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Harry Potter y las Cenizas del Fenix por Midnight Speechless

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Notas del capitulo:

Este creo que ha sido el más estresante que he tenido que hacer.

Espero y les guste, y porfavor dejen reviews.

Gracias Ladyduquesaa, setsu23, danmary, liaaran y los demas, es increible que mi fic tuviera tan increible respuesta.

 

Capitulo I: Un nuevo Harry

 

Exactamente paso una semana despues de saber toda la verdad, y Harry estaba impaciente por que llegara la citación urgente de Gringotts, en ese tiempo, el moreno puso en practica cualquier hechizo que hubiera tenido conocimiento, sabiendo que tenía que reforzar su magía, y preparandose mentalmente para lo que se le lanzara.

 

En algunos momentos se preguntaba si todo lo que estaba ocurriendo era verdad, pero él en su interior sabía que así era.

 

-¡Muchacho, baja en este momento!- ahí estaba una de las pruebas irrefutables que todo lo que estaba pasando era la cruda y perturbadora verdad.

 

-¡Voy en seguida!- respondio con fastidio el moreno, aguantandose el deseo irrefrenable de matar a esos desgraciados y largarse, pero sabía tambien que eso tenia que esperar hasta que la carta citatoria llegara.

 

-¿Si, que ocurre?

 

-¡No me hables en ese tono maldito fenómeno!- espeto Vernon Dursley, con la cara cambiando subitamente a un color granate- Ahora respondeme esto, ¿de quien es esta carta?- le pregunto al moreno, agitandole en la cara el sobre que tenía en la mano.

 

Harry arranco el sobre de las manos de Vernon y luego vio claramente el sello de Gringotts el banco magico, el moreno estallo en exuberante alegría subiendo de dos en dos los escalones dejando a su “tío”, al pie de las escaleras hecho un manojo de rabia. Entro apresuradamente a su habitación y abrio sin cuidado el sobre para sacar el pergamino y empezar a leer:

 

 

Estimado Señor Potter

 

Se le informa al Señor Harrison James Potter, su presencía en el Banco Magico Gringotts el día martes 29 de julio, para la lectura del testamento de la familía Potter e igualmente la lectura del testamento del Señor Sirius Orion Black.

Solo firme la carta que usted ha recibido con su sangre, confirmando así su presencia, la misma carta sera automaticamente un traslador.

 

Sera recibido por el celador de bienes Griphook, que inmediatamente lo llevara con el Director de Gringotts, Ragnok que antes le hara una prueba de reconocimiento de sangre y firma magica, y despues le leera los testamentos.

 

Gringotts

 

El rostro de Harry revelaba exuberante alegría y el no le importaba en ocultarlo, “¡por fin!”, despues de todas las desgracias que ha pasado finalmente, era libre, no dudo dos vecez y empezo a recoger todas sus pertenencias y los metio como pudo en el baúl escolar.

 

-¡Muchacho!- grito el cabeza de los Dursley, entrando a la que nunca más sería habitación de Harry, el hombre se detuvo en la entrada del destartalado cuarto y vío con ira lo que el joven mago estaba haciendo- ¿QUE CARAJO HACES TU MALDITO FENÓMENO?- exclamo con rabía agarrando por el cuello de la camisa al moreno, estampandolo contra la pared.

 

-¡Sueltame!

 

-¡Ni lo creas fenómeno, de esta no te salvas!- le grito con ira, cambiandole el color del rostro a un morado enfermizo.

 

-¡NO ME LLAMES FENÓMENO!- le grito el moreno de vuelta, abriendo subitamente su núcleo magico, lanzando una ola irrefrenable de aire que golpeo a Vernon en todo el pecho lanzandolo al otro lado de la habitación- ¡No sabes el gusto que sera hacerte sufrir horriblemente por todas las barbaridades que me hiciste pasar, maldito pedazo de mierda!

 

-¡Vernon!- Harry dirigio su atención a la puerta para ver a Petunia Dursley horrorizada a su esposo tirado en el suelo sangrando del pecho. Petunia levanto la vista y le dirigio una mirada furica al moreno- ¿que le hiciste a mi esposo, niño estupido?

 

-¡Ni te atrevas a tocarme desgraciada... o terminaras como la mierda de tu esposo!- espeto el moreno, con la misma emoción que su “tía” sentía en ese momento.

 

-¡Oh, por supuesto que me atrevere!- le respondio molesta dirigiendose al moreno decidida a agredirlo.

 

Nuevamente, Harry libero su núcleo y lanzo un pulso de aire que lanzo a Petunia a la entrada de la habitación donde su cabeza dio contra la parte superior de la puerta, rompiendole el cuello matandola al instante.

 

-¡PETUNIA!- grito Vernon viendo el cuerpo sin vida de su esposa.

 

-¡Callate ahora tu sigues!- le grito Harry escupiendole en la cara.

 

-¿Sabes?- empezo el moreno caminando en circulos por la habitación, poniendo en su rostro una expresión de reflexión- algunos magos pueden hacer ciertos hechizos sin el uso de una varita con solo abrir su núcleo de magía... eso llega a ser algo muy util en ocasiones de gran necesidad ¿no crees?- siguio el moreno viendo a Vernon con extrema malicia y luego darle una sonrisa aterradora- ...como en este... en el que planeo hacer una simple transfiguración... una cosa tan simple que terminara acabando con tu miserable y asquerosa vida... transfigurare toda la sangre que has perdido en gasolina y luego...- Harry se detuvo y se arrodillo frente a su tío, abrio poco a poco su núcleo de magía y trono sus dedos, viendo como la sangre que estaba regada alrededor de Vernon Durley cambiaba a un liquido opaco amarillento y menos espeso- arderas en el infierno junto con la desgraciada de tu esposa- termino con malicia, el moreno nuevamente trono sus dedos sacando chispas de entre ellos, que al llegar a la gasolina, hicieron ignición.

 

Harry se levanto, tomo su baúl, la jaula de Hedwig-con ellla dentro- y se dirigio fuera de su habitación hacia las escaleras todo esto sin quitar su sonrisa de maligna satisfacción al escuchar los gritos de agonía de Vernon por el fuego que le quemaba irremediablemente, el moreno sabía que Dudley intentaría hacer algo para salvar a sus padres si lograba escuchar lo que ocurría en su antigua habitación, asi que con otra ola de magía transfiguro la puerta de la habitación de su primo en una pared, esperando que con eso, logre quemar la casa junto con todos los que se encontraban en el interior

 

El moreno de ojos verdes, camino seis calles más abajo hasta llegar al parque donde por primera vez, vio a Sirius en su forma animaga-sin este saberlo- y donde por primera vez tomó el Autobus Noctambulo.

 

No se hizo espera y despues de 15 minutos el Autobus aparecio de la nada, abriendo sus puertas para darle paso a su interior, lo primero que Harry vio al entrar fue a Stan Shunpike el revisor del Autobus Noctambulo.

 

-¡Harry! Tiempo sin verte, ¿que has hecho en estos días compañero?

 

-Lo de siempre, meterme en problemas, discusiones, peleas... muertes- siseo con cierta malicia viendo el interior del autobus y acomodandose en una de las camas que siempre estaban en el momento que terminaba la puesta del Sol.

 

-Oh... bueno, que mal pero mira el lado bueno, ya te alejaste de ese problema.

 

-Si... tienes... razon ya me aleje de el.

 

-Y dime ¿en que problemas te metiste?

 

-En unos muy grandes, pero a la vez liberadores, no se como decirlo pero fue... devastador- respondio sonriendo de lado.

 

-Bien por ti Harry, te tengo que decir que es la primera vez que te veo algo diferente, no se como decirlo pero es... uhmm, no se... nuevo ¿tal vez?

 

-Si estas en lo correcto me siento... nuevo

 

Harry giro sobre si mismo y se acosto en la cama con sus pertenencias al lado y cerro sus ojos intentando descansar, Stan no se preocupo en seguir hablando con él, sabía que no era el momento para fastidiar más de lo que ya había hecho, al hacerle esas preguntas.

 

Pasaron varias estaciones y finalmente Harry llego al Caldero Chorreante, dirigiendose directamente a la barra donde estaba Tom sirviendo unas cervezas a los magos que estaban sentados alrededor.

 

-¡Harry Potter!- Harry rodo los ojos mentalmente, ese hombre nunca iba a cambiar, siempre llamandolo en voz alta para que los clientes fijaran su atención en el.

 

-¿Como estas Tom?

 

-Bien, bien ¿en que te puedo ayudar muchacho?- pregunto el camarero del bar mostrando un sonrisa desdentada.

 

-Quisiera una habitación Tom, me voy a quedar aqui hasta unos días antes de partir.

 

-Claro muchacho, toma la habitación que esta al final del pasillo, subiendo las escaleras.

 

-Gracias Tom, el pago por la estadía te la doy mañana en este momento es muy tarde y Gringotts debe estar cerrada.

 

-Oh, no hay problema muchacho, tu eres siempre bienvenido en este lugar.

 

-Gracias, buenas noches.

 

-Buenas noches Harry.

La habitación no era del todo mala, las paredes tenía estampados de flores negras con un fondo blanco, dando un buen contraste, piso a pesar de ser viejo, estaba bien pulido, habbia un viejo armario, un escritorio y una cama  de sabas blancas y doseles color crema. Harry dejo de observar el interior de la habitacion y dejo su baúl al pie de la cama, la jaula con su lechuza aún dentro, la poso sobre el escritorio que estaba cerca de la ventana, y luego sin hacer más nada se lanzo en la cama, callendo dormido al instante.

 

A la mañana siguiente, Harry se levanto con buenos animos, tranquilo, feliz de que por primera vez en todos estos años, no se tuviera que levantar por los irritantes gritos de Petunia Dursley para que les hiciera el desayuno a ella, su marido y su asqueroso hijo. Se vistio rapidamente y bajo las escaleras dirigiendose a la barra.

 

-Buenos días Tom.

 

-Buenos días Harry- le devolvio el saludo el camarero con su sonrisa desdentada- ...¿vas a Gringotts en este momento?

 

-Si, tengo que atender ciertas cosas y tener un buen cambio de imagen... aunque no lo creas, nunca me gusto mi forma de vestir, no había problema en ir y comprar ropa nueva, pero si había un serio problema en mover mi culo de mi cama para hacerlo- este comentario saco varias carcajadas del camarero que le dio una sonrisa y se despidio de él deseandole suerte en su diligencia.

 

La reunión con Ragnok era al día siguiente, pero igualmente necesitaba dinero con el que comprar lo que necesitaba para estar a la vista publica: ropa, mucha ropa y tal vez... algo más.

 

Harry saludo a los pocos duendes que conocía, antes de reunirse con Griphook, que lo llevaría a la boveda de ahorros que le habían dejado sus padres. Despues de eso, el moreno se dirigio a Madame Malkin's, y apenas entro vio a la bruja detras del mostrador.

 

-Madame Malkin, ¿como esta?- saludo el muchacho, dandole una cierta sonrisa seductora, que provoco el sonrojo de la vieja bruja.

 

-Señor Potter, que bueno verlo por aqui... estoy bien ¿desea algo?

 

-Oh si, quisiera un guardarropa completamente nuevo.

 

-Bien, vino al lugar indicado, solo espera aqui y le traere un nuevo diseño que es de mi creación- dijo la bruja, dirigiendose apresuradamente a la trastienda, regresando minutos despues con un traje transparente, algo extraño y estupido para opinión de Harry.

 

-¿Que es eso, Madame?

 

-Oh, es mi nuevo diseño magico, lo llamo el traje de los menesteres.

 

-¿Y que tiene de especial este traje?- pregunto el moreno aun más confundido.

 

-Este traje es especial y un prototipo que aun no saco al mercado. Veras este traje es transparente en este momento, como si fuera de plastico ¿verdad? Bueno, mira que ocurre cuando un mago se lo coloca- la mujer saco su varita y con una sacudida aparecio un maniqui, luego con otra sacudida el maniqui cobro vida y agarro el traje de Madame Malkin y se lo coloco-...mira bien de cerca, este maniqui no es un ser pensante asi que no le ocurrira nada al traje, pero si es un ser humano el que lo usa... todo cambía- la anciana guardo su varita y luego coloco una de sus arrugadas manos en el hombro del maniqui, sobre la tela del traje, la mujer cerro los ojos como concentrandose en algo... e inmediatamente Harry vio como el traje que antes era de una tela transparente casi plastica, cambiaba a un elegante conjunto que consistia en un pantalon negro, con camisa abotonada de color crema, chaleco de seda negro, y finalizando con una tunica negra con exquisitos bordados florales aperlados y un broche de plata.

 

-Increible Madame Malkin, usted se lucio- le alabo Harry sorprendido por lo que acababa de ver, simplemente la magía nunca lo dejaría de sorprender.

 

-Gracias señor Potter, dígame ¿cuantos desea?.

 

-Pero, ¿con uno no era suficiente?- pregunto extrañado.

 

-Oh no mi muchacho , lo que ocurre es que una vez que hayas utilizado el traje de los menesteres, este se queda permanentemente en el diseño que tu le creaste.

 

-En ese caso deme los suficientes como llenar el armario de una mansión- respondio el muchacho con una sonrisa maliciosa, que se ensancho aun más al ver la expresión que tenia Madame Malkin al oír lo que Harry quería.

 

-Ss...si señor Potter, en seguida, oh... ¿a donde le dejo el pedido?- pregunto titubeante la mujer.

 

-Dejelo al Caldero Chorreante porfavor, y gracias.

 

-No, gracias a usted señor Potter.

 

Harry se termino de despedir de la mujer y salio al exterior dirigiendose al callejon Knokturn, quería comprar la varita nueva y algo más que tenia pensado desde hacía mucho tiempo, los libros los compraría despues de la reunión al día siguiente en Gringotts.

 

Entro sigilosamente al callejon, pues no quería que reconocieran al niño-que-vivio en el centro comercial de magía negra mas importante de Gran Bretaña. Anduvo a paso ligero y en el momento diviso la tienda de varitas no-registradas, entro sin dudarlo dos veces.

 

-Oh, vaya, vaya ¿que tenemos aqui?- hablo el hombre con una mirada maliciosa a Harry- el nino-que-vivio en mi tienda es interesante tenerlo aquí señor Potter.

 

-Callese y vayamos al grano- espeto el muchacho- busco una varita nueva y tu me la venderas.

 

-Muy bien señor Potter, como usted desee- replico el hombre, impresionado de que la persona que suponía una imagen de luz para el Mundo Magico fuera tan... frío- aqui le presento varios tipos de madera y usted elegira la que responda a su núcleo magico perfectamente.

 

Harry empezo a observar todas las muestras: cerezo, manzano, espino, roble, caoba, cenizo, vid, sauce, tejo... pero la siguiente le llamo la atención, una madera de un color blanco puro... sin dudar Harry lanzo un hilo de magía desde su núcleo para que este se encontrara con la madera, e inmediatamente vio como la madera se levantaba varios centimetros en el aire, soltando un suave brillo dorado.

 

-Oh consiguio la madera para su varita, veamos...uhmm interesante, casi nunca nadie logra hacer que su magía reaccione al abedul blanco...-el hombre sonrio maligno- esto prueba que usted de hecho es un ser unico y especial... ahora quiero que elija el nucleo de su varita, vera los materiales en esta vitrina- dijo señalando una hilera de objetos.

 

Otra vez el moreno empezo en su diligencia y sin mirar simplemente solto la magía de su núcleo y espero que este encontrara lo que buscaba, la magía duro solo unos segundos en el aire antes de regresar a él y ver como tres objetos de levantaban de la vitrina, atravesaban el cristal como si fuera agua, y se detenian enfrente de él.

 

-Increible, tres núcleos muy raro, pero visto en muy pocas ocaciones... dejame ver... cabello de Veela... vaya una garra de Nundu ... oh, y una pluma de Fenix Oscuro...increible, tres cosas que son de criaturas tan oscuras y tenebrosas... pero a la vez muy hermosas, como un rayo de luz... fascinante, simplemente fascinante- Harry, ya exasperado por la actitud del fabricante, carraspeo la garganta para llamar su atención- disculpeme señor Potter... continuemos, busque la piedra preciosa que sirva de estabilizador para el aura magíca que obtendra su varita- y nuevamente Harry solto otro hilo de magía y esta vez la reaccion fue inmediata, una perla se poso en la palma del moreno- y tenemos finalmente... una perla, vaya, nunca crei que tan simple, pero no menos hermoso objeto, te hubiera elegido.

 

-Como usted dijo... soy un ser unico y especial- replico Harry con malicia.

 

-Me esta empezando a caer bien señor Potter, ¿me puede permitir la insolencia del por que el cambio?

 

-No hay ningun problema, la verdad es que siempre fui así... pero nunca me di cuenta- respondio sinceramente el muchacho.

 

-Ya veo... muy bien señor Potter su nueva varita estara lista en...- el hombre poso su vista en un viejo reloj que estaba a espaldas de Harry- 4 horas no más.

 

-Gracias, ¿me haría el favor de enviarlo al Caldero Chorreante?

 

-Por supuesto señor Potter, oh se me olvidaba son... 450 galeones

 

-Muy bien, aqui tiene- replico lanzandole una pequeña bolsa de cuero- ahi tienes 650 galeones... 450 por la varita... 100 por quedarse callado y... otros 100 para que grabes las siguientes runas en la varita, conocimiento, fuerza y luz... hasta luego señor...

 

-Longlock

 

-Señor Longlock... hasta luego.

 

-Espero vernos otra vez, señor Potter- se despidio el hombre, viendo como la puerta se cerraba.

 

Notas finales:

Dejen REVIEWS porfavor y asi sabre que tengo luz verde para mi fic.

 

Actualizare lo mas pronto posible.


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