Los mal aventurados no lloran.
Sé que esta en algún lugar mejor, donde no haya abuso, donde no estuvieran los bastardos de central que solo buscaban la forma de utilizarlo a él o a cualquiera que les fuera útil para sus fines “en nombre de la iglesia”, fuera de este mundo , fuera de este mundo en miseria, en el que solo esta el dolor que deja atrás la guerra, Quiero encontrar el medio para yo poder hablar con ella, algún medio para reunirme con el (claro que no involucrara a ese gordo de mierda) poder hablar con el, la única persona que me conocía de verdad , con quien podía hablar sin problemas y que me entendía, poder decirle a ella que aquí todo esta peor, aunque había terminado la guerra con nuestra victoria y el mundo estaba volviendo a la “normalidad” eso era imposible para las personas que un día lo llegamos a conocer aunque solo hubiera sido por poco tiempo todos le tomaron cariño unos mas que otros, causando un gran dolor con su ausencia.
Que al igual que ella mi voluntad también murió, sin el que sentido tenía seguir viviendo la vida ya no tenia sentido si no podía estar a su lado, le quiero platicar que todo sale mal que yo la alcanzaría teniendo la oportunidad, todo empeoro todo a su alrededor salía mal. Quería reunirme con el a como diera lugar pero los entrometidos de la mujer esa* y el estúpido conejo** no me dejaban solo, alegando que lo mejor para mi era estar acompañado, pues sabían la relación que tuvo con el y como me había afectado que hubiera muerto, además que sospechaban lo que haría si me llegaba a quedaba solo un momento, sabia que se preocupaban, que no querían perder a otro buen amigo, que no querían tener que sufrir mas, pero me importaba poco lo que ellos sintieran si llegaba a morir, sabia que si el estuviera aquí lo regañaría de pensar de esa forma pero solo era un “si el” y él no estaba aquí.
Sé que ella se siente mejor , sin el dolor de la guerra y el sufrimiento de las personas ajenas, que a él lo afectaba mucho, solo demostrando lo mártir que podía llegar a ser, haya no hay suplicio, seria muy impulsivo, que incluso en la otra vida tuviera que sufrir todavía mas de cuando estaba vivo, eso si seria pura mierda, como si el ya no hubiera sufrido mas de la cuenta cargando con un peso enorme sobre su espalda y que el muy idiota no dejaba que nadie le ayudase, he de utilizar el medio y llegar a lo desconocido sentirla a lado mio, volver a sentir su calor, volver a oler su dulce esencia ,oír su risa ese hermoso sonido, ver de nuevo esa sonrisa deslumbrante que cualquiera que lo viera se alegraba, esa sonrisa empalagosa que aunque le gustaba nunca se lo diría alguien que no fuera el y eso ya no seria posible no hasta que el muriera.
y decir que todo esta peor mi mundo, mi vida, mi ser estaba vacío sin él, yo estaba muriendo lentamente por dentro, estaba destrozado y nadie lo podía ayudar y aunque pudieran no aceptaría la ayuda era demasiado orgulloso para permitirlo, que al igual que ella mi esperanza también murió, desde sucedido con Alma, mi esperanza era el y él había muerto llevándosela con sigo dejándome sin una razón por cual vivir, la quiero abrazar que todo sea igual, mi vida ya es tan gris que el dolor jamás se marchara, quería sentir el contacto de su piel con la suya como habían estado incontables ocasiones en alguna de sus habitaciones, que todo regresara a ser como lo había sido antes de aquella ultima pelea, antes de que la existencia del peliblanco se esfumara.
Él era quien le daba luz a su mundo y a su vida, y ahora sin él estaba en una enorme oscuridad sin fin, donde el dolor nunca lo consumía y el constante recordatorio de la muerte del menor no lo dejaba de atormentar, pero no era como si quisiera olvidarlo, a su estúpido, infantil e imbécil moyashi. Me debería de acordar, debo yo recordar, y sentirse mejor, es mejor no creer en el amor, así como lo hago yo recordaba esa promesa que hicieron de no separarse nunca, de estar siempre juntos y eso inevitablemente me recordaba que mi cerebro me había dicho “no te involucres mas con el, lo único que lograras es lastimarte” y por primera vez no le hice caso y desgraciadamente no se equivoco, había salido terriblemente lastimado pero no se arrepentía de nada pues había podido estar un tiempo con el y eso le bastaba, pero el sabia que de ahora en adelante no podría creer en el amor, no, si no se trataba del moyashi.
La debería de odiar por dejarme aquí pero ella no escogió soy un simple amante loco yo he aprendido mi lección, lo debería de odiar, hacer realidad lo que tantas veces actuó para intentar engañarse a si mismo antes de aceptar que se había enamorado de él, pero simplemente no podía, el no había tenido la culpa, aunque lo hubiera dejado atrás, el no tuvo opción, y no solo porque los de central lo forzaron a luchar sino que el destino y la maldita personalidad de mártir del mocoso le impedían dejar el campo de batalla hasta que todo hubiera terminado. Yo solo era un simple amante envuelto en la locura por perder al amor de su vida y aprender de la forma mas cruel posible que la vida le pudo enseñar, que el amor es muy doloroso y si de verdad estas enamorado de alguien te traerá dolor y felicidad a la vez, puesto que el sufrimiento de esa persona es el tuyo multiplicado por diez y que su felicidad al igual que el dolor es la tuya, que con tan solo verla sonreír eres capaz de hacer cualquier, cosa cualquier locura para traerle felicidad y estar satisfecho contigo mismo por lograrlo.
Que mientras yo la extraño, mi vida desvanece más, mientras más pasa el tiempo me doy cuenta de cuanto lo amaba y que me arrepiento de no habérselo dicho cuando tuve la oportunidad. Que en este momento lo único que podía hacer era extrañarlo, cosa que me desagradaba al sentirme inútil, pero si algo me confortaba era que la maldición en mi pecho estaba apunto de terminar de consumir mi vida y así poderme reunir con él no me importaba lo que dios pensara de nuestra relación, dado que a sus ojos solo seria una aberración, pero esperaba que fuera misericordioso, en recompensa por el dolor que ambos en especial el menor había pasado y así por fin poder reunirme contigo Allen.