Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Fast and Beautiful por urumelii

[Reviews - 277]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

waaaaaaaaaaa

ahora no tarde tanto o si???

espero ue no

bueno aqui esta la conit, ok estoy recibiendo muy pocos rvws y se que lo merezco por no apurarme pero no sean crueles :( como sé si les gusta o no?? D:

me apure para traerles la conti!!

espero les guste!!!

no me maten, solo azotenme (?)

Aoi

 

 

No sé como logré separarlos, no cabía duda que cuando se lo proponía Reita tenía una fuerza impresionante. Shou detuvo a Kai, quien seguía forcejeando y tratando de zafarse para aventarse una vez más sobre el rubio. Yo sostenía a Reita por la cintura, pero ya no hacía el intento de moverse siquiera, sólo respiraba agitadamente; sin embargo debo de admitir que la mirada que le dedicaba a Kai bastaba para que mi mejor amigo me diera miedo, y mucho.

 

Por alguna extraña razón ninguno de los cuatro hablábamos, generalmente Kai era la voz de la razón, él que nos regañaba si hacíamos algo mal o nos dejábamos llevar por nuestro impulsos. Ahora ¿Qué se suponía qué hiciéramos Shou y yo? Ciertamente no me veo regañando a nadie y a Shou menos. Sentía que no tenía siquiera la voz para decirles algo, aun si pensara que se habían vuelto completamente desquiciados. Reita sangraba de un labio y Kai de la ceja, pero en ningún momento el contacto visual entre ambos se quebró, sin decir palabras parecían estarse matando con la mente.

 

Estábamos en el baño del hospital, no podía dejar de pensar que era irónico que  en uno de estos mismos baños, yo había perdido la cabeza, recién había ocurrido el accidente de Nao. En ese momento había sido Kai quien me había tranquilizado, Shou quien me había motivado y Reita quien me había comprendido. Ahora todos los papeles estaban invertidos y no de una forma agradable. Quería decir algo, pero simplemente las palabras no salían, aunque estoy seguro de que no hubieran servido de nada, mis dos amigos parecían estar en un mundo completamente aparte.

 

-¿Qué pasó? – fue Ruki quien quebró el extraño ambiente en que estábamos sumergidos. Alzó una ceja al vernos, pero no pareció sorprenderle en lo absoluto. Kouyou estaba justo detrás de él.

 

Kai sonrió y puedo jurar que fue la risa mas siniestra que le he visto jamás – listo Reita, ya llegó. Pregúntale, pero sobre todas las cosas a mi no me busques cuando el resultado no sea el que esperas – se logró zafar de Shou de un jalón pero no se movió.

 

Todos estábamos estáticos. Sentía a Reita tensarse en mis brazos – no necesito preguntarle Kai, ya te lo dije. No entiendo que mas quieres – lo dijo con seriedad pero no con desprecio, el tono que el castaño oscuro estaba usando.

 

-no puedes decirme esas cosas y esperar que todo sea fácil Rei, el mundo no funciona de esa forma – de repente me sentí terriblemente incomodo, nosotros no debíamos estar escuchando eso, pero ahora parecía imposible el poder irse. Noté que la voz de Kai se quebraba al decir las cosas – no puedes esperar que crea lo que me dices, cuando sé que tu novio está enamorado de otra persona y a ti te pesa mas de lo que estás dispuesto a aceptar – las palabras fueron tan directas que si hubieran sido cuchillos todos estaríamos muertos en este momento.

 

Ruki abrió muchísimo los ojos y comenzó a tartamudear – yo…¿Cómo?....- miró hacia el piso.

 

Fue Shou quien habló – eso no importa Ruki, lo sabíamos – dijo con seriedad.

Reita suspiró – no te preocupes no haré un escándalo – dijo con calma, lo cual causó un bufido por parte de Kai.

 

-¿Qué es lo que te molesta realmente? – fue Ruki quien habló sorprendiéndonos a todos, mas a Kai quien lo miró indignadamente – ¿te le fuiste a los golpes porque aun así no te hizo caso? porque a pesar de todo ¿no quiere estar contigo? – si las cosas podían empeorar ese fue el momento. Kai incluso palideció – vamos Kai, acéptalo ¿desde cuándo estás enamorado de Reita? – preguntó con veneno.

 

Shou se acercó al castaño oscuro al notar que cerraba los puños – eso es lo que menos te debería de interesar – contestó fríamente.

 

-¿no? ¿Crees que no notaba como me mirabas? ¿Cómo lo veías a él? – Reclamó – desde el momento en que comenzamos a salir ¿Cuánto tiempo, en serio? – sonó tan altanero que hasta lucía más alto.

 

-Kai…- Reita comenzó a hablar – tu… ¿desde cuándo?....yo pensé…- no podía terminar los enunciados.

 

Por su parte nuestro líder parecía a punto de explotar y yo ahí incapacitado para hacer algo ¿Cómo carajo se suponía que me iba a meter en la discusión? se estaba tornando demasiado personal, lo cual no evitaba que se fuera a ir directo al desastre, porque eso era exactamente lo que estaba a punto de pasar. Lo que no sabía es de quien tendría que recoger los pedazos, de Reita o de Kai.

 

Kai rió irónicamente - ¿desde cuándo? ¿Es en serio? Eres un reverendo idiota Akira Suzuki. Te amo – lo dijo rendido alzando los brazos y dejándolos caer – te amo desde el primer estúpido momento que te conocí. Cuando no era más que una molesta sombra para ti, el amigo de Aoi – movió las manos – te he amado aun cuando ni siquiera me volteabas a ver, porque claro, todo tiene que girar alrededor de Reita – dijo en forma burlona – y ahí siempre me tenías, cada vez que necesitabas algo, tenías algo, te sentías mal, ahí me tenías como tu tarado ¿Por qué? PORQUE TE AMO – gritó con las lagrimas resbalando por sus mejillas. Era sumamente doloroso ver a uno de mis mejores amigos en ese estado y no poder hacer nada por él – aguanté demasiadas cosas, desde esperar que me notaras como un amigo tuyo, hasta que anduvieras con Ruki. Aguanté ver como Nao y este enano se enamoraban y tu ni enterado, me dolía no poder hacer nada al respecto. Me dolió cuando te diste cuenta de lo que ocurría y preferiste actuar como si nada ocurriera en lugar de voltear a ver a quien de verdad estuvo ahí contigo desde siempre. Y ahora, que tienes el orgullo mas herido que nada, por culpa de Ruki ¿vienes y me dices que estás enamorado de mi? Y de verdad esperas que te crea – mi cerebro retumbó al escuchar aquello. Eso era lo que había pasado, por eso se habían ido a los golpes….

 

Miré a Ruki quien se mordía fuertemente el labio inferior, parecía estar arrepentido de lo que acababa de pasar. Solté por inercia a Reita, por supuesto que yo sabía lo que sentía, lo supe todo el tiempo, pero jamás pensé que aquello estuviera pasando por la mente de mi amigo rubio, jamás había mencionado nada acerca de Kai. Por lo cual hacía cierta la teoría de Kai, que sólo se le acercaba porque estaba herido. Sin embargo también se me hacía poco probable, últimamente Akira había tomado conductas con Kai que nunca había tomado, desde…lo mío con Kou…

 

-y esperabas que te leyera la mente ¿no? – Fue la respuesta de Reita – lo mío con Ruki no es tu incumbencia – dijo con seriedad – mis decisiones o mis cuestiones acerca de ese aspecto no deberían de importarte. Lo que debería de importarte es lo que digo – volvió a cerrar los puños.

 

Kai negó – no Reita, así no. No con Nao recuperándose, no cuando no sabes ni dónde estás parado con tu relación, no cuando tus acciones me han demostrado siempre lo contrario – seguía llorando.

 

-y tu estando con Aoi me demostrabas muchas cosas – reclamó con intensidad – por qué después de todo, ninguno de los dos se molestó en decirme que habían montado una farsa – gritó.

 

Estuve a punto de contestar cuando una enfermera entró al baño dejándonos a todos callados – jóvenes les voy a tener que pedir que guarden silencio o salgan del establecimiento, el escándalo que están provocando está molestando a los pacientes – dijo con voz queda.

 

-no se preocupe, no hay nada más que hablar – dijo Kai y salió disparado. El rubio trató de seguirlo pero lo sostuve negando, las cosas estaban demasiado agitadas para seguirle moviendo. La enfermera salió del baño dejándonos nuevamente solos.

 

Ruki alzó la vista – Rei…yo…te lo iba a decir…lo siento – dijo con voz temblorosa.

 

El mencionado negó – no te preocupes, si de verdad estás enamorado de Nao no me interpondré. Yo también debí de ser sincero conmigo mismo desde un principio – lo dijo mas para él que para Ruki.

 

-no podías haberlo sabido – fue Kouyou quien habló por primera vez – si Kai y Aoi decidieron montar esa farsa, también deben de vivir con las consecuencias de eso – dijo con voz tranquilizante.

 

-x-

 

No vi a Kai toda esa semana, Reita parecía un zombie andando; únicamente cuando veíamos a Nao pretendía que todo estaba de maravilla. Yo mientras era un manojo de nervios, en cualquier momento podría haber una carrera y mi equipo era un total desastre, yo era un total desastre. Todo estaba hecho un desastre.

 

-el amor es un asco – dijo Reita entrando a la habitación que usaba en su casa – no sirve para nada – se dejó tumbar sobre la cama. Tuve que subir las piernas para evitar que las aplastara.

 

Dejé la revista de autos sobre el mueble y lo miré con un poco de lastima – Rei ¿de verdad lo quieres? – no me había atrevido a tocar el tema hasta que él mismo estuviera listo. Estaba boca abajo con la cara oculta en las cobijas, lo vi asentir - ¿Por qué no dijiste nada? – alcé una ceja.

 

Se giró hacía a mi aun acostado – porque soy un idiota – respondió con simpleza – después comenzaron a salir y yo no tuve de otra mas que resignarme – recargó la cabeza en su mano, recargándose sobre su codo.

 

Torcí la boca – lo siento, no puedo dejar de pensar que todo este relajo es mi culpa – me revolví incomodo.

 

-lo es – dijo con tono burlón – pues de cierta forma no había de otra – se alzó de hombros – tal vez si hubieras confiado en mi desde un principio – se notaba dolido.

 

Suspiré – no es tan fácil, para mi también era difícil aceptarlo. Creo que hacer la farsa con Kai fue el único escape que encontré, pero si hubiera sabido desde un principio lo que sentías jamás se lo hubiera pedido. Él te veía como una causa perdida, por eso aceptó – le expliqué tratando de sonar lo mas tranquilo posible, sabía que mi amigo no se iba a enojar pero prefería prevenir – pero te voy a decir algo. No están tan mal, Kai está dolido piensa que sólo lo buscas por tener un escape, de la misma forma que yo lo hice. Tiene derecho a ponerse así, tu nunca diste muestras de nada…hasta hace poco – tragué saliva.

 

-hasta que me di cuenta que lo que ustedes traían era un engaño – sonrió de lado – creo que en ese momento mis sentimientos salieron a la luz, por mas que quería apartarlos y cuando pasó lo de Nao, esa conversación en el baño…- se volvió a tirar en la cama, esta vez boca arriba.

 

Parpadeé – todavía tienen oportunidad, no es como que sea imposible – dije amargamente.

 

-¿no? – Alzó una ceja - ¿Por qué lo parece? – bufó un poco desesperado.

 

Negué – cuando estés en mi situación, entonces me hablas de cosas imposibles – sólo quería que entendiera que si quería a Kai debía luchar por él, Reita estaba acostumbrado a obtener las cosas en el momento en el que las quería. Incluso con las personas era la misma situación – búscalo, nada puede salir peor – volví a agarrar la revista y la abrí en una página cualquiera.

 

-¿y a ti quien te hizo la doctora corazón?

 

-jajaja, estúpido – dije con sarcasmo.

 

Reita siguió revolviéndose en la cama – oye, Aoi – hice un sonido para que supiera que le prestaba atención aun si no alcé mi vista de la revista – se acerca la fecha – dijo un poco asustado - ¿no estás nervioso? – al menos él si parecía estarlo.

 

-la verdad estoy más preocupado por mi hermano que por nosotros. Sé que nosotros podremos cumplir el trabajo, pero no sé qué pasará con el equipo que no lo logre – negué sintiendo una punzada en la cabeza – no nos pueden poner a competir de esta forma – tragué saliva – y lo peor es que no tengo idea de cómo zafarnos – terminé por dejar la revista olvidada.

 

-hablé con Kyo – asentí, odiaba al tipo pero quisiera o no estábamos juntos en el mismo problema – los dos acordamos en que debíamos dividir el trabajo, así ninguno estaría compitiendo con el otro – dijo parpadeando en demasía.

 

Me acomodé mejor – pero eso significaría que ninguno de los dos cumpliría con el trabajo ¿no sería más peligroso? – y entonces la solución a nuestros problemas me llegó como si alguien me hubiera pegado con una piedra – tenemos que hacer que los dos tengan lo que quieren – dije como si fuera lo más obvio del mundo. Reita me miró sin entender – mira, si tienes un dulce y las dos personas quieren ese dulce, tu pensarías que se tienen que pelear por el dulce ¿no? – Reita asintió – pero si tienes dos dulces, no tiene por qué haber pelea – expliqué. La cara de mi amigo se iluminó.

 

-¿estás hablando en serio? Pero nosotros no podemos comprar o igualar el otro dulce – dijo sin entender.

 

-pero eso no lo sabe nadie, le damos el dulce a un niño luego sin que se dé cuenta se lo quitamos y se lo damos al otro niño – expliqué.

 

Parecía que los ojos de Reita estaban a punto de salirse de sus orbitas - ¿sabes lo peligroso que eso sería? – a pesar de estarme cuestionando parecía estar completamente de acuerdo conmigo.

 

-¿se te ocurre algo mejor? – no podía evitar la emoción en mi voz.

 

Reita negó y también sonrió.

 

-x-

 

-¿ustedes están locos? – dijo Kyo. Sin poder creerlo estábamos en la casa del enano diabólico, como si fuéramos amigos de toda la vida, discutiendo cosas de la escuela – ¿creen que estamos en una película? Estamos hablando de miles de dólares en droga – preguntó arrugando la nariz y bajando la voz como si estuviera diciendo algo prohibido.

 

Asentí – pero es la única forma en que los dos podamos cumplir ¿tienes una mejor idea? – cuestioné un poco harto, ese tipo de verdad me sacaba de quicio – ya estamos metidos hasta el cuello, lo menos que podemos hacer es tratar de salir lo mejor librados – tomé un poco del jugo que me había servido una de las sirvientes de la casa del enano.

 

Sakito giró los ojos – dos mafiosos contratan a un montón de adolescentes para transportar droga en una sola noche – dijo en tono de cuento – y lo primero que los niños hacen es….robarles – abrió mucho los ojos - ¿Cómo puede eso salir bien? – parecía estar tragando amargo.

 

-veinticinco para Gackt y veinticinco para Mana. Lo que hagan después no es nuestro problema – dijo Reita con voz calmada.

 

Hitsugi quien no había hablado hasta el momento chasqueó la lengua – no es mala idea – los demás lo miramos un poco sorprendidos, ese chico no era de muchas opiniones – así ninguno de los dos equipos estará compitiendo y ninguno estará en peligro con la mafia. Me gusta – asintió.

 

-habla por ti – Sakito torció la boca pero Kyo lo miró de tal forma que se calló de inmediato. Pude captar que Shou lo miraba con detenimiento pero no dijo nada.

 

Kyo terminó por suspirar resignado – está bien, pero tendremos que hacer todo con sumo cuidado, lo mas difícil será al momento de robarle a uno o al otro. Si vemos que resulta imposible, no haremos nada – no lo dijo con presunción – y sobre todo, debe parecer que estamos compitiendo entre nosotros – dijo sonando como señor.

 

-sería buena idea unirnos – habló Reita – que los dos equipos lleven todo a un solo lugar y luego al otro. Tenemos que planearlo muy bien – dijo torciendo la boca, dado que los equipos en ese momento estaban incompletos no se podía hablar con claridad ni llegar a nada.

 

-esto va a ser una locura – dijo Sakito sin poder creerlo – más de lo que ya lo era, ni siquiera podemos estar en una habitación todos juntos más de una hora sin terminar peleando o insultándonos ¿ahora pretenden que le robemos a un mafioso? Claro, tal vez después nos reunamos junto a la fogata y cantemos canciones de campamento – miraba fijamente al frente.

 

Kyo se apretó el puente de su nariz – no hagas esto mas difícil – dijo con voz calmada.

 

Sakito infló las mejillas – no es ser difícil, es ser realista. A ver me vas a decir que de la noche a la mañana este – me señaló – y su hermanito se van a llevar súper bien o que Shou va a aparentar que no me odia. Si no podemos ponernos de acuerdo en esto, mucho menos en algo de trabajo y que implica arriesgar nuestras vidas, digo o me lo tomen a mal pero quisiera ver que Kyo y Suzuki no terminen discutiendo o que Aoi no haga una estupidez por estarse luciendo – se calló al ver que Kyo ensombrecía cada vez mas su mirada.

 

-tienes razón – dijo el enano endemoniado – tu – señaló a Sakito – y tu – señaló a Shou – van a arreglar sus problemas ahorita mismo. Y eso va para ti también – me dijo seriamente y después se giró hacia Reita – propongo una tregua, que no se haga nada a menos que los dos estemos de acuerdo – le extendió la mano.

 

Abrí la boca sin poder creerlo, pero era aun mas entretenido ver la expresión que Shou y Sakito tenían, sabían que si Reita y Kyo se daban la mano ellos también estaban comprometidos a llevarse bien. Algo que estoy seguro que Shou no quería ni en un millón de años. Sin embargo sucedió, como si el primer ministro de Israel y el de Palestina se dieran la mano y declararan la paz mundial, así pasó con Kyo y Reita, pues el apretón sobre todas las cosas fue sincero. Resultaba que esos dos eran mas maduros de lo que me habría imaginado.

 

-ahora ve a hablar con tu hermano – dijo Reita como si acabara de escalar el Everest y me estuviera pidiendo lo mismo – y ustedes arréglense – señaló a Sakito y a Shou con la cabeza.

 

El mas bajo no parecía estar de acuerdo y Shou soltó un suspiro – también tendrías que arreglarte con Kai, digo, si esperas que esto funcione – dijo tranquilamente mirándose las uñas, mientras el rubio palidecía.

Sakito se levantó bruscamente para reclamar algo, pero en ese momento la bufanda que traía en su cuello resbaló cayendo al piso. Usualmente me hubiera dado igual si no hubiera sido por los enormes moretones que adornaban su cuello y no es que fuera a decir algo, fue Shou quien no se pudo guardar el comentario.

 

-¿Quién te hizo eso? – preguntó enojado.

 

-no te importa – volvió a ponerse la bufanda rápidamente.

 

-tienes razón – dijo con sarcasmo – no me importan los fetiches de tu noviecito – se cruzó de brazos.

 

El otro alzó una ceja – si hay gente que es mas hombre que tu y sabe lo que le gusta, no es mi problema – retó con veneno en la voz.

 

Shou sonrió de lado – que bueno que te conseguiste un hombre, porque se nota que al caballero no lo sabes retener a tu lado – se  levantó – a ver si se te pega algo y dejas de actuar como niño – le dio la espalda mirando a Reita y negando con la cabeza.

 

Salió después de eso, dejando un ambiente sumamente incomodo.

 

-¡ven! – gritó Sakito con la voz excesivamente aguda.

 

Kyo lo miró un poco harto - ¿es en serio lo que acaba de pasar? – negó sin poder creerlo – espero que a ustedes dos les vaya mejor – se alzó de hombros.

 

Claro, sería bien fácil llegar y hacer una especie de tregua con mi hermano.

 

-x-

 

Toqué el timbre esperando lo peor, bueno en realidad no sabía que esperar. Finalmente después de unos dos minutos un hombre en sil de ruedas abrió la puerta, no pude evitar sorprenderme pero no dejé que me molestara o algo parecido.

 

-si dime – dijo al notar que me había quedado completamente paralizado. No sabía que decir, me sentía completamente ridículo ahí parado, pero también sabía que era mi única oportunidad.

 

-disculpe ¿está Kouyou aquí? Soy su hermano y me dijeron que tal vez estaría con su hijo – pregunté revolviendo mi cabello por los nervios.

 

El hombre alzó una ceja – no sabía que tenía hermanos – debo admitir que la afirmación me dolió muchísimo, ni siquiera había hablado de mi cuando antes…bueno antes éramos inseparables.

 

-le puedo enseñar mi identificación si gusta – ofrecí buscando mi cartera en el bolsillo de mi pantalón escolar. Había ido a buscarlo después de la escuela, justo después de obtener la confirmación por parte del enano diabólico de que se había ido con el tal Saga. Por supuesto que era mas fácil encontrarlo aquí que en casa, mi madre jamás me dejaría verlo y no podía arriesgarme a saber si estaba ahí o no.

-no es necesario – se hizo hacia atrás – pasa, ahorita le digo que aquí estás – movió la silla hacia un largo pasillo. Mientras yo me senté en la mesa del comedor, pues era la mas cercana. Era una casa bastante agradable a pesar de ser de un sol piso, estaba llena de pinturas hermosas y había un poco de desorden. Se sentía mas como una casa de solteros que como una familia.

 

-¿seguro que dijo hermano? – escuché la voz de Kouyou a lo lejos y fue como si mi estomago recibiera varios golpes al mismo tiempo. Esto era una locura, pero era por el bien de ambos. Me miró y paró en seco, me levanté de mi asiento sintiéndome completamente estúpido - ¿Qué haces aquí? – preguntó sin poder creerlo. Dios, se veía divino en ese uniforme, la ligera forma en la que se maquillaba y ahora arreglaba su castaño cabello, resaltaba sus hermosas facciones de una manera extraordinaria.

 

Cerré los ojos olvidándome de esos pensamientos – necesito hablar contigo – le dije tratando de no tartamudear.

 

Asintió, el padre de Saga nos dejó solos en menos de un minuto – Kyo me comentó del acuerdo que llegaron – dijo tranquilamente, no cabía duda que mi hermano había cambiado hasta en su actitud – me dijo que quería que hiciéramos las paces por el bien del plan – sonrió irónicamente poniendo las manos en su cintura – sinceramente no me queda de otra, no voy a poner en riesgo todo sólo porque no te soporto – lo dijo con tal desprecio que creí que podría ponerme a llorar en ese momento, yo el grandioso Aoi Shiroyama reducido a esto.

 

-estoy preocupado por ti Kou – dije sin descolocarme.

 

-no lo estés. No me encanta el plan, porque después de todo estaría engañando a la persona que me regaló el skyline. Pero tampoco soy tan estúpido como para ponerlos a todos en peligro, le dije a Kyo que contaran conmigo, pero que no esperara que te hablara como si nada – explicó serio, sin ninguna expresión en su voz.

 

-¿Por qué aceptaste el skyline? – pregunté luchando por no perder la cabeza.

 

-me ofreció el auto a cambio de que te ganara, fue un trato muy sencillo de aceptar – contestó alzando los hombros.

 

-¿has visto a Mana? – seguí con el interrogatorio. Pero se limitó a asentir – ¿te dijo algo? Algo que podría sernos útil para lograr el objetivo – moví excesivamente las manos.

 

Negó – la única persona que puede ayudarnos en eso, es Sakito – se cruzó de brazos.

 

-¿Sakito? ¿Qué tiene que ver en eso? – cambié de posición pero permanecí parado.

 

-tendrás que preguntarle a él – torció la boca - ¿es todo? – ya quería que me fuera, incluso se inclinó hacia la puerta.

 

-Kou…

 

Negó de nuevo – no lo digas Aoi – odiaba que me dijera por mi apodo – sabes que está mal y yo, yo no puedo perdonarte que me hayas visto la cara de idiota, algo te pudo haber pasado y tu me engañaste – no perdió el tono calmado de su voz – eres la persona en la que mas confiaba y resulta que tu no confiaste en mi. Al final yo te di todo y tu ¿Qué me diste? – está vez si sonó un poco dolido.

 

-quisiera que entendieras porque lo hice – dije rápidamente – mira en el lío en el que estamos metidos, si esto sale mal acabaremos muertos ¿Por qué habría de meterte en esta vida? Te amo demasiado como para hacerlo – dije sin pensar.

 

-Yuu…- y vi como las lagrimas resbalaban por sus mejillas – eres mi hermano mayor, siempre lo serás, entiendo tu preocupación – y sus palabras taladraron mi corazón.

 

-¿así me ves ahora? ¿Cómo tu hermano mayor? – no quería escuchar la respuesta pero debía hacerlo si esperaba poder seguir adelante un día.

 

-siempre te vi como mi hermano mayor – contestó como si fuera lo mas obvio del mundo.

 

Entrecerré los ojos – mentiroso – le dije por lo bajo, abrió increíblemente los ojos – si nada mas me vieras como tu hermano, jamás… - cerré los puños y mordí mi lengua para no terminar la oración.

 

Se acercó a mi – soy tu hermano – murmuró – he pasado mucho tiempo tratando de hacerme a esa idea, enojándome contigo por no confiar en mi y actuar como mi hermano mayor en cuanto a las carreras. Odiándote porque me hiciste a un lado, como si fuera tu hermanito molesto y no…- dejó de hablar en ese momento.

 

-lo hice por tu bien – levanté su barbilla – jamás lo hice por eso, nunca pensé que fueras mi hermano menor y mucho menos pensé que fueras molesto. Lo hice porque no quería que nada te pasara. Lo hice mal, pero mira a donde nos ha llevado – acaricié su mejilla – lo primero que no quería y lo primero que pasa – besé ligeramente el lugar donde estaba mi mano.

 

-Aoi vete – resbalaron mas lagrimas de sus ojos – somos hermanos, y como hermanos te perdono…

 

-y ¿Cómo amantes?

 

Notas finales:

aoiha!!!!!!!!!!!!!!!!!

muahahaha

y el reikai??

esperaron eso?

chan chan chan ya se descubrió que es lo que tienen q hacer y dejenme decirles q le costó a aoi resolver el problema XDD creen que resulte??

shou y sakito hablaran??

porq sakito puede hablar con mana??

que pasara con aoi y uru?? 

reita hablara con kai o se le adelantaran?? muahaha

les gusto?

review!!! u.u


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).