Kosuke cargo durante harto rato a Hiroki en su espalda, siguió las indicaciones del pequeño. Ya habían llegado a la casa del rubio y Kosuke tubo que desmontar al pequeño, pero se dio cuenta que estaba dormido. Con la poca vista que tenia el joven hacia su espalda de todas maneras pudo observar lo lindo que se veía y en ese momento pensó, "este niño no es igual a los otros, normalmente los niños de su edad suelen estar jugando y correntiando, pero el... el es mas tímido... es mas lindo. Si fuera una chica esperaría a que creciera y lo aria mi novia". Kosuke bajo lentamente de su espalda a Hiroki y en cuanto el pequeño comenzó a despertar y a frotarse los ojos con su pequeña mano.
-Kosuke-sempai, Gracias por traerme- Dijo el pequeño rubiecito
-Descuida, no fue nada
-Kosuke-semai, ¿te puedo pedir un ultimo favor?
-mmm...esta bien, ¿que necesitas?- Dijo el joven
-pues, podrías esperar aquí, para verificar que no este mi padrastro en casa, porque si esta, la cosa se complicaría- dijo Hiroki desviando la mirada un poco sonrojado.
-¡Claro!, no hay problema- Dijo Kosuke mientras pensaba que relación había entre ese "padrastro" y Hiroki.
Luego de un rato el pequeño salio y le grito a Kosuke:
-No hay cuidado, no esta en casa
-¿y quien te cuidara Hiro-kun?
Hiroki sintió una felicidad momentánea al escuchar que Kosuke lo habia llamado con mas confianza, pero de inmediato contesto la pregunta:
-Pues...nadie, supongo
"con solo 10 años y quedándose sólito", pensó el joven. Luego de que Kosuke analizara la situación por un rato dijo decidido:
-pues entonces, yo te cuidare esta tarde
Hiroki se sonrojo un poco y trato de ocultarlo a travez de su bufanda, cosa que no logro.
Ambos chicos pasaron a la sala.
-Perdón por el desorden- Dijo Hiroki con tono amable.
La situcion comenzaba a volver un tanto incomoda, así que decidieron subir al cuarto del pequeño Hiroki.
Kosuke rompió el silencio preguntando:
-Y dime...esos niños que te estaban molestando el otro día...¿porque lo hacían?
El pequeño se le torno una mirada triste, se puso cabiz bajo y respondió un tanto inseguro:
- ellos, dicen que... a mi... me gustan los chicos, solo por que soy tan pequeño y frágil como una chica, ya nadie se junta con migo por que me llaman "gay".
los ojos del pequeño se llenaron de lagrimas puras que empezaron a recorrer su rostro. Kosuke se acerca mas a Hiro-kun y le da un tierno abrazo, esto hace que las mejillas del pequeño se tornen aun mas rosadas.
-No te preocupes, si alguien te vuelve a hacer algo, yo me encargare personalmente de darle su merecido-Dijo el joven.
Hiroki respondio con una dulce sonrisa. Luego de que ambos chicos estuvieran abrazados por un rato, Hiro aparta su cuerpo de el de Kosuke, para romper el silencio:
- Lo peor es que al parecer mis compañero tienen razón-Dijo mientras se sonrojaba aun mas (si es que era posible)
-¿Por que dices eso?, ¿acaso no te gusta alguna compañera de tu clase?- Respondió Kosuke
-Pues... lo que pasa... ¡¡es que me gustas tu!!- Dijo el pequeño rubio gritando, apunto de romper en lagrimas.
Kosuke lo abrazo y apego la cabeza del pequeño en su pecho y dijo con tono amable:
- La verdad, no se como a alguien le puede gustar una persona, solo conociéndola en el día, pero de lo que estoy seguro, es que tu también me gustas.
-¡¡¡Kosu-sempai!!!, dijo Hiroki rompiendo en lagrimas de profunda felicidad aferrándose aun mas fuerte a Kosuke.
Kosuke le acaricio el cabello y luego le tomo el mentón, asciendo que ambos labios se juntaran dándole un dulce beso, Hiroki estaba completamente sonrojado, ambos chicos sentían sus respiraciones aceleradas, cuando de pronto Kosuke quiso incorporar su lengua en aquel beso, Hiroki abrió un poco su boca para permitir la entrada. ambas lenguas se juntaron y comenzaron a entrelazarse y a mesclar ambas salivas, la sensación era cálida y húmeda a la vez.
Kosuke, ya no estaba consciente de que aquella persona que el estaba besando tan apasionadamente era un pequeño niño de solo diez años, pero su mirada ya la había invadido la lujuria, así que bajo una de sus manos por el cuello del pequeño y lo empezó a tocar mientras lo besaba. a Hiroki le dio un pequeño estremecimiento que trato de ocultar, luego Kosuke bajo aun mas su mano llegando al pectoral del rubio y acariciando por encima sus pezones que ya se estaban poniendo suros, de repente el joven le peñizco su durito pezón y este de un momento a otro se alejo repentinamente, estaba algo asustado:
-¡¡Nooooo!!, no quiero que hagas lo que hace mi padrastro, no me gusta-
-Perdón, se me había olvidado, que eres un niño pequeño aun- Dijo lo ultimo bajando el volumen de voz.
Luego de unos instantes Kosuke analizo lo que le dijo el pequeño, y pregunto:
-¿y?...¿que se supone que hace tu padrastro?
-mmm... bueno aveces me toca, donde tu me tocaste, yo le digo que no debe hacerlo, pero el sigue y sigue y luego me toca aquí- Dijo Hiroki señalando su entrepierna- No me gusta que haga eso porque me hace sentir raro. Dijo el niño algo angustiado.
Kosuke, estaba bastante enojado (furioso) por lo que se acabo de enterar, ¿como era posible hacerle algo a así a un niño pequeño?, estaba a punto de reventar de rabia, pero debía guardar la calma delante de el niño, pero esto no significa que no haría nada al respecto. dijo:
-Lo, lamento Hiroki, te prometo que hablare con tu madre para que no sigas teniendo que aguantar a ese (repugnante) hombre, recuerda que yo nunca te haría nada sin tu consentimiento, Dijo Kosuke sonriendo, aunque por dentro se moría por hacerlo suyo.
- Kosuke-sempai, una ultima cosa, ¿ podríamos guardar esto en secreto por ahora?
-esta bien, pero con una condición
-¿que cosa?
- que me dejes probas tus labios por ultima vez. Kosuke, no espero a que Hiroki respondiera, cuando se abalanzo encima de el y lo comenzó a besar salvaje-mente, pero de repente el mismo Kosuke interrumpe aquel beso, para ir a buscar algo. Bajo las escaleras rápidamente y al parecer encontró lo que quería subió corriendo y le indico al pequeño que abriera la boca y acara la lengua, Hiroki muy obediente, lo hizo y este le unto en su pequeña lengua un dulce espeso, que el embace tenia forma de pasta de dientes.
-mantén la boca abierta-Dijo kosuke mientras le ponía la tapa al extraño dulce. De repente este comenzó a lamer la lengua de Hiro-kun. La sensación era muy buena, tan buena que provoco a Hiro que le diera una devil erección, Kosuke seguía lamiendo la lengua del pequeño y este jadeaba un poco muy sonrojado. Kosuke interrumpió aquel beso:
-Bueno creo que ya es tarde, me debo ir, si es que viene tu padrastro, llámame, yo vendré por ti- Dijo Kosuke.
Hiro-kun asintió con la cabeza mientras ambos chicos se dirigían a la salida.
-Recuerda nuestro secreto, ahijado- Dijo Kosuke mientras le guiñaba un ojo y se despedían con la mano.