El sonido desgarrador de notas de amor, eso es lo que dice la canción, podría ser cierto, el amor es dolor, según he escuchado en varios lados, realmente no pensaba que eso fuera cierto.
Siempre había pensado que cada quien se fabricaba su propia felicidad, o su propia tragedia, pero ahora, ahora me doy cuenta que estaba equivocado, porque hay un momento de tu vida, un momento que cualquiera desearía evitar, el momento del que todos desearían escapar.
Ahora solo puedo mirar la ventana y recordar esos momentos, aunque realmente ni siquiera hubo momentos, porque tú no me veías, tal vez yo te veía pero tú nunca me viste a mí.
Todo antes parecía tan normal, ahora es tan monótono, tan aburrido que he llegado a hastiarme, no tengo razones para seguir en este decrepito lugar, y ahora solo puedo ahogar mis deseos de derrumbarme en este mismo lugar.
Aunque este frente a la fotocopiadora, desearía poder llorar y decir lo que siento, desearía haber podido hablarte, nunca pude y ahora me arrepiento.
Tú no estabas tan lejos de mí, a solo unos cubículos, dos para ser exactos, no era nada lejos, apenas una distancia de unos cuantos metros, no era tan difícil hablarte, no era tan difícil intentarlo.
Pero tú… tú ya no trabajas más aquí.
Tú ya no estás, porque simplemente era un pequeño trabajo temporal, simplemente un trabajo para ganar un poco de dinero extra.
Y después de que te fuiste hubo varias vacantes, pudiste regresar, pero sé que no lo harás, ¿Por qué regresarías?, no hay nada aquí, todo es monótono, sencillo, asquerosamente patético.
Todas las personas que aquí trabajan son patéticas, y realmente, yo soy el más patético.
El amor es toxico, pero no puedo quejarme, porque sé que sucede todo el tiempo, personas se enamoran y se desenamoran, solo me queda esperar a que el tiempo sane las heridas que dejaste, ¿Cómo pudiste herirme si ni siquiera me notabas?, y trato de ignorar el hecho de que aunque las heridas sanen siempre estará ese dolor y ese odio hacia mí mismo.
No era tan difícil, solo dos cubículos, unos cuantos pasos, unas cuantas palabras, pero yo no tuve el valor y tu nunca me notaste.
Pero no tengo el poder para culparte, porque no es tu culpa que no me notaras, realmente nunca nadie me nota, soy como un fantasma, no, un fantasma no, a los fantasmas se les reconoce, se les nota y se les tiene miedo, respeto o compasión, pero yo no tengo nada.
Porque soy un ser insignificante en la vida de todos, mi jefe apenas y recuerda que trabajo aquí, a nadie le importo y nadie me importa, solo deseaba que tú me notaras, pero no lo hiciste, no es tu culpa, no es tu culpa que nadie me note.
Así que pasare mi tiempo con gente que no me entiende, tratare de buscar alguna forma de olvidar este sentimiento, tratare de olvidarte, porque ese moderno romance que tuvimos fue una condición terminal, porque realmente fue una innovación al romance, porque tu ya no estás aquí.
Y si hubiera tenido el valor de hablarte tal vez no estaría aquí ahora mismo, frente a la fotocopiadora pensando en todo lo que pudimos ser, pudimos haber estado bajo un árbol en este mismo momento, pudimos estar abrazados, pudimos haber paseado por un parque pateando las hojas marchitas en el suelo, pudimos haber llegado a cualquier lado.
Pero tú ya no trabajas aquí, porque solo fue un trabajo temporal, un lugar vacio que tú cubrías.
Pero eso sucede todo el tiempo, aunque no puedo evitar culpar al destino por mi dolor, y no puedo evitar preguntarme porque me paso a mí, no puedo evitar pensar en las cosas que pudieron haber pasado si solo hubiera tenido el valor.
Si solo hubiera caminado por esos dos cubículos, llegar a tu lado y saludarte, pero no pude, simplemente no pude, y tu no me notaste ni un segundo, pasaste frente a mi cubículo tantas veces y ni una mirada me dirigiste, sigo sin culparte, la gente nunca me nota.
Y yo no tengo el valor para hacerme notar.
Tengo que convencerme que no vas a volver, que no trabajas más aquí.
Ahora solo puedo pensar en que te amo, y que tú no estás, que no me notaste, y eso me hace pensar que moriré solo.
Que nadie nunca me notara, viviré y moriré solo.
Estoy aceptando el hecho de morir en la soledad, de volverme un ser trágico, y la idea no resulta tan mala, ¿Quién me notaria?, nadie nunca me ha notado, y para que esforzarme si se que nunca me notara, se que nunca nadie me vera.
Por mi morir en una habitación obscura sin gente a mí alrededor, sin tener que recordar bellos o malos momentos es una idea fantástica que me gusta.
Simplemente morir sin gente que me odia a mí alrededor, sin hipócritas que me miren con tristeza, sin amores pasados que recordar, sin errores irreparables que arruinaron amistades, sin decepciones.
Y tú ya no trabajas aquí, y yo no sé donde estas, y tú no me notaste, y yo te sigo amando, como un masoquista aun te amo.
Y las decepciones parecen continuar y la vida parece ser más larga de lo esperado, pero solo soy un microbio que nadie nota, solo un insecto que se ha camuflajeado bastante bien.
Por mi estaría bien morir sin gente a mi alrededor, vivir, respirar y morir solo.
Me gusta la idea de morir solo.
Pienso que me encantaría morir solo.