La noche era enigmática y ciertamente refrescante. Las personas transitaban apresuradas por diversas razones. La noche, pues, recién empezaba en aquella discoteca.
Un azabache entraba, examinando minuciosamente. Buscaba algo, o a alguien en particular.
This is where I'll be
So heavenly
So come and dance with me
Hacía un par de semanas que había descubierto aquella discoteca. En realidad el chico no era afecto a esos sitios, había ido un par de veces por la curiosidad y porque, según sus propias palabras, no tenía nada mejor que hacer. Vivía solo y normalmente se aburría a horrores, así que un par de tragos no le caerían mal.
Las chicas no tardaban en embobarse con él, a menudo le pasaba aquello, aunque esa no fuera su intención. Ninguna de esas chicas le atraía en particular, tan ataviadas de maquillaje y esos atuendos, que lejos de hacerlas parecer atractivas, las hacía ver tan vulgares, rogando por llamar su atención. Lástima. Lástima porque ninguna de ellas lo lograba, de hecho hacía unas noches una persona le había despertado la curiosidad.
So Sexy, I'm sexy
So come and dance with me
I'm all that you see, you wanna see
So come and dance with me
Justo en la persona que estaba pensando. Sonrío para sí mientras daba un trago a su bebida, contemplando a aquel rubio que subía las escaleras, acercándose cada vez más.
So close now, so close now
So come and dance with me
So come and dance with me
So come and dance with me
Ese “juego” con el rubio llevaba hacía unos días. No tenía idea –y tampoco se había puesto a examinar- de porqué le atraía tanto ese rubio, un hombre e particular. Todo había comenzado con el azabache poniendo los ojos sobre aquel rubio, que dicho sea de paso, no estaba nada mal. El rubio tampoco tardó en darse cuenta de la mirada fija que tenía el sujeto de unas mesas adelante. Iba sólo por lo que se había dado cuenta, sonrió juguetonamente mientras alzaba su trago, en un intento por hacerle ver a Sasuke que sabía de sus furtivas miradas sobre él. Sasuke se limitó a sonreír con sorna y contestar él mismo, alzando su bebida también.
Ya estaba más que hecho el primer acercamiento.
You're the boy with all the leather hips
Stucky hair, sticky hips stubble on my sticky lips
You're the only one I ever want only one I ever want only one I ever want
Beautiful boys on a beautiful dance floor
You're dancing like a beautiful dance-whore
Waiting on a silver platter now
And nothing matters now
Los días posteriores habían sido poco frecuentes. Es decir, él, Sasuke Uchiha, no podía verse desesperado por ver a alguien, por ese motivo no volvió a asistir a esa discoteca sino hasta el fin de semana siguiente.
Y al parecer no había sido tan buena idea. Todo ese tiempo en que creyó torturar al rubio se torturaba a sí mismo. Sin saber más de él, probablemente alguien más ya había puesto sus ojos sobre él. Sin importar si ese “alguien” era hombre o mujer, la idea enloquecía a Sasuke, tenía que indagar más la próxima vez que ambos se vieran.
This is what I am I am a man so come and dance with me
So strong now it's strong now
So come and dance with me
- Nos volvemos a ver, rubio – quizás no fue el “discurso” que había planeado desde un inicio, pero las cosas espontáneas estaban bien, dejar que su sentir aflorase y que el rubio se diese cuenta de que, aunque probablemente fuera un capricho, tenía la intención de que fuese algo más.
- Oh… - Dio un trago a su bebida para después, mascullar – “rubio” es muy poco formal, llámame Naruto.
- Naruto, eh? Déjame invitarte un trago – Las palabras parecían salir de su boca sin pedir consentimiento o algo similar a su cerebro, pero ya estaba hecho, al rubio no parecía incomodarle el acercamiento, así que decidió arriesgarse más.
- Por supuesto.
Y el acercamiento se fue dando paulatinamente. Sasuke tenía que admitir que lo que estaba sintiendo era mucho, pero mucho mejor que un mero capricho suyo. Naruto se sentía bien con la compañía de Sasuke, tanto que no negaría, si se lo preguntasen, que el azabache lo atraía bastante.
I'm all that you'll be you'll ever see
So come and dance with me
So close now. You're close now
Come and dance with me come and dance with me
So come and dance with me!
Muchos tragos después ya eran lo bastante desinhibidos como para no haberse besado. De hecho Sasuke había comprobado, con placer, que los labios del rubio eran bastante adictivos. Naruto también se dejaba llevar y enredaba juguetonamente su lengua a la del Uchiha. Llevaban ya unos meses de conocerse –es decir, frecuentarse en ese bar, aunque ya ambos sabían lo necesario del otro- así que, ¿por qué no?
- ¿Qué haces? – Preguntaba Sasuke, algo tomado, pero lo suficiente para darse cuenta que Naruto se levantaba de su asiento y le tiraba de un brazo.
Naruto, probablemente igual o más bebido que su compañero, tenía sólo una sonrisa boba en el rostro, mientras se movía rítmicamente al son de la música. Sasuke comprendió y, aunque normalmente la idea de bailar no era atractiva para él, la cosa cambiaba con el rubio. Las caderas del Uzumaki se movían frenéticas, era un espectáculo embelesante para Sasuke, quien siguió el ritmo marcado por su compañero,
you're the boy with the leather hips sticky
hair sticky lips stubble on my sticky hips
Beautiful boys on a beautiful dance floor
you're dancing like a beautiful dance whore
El ambiente estaba caldeado a más no poder, se sentía tan bien estar así, tan cerca del otro y sentir placer con el más mínimo roce. Sasuke se colocó detrás del rubio, frotándose tan descaradamente como su libido se lo permitía. Tomó al Uzumaki por las caderas, rozando suavemente con las yemas de los dedos, al tiempo que le susurraba algo al oído. Naruto se contrajo ligeramente debido al cosquilleo y a la propuesta hecha por el azabache, pero asintió.
waiting on a silver platter now
And nothing matters now!
Nothing matters now nothing matters now and nothing matters now
El taxi los dejaba frente al edifico donde se encontraba el departamento de Sasuke. Como pudieron, bajaron de él y se dirigieron a la habitación del pelinegro. Nuevamente el azabache estaba detrás del rubio, esta vez sus manos se adentraban por la camisa de Naruto palpando cuánto era posible, ambos se habían planteado disfrutar a toda costa.
Naruto se giro, quedando frente a Sasuke, acercando sus labios al Uchiha, este cerró los ojos en espera del contacto, el cuál no llegó. En cambio sintió como las manos del rubio le daban un empujón a la cama y veía, con mucha lascividad, como aquel se deshacía de las prendas que llevaba puestas. Sasuke también se deshizo del molesto cinturón y los zapatos. Todas las prendas que ambos llevaban puestas quedaron en el suelo esparcidas, evidenciando la desesperación y ansiedad por parte de ambos.
Sasuke se dedicaba a lamer el pecho del rubio con desesperación, y este tomaba su pene y el de su compañero y los rozaba. Sentía como el Uchiha estaba endureciéndose y la idea de tenerlo dentro de sí le excitó de tal manera que no tardó en quedar sobre Sasuke, con el miembro de aquel rozando su trasero. Su excitación era tal que le costaba enfocar al azabache ya que su vista estaba completamente nublada. Las manos de Sasuke treparon por las caderas, recorriendo toda la espalda.
Naruto estaba extasiado. Necesitaba ya al Uchiha dentro de él. Lo necesitaba YA.
Sus jadeos y el hecho de que se mordiera el labio inferior, en un intento de contener el placer, le indicaron a Sasuke que aquel quería avance y progreso. Sin más, tomó lubricante de su cómoda y frotó la entrada del rubio, desesperado por más contacto, empujaba su trasero hacia los dedos que masajeaban. Sasuke untó su miembro también, y sin más rodeos, entró en el rubio. Ambos exhalaron largamente, sintiendo ese placer tan sofocante que no bastaban los gemidos para liberarlo.
A Naruto le dolía ligeramente, pero era más el deseo de estar con Sasuke, que comenzó a moverse, el dolor ya se pasaría, estaba seguro. El azabache, no queriendo quedarse atrás, tomó las caderas de su amante y las hacía chocar contra su vientre. Los jadeos acompasados eran tan intensos como el sonido de sus cuerpos chocando frenéticamente. En cada estocada, Sasuke sentía como se adentraba más en Naruto y como esa estrechez seguía presionándolo con la misma fuerza del inicio, tan placentera y cálida. Una mano del azabache se colocó en el pene de Naruto y comenzó a frotarlo, la yema de su pulgar hacía círculos que ponían más duro el pene de Naruto, si se podía. Las paredes del rubio hicieron aún más presión y Sasuke se dio cuenta que estaba tocando un punto sensible, y que el rubio no tardaría en correrse, él también lo necesitaba así que aceleró el movimiento de su pene y el de su mano sobre el miembro del rubio. Ambos arquearon su espalda al sentir como el orgasmo les invadía mientras jadeaban, a más no poder, sintiéndose exhaustos, pero completos, en brazos del otro.
you're the boy with the leather hips sticky hair sticky lips stubble on my sticky lips Beautiful boys on a beautiful dance floor
you're dancing like a beautiful dance whore
waiting on a silver platter now...
And nothing matters now!
A Sasuke ya no le interesa ir mucho a los bares. Con la carga laboral que tiene en su oficina le basta. Aguanta todo ese horario en el curro con tal de llegar a casa y verlo.
Y Naruto se sabe especial para el azabache. También lo espera en casa después de una larga jornada laboral. Ambos acordaron vivir juntos después de su larga relación y conocerse más, el sexo no era lo único que querían del otro, sino más.
Mucho más.