Uruha's POV
Me encontraba recostado en mi cama pensando, mañana es el primer día de clases, ¡no quiero ir! Es toda una tortura el sólo pensar que mañana comienza ese suplicio, pero bueno prefiero estar allá que estar aquí, al menos en la escuela tengo mas variedad de lugares en donde dormir y no solo en mi cama, aunque también sé que debo poner empeño en mis clases, es mi ultimo año, ya quiero graduarme para mudarme de aquí, buscar un trabajo y así no necesitar mas de mi madre; pero el solo pensar que debo ir a sentarme a escuchar estupideces de los maestros y mis compañeros me aburre, espero que no sean los mismos idiotas que el año pasado, también me inquieta saber quien será mi profesor, espero que no sea otra vez Matsumoto ese imbécil me odia, pero creo que le deje muy en claro que el sentimiento es mutuo, no quiero que sea mi profesor otra vez, pero ya que, si es así haré exactamente lo mismo que el año pasado seré su peor pesadilla, solo de pensarlo ya me divierte; aunque debo aceptar que es buen profesor, ah ya carajo no quiero pensar en la escuela ya mañana estaré en ella y no me dan ganas de ir, ya tengo suficiente con eso.
Pase otro rato recostado en mi cama, envolviéndome entre las sabanas, es casi la 1:00 PM y yo sigo aquí en mi cama con la pijama puesta, solamente me levante para comer; no tengo planes para hoy solamente dormir y dormir, o eso pensaba hasta antes que mi madre me hablara.
-¡Kouyou, ven por favor! – ahh y ahora que quiere esta mujer.
Me levanté y bajé las escaleras, ella estaba frente a la puerta al parecer ya se iba a trabajar.
-Ya me voy –
- no te hice comida no me quedo tiempo – ver las novelas es algo que quita mucho tiempo
- Hazla tú, aunque creo que no hay nada que hacer - que novedad
- Toma – me dio dinero y una lista
- ve al supermercado y por favor compra solo lo que esta en la lista, no compres nada más, ¿entendiste? – me habla como si tuviera 5 años
- Si mamá ya entendí – ahh no quiero ir al supermercado.
- bien, entonces me voy – me miró de pies a cabeza
- Kouyou báñate y quítate esa ropa, además tienes que lavarla y también la que usaste ayer… y lava la que yo deje ahí también – que emoción, lavré ropa.
- Ah y se me olvidaba, haces la cena y ahora si ya me voy, vuelvo en la noche – a veces creo que mi madre quería una sirvienta, no un hijo
- ¡Que te vaya bien! – vi que cerro la puerta, mi madre ni siquiera me dijo adiós ni por favor en todo lo que me pidió, como dije ella me ve como sirvienta tal vez, aunque no puedo quejarme ella nunca me desampara, bueno al menos en mis necesidades básicas, en la comida, el vestuario y me obliga a ir a la escuela así que digamos que cumple con sus deberes de madre, aunque por supuesto ella sabe que debe hacerlo como buena abogada sabe que si no los cumple yo podría demandarla por maltrato infantil, bueno exactamente no se cual es el crimen, pero puedo demandarla, pero ella lo sabe es una buena abogada, exitosa se podría decir ha ganado casos complicados y han sido reconocidos en los medios, ella es abogada del acusante no se que nombre tiene eso pero ella respalda a la persona que demanda aunque a veces resulta que el demandante no tiene la razón y eso la enfurece, y se viene a quejar conmigo ¿y yo que puedo hacer? Escuchar todo lo que tiene que decir, es aburrido pero si no lo hago se enoja, me dice que soy un mal hijo y todas esas cosas, supongo que mejor me vaya al supermercado ya pensé muchas sandeces.
Subí a tomar un baño, si algo agradezco es que tengo mi propio baño en mi cuarto así que no debo compartirlo con mi madre, no es muy grande pero al menos es personal; termine mi baño, me cambie de ropa y salí de casa hacia la estación, no esta muy lejos así que puedo ir caminando, llegue y tome el tren; odio que cuando subo al tren las personas me miran todo el tiempo, a lo mejor piensan que soy algún tipo de delincuente aunque no se por qué, si soy un niño tan lindo Já si claro Uruha engáñate tu mismo, el tren llego a mi destino, bueno aun no, tengo que dar unos cuantos pasos para entrar en el supermercado, estando ahí comencé a tomar las cosas que decían en la lista, mi madre me puso hasta el precio del articulo al lado de su nombre y me dio el dinero exacto para eso, - que mala es – dije por lo bajo, seguí con las compras, pero mientras mas avanzaba en la lista me iba dando cuenta que algunos artículos tenían un precio mas bajo al que decía en la lista así que aproveche, me fui al área de chuchearías tenia ganas de comprar algo así, entre al pasillo y me pare a ver lo que había ahí, de pronto una niña entro corriendo y se paro casi a mi lado, la verdad no le preste atención solo vi que era una enanita creo que tendrá unos 3 años máximo, mientras yo seguía en mi búsqueda de algo que comprar con el dinero que me sobraba, me aleje un poco de aquella pequeña, luego escuche como llamaba a su padre, - ¡Papi cómprame chocolates! – cuando la escuche un sentimiento de nostalgia se vino a mi mente, yo no tengo padre bueno si tengo porque no nací del aire, pero no lo conozco, él nos abandono a mi madre y a mi cuando yo tenia 3 años, no tenia suficiente edad como pare recordar y mi madre se dedico a votar todo lo que le recordaba a él, fotos y esas cosas así que supongo que aunque lo vea no podré reconocerlo, supongo que no me puede hacer falta porque nunca estuve con él, pero de cierta forma me gustaría sentir el cariño de un padre.
Tome un chocolate y me dirigí a pagar, regrese inmediatamente a mi casa, tenia mas cosas que hacer; hice mi almuerzo, luego lave toda la ropa que estaba sucia, demos gracias al que creo las lavadoras por que ¿a mano? No, ni de broma.
Cuando menos me di cuenta el día se había ido, ya eran las 7:00PM debía hacer la cena aun, baje a la cocina a hacerla, mi madre aun no llega; debe haberse quedado atrapada en el trafico, vendrá molesta si es así. Terminé de cocinar y me fui a mi cuarto, no tengo apetito mejor me voy a dormir, me quite la ropa que andaba quedando solo en boxers, vi el chocolate que compre sobre la mesa y me lo comí, la verdad es que no me gustan mucho, pero no se ni siquiera porque lo compre bueno no me queda mas que comérmelo, al terminarlo me recosté sobre mi cama siento que mis parpados se hacen pesados, mis ojos se cierran casi involuntariamente.
--
Repentinamente abrí mis ojos, note que aun había oscuridad me di la vuelta para ver el despertador, faltan 5 minutos para que suene la alarma, así que me levante y desactive la alarma antes de que sonara a mi madre le molesta ya que ella se levanta a la hora que se le antoja; me di un baño, y me vestí con el uniforme, no entiendo ¿por que los uniformes de tercer año son distintos a los demás? Es como una discriminación hacia los otros, en fin; baje a la cocina para prepararme algo de comer lo mas rápido que encontré fue el cereal y la leche, me tomo como 5 minutos comer y me fui camino a la escuela, tome el tren, llego a la estación donde yo debía bajarme, camine, no se unas dos cuadras para llegar a la escuela como es el primer día vi a mucha gente que jamás en mi maldita vida había visto, entre y en el patio estaban los listados con los nombres y el salón donde nos corresponde, me busque y vi que me toca en el 301; subí hasta ahí y entre, mire hacia los lados y me di cuenta que mis compañeros son los mismo estupidos del año pasado, vi que el ultimo asiento de la primer fila esta vació, me sentare ahí total con estos enfermos no puedo sentarme adelante, no se le debe dar la espalda al enemigo, me senté y saque mi reproductor, no tengo pensado escuchar los rumorcillos de estos chicos.
Cuando menos me di cuenta un hombre entro al salón, ¿es el maestro? Vi que tomo un marcador y escribió su nombre, al parecer si es el maestro, supongo que es nuevo nunca antes lo había visto, veía que movía su boca pero la música sonaba fuerte y no escuchaba ni el mas mínimo sonido externo, vi que volvió a tomar el marcador y escribió “Matemáticas” supongo que será su materia, baje el volumen de la música de modo que podía escuchar lo que decía.
- Será matemáticas la materia; vamos no se asusten, no seré tan malo con ustedes – que cosa mas estupida la que acaba de decir.
-Pero hoy por ser el primer día de clases, aun no iniciara su tortura, quisiera que hoy, nos conociéramos, así que por favor les pediré a cada uno que se levante y me digan su nombre y algo que les guste hacer, como un hobbie, así que comencemos por acá - ¿tortura? ¿Y no que seria bueno con nosotros? Como veo es solo otro estupido, además que quiere ¿que? Mi nombre y saber lo que hago, esta enfermo, subí de nuevo el volumen a la música, pero sentí que mi celular vibró, lo saque y era un mensaje de mi madre – ¿no me dejaste desayuno?- ¿que mi madre pensara que soy su chef?, iba a guardarlo pero en ese instante me envió otro mensaje - ¿Por qué no me hiciste desayuno? *Puchero*- ¿que se cree niña o que?, en ese momento el chico que estaba al lado mió, me toco, como se atreve el muy inbécil a tocarme, lo mire y me dijo algo pero por la música no escuchaba, así que ni le preste atención y mi madre me envió otro mensaje – Tráeme algo de comer cuando regreses – esta vez si le respondí que le lleve algo y ¿con que dinero? Si ella estaba dormida cuando salí, pero algo me interrumpió, el profesor tenia mi audífono en su mano.
- Por favor guarda eso y únete a la clase, dime tu nombre por favor – ¿Por qué dice tantas veces por favor? Y además que se cree tocándome
- No quiero- le respondí y recosté mi cabeza en el escritorio, en verdad no quiero unirme a su jodida clase, luego de no se cuanto tiempo mi madre me envió otro mensaje - ¿Por favor tráeme algo y yo te lo pago después? – me dijo por favor, hoy lloverá ya lo presentí, ya no le respondí porque es inútil me seguiría bombardeando con mensajes sin sentido, vi que el hombre ese que dice ser profesor se levanto y camino entre las filas de escritorios y luego todos se levantaron ¿ya nos vamos?, no puede ser que vine solo para esto, me levante y trataba de salir del salón pero como todo buen animal los idiotas querían salir todos al mismo tiempo ¿Qué tendrán mierda en la cabeza? No se ni porque me lo pregunto si ya se la respuesta, de pronto sentí la mirada del profesor en mi, lo mire de reojo y si ¡me esta viendo! ¿Qué clase de pervertido es este?, Salí lo mas rápido que pude del salón ya quiero irme de aquí, bueno para empezar ni siquiera quería venir y aunque trate de salir “rápido” fui el ultimo en abandonar el salón, mientras bajaba las escaleras vi a Haku que estaba molestando a un niño, aunque creo que debe ser nuestro compañero lleva el mismo uniforme, como será imbécil es el primer día y ya le esta metiendo “miedo” al enano ese, si no fuese tan enano no le ayudaría, pero Haku es un idiota.
- Veo que no pierdes el tiempo Haku – le dije mientras me interponía entre él y el enano, ahora que lo veo bien es el niño que estaba sentado a mi lado
- No te metas Kouyou – y el idiota aun me reta
- como serás estupido que no te das cuenta que ya me metí ¿Cómo me pides que no lo haga? – lo que mas amo es el sarcasmo
- ¡Apártate!, yo solo estaba hablando con el chico – si como no
- pues como ves, no me voy a apartar por dos cosas: primero porque no se me da la gana y segundo porque no quiero, búscate a alguien de tu tamaño para molestar y deja al enano en paz - me di cuenta que dije lo mismo pero ya que. Tome al chico del brazo y me di la vuelta.
- ¡Ah! ¿Así que ahora traes a tu perra a la escuela?, no sabia que tenias esos gustos. – sino le rompo la cara es porque es el primer día
- ¿Mi perra?, mira quien habla el que anda a dos tras suyo – me refería a sus “amigos” que nunca lo dejan solo.
-Búscate algo que hacer Haku – esto último se lo dije ya de espaldas, no pienso seguir discutiendo cosas sin sentido, yo ni conozco a este chico.
Di como tres pasos más y solté al enano este, no quiero que piense cosas raras y tampoco quiero que piense que soy su ángel guardián o algo así.
-G-gr-acias – escuche una leve vocecita, yo ni lo volví a ver
-Mi nombre es – lo detuve
- ¡No me interesa!, no te creas te ayude porque eres mas pequeño que él y pienso que es injusto además eran tres contra ti, no quiero que tengas ideas raras no quiero ayudarte, no quiero conocerte, no quiero saber tu nombre así que no te molestes en decírmelo, es mas ni te molestes en recordar esto, ¿entendiste? – creo que casi lo hago llorar, pero no me importa, seguí mi camino hasta salir de la escuela.
Mientras iba en el tren de regreso recordé los mensajes de mi madre, creo que me es más fácil prepararle algo cuando llegue a casa.
Una vez que llegue a mi casa vi a mi madre recostada en el sofá de la sala viendo novelas, entre directamente a la cocina y le prepare algo de comer, se lo lleve hasta el sofá, ni cuenta se había dado que yo ya estaba ahí, tomo el plato y no me dijo ni gracias, no me pregunto como me había ido, ¡Nada! Aunque ya me acostumbre a eso, de vez en cuando no hace mal un poco de atención.
Subí hasta mi cuarto y me recosté en la cama, de pronto ese sentimiento que tanto odio me volvió a invadir, a veces me gustaría sentirme querido, no estar tan solo pero mi misma barrera me lo prohíbe cuando alguien trata de ser amable conmigo lo hago pedazos casi como lo que acaba de pasar con aquel niño ¿Por qué seré así? Se me hace un misterio, con esfuerzo abrí la gaveta de mi mesa de noche y saque un cigarro, comencé a fumar cuando tenia 12 años ni siquiera recuerdo como, mi madre se dio cuenta un año mas tarde, no me dijo ni pio cuando me vio hacerlo así que nunca lo deje, al igual que la música a ella le molesta que haga “ruido” con mi guitarra pero, creo que la música es la que nunca me abandonará y no me hace a un lado o me deja solo, siempre esta ahí para mi; por momentos me gustaría tener a alguien con quien hablar y compartir mi vida si es que se le puede llamar así a esto, quisiera que todo fuera no feliz porque nunca nadie es completamente feliz, pero al menos uno de esos rayitos que tanto alegra a los demás quisiera que me alcanzara a mi, pero no lo hace siempre que lo tengo se desvanece casi tan rápido como llega, quisiera tener a alguien que me comprendiera y que supiera lo que siento, quisiera tener a alguien que me quiera, algo así como él lo hacia; moví mi cabeza en dirección a la mesa de noche específicamente a la fotografía que esta ahí, - ¿Por qué?, ¿Por qué? ¿Por qué no me llevaste contigo Akira? ¿Por qué? -