, soy un muchacho humilde y trabajador que no se puede costear algo así.
- Pues deberías pedirle a Quatre que te llevase – le dijo Heero totalmente relajado – una vez nos llevó con Trowa a unas que le pertenecen a su familia, lo único malo es que con sus hermanas rondando es prácticamente imposible relajarse por completo.
- Ah, no, si están sus hermanas de por medio ni por asomo voy.
- ¿Qué pasa con ellas?
- Quatre es el menor de 30 hijos y el único varón de la familia.
- ¿Treinta hijos? – Dijo Draco escandalizado – le ganaron a los Weasley,
- Los Winner son ricos, tanto que si dividieras la fortuna entre todos los hijos aún Quatre seguiría siendo rico – le explicó Heero.
- Eso si es ser asquerosamente rico – dijo Harry – o tengo una pequeña fortuna, pero no suelo usarla.
Draco iba a hacer un comentario cuando vio a una serpiente arrastrándose entre las rocas y saltó al otro lado de Harry.
- Hola – le dijo Harry y notó que los demás no entendían – ¿se puede saber qué haces aquí? – siguió hablando en parsel.
- Busco al chico rubio de las marcas en las mejillas – le dijo ella – mi amo me encargó que le entregara un mensaje.
- ¿Quién es tu amo? – le preguntó intrigado.
- ¿Sasuke estuvo aquí? – dijo Naruto al reconocer la serpiente como una de las que pertenecían al pacto…
Continuará…
Antes que nada, disculpen que no actualizara el miércoles como quería, estuve más ocupada de lo que esperaba y he tenido una semana de locos.
De momento, tendrán que esperar al otro sábado, voy apenas en el comienzo del capítulo siguiente, así que no sé si lo tenga listo el miércoles, en especial si me salen imprevistos por aquí.
Gracias por su paciencia y esperamos que les haya gustado.
Shio Zhang y Wing Zero.