Batiendo sus amplias y hermosas alas
arribó la mariposa
Quedándose muy admirada
por lo que tenía delante
A la orilla del estanque, con la vista baja
la araña de color rosa miraba su reflejo
“-No pensarás ahogarte-“
le increpó la de bello violeta
atrayendo su semblante
“-¿Qué más da si lo intento?-“
repuso cabizbaja la de ocho patas
“-Mucho me tomó llegar aquí
y vine desde lejos-”
Replegando la gloria que alto en el cielo
con ligereza la llevaba
la mariposa se acercó a la araña
“-Te miras en el agua
pero es claro que no estás viendo nada-”
“-¿Cómo podría ser eso?-“
contestóle la más baja
volteando incrédula hacia su acuática gemela
“-Las arañas se hallan en muchísimos colores:
amarillas, blancas y negras
Pero quiso el sol encapricharse
cortando la luz de tal modo
que hiciera de un insecto una gardenia
¿Aún así quieres acabar con este prodigio
hundiendo en el agua tu existencia?-“
La araña le miró entristecida
deseando que sus palabras fueran ciertas
“-Pero has llegado tarde, oh dulce mariposa
pues ni aun si lo quisiera
podría bajar de esta altura
que para siempre se me ha acabado la tela-”
Sonriendo de nueva cuenta
la mariposa alzó la cabeza
“-Tarde aún no es
si todavía puedo devolverte a la arboleda
Haciendo que brille nuevamente
el dulce tono de tu rosa
que ha hecho enfurecer a las flores todas-“
Y extendiendo sus alas
se inclinó humildemente
tanta cuanta era su hermosura
violeta y rojiza
“-Toma las alas de la mariposa
anda, ¡date prisa!
Sube a mi lomo y vuela conmigo
porque no estás hecha para que acabe
así tu destino-“
La más pequeña obedeció
no sin incredulidad
Pues verdaderamente lo que le atormentaba
era aquel miedo ingente
de elevarse hasta el infinito
nacida como, según ella, estaba
para hurgar en la tierra y entrelazar las ramas
Mas una vez que remontó el vuelo la majestuosa mariposa
la araña pudo ver lo bello que era el cielo
Y se sintió libre
como si aquellas alas fueran suyas
Se sintió alta
como si la tierra jamás pudiera volver a amenazarla
“-Volemos juntas para siempre, oh mariposa
Déjame que te acompañe
en tu incesante viaje-“
“-Juntas estaremos siempre
a partir de ahora
que he sido yo el ángel encargado de arrebatarte
Porque jamás que una beldad semejante
cayera de ignominiosa manera
habríase permitido la Madre-“
Y así, continuando el maravilloso viaje
vuelan la araña y la mariposa
con alas etéreas
La una violeta y brillante
galante y aérea
La otra de un rosa profundo
que nunca irá a repetirse
porque era único en el mundo.