CAPITULO 17
Los golpes iban cada vez con más fuerza, realmente se estaba golpeando a matar, Duke sentía un agudo dolor en el pómulo pero no se iba a dejar que le desfiguraran su hermoso rostro, le respondía con la misma fuerza al castaño, ambos tenían los nudillos rojos de tanto golpe.
En un descuido de Duke al ver que los demás se acercaban Kaiba aprovecho para sacarle el Aire de un fuerte golpe en la boca del estomago, Duke callo arrodillado ahogándose, El castaño iba a volver a aventársele encima pero las manos de el moreno y el rubio lo detuvieron.
La mirada desaprobatoria que le lanzo él pequeño a su hermano lo hizo recapacitar, y se soltó del agarre de esos dos.
-Pero porque pelean?- pregunto Tea mirando el rostro amoratado del castaño.
-Ja!- rio Duke con dificultad, al parecer no había aprendido la lección aun –Por qué me quiere quitar a mi cachorro- mirando maliciosamente al ojiazul que hizo de todo por auto controlarse y no descubrirse otra vez.
-En serio chicos! Ya déjense de tonterías!- decía Tea, al parecer nadie se lo había creído, solo Yugi que se quedo sorprendido, de verdad había algo ahí que no querían que se supiera, pero ya le preguntaría a Joey, se ofrecería acompañarlo su casa y ahí aprovecharía para sacarle toda la sopa a su amigo.
El moreno ya no quería estar rodeado de idiotas así que paso a un lado del rubio y lo golpeo en el hombro con el suyo –Apártate perro, no me estorbes- decía más que molesto.
-Vámonos Mokuba!- le gritaba al pequeño que estaba apenado –Chicos lo siento, nos vemos después- se fue con la cabeza gacha.
Los hermanos Kaiba se habían retirado de la escena dejando a los 4 chicos.
-Te duele?- preguntaba Tristan ayudando a levantarse al pelinegro.
-jeje un poco, ese bastardo pega duro- sobándose la mandíbula.
-NO crees que te pasaste DUKE!- decía muy enojada la castaña, nadie entendió el porqué, creyeron que por la presencia de el pequeño.
Duke ofreció llevarse Joey a su casa, como todo buen “novio”, llevaría a Yugi también porque le quedaba de paso. Tristan y Tea se fueron caminando eran vecinos (pobre tris).
-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-
En la casa del rubio
Habían llegado a la casa del rubio un poco adoloridos porque el convertible del pelinegro era solo para dos personas, entraron a la sala.
-Joey tienes agua fría?- preguntaba Duke con la intención de agasajarse con el rubio un rato en la cocina.
-Si claro! Espérame Yugi ahora vuelvo!- respondió el rubio y ambos entraron en la cocina, Duke atrapo al rubio por la espalda después de cerrar el refrigerador. –Que haces Duke!- dijo sorprendido pero en voz baja para que Yugi no escuchara nada.
-Vamos Joey, quiero tenerte aun que sea una vez- le susurraba en el cuello.
-Acaso estás loco!- decía el rubio sorprendido –Créeme, creí que con lo que paso con Kaiba ibas a comportarte después- decía medio molesto el rubio, tanta preocupación de su parte para que este cabezón no entendiera ni con golpes.
-Oh! Vamos Joey, eso era entre el amargado y yo!- tomándolo de la cintura pegándolo a su cuerpo-entonces que dices? Me puedo quedar contigo esta noche?- preguntaba mientras comenzaba a besar el cuello del rubio aprovechando que tenía las manos ocupadas con la jarra y el vaso.
-Duke espera- tratando de controlarse,-Entonces si me puedo quedar contigo?- vuele a insistir el pelinegro, -está bien pero compórtate porque aquí esta Yugi- mientras se retiraba del pelinegro, -Ahora regreso!- dijo Duke saliendo de la cocina y de la casa.
Joey regreso a la sala disculpándose con Yugi por la demora.
-Joey, aprovechando que Duke no está, qué fue lo que paso en el parque?- mirándolo queriendo atravesar la asustada mirada del rubio, quería respuestas y no se iba a marchar de ahí sin ellas.
-Bueno, pues no se qué cosa allá sido eso- decía nervioso, no se esperaba eso de su amigo.
-Joey, confía en mí, acaso no somos amigos?-
-Si Yugi, claro que somos amigos- decía con una sonrisa, tratando de hacer sentir bien a su amigo.
-Joey, no me respondiste hace rato, era Kaiba el de ayer verdad?, tu engañas a Duke con Kaiba?- preguntaba preocupado.
-amm, Yugi bueno las cosas, jeje bueno veras, no es lo que parece- decía mas que nervioso, sentía que su cuerpo comenzaba a hervirle la sangre de los nervios.
-Entonces, confía en mi Joey, dime que es lo que realmente está pasando-
-Bueno, pero por favor prométeme que no le dirás nada a los chicos, por favor- mirándolo con cara de suplica.
-Claro que no!, si eso es lo que pides, no le diré nada a nadie, pero dime qué pasa, que muero de angustia Joey- quería saber que pasaba con su amigo, de un día para otro se entera que es gay? O bisexual? Quién sabe, otro día mas se entera que Joey no simplemente esta con Duke si no también con Kaiba, que acaso no se soportaban?.
-Bueno, veras, la cosa paso así- no sabía ni por donde comenzar. –Pues muy bien me lo decía Tristan que mi bocota un día me metería en problemas y pues así fue- mientras tomaba aire.
-Que paso?-preguntaba intrigado Yugi.
-Pues le dije a Kaiba algo que no le pareció, algo que hirió su orgullo-
-Eso sí que es peligroso Joey, tu más que nadie sabe que es de los más orgulloso-
-Sí y pues solo te diré que termine casi siendo abusado se..ssexuu…al.. Sexualmente por él- mientras agachaba la car demasiado apenado.
-QUÉ!?, pero como se atrevió a aprovecharse de ti!?, y que hiciste!?, lo denunciaste!?- Yugi se había molestado demasiado con Kaiba, como era posible que llegar a ese punto para humillar a Joey.
-No, no lo hice- decía tratando de sonar calmado. –Pero Joey!?- decía su amigo –Lo sé, lo pensé, pero la verdad que no sé que me paso, puse haberme defendido cuando me desato- decía el rubio –QUE!- (ya le gusto gritar “que”) –Pero acaso te ato, Joey prácticamente no mejor dicho te violo y tu como si nada hubiese pasado- decía colérico el pequeño.
-Ya te lo dije no se qué paso, aparte lo de Duke y pues creo que ya es todo- decía dando por terminada la conversación.
-No, no, no, no y no!!- se decía así mismo –Y Duke lo sabe? Por eso se pelearon verdad?- ya había sacado sus deducciones, y el rubio decidió dejarlo en un si, no le diría que Duke chantajeo al moreno para acostarse con él.
-Si Yugi y bueno creo que es todo, pero por favor no le digas nada los chicos- casi en suplica.
-Si no te preocupes, pero espero que hagas algo con Kaiba, esto no se puede quedar así!- mientras salía de la casa del rubio muy pero muy molesto, ya vería Kaiba quien era Yugi Motou y lo que podía hacer por sus amigos.
-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-
10 min después llego Duke con una bolsa, al parecer había ido a su casa por su uniforme y ropa para dormir.
-y Yugi?- preguntó el pelinegro para saber si podía hacer de las suyas.
-Tiene unos minutos que se fue- respondió el rubio que al parecer ya se había bañado, solo andaba con un bóxer aguado y una playera blanca.
-Muy bien!- con una sonrisa maliciosa en el rostro, se acerco a Joey para tomarlo de la nuca y darle un beso, el rubio no se resistió, ya había aceptado que Duke también lo calentaba y a diferencia de Kaiba este era mas expresivo.
-Duke, ya es noche, mañana hay clases!- decía el rubio apartando al chico dado de su cuerpo.
-Sera rápido lo prometo!- siguiendo a Joey a la planta alta.
Entraron al cuarto del rubio y Duke no dudo en tirarlo a la cama.
-Duke!- se asusto el rubio por la acción –Que haces!?- cuando el pelinegro le bajo el bóxer.
-Solo la puntita Joey!- le susurraba al oído mientras son su mano frotaba el miembro del rubio.
Joey no pudo resistirse a las caricias, maldecía su autocontrol –Demonios! Otra vez llegare tarde- diciendo esto y jalando al pelinegro encima de él.
Duke acariciaba las suaves piernas del rubio, y coló sus manos debajo de la playera para después quitársela, Se quedo contemplando el cuerpo de Joey una milésima de segundo, para después volver a besar al rubio con pasión, Joey torpemente desvistió al pelinegro.
Ya estando los dos desnudos en la cama no dudaron an acariciarse por donde pudieran, era la primera vez que Joey participaba de esta manera, tan abiertamente, se sentía tan caliente y las palabras del ojiverde no ayudaban.
-Joey pongámonos sucios- le susurraba al odio, para después morderlo, chuparlo y meter su lengua. –eh?- no podía ni articular palabra Duke había metido dos dedos en él.
-Dime cosas sucias- le volvía a susurrar, -es…estaa..ass de…de…memn..te- mientras se aferraba a las sabanas, Duke estaba estimulando su próstata con los dedos.
-Dime, te gusta lo que hago con mis dedos?- sus preguntas lascivas solo hacían que el rubio solo se calentara.
-Deja de jugar y termina de una vez!- rodeno el rubio. –Está bien pero muéstrame tus puntos buenos, tomando a Joey de la cadera para ponerlo en 4 sobre la cama.
-Deja de ver maldito enfermo!- decia el rubio muerto de la vergüenza.
Duke volvió a meter los dedos y haciendo movimiento de tijeras iba ensanchando la entrada del rubio, este por su parte estaba que no controlaba sus gemidos, su miembro le dolía, y comenzó a masajeárselo.
El ojiverde se apresuro a sacar un condón, ya no aguantaba, tenía ganas de darle por el culo a ese perrito travieso que no hacía otra cosa más que calentarlo.
Joey estaba ansioso, tenía ganas, realmente sus hormonas eran una revolución ya no le importaba desistir ala primer provocación, simplemente buscaba placer, como Duke y como Kaiba.
-Que pasara si Kaiba se enterara que ahora su cachorro me pertenecerá?- decía Duke mientras sacando al rubio de la ensoñación en la que se encontraba , era verdad que pasaría si Kaiba se enteraba?, pero fue sacado de sus pensamientos cuando de una sola estocada Duke entraba en el rubio.