Sus maletas ya estaban hechas, solo había metido libros, ropa y sus cd’s no necesitaba nada más todo lo qué quedaba se lo dejaba ya sabría el pelirrojo qué hacer con las cosas. Se sentó en el escritorio y tomo pluma y papel, hace meses planeaba irse, largarse de su vida como tanto lo había estado deseando el de ojos verdes, pero no podía…le faltaba voluntad y fuerzas, no, no se quedaba por las noches de pasión, con cualquier persona podría obtener una noche de sexo sin compromiso, tampoco estaba ahí por la linda cara del pelirrojo, o por su bien formado cuerpo, se había quedado todo ese tiempo por qué ‘’sentía algo por el’’, pero poco a poco todo se fue apagando. Sus ojos verdes ya no centellaban como antes, sus labios seguían teniendo el toque..pero eran solo besos vacios, el departamento qué compartían juntos como pareja era pequeño, pero había estado creciendo tanto la distancia qué ahora se le hacia sumamente grande.
Se perdía en la sala con sus audífonos y la música a todo volumen, tan solo para no escuchar las platicas de Gaara con alguno de sus ‘’amiguitos’’, estaba cansado, enfermo, la rutina lo había ido matando todos esos meses, había permanecido a su lado como un idiota, se había estado esforzando y ponía esmero en cada uno de los detalles qué fueran para aquel chico..Pero al final de todo aquellas palabras qué siempre le había gustado escuchar, se habían vuelto palabras sin sentido, tan vacías qué ya no encontraba el chiste.
Últimamente se había estado armando de valor para largarse, y ya tenía el suficiente, toda la mañana había estado recogiendo cosas de importancia para llevarse, menos las fotos, recuerdos, cartas, detalles qué se habían hecho el uno al otro, esos se los dejaba, a ver qué hacia con ellos. Antes de tomar la decisión final había estado con su niño por una ultima ves, lo había besado como nunca hasta hincharle los labios, lo había mirado tanto qué Gaara se había hartado, le pregunto un millón de veces si lo amaba, a lo qué el de ojos aguamarina respondía siempre ‘’si, ya sabes qué si Sasuke’’, y aun qué fuera mentira..ah!, como lo había hecho feliz, y muy en el fondo había tenido la ilusión de qué esa mañana el pelirrojo no saliera y se quedara a su lado, como en los viejos tiempos, qué ese chico lo mirara amorosamente y le robara la respiración..Pero no, al Sabaku No, no le importo nada y se levanto sin más para salir, ni siquiera se le hizo raro el extraño comportamiento del Uchiha.
Perfecto, ahora el azabache podía irse con la conciencia tranquila, había hecho todo lo qué estaba a su alcance para poder recuperar si quiera una miseria de aquel amor del qué ahora no quedaba nada..Ahora podía salir por esa puerta sin preocuparse por dejar a su pobre novio, el qué tanto le había estado rogando. Había notado qué el pelirrojo no lo extrañaría y mucho menos notaría su ausencia.
La mano le temblaba, y la pluma esperaba paciente pare reposar sobre la hoja. Trago fuerte y se armo de valor para comenzar a escribir.
‘’Querido perro faldero; me largo.
No, no has hecho nada mal, todo estuvo perfecto, me gusto como estuviste actuando simplemente ya no puedo seguir contigo. Todo termino, ya no te quiero a mi lado así qué sigue tú camino muy lejos de mi , no quiero qué nos crucemos más puedes estar con quien te plazca eres libre ahora te dejo algunas cosas puedes hacer lo qué quieras, tíralas, quémalas regálalas o consérvalas. Te deseo dos cosas: todo y nada, todo que te haga feliz y nada que te haga sufrir.
Adios Gaara, y gracias por cumplir la promesa.
Sasuke. ‘’
En cuanto termino de escribir, dejo enseguida la pluma y la hoja tal cual, tomo sus maletas y camino hacia la puerta dejando sus llaves en la mesa de la entrada , se volvió para ver por ultima ves aquel lugar donde antes era feliz, sonrió levemente y salió.
No importa a donde fuera ahora, o a donde fuera el.