Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Corre por Chris Yagami

[Reviews - 48]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Capítulo 5.- Amor inmortal

Después de tener cerca a aquel que estaría siempre en su corazón me pregunte muchas veces las razones que tuvo para seguir conmigo. Dice que me ama y quiero creer eso pero aun sé que fue la razón de su existencia, lo único que le importaba al grado de dejar a su propio hermano al cual quería demasiado pero nunca mas que a su esposo y comprendo que de las cenizas puede de nuevo renacer un tremendo amor inmortal, así como el que yo siento por él.

No tengo idea de cuando pasó, pero me enamoré de su inocencia y bondad cuando era de nuevo ingreso en la universidad. Yo era compañero de clase de Ikki, ambos habíamos seducido a la mitad de la clase y muchos más fuera de esta, era una especie de competencia entre los dos la cual llevábamos casi en empate. Nunca me había interesado en nadie, para mi eran solo amantes pasajeros que se irían así como habían llegado, sin pena ni gloria.

Pero un día, durante una celebración de cumpleaños para Ikki me presentó a su hermano del cual quedé prendado de inmediato. En ese momento me parecía que era solo un estudiante de preparatoria por lo dulce de su aspecto, juvenil al grado de rozar la ingenuidad pero en ese mismo instante me enteré de que era estudiante en la misma institución que la nuestra. Por desgracia también me enteré de que tenia pareja, un idiota amigo de Ikki y desde ese momento me di cuenta de como lo trataba, sujetaba su brazo de manera posesiva mientras lo llevaba de arriba abajo por toda la celebración, se molestaba cuando conversaba con un joven de cabellos castaños, quien ahora sé que es Seiya, pero extrañamente Shun se dejaba hacer sumiso, no se inquietaba, ni se oponía a eso, tal parecía que le parecía normal. Eso me inquieto al principio y escuche también la molestia de Ikki cuando me comentaba de la obsesión de Hyoga con él, su paranoia. Aunque en ese momento no creí que fuera capaz de dañar a esa criatura que lo único que provocaba en alguien era la sobreprotección.

No intenté nada con Shun en parte por las amenazas de Ikki, pues me dijo que no iba a permitirme que me acercara a su hermanito con las intenciones de colarme entre sus piernas, pero lo que él no entendía era que una de mis reglas era la de no interponerme entre una pareja como un bastardo lo había hecho con mis padres. Fue espantoso ver cada noche una riña entre ellos cuando aun tenía diez años, como mi padre buscaba en otro hombre lo que mi otro padre intentó darle: una mejor solvencia económica. Fue desastroso ver para mí el deterioro del padre que permaneció conmigo hasta verlo morir de depresión un par de años después quedando entonces bajo la tutela de mis tíos.

Tal vez es por eso que tengo miedo de que aquel regresara a la vida de mi esposo, yo lo amo demasiado, al borde de necesitar escuchar su voz día y noche. Lo amo tanto como mi padre amó a su pareja y como fui testigo de que ese amor no fue suficiente para retenerlo a su lado, me asusta que mi amor tampoco sea suficiente para Shun.

Después de saberlo casado con Hyoga seguí observándolo, pues lo hacia en la universidad, no lo espiaba, no soy un obsesivo simplemente lo encontraba en el camino cuando iba al encuentro de Ikki. Pero después de su boda, viendo como Ikki se escudaba en su trabajo para ignorarlo después de desobedecerlo y casarse con el a pesar de todo, no me quedó mas remedio que mirar desde las sombras, sin saludar siquiera pues supe como era su esposo, lo celoso que era con él. Tal vez pensando lo mismo que yo, que con esa hermosa apariencia alguien más podía llegar de la nada y seducirlo.

Yo seguía en contacto con Ikki y por ello me entere del accidente que había sufrido su hermano. A pesar de que me sabía un seductor, pues tampoco dejé mis pasos en mis años universitarios, me llamó para decirme de su estado pues también comprendía que lo que sentía por Shun era inocente, sin dobles intenciones.

Ese día en el que me entere de que casi muere a manos de Hyoga volé desde Grecia donde me encontraba en un viaje de negocios para verlo y estar a su lado si lo necesitaba. Los nervios me hacían temblar cuando caminaba al hospital, pues seria la primera vez que el me vería después de años. Compré doce rosas blancas para él, para desearle la salud que merecía, pero cuando entré a la habitación lo encontré llorando en los brazos de Ikki, inmediatamente pensé en que no era un buen momento, pero todos me recibieron con una sonrisa incluyéndolo a él.

Desde ese entonces lo procuré como si de verdad fuera su pareja, no eran esas mis intenciones, no al principio pues Ikki me había contado de lo que Hyoga le había hecho, la clase de maltratos a los que fue sometido y lo peor fue haberme enterado de que había perdido a su hijo en el ultimo intento que Hyoga hizo para someterlo. Por eso Shun se encontraba tan deprimido.

Pero con paciencia y sin proponérmelo en realidad, me gané su corazón, así meses después me dio una oportunidad y lo convertí en mi pareja, después de poco tiempo le propuse matrimonio. Para mi no fue poco tiempo, tenia amándolo mas de cinco años y estaba dispuesto a todo con él, pero Shun se asustó ante la simple propuesta por lo que no volví a mencionar, deje que las cosas crecieran un poco mas hasta que lo vi adecuado de nuevo año y medio después de la primera vez. Cuando escuché de sus delgados labios un si me sentí morir de felicidad.

La boda fue sencilla, solo asistieron a ella amigos cercanos, alrededor de unas veinte personas que felicitaron nuestra unión. Pero esa noche no pude hacerlo mio, veía en sus ojos verdes el miedo a tener relaciones conmigo y yo no podía comprenderlo, fue cuando me contó aquello que yo no sabia, lo que no me había querido contar por vergüenza y ningún otro lo hizo por respeto a su privacidad. No puedo describirles la furia que me invadió al pensar en Hyoga humillándolo de esa manera. Entonces esa noche no pasó nada, solo lo besé delicado agradeciendo su confesión pero simplemente lo atraje  a mi pecho para que durmiera tranquilo junto a mí pues desde ese momento estaríamos juntos y nada mas importaba.

Pasados los meses seguía mostrándose temeroso a mis intentos de llegar más lejos. No estaba desesperado por poseerlo, simplemente quería demostrarle realmente cuanto lo amaba y veía su preocupación cuando no podía hacerlo conmigo. Entonces le propuse que asistiera con un profesional a lo cual se negó al principio, pues le apenaba contar a un desconocido lo que había pasado. Pero terminé por convencerlo, no por mi, para mi es suficiente con que me sonriera pero él no podía seguir con aquello en su cabeza, el espectro que Hyoga fue en su vida debía desaparecer y así ambos asistimos a esas terapias que poco a poco fueron liberándolo. Muchas veces lloró en mis brazos mientras relataba lo que le pasaba y yo lloraba con él por no haber intentado arrancárselo a Hyoga antes de que lo lastimara tanto.

Poco a poco logramos consumar nuestro matrimonio, nuestra primera vez fue maravillosa para mí. Aun sabía que existían sus temores al respecto y por eso cuide de él, no lo tomé sino hasta que realmente estuvo listo y cuando pasó me sentí completo.

Le dije un día que quería que me diera un hijo a lo que él sonrió entristecido, él también lo quería pero con eso también recordaba lo que había pasado con su anterior bebé. La decepción de su perdida es algo que no lograré que olvide nunca y no quiero hacerlo olvidar a su bebé, pero me gustaría que dejara de culparse de ello.

Lo intentamos mucho tiempo, casi un año desde que comenzamos a tener intimidad, pero no conseguíamos nada. El medico decía que se debía al estrés emocional que Shun cargaba por las terapias, las emociones encontradas. Traté de no volverlo a presionar, ya no hice ninguna mención al hecho de no poder concebir. Si las cosas se iban a dar debía ser a su tiempo.

Después de nuestro tercer aniversario de bodas hubo un tiempo en el que de nuevo se mostró distante, apenas charlábamos en la cena siendo que le gusta mucho hacerlo. Eso me preocupó y me llevó a cambiar un poco mi horario, llevaba trabajo a casa con tal de estar mas temprano junto a él y saber que era lo que le pasaba, pero no logré descubrir nada. Un día recibí una llamaba en mi oficina de parte del hospital, cuando me dijeron el nombre de Shun perdí el alma y como un cohete conduje hasta aquel lugar encontrándolo sentado en la cama. Para ese entonces ya los había llamado a todos, Ikki, Seiya, Shiryu, Milo, somos lo mas cercano a una familia para él. Todos llegamos casi al mismo tiempo. En se momento me dijo la razón por la cual estaba ingresado: un hijo, mi pequeño Shun esperaba a nuestro hijo. Invadido por la euforia no me importó que no quisiera besarme, estaba por darme lo que terminaría de hacer nuestra familia y era magnifico.

Aun así su actitud siguió, se mostraba distante y no comprendía por qué aun. Hasta una tarde en la que el decidió levantarse y caminar un poco, me llamó diciéndome que saldría a ver a Ikki. Me quedé preocupado, no deseaba que en ese camino sufriera una nueva caída o amenaza, si algo le pasaba a ese bebé se devastaría. Poco tiempo después Milo me llamó para decirme que Shun había estado en su restaurante y después de un desmayo se había marchado. Entonces me levante y decidí ir a casa para cuidarlo, los nervios me carcomían, tenia un mal presentimiento.

Conduje tan rápido como pude hasta allá, cuando llegue no pensé que eso estuviera pasando. Mi esposo se estrelló en mi pecho asustándome. Me incliné para ayudarlo mientras tenia un ataque histérico diciendo que acaba de matar a alguien. Fueron los vecinos del lugar quienes llamaron a la ambulancia y policía que llegó poco tiempo después. Yo no me aparte de Shun en ese tiempo así que me di cuenta de la presencia de Hyoga cuando este iba en una camilla rumbo al hospital. Miré a Shun en ese entonces, su histeria, su ropa desaliñada… afortunadamente el examen medico nos dijo que no había alcanzado a ser violentado pero aun así me maldije por no poder protegerlo y si él hubiera logrado su propósito no sé que hubiera pasado con Shun.

Después de eso no sabia como sentirme, Hyoga había regresado y Shun no me había dicho nada ¿Lo habría cortejado? ¿Shun aun lo amaba? Si así es, me voy a encargar de arrancarle a ese desdichado del corazón.

Mi teléfono celular timbó en ese instante. Es Shun. Han pasado poco mas de cinco meses desde ese día y Hyoga está en los separos a la espera del juicio, Shiryu consiguió que se pospusiera por la condición de Shun. Ha tenido una amenaza mas por eso le recomendaron reposo absoluto desde hacia dos semanas.

-Dime Shun- contestó de inmediato con una sonrisa en el rostro. A pesar de todo aquello yo aun lo amo y el me demuestra que también me ama así que soy feliz por ello.

-¡Ven!- me dice agitado, inmediatamente palidezco-¡me duele!

-¿Qué?- no se como reaccionar ante sus palabras eso no debería pasar, es muy rápido aun.

-¡Shaka!- repite tratando de sonar tranquilo- ¡Ven rápido, tengo miedo!- comienza a llorar pero aun así puedo entenderlo- ¡Estoy sangrando!

-¡Voy para allá!- salgo de inmediato, pero no le cuelgo, no quiero dejarlo solo- Shun, escúchame, tienes que seguir hablándome, dime lo que pasa, amor ¿Llamaste a una ambulancia?

-Si- contesta después de una queja que intentó contener- los llamé hace poco, vendrán muy pronto.

-Se paciente, mi amor, no te asustes, todo va a estar bien- me siento como un estúpido diciendo esto sin parar mientras el maldito elevador no se apresura. Cuando las puertas se abren lo escuchó quejarse a lo lejos, debió tapar la bocina para que no lo escuchara pero pude hacerlo. Me siento desesperado.

-¡Shun! ¿Qué pasa? Resiste, mi vida- ya estoy en el estacionamiento y subo al auto colocándome el “manos libres”. A pesar de todo conduzco con cuidado- ¿Shun?- no me contesta, ¿Qué rayos pasa?- ¡¿Shun?!

-Aquí estoy- contesta en un susurró- Escuchó a la ambulancia- termina diciendo en un suspiro.

-Eso es bueno- sonrió también yo en un semáforo- verás que todo va a estar bien- no puedo dejar de repetirlo, no solo para él sino también para mi, estoy igual o mas asustado que él.

Sigo hablándole durante todo el camino. Solo diez minutos que bien pudieron ser años y me habría parecido lo mismo. Cuando llego a nuestra casa hay gente alrededor y unas luces bailan sobre sus cabezas. Shun me colgó hace un par de minutos, de seguro por recomendación de los médicos. Me acercó corriendo justo para ver como lo suben a la ambulancia envuelto en una sabana blanca, sujeto su mano cuando me la pide. Su rostro demuestra tanta angustia que solo atino a sonreírle para que se tranquilice. Besos su labios con delicadeza para después ser apartado de su lado.

Las puertas se cierran y la ambulancia comienza a llorar alejándose de mí.

Notas finales:

Jo! este capitulo no lo habia planeado

Se me acabo la canción ^w^U...

A pesar de que amo esta pareja no tengo ningun fic donde acaben juntos D:... soy mala hasta conmigo u.u

Saludos xD

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).