Se vistió con un pantalón de mezclilla y una playera de color verde, sin ningún dibujo ni letras. A Draco le gustaba mucho esa playera, la usaba cuando quería sentirse relajado y cómodo.
Salió de su dormitorio, y pudo ver a Theo sentado en un elegante sillón negro. Se vieron y Draco hizo una seña con la cabeza de que salieran, y Theo la entendió, se levantó y se dirigió a la puerta un poco más adelantado que Draco.
Al salir Draco tomo el mando del camino y dijo, con Theo un poco atrás debido a la repentina dirección de su amigo.
-Quiero estar lejos de todo este ruido, podemos ir a nuestro lugar?- dijo Draco quien no paraba de caminar.
-Si… pero con una condición- dijo Theo ahora al lado del rubio –Que me cuentes que pasó- dijo deteniéndose para ver a su amigo creyendo que éste se detendría igualmente, pero no lo hizo. Así que apenas un par de pasos por parte del rubio, Theo estiro el brazo para detenerlo –Draco-
El chico rubio se detuvo debido al agarre de su amigo, volteo a verlo y dijo
-No paso nada- y se volteo pero el agarre se hizo más fuerte.
-Draco necesito saber que pasó- dijo impaciente.
-Que no fue nada!- respondió Draco exasperado
-Ah no? Y porque estabas llorando de esa manera eh?! Nunca, óyeme bien, NUNCA te había visto llorar así, a excepción de hace poco pero era diferente. Nunca pasabas de ponerte triste y tratar de aparentar que estabas bien, Draco para que hayas hecho eso tuvo que haber pasado algo y algo serio, dime-
Draco se sentía acorralado, moría por decírselo, contarle lo que vio y así tal vez sentirse un poco desahogado, pero es que siempre era él el que tenía que estar mal y era Theo el que la llevaba. No podía darle tantos problemas a Theo, acababa de confesarle algo muy serio y ahora con esto? No, no podía hacerle eso.
-No Theo no es nada, de verdad, ya te he dado suficientes problemas y ni siquiera tienes por qué tenerlos, son míos y no pienso en ti al momento de contarte, mejor vámonos ya si?- pidió Draco esperando que su amigo no insistiera pero no fue así.
-Draco te voy a dar unas nalgadas, eres MI MEJOR AMIGO, créeme que si hay problemas que quiero manejar, aparte de los que pueda tener yo, serian los tuyos. Draco, que no lo entiendes? Estamos juntos en esto, necesitas de alguien, aunque no lo aceptes, pero eres un terco orgulloso que parece que le entran mis palabras por una oreja y le salen por la otra- dijo Theo que no sabía porque carajo su amigo no lo entendía.
Draco se quedó en silencio, era genial contar con alguien así –Te digo allá, vamos- y siguieron su camino.
Salieron del castillo caminaron un par de minutos. Llegaron a la orilla del bosque prohibido, por un lugar un poco apartado (Era la ventaja de estudiar en un colegio tan enorme) no había gente.
-Hace mucho que no veníamos aquí cierto?- comentó Theo al haber entrado en el Bosque por entre dos árboles.
-Si… como 5 años casi no?- dijo Draco que ya había entrado.
-Si… que rápido se va el tiempo. Recuerdas como lo descubrimos?-
-Jajaja si, andábamos de traviesos explorando el nuevo colegio, obviamente cuando Dumbledore dijo que estaba estrictamente prohibida la entrada al Bosque por los alumnos, para nosotros fue una clara invitación a entrar- comentó Draco con una sonrisa en el rostro.
-Jajaja si caray, en nuestro primer año llegamos hasta aquí, recuerdo que no me soltabas el brazo para nada jajaja- comento Theo entre risas debido a recordarlo y aun mas al ver el gesto de su amigo.
-Ja ja ja que gracioso, yo no te estaba agarrando del brazo era solo que… que pues… te estaba deteniendo por si se te ocurría escapar- dijo Draco viendo a Theo con gesto “-.-“
-Jajaja si como sea jaja oye… y recuerdas que fue lo que vimos esa primera vez?-
-Si!… fue increíble no?- dijo Draco tambaleándose por estar cruzando sobre unos troncos muy grandes que estaban tirados.
-Lo sé, el primer día y vimos un unicornio chiquito-
-Aaahhh fue genial, nunca he vuelto a ver otro igual. El año pasado vimos uno pero ya maduro, y fue de lejos-
-Sí, y luego que contigo se llevó muy bien, y ahora que se mas de ellos, fue extraño que se comportara así no crees?-
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Flashback
-Vamos Draco, no pasa nada- dijo el pequeño Theo empujando a su amigo rubio por la espalda, escapándose a escondidas de las miradas de los demás.
-Pero… pero es muy tarde Theo- dijo ahora el pequeño Draco poniendo resistencia al el empuje de su amigo.
-Ay! Y qué tiene? Apoco tienes miedo?- dijo Theo retando a su amigo mientras caminaban cautelosamente por un pasillo oculto del castillo.
-Claro que no, un Malfoy nunca tiene miedo- respondió Draco tajante
-Entonces?-
-Qué?-
-Como “qué?”? Porque no quieres ir?-
-Si quiero ir-
-Bueno, ya lo dijiste eh- y siguió el camino, pero Draco no se movió –Vamos!- y se devolvió para jalarlo del brazo.
-Ay voy!- y caminaron a prisa cuidando que no hubiera gente.
La oscuridad predominaba en las afueras del castillo, lo cual hizo mucho más fácil que no los vieran, aparte llevaban sus túnicas negras que los camuflajeaban, a excepción del cabello de Draco que resaltaba, poco más que su piel, levemente a lo lejos.
Después de caminar unos momentos cerca de la orilla del Bosque Prohibido y cuidando que ningún profesor los fuera a ver, encontraron un árbol muy grande que estaba junto a otro igual de alto pero no tan ancho, y a sus lados había muchos árboles juntitos. Ambos estaban muy juntos pero no pegados, y justo en medio de los dos había un pequeño agujero por donde no cabria ningún adulto, si mucho un adolescente.
-Mira Draco, por ahí- dijo Theo señalando el espacio entre los árboles.
-Qué piensas hacer?- preguntó Draco con la esperanza de que no fuera lo que parecía obvio.
-Ay Draco, como que qué pienso hacer?, pues entrar!- contestó Theo como si fuera la respuesta más obvia del mundo.
-Entrar… por ahí?- dijo Draco mientras veía ciertos escarabajos y hormigas e incluso… arañas? –No eh, estás loco si crees que voy a meterme allí- dijo Draco de manera terminante.
-Claro que si, vente- respondió Theo ignorando el gesto de su amigo y tomándolo de la muñeca para jalarlo y hacerlo pasar entre los dos árboles.
-N… No, Theo!- rezongó Draco mientras forcejeaba contra el agarre de Theo pero su amigo era un poco más fuerte que él así que no lo logró.
Primero entró Theo. Pero ahora Theo no le agarraba la muñeca, sino que Draco lo tomaba del brazo. El rubio entró justo detrás que Theo. Al haber cruzado se podía notar que los árboles que habían visto por fuera seguían muy pegaditos. Eran aproximadamente 15 metros cuadrados de suelo lleno de árboles con tronco delgado y con menos de un metro de distancia entre ellos haciendo que no se pudiera ver mucho más allá. Siguieron caminando, introduciéndose en el Bosque Prohibido.
-Theo…- habló Draco muy bajito –Vámonos- aun agarrando el brazo de su amigo.
-No, tranquilo no pasa nada, sólo caminemos más allá de estos árboles si?- contesto Theo con un tono de emoción.
Caminaron (ya sin agarrarse pues Draco lo había soltado) entre dichos árboles, algunos tenían una cosa verdosa pegada al tronco que se notaba por la poca luz que entraba de la luna. A Draco se le a figuró ver unas lucecitas revoloteando por entre los árboles a unos cuantos metros de ellos. La luz de la luna se hacía más brillante, lo que indicaba que estaban más cerca de la salida.
-Mira Draco, adelante ya no hay árboles-
Draco observó y era cierto. Unos pasos más adelante llegaron a un terreno pequeño donde no había ningún árbol. Era un suelo cubierto de césped extrañamente muy bien cuidado. Se quedaron en la orilla de los árboles observando alrededor. En el centro había una piedra grande. Draco avanzó con más seguridad pues había luz lunar y se sentó en ella, quedando frente a Theo que estaba donde mismo.
-Por fin un lugar despejado- dijo Draco observando el cielo desde donde estaba sentado.
-Jaja lo sé… Es enorme no?- pregunto Theo recargándose en un árbol u mirando por entre los árboles del Bosque.
-Si…- dijo Draco aun mirando al cielo.
-Yo venía con la ilusión de encontrar alguna criatura interesante pero… ya veo que no-
-Afortunadamente. No querrás toparte con un estúpido troll o si?-
-Jaja no, ellos no son interesantes-
Se quedaron en silencio unos segundos. Draco seguía mirando el cielo muy entretenido, cuando de pronto se escuchó un ruido, ruido que al parecer sólo Theo escuchó.
-Oíste eso?- preguntó con asombro
-Qué?- respondió sin mucho interés Draco sin dejar de ver al cielo.
-Ese ruido- respondió buscando con la mirada por entre los árboles.
-Ay Theo, cuál ruido? Yo no escuche nada-
-Es en serio, se escuchó como una pisada-
-Ajá, de seguro estas tan desesperado por ver alguna criatura mágica que ya hasta crees oír cosas. Mejor vámonos antes de que creas ver una esfinge o algo así-
-Aaahhh tienes razón. Tal vez sólo creí escuchar algo- respondió Theo un tanto decepcionado.
-Sí, eso creo yo, porque yo también lo pude haber escuchado no?- dijo Draco aun sentado en la piedra y viendo la luna que había encontrado a pesar de unas nubecillas que acababan de aparecer –Theo… Theo que pasa?- dijo Draco que había bajado la mirada porque su amigo no había respondido.
Theo tenía los ojos muy abiertos y observaba justo detrás de Draco. El rubio al verlo con esa cara se sintió un poco asustado pero pensó que de seguro era una broma de su amigo quien ahora tenía en su rostro una pequeña sonrisa dibujada.
-Te sientes bien Theo? Por qué estas a…- pero no pudo terminar su pregunta porque sintió una especie de respiración justo detrás de él. Sus ojos se abrieron como aros de quidditch y comenzó a ponerse nervioso –The… Theo… que es?- preguntó ahora con los ojos muy apretados.
El rostro de Theo dibujaba un claro asombro, tenía los ojos muy abiertos y su sonrisa era clara –No te preocupes Draco, no te hará daño- dijo para intentar tranquilizar a su amigo.
-Pero qué eso?- Draco tenía los ojos muy cerrados y ni se movía. Sentía a la criatura olfateando toda su espalda.
-Velo tu mismo- respondió Theo de manera tranquila y sin moverse de su lugar.
Draco abrió los ojos lentamente, seguía temblando pero al ver a su amigo sonreírle se sintió más seguro.
-Voltea muy despacio- dijo Theo.
Draco hizo caso y fue girando su cuerpo, aún sentado sobre la piedra, hasta poder ver perfectamente eso que estaba detrás de él. Un pequeño potrillo de unicornio lo volteaba a ver con gesto curioso, al parecer le llamaba la atención el cabello de Draco. El pequeño unicornio dorado camino un poco rodeando la roca donde estaba Draco sentado para quedar a su lado. Draco no lo podía creer, era una criatura demasiado bella e interesante y solo la veía de manera expectante. El potrillo acerco su cabeza de manera que Draco pudiera acariciarlo y fue lo que hizo: estiro su mano lentamente hasta posarla en el cuello de la cría, donde pudo notar que tenía unos mechones más oscuritos que formaban una especie de media luna chiquita. La pequeña criatura solo cerraba los ojos dejándose acariciar. Theo no se movía, solo los veía asombrado y sorprendido. Draco levantó la mirada para ver a Theo pero no dejaba de acariciar al pequeño potro dorado. Theo avanzó despacio pero fue suficiente para que el unicornio lo notara y voltea
ra a verlo y muy rápidamente se fue detrás de la roca.
-No, no, no, Theo espera! No te muevas- Theo se quedo quieto y Draco se bajó, rodeó la roca y se dirigió al unicornio que estaba muy alerta para salir corriendo si Theo se acercaba.
-Tranquilo bonito, no pasa nada, no te hará daño- dijo Draco acercándose al potrillo y acariciándolo de nuevo –No tengas miedo- continuo acariciándolo pero ahora del lomo y veía de manera asombrada a Theo, era increíble, se sentía muy suave. El pequeño unicornio se dejaba acariciar y de vez en cuando relinchaba en muestra de que le gustaba –Y dónde está tu mami eh? Por que no estás con ella? Es peligroso que andes solo en el Bosque- le hablaba Draco. Theo no dejaba de verlos. En eso, Draco lo volteó a ver y le hizo señas de que se acercara muy despacio y eso hizo, se fue acercando a la roca muy lentamente mientras Draco le seguía hablando para que no escuchara. Theo llego a la roca sin que lo escuchara, se subió y pudo ver al dorado unicornio brillante como el cabello de su amigo bajo la luz de la luna.
Así estuvieron unos escasos minutos porque de pronto escucharon un fuerte relinchido y el pequeño unicornio volvió la cabeza muy apresuradamente atendiendo a su llamado.
-Anda, ve, ha de ser tu mamá que te está buscando- dijo Draco dándole palmaditas en el lomo para que fuera a donde provenía ese sonido. El potrillo movió la cabeza como si asintiera y se fue corriendo muy rápido a pesar de su edad y tamaño.
-Asombroso no?- dijo el pequeño Theo mirando por donde se había ido.
-Sí, fue increíble- dijo Draco aún si creerlo.
-Por qué no habrá dejado que me le acercara?- preguntó Theo.
-No lo sé, tendría miedo tal vez-
-Sí, supongo, pero eso no le quita lo único verdad?-
-Claro que no, viste su color? Según yo son plateados-
-Algo me comentó mi mamá, creo que mientras van creciendo se van haciendo plateados y su cuerno crece- explicó Theo.
-Maravilloso- respondió el pequeño Draco con una sonrisa en el rostro –era muy cariñoso-
-Jaja sí, pero creo que su mamá lo buscaba-
-Sí, ya está más oscuro… deberíamos irnos antes de que empiecen a buscarnos-
-Tienes razón, no pensé en eso, vámonos-
Y ambos salieron corriendo. Draco, antes de entrar en los árboles otra vez, volteó para ver si de casualidad lo veía otra vez pero no vio nada solo escuchó un suave relinchido que lo hizo sonreír pues supuso que sería del pequeño unicornio.
-Draco!- gritó Theo –Apúrale-
-Sí, ya voy!- y salió corriendo para alcanzar a su amigo.
Iban corriendo a todo lo que podían, cruzaron por entre los árboles que dejaban entre ellos una especia de entrada y fueron corriendo al castillo donde en la puerta del Gran Comedor estaba el profesor Snape.
-Por qué tan tarde?- preguntó entre dientes
-Porque…-
-Fuimos al baño- respondió Theo porque a Draco no se le ocurriría nada para decir rápido.
-Última vez que van antes de entrar- dijo Snape y los llevó al Gran Comedor.
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-Sí, pero fue increíble, nunca lo olvidare- dijo Draco mientras llegaba a la orilla de los árboles –Aaahhh sigue igual- dijo sonriente.
-Si… a diferencia que ahora si hay sol- comento Theo.
Draco solo sonrió mientras caminaba hacia la roca que ahora parecía más pequeña.
El lugar estaba igual. Alrededor estaba lleno de árboles. El zacate seguía cuidado y mostraba un verde vivo. Los rayos de sol iluminaban toda esa zona y entraban unos cuantos rayos por entre los árboles.
Draco llegó a la piedra y se sentó en ella. A pesar de los años que habían pasado, Draco se acomodó perfectamente en la roca y Theo llegó y apoyó los codos en ella viendo a Draco a los ojos.
-Bueno, ya llegamos-
Draco respiro hondo –Qué quieres saber? Ya te dije que vi no?-
-Pues si… pero Draco… no te pongas así por él-
-Ay yo no me pongo de ningún modo por “él”- dijo Draco desviando la mirada para donde una vez se había ido el pequeño unicornio.
-Claro que si, intentas estar indiferente ante un tema referente a él. La verdad es que Potter me importa un bledo pero… Draco, no crees que deberías tomarlo con más calma? No te castigues solo porque lo viste con una chica- dijo Theo intentando convencer a su amigo de que pues si no era Harry, seria alguien más –Además que es eso de que no debes sentir algo por el?-
-Pues así es, tal como lo dijiste, NO debo-
-Y por qué?-
-Ay que no lo entiendes?-
-Pues no, explícame-
-Aaahhh Theo a quien engaño? Por más que quiera que pase algo con… Harry, no pasara. Me acaba de quedar claro y eso solo muestra que mis decisiones serán erróneas y que solo voy a estar como idiota cometiendo errores solo por querer “vivir algo que he imaginado”-
-No Draco, no son errores, simplemente pues… tal vez no le gustas- dijo Theo creyendo que ese comentario no fue el correcto.
-Ja! “Tal vez”? “Tal vez?!” Theo es obvio! Lo vi intercambiando sus babas con esa asquerosa chang además creo que también tiene algo que ver con la sangre sucia de Granger- dijo con el enojo a flor de piel.
-No, en eso si no estoy de acuerdo. Son amigos y eso lo se porque así somos tu y yo-
-Claro que no, ella se la pasa con el todo el tiempo, es una odiosa… de seguro es una interesada que quiere estar con él para que la volteen a ver-
-Aaahhh Draco… no se que hacer- dijo sinceramente Theo –Suenas tan convencido-
-Lo estoy-
-Pero no es el camino, huir de lo que sientes sin siquiera intentarlo-
-Intentar? Para qué? Para recibir un rechazo? Una burla? O no, ya sé un hechizo o un golpe verdad?-
-Claro que no Draco, me refiero a que puedes intentarlo con alguien más. Potter esta tonto-
-Eit!- dijo Draco severamente y viéndolo a los ojos.
-Jajaja qué? Apoco lo defiendes?- dijo Draco levantando una ceja y sonriendo.
-Ay claro que no, pero… no es tonto… es idiota fíjate-
-Aja… o será que no te gusta que lo insulten porque es tu “amorcito”? jajaja- dijo Theo soltando una risotada.
-No seas tarado. Dile como quieras. No tiene por que importarme- dijo Draco ignorando el comentario de su amigo.
-Ah si? bien, porque no quisiera que te enojaras conmigo por decirle a tu noviecito estúpido cuatro ojos cara rajada- dijo Theo mirando hacia otro lado y asintiendo con satisfacción.
-Oye!- dijo Draco dándole un zape en la cabeza –No le hables así- regañó Draco
-Jajaja entonces si lo defiendes! Rayos! Creo que el y yo no nos vamos a llevar bien… Oye y porque te gusta eh? Digo, está bien feo y medio deforme- comentó Theo entre risas.
-Ay pues tú no estás muy normal eh- dijo Draco viendo a su amigo con cara de pocos amigos.
-Claro que si, tengo muchas pretendientas y pretendientes jaja igual que tú- dijo sin dejar de reír
-Uy si no? El súper guapo jaja-
-Jaja claro que si- dijo sonriendo –Aaahhh me gusta más cuando sonríes. Draco no te des por vencido si? habrá alguien más-
-No Theo- dijo Draco ahora triste –No es lo mismo, nadie tiene sus ojos, ni su sonrisa ni ese color perfecto de piel… además no pienso seguir perdiendo el tiempo con babosadas como esas, debo preocuparme más por otras cosas que si valgan la pena-
-No Draco y de eso me encargo yo. No estoy esperando que se lo digas a todo el mundo porque se que no quieres eso-
-No…-
-Pero no te lastimes, ve como te pones, nunca habías estado así por alguien y tal vez eso quiera decir algo no crees? Yo me encargare de averiguarlo, ya veras- dijo satisfecho.
-Averiguar qué?-
-Si Potter es… pues tu sabes no? Jaja-
-Aaay terco… Harry no lo es-
-Eso no lo sabemos… puede mmm aparentar no?-
-Pues… tal vez pero aun así no lo creo-
-Tu tranquilo si? te prometo que no hare nada imprudente y mucho menos algo que te comprometa, hay formas de saberlo y se me acaba de ocurrir una- dijo sonriendo al rubio.
Draco esbozó una sonrisa y le volvió a dar un zape
-Jaja y eso por qué?- preguntó Theo sobándose aunque no le había dolido
-Porque quise jaja, pero en serio no hagas nada si? no quiero desilusionarme o mejor dicho volver a ilusionarme para luego regresar a la realidad-
-Ay Draco eres muy sexy… quien quita y Potter se va a la cama pensando en ti para hacer otra cosa que no es dormir- dijo Theo pícaramente logrando su objetivo de poner rojo a Draco.
-Theo! Claro que no! Harry no haría eso- dijo el chico con las mejillas sonrosadas
-Jaja ay puede ser- dijo riendo y siguiendo a Draco que se había bajado de la roca para salir del bosque -Ah y otra cosa… desde cuando le dices Harry? Desde que eres tu el que se va a la cama pensando en él?- dijo sonriendo reteniendo una carcajada.
Draco lo miro con sonrisa malévola, se acerco un poco a su oído para no verlo a la cara y dijo en voz baja –No, desde que imagino que está entre mis piernas y así es como le digo…- las mejillas de Draco se sonrojaron mucho mas y rápido se dio la vuelta y caminó para llegar entre los árboles sonriendo apenado.
Theo se quedo con los ojos muy abiertos y sin moverse –Wow! Eso fue demasiada información para mi eh!- dijo y caminó para alcanzar a su amigo.
-Jajaja eres un idiota- dijo Draco sin contener la risa –Le digo así porque… se me sale-
-Aja seguramente, le dices por su nombre cuando nadie te ve porque es especia para ti- contesto Theo sonriendo porque ya había superado la broma de su amigo –No vuelvas a decirme cosas así eh- dijo avergonzado y no molesto.
-Jajaja es que quería ver tu reacción además tu empezaste- dijo Draco riendo
-Lo se pero… pero… no se vale… solo yo puedo hacerlas-
-Jaja claro que no pero no te preocupes no lo vuelvo a hacer-
-Jajaja por qué?-
-Pues porque me sentí… raro…-
-Jajaja menso es porque te gusta, pero aparte eso es confianza que me tienes para contarme cosas así. Es solo que pues… eres como mi hermano y que me digas que alguien hace… eso… es raro- dijo Theo mientras se acercaban a los árboles –Nunca lo había pensado, estas chiquito para hacer eso eh- dijo Theo como todo un padre protector
-Ay ajá eh- dijo Draco riendo
Continuaron conversando el poco camino que les quedaba para salir pero fue suficiente para que quedara claro que de ahora en delante Theo iba a bromear mucho con Draco pero éste no se quedaría de manos cruzadas y también lo llegaría a molestar… bueno, si es que sus mejillas no se lo impedían.
Theo iba a pensar en cómo perfeccionar su plan porque, sin saber porque, sabía que algo bueno podría pasar con todo eso, solo era cuestión de tiempo para poder ayudar a su amigo rubio porque no le gustaba para nada, verlo de esa manera. Tal vez “Potter” seria el indicado, o tal vez no pero no perdía nada con intentarlo. Ver a su amigo así de feliz era muy especial, sobre todo porque creía que Draco era una persona que no demostraba muchas cosas de él, de cómo es, pero eso mismo que ocultaba era algo que podía entregar. Draco merecía una experiencia así y el la esperaba de verdad. Cuando Draco le confesó su atracción hacia Harry no lo entendió o no lo asimiló del todo pero basto con un día para que lo que lo pudiera entender y ayudar así que todo siguió normal. Su amistad era envidiable y por eso mismo cualquiera de los dos era capaz de hacer lo que fuera por el otro y Draco siempre lo había demostrado así que ahora era su turno.