CAPITULO 15
El castaño parpadeo un par de veces y un impulso lo llevo aceptar sin chistar, Joey dio un saltito de la impresión, creería que se negaría, y ahora qué?, no pensó en la probabilidad de que haría el castaño se quedaba con él.
Kaiba volvió dentro de la casa del cachorro.
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Sábado 10 am
Dos cuerpos se comenzaban a despertar, Un rubio sintió una tibieza a su lado, una que no recordada al despertar, poco a poco abrió los ojos y se topó con un ojiazul que tenía el ceño fruncido, como si algo le doliera.
-Te sucede algo?- pregunto alarmado el rubio. Seto no dejaba de gimotear.
-Kaiba! Te duele algo!- mientras lo movía con la mano.
-No me toque perro!- gruño el moreno , mientras se levantaba tomándose el brazo –Se me durmió el brazo!- respondió.
-JAJAJAJA vaya! Y yo que creí que a ti no te sucedían ese tipo de cosas!- decía el rubio partido de la risa.
-Cállate perro!- dándole con la mano en la cabeza –Vaya! Al parecer me eh curado!- decía con malicia.
El sonido de algo los interrumpió, Seguido de eso un Joey todo rojo, su estomago había lanzado semejante rugido.
-Creo que tengo hambre!- dijo inocentemente.
-Donde guardas las croquetas perro- haciendo rabiar al rubio mientras se ponía de pie.
Joey iba a protestar pero sus ojos se posaron en el cuerpo del moreno, que en ese momento llevaba la ropa que le había prestado en la noche.
Flash back
Seto entro a la casa del rubio, tras cerrar la puerta lo aventó contra el sillón y se posiciono encima de él, al parecer el semental aun no tenía suficiente, empezaron los bezos y las caricias subían de nivel, Las mano de Joey recorrían todo a su paso mientras sus labios no se separaban de los del moreno.
Seto comenzó a colar sus manos por debajo de las ropas del rubio para dejar a la vista la tersa piel, no dudo en saborearla, Joey no se quedaba atrás poco a poco fue acercándose al cuello del moreno, y lo comenzó a lamer, chupar para después darle pequeñas mordidas que iban desde la babilla hasta su lóbulo, Seto se estremecía con las caricias del rubio, desabrocho su pantalón junto con el del rubio.
-Kai..ba que..ha..ces..!- pregunto con dificultad.
-No tengo condones- decía el castaño mientras tomaba ambas hombrías entre sus manos, y comenzó a masajearlas. –ah!..Así..Que.. es..to..es lo uni..co que po..demos ha..cer!- decía sin dejar de masturbarse.
Joey solo se dejo hacer mientras se sentía venir, los dos llegaron a un orgasmo, sus cuerpos temblorosos se descargaron manchando sus ropas.
-Yoo lo siento!- decía apenado el rubio –Espera, ven sígueme- jalándolo a la planta alta.
Joey le prestó una playera y un pantalón de vestir al castaño para que se cambiara sus ropas mientras las metía a la lavadora junto con las suyas.
Cuando regreso escucho que Kaiba estaba hablando por teléfono, seguramente con Mokuba para a visar de su ausencia esa noche.
Fin del flash back
-Te gusta algo!?- pregunto el moreno al ver la intensa mirada del rubio para con su cuerpo.
-Cállate imbécil!- decía molesto el rubio, la palabra gustar era para él algo fuera de lo inimaginable, mejor dicho no se había planteado la teoría que si en algún momento le llegara a gustar el moreno. –Mejor vamos a desayunar que muero de hambre!- decía para dejar esas divagaciones mentales, que le daban miedo.
Bajaron a la cocina, Kaiba se sentó en el comedor que se encontraba ahí mientras esperaba que el rubio preparara algo decente para almorzar, Joey preparo el desayuno simplemente se lucio con el castaño quien no se esperaba que cocinara tan delicioso. Después de comer el castaño quiso recoger los trastos sucios pero el rubio le dijo que era de mala educación hacer aseo en casa ajena, así que él los llevo al fregadero para lavarlos.
Joey sintió los labios del moreno en su cuello, y rápidamente dejo de hacer lo que estaba haciendo para darse la vuelta y responder con un beso, las manos del moreno tenían acorralado al rubio entre su cuerpo y el mueble de la cocina, Joey movía sus manos por todos lados del cuerpo de Kaiba, el otro también comenzó a corresponder las carisias, sus manos se posaron en las nalgas del rubio y las estrujo deliciosamente, Joey solo atino a gemir, Seto no soltando el agarre lo levanto para sentarlo en aun lado del fregadero arreplegándolo a su cuerpo para friccionar sus caderas, las cosas se estaban poniendo intensas hasta que el sonido de algo los interrumpió.
El timbre estaba sonando, Joey con trabajos y muy a su pesar se separo del cuerpo del castaño para ir a abrir la puerta.
Al abrir la puerta sus ojos no pudieron ocultar el asombro.
-Hola Joey! In..Interrumpo algo? Dijo apenado Yugi al ver al rubio con semejantes marcas en el cuello y un poco sonrojado.
-amm.. Pues jiji que pasa Yugi?- pregunto sin saber que responder.
-No nada, yo no quería interrumpir, estas con Duke?- pregunto un poco curioso.
-Amm bueno Yugi, estas veras- decía en voz baja –Estoy con una hermosa chica- guiñándole el ojo a Yugi.
-Pe..Pero y Duke?- cuestionando con la mirada.
-Este, veras, eso, amm… a mi todavía me gustan las mujeres, pero me guardaras el secreto verdad- volteando a ver hacia dentro cerciorándose que no lo hayan escuchado.
-está bien- decía un poco angustiado –Nos vemos cuídate- y dio media vuelta y se marcho de la casa del rubio, vio un hermoso auto estacionado fuera – ha de ser una chica muy rica- y con ese pensamiento se marcho.
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Dentro de la casa
-Y se puede saber que fue todo eso- decía un ojiazul parado en la puerta de la cocina, había escuchado todo lo conversado entre ese par.
-Bueno, veras- decía un poco apenado –es que mis amigos creen que yo ando con Duke- mientras bajaba la cabeza apenado.
-Y eso es verdad?- preguntaba el castaño mientras alzaba una ceja.
-No! Claro que no!, solo era porque, pues tu recuerdas lo sucedido verdad! Bueno por eso, me entiendes?- mirándolo a los ojos.
-Si, te entiendo, los chismes vuelan y te pueden someter o chantajear- decía molesto.
-Ah?- el rubio no entendía la frase.
El castaño solo dijo –Devlin!- y volvió a callar.
-Duke? El que tiene que ver?, te hizo algo?- seguía confundido.
-Sí, El muy maldito me chantajeo con decirle a la prensa que me “acuesto con un perro”-
-Te chantajeo? Duke?!- decía sorprendido, el no creía que fuera ese tipo de personas –Que te pidió? Dinero?-
-No Wheller, no te lo imaginas?- resoplo sarcásticamente –Que me metiera con él, el muy infeliz me pidió Sexo a cambio de no decir que tenia sexo con un hombre!-
-Que!? Pero él me prometió que guardaría el secreto, y la verdad el siempre cumple lo que promete- casi grito el rubio.
-Quizás a ti! Te guardaría el secreto pero a mí no perro entiendes!- decía mas que molesto, era evidente a un que no lo quisiera disfrazar, el maldito afeminado lo había chantajeado y ultrajado por nada.
-Que piensas hacer?- preguntaba intranquilo el rubio, era obvio que él también se dio cuenta del engaño del pelinegro para con Seto, Y temía por el (Duke).
-Maldito, esto no se va a quedar así- dijo en un susurro, mas para él que para el rubio.
El moreno salió más que molesto de la casa del rubio, que se agarra Duke Devlin, por que el día que lo viera no se la iba a acabar.
Joey solo vio como el auto arranco a gran velocidad y cerró la puerta muy angustiado.
-Dios mío, que irá a pasar?- se preguntaba, esperaba que no fuera nada grave.