Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Intenciones fallidas por Sweet Happiness

[Reviews - 7]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +



- Bien, ya es tiempo de tomar un descanso. Tienen 15 minutos



 Tuve suerte ya que Ruki, Aoi y Kai salieron por la puerta, dejándonos a mí y a Uruha solos.



 Dejé mi bajo en un lugar seguro y fui hacia Uruha.



- Oye Uru - le dije sentándome frente a él - este… te tengo una propuesta


- ¿De qué se trata?


- Bueno… si te estoy ofendiendo tan sólo dímelo



 Creí que las acciones serían más adecuadas para hacer una proposición de tal índole, así que puse mi mano en su rodilla para ir subiéndola por su muslo poco a poco, casi llegando a su entrepierna.  En un principio miró fijamente como se movía mi mano y luego una sonrisa se dibujó en su rostro.



- Así que esto te propones


- Si. ¿Qué dices? No nos haría nada mal compañía una de estas noches


- Creo que tienes razón. ¿Quieres que sea sólo entre nosotros o con alguien más?


- Mmm - no esperaba que Uruha preguntara eso - quisiera que estuviéramos solos


- Está bien. Eso sí, aceptaré siempre y cuando tú aceptes mis condiciones


- Dime - sentí curiosidad, deseaba saber en qué pensaba Shima


- Primero, el encuentro debe ser en mi casa


- Perfecto


- Y segundo, quiero ser yo quien tome la iniciativa al momento de hacerlo. Tú puedes fijar la fecha y hora


- Muy bien, acepto. Que sea el miércoles de la semana entrante a las 21:00 hrs.


- ¿¡El miércoles!? Ya sabes que al otro día tenemos ensayo


- Tú decides


- Humm… ok, que sea el miércoles


- Ya que hemos fijado todo, no se hablará más del tema hasta que ocurra, ¿hecho?


- Hecho



 Le sonreí por última vez y me fui a dar un paseo. Me sentía estupendo, había sido realmente fácil convencer a Uruha. Muy pronto lo tendría gimiendo y pidiendo por más, usaría su cuerpo tanto que no podría moverse por el cansancio.




• • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • •




 ¿Así que Reita tenía esas intenciones conmigo? No me sorprendía realmente, siempre lo descubría mirándome cuando me estaba cambiando y cada vez que tenía la oportunidad tocaba alguna parte de mi cuerpo. Lo que me sorprendió fue que tuviera el valor de hacerme tal proposición. Más aún, sabía lo que verdaderamente planeaba. Seguramente quería utilizar el pensamiento de que alguna vez estuvimos juntos para incrementar su estúpido orgullo de hombre.



 Aun cuando acordamos no hablar nada del tema, Reita me dedicaba sonrisas lascivas y hacía insinuaciones que por suerte sólo él y yo entendíamos.



 Estaba esperando a Reita, tenía todo preparado. Ya me había mentalizado para lo que sucedería pronto, sin duda Reita se llevaría más de una sorpresa aquella noche.



 Al escuchar el sonido del timbre respiré hondo y abrí la puerta. Estaba sonriente con un bolso en su mano.



- Hola


- Hola. Con permiso.



 Entró y dejó su bolso en él sofá.



- ¿Y bien?


- Ve a mi habitación mientras yo termino de prepararme. Hay algunos bocadillos por si quieres. Si estás desnudo para cuando llegue será mejor


- Ok. ¿Dónde está tu dormitorio?


- Por el pasillo, la última puerta a mano izquierda


- Bien. Te espero


- Claro - le dediqué una sonrisa falsa



 Fui hasta el baño, me desnudé y a continuación me puse una bata de seda azul. Me miré al espejo y pensé en que cumpliría mi objetivo de la mejor manera posible.


 
 Cuando llegué a mi habitación Reita se encontraba completamente desnudo sobre mi cama. Su pene aún no estaba erecto. Genial, no había estado “jugando” por lo que yo tendría el privilegio de hacer que su miembro reaccionara.



 - Por fin


- Vamos a divertirnos



 Me acerqué a una caja que tenía en mi habitación y de ella saqué un par de esposas y unas cadenas.



- Oh, cielos


- Bien, pon tus manos sobre tu cabeza


 
 Le puse las esposas y con la cadena lo amarré a la cama. Nuevamente me acerqué a la caja y de ella extraje unas cuerdas. Tomé uno de los tobillos de Reita y en él amarré el extremo de una de las cuerdas. El otro extremo lo até fuertemente a la pata de la cama, dejando su pierna flexionada. Cuando iba a hacer lo mismo con su otro tobillo me detuvo.



- ¡Oye, oye, oye! ¿Por qué separas tanto mis piernas?


- Tranquilo, así tengo mayor acceso a tu entrepierna. Haré que sientas algo muy rico - le respondí con tono seductor.

 

 Al parecer mis palabras lo calmaron aunque las utilicé como excusa, él no sabía lo que iba a ocurrir.



- Hum, creo que ya podemos empezar



 Bajé el nivel de las luces y me dispuse a desnudarme. En aquel momento me sentí excitado por la situación en la que me encontraba, así que decidí desnudarme con parsimonia.



 Me ubiqué al frente de la cama. Con mi mano derecha descubrí lentamente mi hombro izquierdo. Cerré mis ojos e imaginé que Reita era quien lo hacía. Repetí el procedimiento con mi otro hombro y la bata cayó hasta mi cintura. Acaricié mi cuello y bajé lentamente mi mano hasta mis tetillas. Moví mi dedo índice en círculos sobre una de ellas y la pellizqué suavemente. Con mi otra mano acaricié mi miembro por sobre la bata. Emití jadeos leves, necesitaba más que eso. Llevé mis manos hasta el nudo de la bata y lo desaté por completo. La bata cayó a mis pies y seguí acariciándome.



- Nnn así Reita - pronto se excitaría, de eso estaba seguro - ahhh más



 Abrí mis ojos y vi su mirada suplicante, su miembro se veía más duro, era momento de hacer a Reita partícipe de mi placer.



Me puse a su lado y tomé su cara con ambas manos. Con mi pulgar acaricié sus labios.



- Quédate quiero, si te mueves pagarás las consecuencias - le advertí



 Besé alrededor de su boca, lamí sus mejillas y bajé hasta su cuello. Deposité un beso y succioné su piel dejando una marca rojiza.



- Ahh Uru - jadeó y sonreí



 Volví a sus labios y lo besé calmamente. Introduje mi lengua en su boca, comencé a explorarla al tiempo que continuaba moviendo mis labios. Me correspondía sumisamente, se estaba comportando demasiado bien y eso me sacó de quicio, deseaba hacerlo enojar.



 Terminé aquel beso y me puse a horcajadas sobre él, quedando así sentado en su pecho sin cargar todo mi peso en él. Tomé mi pene y lo acerqué a su boca.



- Chúpalo


- ¿Qué? Por supuesto que no lo haré


- ¿Ah no?



  Agarré su miembro y lo apreté.



- ¡Ahhh!


- Hazlo. Abre la boca


- S-si



 Observé maravillado como sus labios se separaban de apoco. Metí mi miembro en su boca y él comenzó a succionar mi miembro el cual no tardó mucho en ponerse duro. Sus labios se movían, mas no su lengua.



- Lámelo, sabes exactamente como hacerlo



 Su caliente lengua se movió a la par de sus labios, recorría por completo mi miembro aunque no tan rápido como yo lo deseaba. Tomé su cabello y empujé su cabeza en sentido contrario al movimiento de mis caderas.



- Sii ahhhh si mmm sigue Reita ¡Así, sigue así!



 La punta de mi pene ya tocaba su garganta. Las arcadas se hicieron presentes en Reita al igual que unas cuantas lágrimas en sus ojos.



- Mmm bien Reita, ahh lo haces maravillosamente



 Continué moviendo mis caderas, ya sentía que el final estaba cerca. No tenía intención alguna de correrme en la boca de Reita, así que saqué mi miembro y comencé a masturbarme.



- Ohh, mmm que delicia ahhhhh



  Terminé por correrme, manchando sus labios y sus mejillas.



- Reita, te ves tan sexy. Me encantaría retratarte


- ¿¡Qué!? Ni se te ocurra


- No te preocupes, no lo haré - acaricié su mejilla y con mis dedos tomé un poco de mi semen - parecía que disfrutabas teniendo mi pene en tu boca


- No es así


- Si tú lo dices… Bueno, ya que te has portado tan bien me toca complacerte



 Sus ojos brillaron, estaba verdaderamente ilusionado.



 Me levanté de la cama y caminé hasta quedar frente a él. Me situé entre sus piernas y acaricié su pecho. Sabía cuan orgulloso estaba de los músculos de sus brazos, así que dediqué varios minutos a tocarlos y besarlos. Llegué a su abdomen y fui bajando hasta su vientre mientras lamía y besaba toda la piel a mi alcance. Su pene punzaba mi cuello, me llegaba a causar cosquillas. Lo miré con avidez y lo introduje a mi boca.



- Ahhh Uruha



 Subí y baje mi cabeza incontables veces, su pene estaba totalmente erecto. Con una de mis manos agarré mi miembro y me masturbé, se sentía exquisito. El sabor amargo del líquido preseminal se hizo presente en mi boca, ya era tiempo de seguir.



 Retiré su miembro de mi boca. Lamí la punta y bajé hasta sus testículos, los acaricié un poco y seguí bajando hasta llegar a su entrada.



- ¡No! Detente


- ¿Quieres que dejemos todo hasta aquí?


- No pero… ¡Yo debería hacértelo!


- ¿Eh? Eso no tiene gracia


- No voy a dejar que me lo metas - su mirada llena de odio me encantaba


- ¿Y cómo vas a detenerme? Estás amarrado, no puedes hacer nada - le sonreí burlescamente


- ¡Estúpido! ¡Te odio!


- ¿Ah sí? Pues yo no te odio, y te haré disfrutar mucho. ¿Creías que yo iba a ser tu uke? No seas tonto. Te conozco y desde el principio supe lo que te proponías. Querías agregarme a tu lista de putas folladas


- ¡No es así!


- Bueno, tú quisiste acostarte conmigo en un principio. ¿Quieres que te ponga lubricante? No pienso dilatarte


- ¡Déjate!


- Lo tomaré como un no



  Agarré mi miembro y metí la punta.



- ¡Ayy! ¡Lubricante! ¡Ponme lubricante por favor!


- Está bien



 Saqué una botellita de la misma caja de antes y vertí un poco de su contenido en mi miembro. Lo esparcí completamente y puse un poco de lubricante en la entrada de Reita.



- Bien, voy a entrar


- Si vas a hacerlo hazlo rápido pero… ten cuidado


- Lo tendré



 Posicioné mi miembro e hice presión. Sus paredes abrían paso a mi pene con total dificultad, cielos, Reita estaba tan estrecho.



- Ohh mierda que rico mmm


- Ahh duele


- ¿Te gusta?


- N-no


- Pronto te gustará, te lo aseguro. Sólo deja que… ahhh listo - por fin terminé de entrar en él - Cuando estés más cómodo me avisas. Quizás si hago esto ayude…



 Comencé a masturbarlo, pensé que tal vez así se relajaría.



- ¿Ahora se siente mejor?


- S-si


- ¿Puedo…?


- Espera… ahhh rayos… Ya puedes comenzar


- Aquí voy. Mmm esto es increíble


- Ahhhh


- Voy a ir más rápido


- ¡N-no, por favor!


- Dejaré de masturbarte, ahora tendrás que arreglártelas tú solo


- No Uru



 Habían lágrimas en sus ojos, le dolía, sin embargo estaba seguro de que se le pasaría pronto. Si no dejaba de masturbarlo jamás sentiría el placer que le proporcionaban mis embestidas.



- Aki, cálmate - le hablé suave y dejé de penetrarlo - Mírame a los ojos - acerqué mi rostro al suyo


- ¿Q-qué?


- Te juro que te sentirás bien - lo besé lentamente, disfruté del movimiento de nuestros labios - ¿Me crees?


- S-si


- Buen chico. Prepárate



 Lo tomé de sus piernas y moví mis caderas rápida y fuertemente. Su interior tan húmedo y cálido me fascinaba, sentí que me volvería adicto a aquella sensación.



 Sus músculos se tensaban y su pene estaba completamente erecto, se veía tan grande y duro.
 


- Ahhh


- ¿Ahora lo sientes mejor?


- Un poco


- Intenta levantar un poco tus caderas, yo te ayudo


- Ok


- Ohhh así se siente mejor mmm que rico


- Ahhhh


- Di mi nombre


- Mmmm Shima aahhh… ¡Ahhh!



 Me detuve en seco. ¿Qué había sido ese sonido? Aquel gemido había sido diferente a todos los que había emitido Reita anteriormente.



- ¿Y eso?


- Es que se sintió bien


- ¿Aquí? - moví mis caderas


- S-si - estaba más agitado que antes


- Afírmate de mis caderas con tus piernas. Me acomodaré mejor ¿Si?


- Si



 Dejé de sujetar sus piernas y puse mis manos a su costado apoyándome en la cama.



- Ahhhh ¿Mejor?


- Siii ohhh cielos esto es exquisito


- Te dije que te gustaría - sonreí


- Ahhh siii Shima mmm ¡más!


- Aki eres asombroso ahhh me encantas


- ¡Ahhhhhh Shimaa! - se corrió Reita manchando su torso


- Vaya, salió mucho


- Oh, estoy agotado


- Esto no termina aquí, aún no me corro. Quédate quieto, desataré tus piernas


- Está bien



 Desaté sus tobillos e hice que se girara de manera que quedara apoyado en sus rodillas.



- Shima estoy cansadísimo y…


- ¿Y…?


- Me duele todo - dijo con vergüenza


- ¿Prefieres moverte tú a tu ritmo?


- Si, por favor


- Ok. Déjame acomodarme



 Me puse debajo de él con sumo cuidado. Aún con sus manos atadas se posicionó sobre mis caderas.



- Ayúdame a meterlo


- Si


- Así, despacio… ya déjalo, yo continúo


- Bien


- Te ruego que no me apures, iré incrementando el ritmo de a poco


- Bueno - me maravillaba lo sumiso que estaba Reita, nunca lo había visto comportarse de una manera parecida


- Ahhh se siente bien mmm Shima está tan grande


- Te estás excitando de nuevo - comenté con gracia


- No puedo evitarlo, me calientas


- Tú también, estás realmente bueno


- Ahh Shima apúrate y córrete, quiero sentirlo


- Ve más rápido


- Lo intentaré


- ¿Duele mucho?


- En la mañana dolerá más - se rió un poco


- Algo tendremos que hacer, pero ahora no quiero pensar en eso


- S-si aahhh. No resisto, quiero más


- ¿Te ayudo?


- No, déjame a mí. Ahhh así se siente tan bien ohh mierda - sus caderas se movían más y más rápido


- Mmm ya no aguanto ¡Akii! - gemí al tiempo que me corría


- Ohh está tan caliente, m-me gusta - de su pene salían gotitas de semen - Ahh no hagas eso


- Antes no querías que dejara  de hacerlo - moví mi mano con maestría alrededor de su pene
 

- ¡Ahhh! - otra vez se corrió pero ahora manchándome a mí también - Cielos - dejó su cuerpo reposar sobre el mío e intentó pausar su respiración


- Voy a levantarme


- No, quédate aquí


- ¿No te duelen los brazos? Quiero desencadenarte


- Apúrate

 

 Tomé la llave y le quité las esposas a Reita. Se metió bajo las mantas y cerró los ojos. No tardé mucho en hacerle compañía.



- Quiero hacértelo de nuevo - le susurré, me encontraba de costado, él me estaba dando la espalda.


- No Shima, me duele mucho


- Sólo una vez más


- No. Ahhh te dije que no



 Puse mi miembro en él, estaba más dilatado y ya no costaba tanto. Abracé su cintura.



- Con un poco me basta



 Besé su cuello mientras lo penetraba. Él levantó levemente su pierna para tener más facilidad al hacerlo.



- Mmmm que daría por tenerte todas las noches así


- Ahhh Shima



 Fueron tan sólo minutos que me parecieron eternos. Nos corrimos una vez más y permanecimos en la misma posición durante un tiempo. Ya era de madrugada.



- No podremos dormir casi nada


- Sólo a ti se te ocurre planear algo como esto en mitad de semana


- Shima


- ¿Hum?


- Te quiero


- Yo también te quiero Aki. Gracias


- A ti igual… aunque luego querré matarte


- Lo sé




• • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • •




- Reita, levántate


- ¿Ahh? - abrí mis ojos y vi a Uruha - ¿En dónde estoy?


- ¿No te acuerdas? - sonrió - Tienes una hora y media para levantarte, darte una ducha, desayunar y partir a la compañía. ¡Vamos, rápido rápido!



 Intenté sentarme y emití un gemido de dolor.



- ¡Ay!


- Yo mejor me largo. Dejé tus cosas en el baño, está junto al frente de esta habitación. Date prisa - dijo y salió rápidamente dejándome solo


 
 Me dolía mi trasero horriblemente. La noche anterior lo había hecho con Uruha tres veces y peor aún; yo había sido el uke.



- Mierda - me dije a mí mismo - no debería haberlo disfrutado tanto



 Hice un esfuerzo sobrehumano y me levanté. Me fui desnudo hasta el baño, limpié todo mi cuerpo y luego pensé en ponerme el jabón de Uruha. No, así tendría el mismo aroma que él y sería demasiado sospechoso.



 Me vestí y fui hasta la cocina.



- Te preparé el desayuno. No queda mucho tiempo


- Ya lo sé - dije enfadado


- ¿Te duele mucho?


- … - le dediqué una mirada fulminante y sonrío ladinamente


- Lamento no tener nada que te alivie. Creo que no podrás sentarte en todo el día, ¿Me equivoco?



 De haber tenido algo para lanzarle lo habría hecho, sin embargo al no tener nada preferí ignorarlo.



 Cada uno se fue en su propio auto. Llegué a la compañía un poco después ya que opté por tomar otro camino.



- ¡Hola! - me saludó Ruki entusiasmado. Uruha permanecía sentado afinando su guitarra


- Hola


- ¿Y ese ánimo?


- No es nada


- Si tú lo dices…


- ¡Oigan! Les tengo una noticia - nos dijo Kai entrando a la sala de ensayos


- ¿Qué sucede? - preguntó Aoi


- Hoy todos deben quedarse obligatoriamente a una cena que darán los ejecutivos


- ¿Es realmente obligatorio? - mierda, si era así tendría que sufrir un suplicio todo el día


- Si, es absolutamente obligatorio. ¿Tenías planes?


- No realmente


- Bueno, espero que los demás tampoco hayan tenido planes ya que tendrán que dejarlos de lado, esta cena es muy importante


- ¡Bien! - dijimos todos al unísono, unos más entusiasmados que otros


- Oye Reita, ¿estás bien? - me preguntó Ruki


- Si, ¿por?


- Caminas raro


- … - abrí mis ojos sorprendido y sentí como los colores subían a mi cara, no tenía ninguna excusa. Busqué la mirada de Uruha, necesitaba su ayuda. Él se limitó a sonreír


- ¿Y esa marca? - dijo Ruki apuntando a mi cuello


- Ehh - llevé mi mano hacia el lugar que indicaba sin saber qué decir


- No me digas que… - se acercó y me habló al oído - ¿Tuviste sexo anoche?


- ¿Yo? No, para nada


- ¿Y por qué caminas así?


- Me caí por las escaleras


- Tu casa no tiene segundo piso


- Fui a un bar anoche y bebí un poco, me mareé y caí por unas escaleras, pero estoy bien


- Ok… ahora explícame lo de la marca


- Eso… bueno, conocí a una chica anoche y nos acostamos


- ¿No eras tú el que dijo que no había tenido sexo anoche?


- Ehhh es que…


- Reita, Ruki - nos llamó Uruha - por favor, déjense de hablar tanto, los estamos esperando a ustedes para comenzar



 Miré a Uruha totalmente agradecido (aunque seguía enfadado por lo de la noche pasada).



- Así que Uruha sabe lo que sucedió


- No es así


- Bueno - alzó una ceja - ya me encargaré yo de averiguarlo



 Rogué a los cielos que Ruki no terminara descubriendo lo que había pasado, y también pedí fuerzas para soportar aquel tedioso día. Mi más anhelado deseo era llegar a mi casa a descansar y que se me pasara el puto dolor.

Notas finales:


Hii! ^^


 Hace tiempo que quería subir esto pero en estas últimas han pasado miles de cosas [[tanto buenas como malas u_u]] He andado con un humor terrible, he sufrido una crisis existencial y eso .__.

Además que, a parte de que no me he metido mucho al pc, nunca me llegaba la inspiración y terminaba escribiendo como dos líneas y listo.


 Reita uke >w< siempre había deseado escribir algo así *o* No tenía idea de qué título ponerle, así que puse lo primero que se me vino a la cabeza xdd


 Emmm  que más... He tenido un montón de ideas últimamente pero no tengo mucho tiempo, lo que pasa es que para ganar algo de dinero durante una semana tengo que cuidar a la mascota del jefe de mi madre, un perrito llamado Azu que tiene 4 meses, que es muy demandante de afecto y que justo ahora duerme siesta [[tiene sus horarios xddd]] No me deja dormir en las noches, es que prácticamente me bota de la cama u_u' así que ahora estoy muerta de sueño y con mucho calor >.<


 Intentaré subir algo pronto, pero no prometo nada -.-'


 Bueno... muchas gracias por leer, en lo posible dejen reviews, me gusta saber lo que piensan ^^


 Que estén bien y que sean happy n_n


Chau :3


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).