¿Recuerdas la vez en que nos enamoramos?
Fue en primavera cuando te conocí por mera casualidad, éramos unos niños demasiado inocentes como para entender los prejuicios de la gente, nosotros solo sabíamos que nos amábamos intensamente más allá de lo que el rededor podía comprender.
¿Recuerdas como empezó todo?
Tu vivías a lado de mi casa pero nunca nos hablábamos, tal vez porque nunca coincidíamos o por timidez, pero todo cambio la vez en que nos encontramos en aquel parque. Era una tarde fría y solitaria y solo tú y yo nos encontrábamos en ese lugar. Ya estaba aburrido y al parecer tu también, entonces me anime a hablarte y me di cuenta que teníamos muchas cosas en común.
En lo primero que me fije fue en tu dulce voz, demasiado tímida y adorable y esos ojos café miel me cautivaron desde el primer momento pero era muy joven para entender lo que sentía, tan solo tenía 10 años. Me dijiste que tu nombre era Thomas.
Siempre supe que eras especial y, aún hoy a mis 23 años lo sigo creyendo.
Conforme iba creciendo me di cuenta que lo que sentía por ti era más que un simple cariño de amigos. Yo te amaba…Aún lo hago.
Nuestra historia duró más de lo que tardan las flores en secarse y volver a reverdecer.
De primavera a invierno.
Mes tras mes y año tras año.
Si lo nuestro era mejor que tocar el cielo, entonces ¿por qué terminó?
¿Recuerdas? De vuelta en el Otoño
Yo lo recuerdo perfectamente. Acababas de cumplir 15 años, ya estábamos en vacaciones y fue ese día cuando te declare mis sentimientos como un crío enamoradizo. Simplemente no podía seguir ocultando lo mucho que ansiaba verte cada tarde, que moría por probar tus labios, que deseaba abrazarte y tomarte de la mano, que la piel me quemaba por tener contacto con la tuya.
Tú me dijiste que también me amabas, con las mejillas sonrojadas y una sonrisa tímida, sencillamente te veías adorable.
Recuerdo que solía perderme en tu mirada y mis días se alegraban con solo ver tu sonrisa, en cambio, era como si me apuñalaran cuando te veía soltar lágrimas por esos ojos que tanto amaba.
Solíamos pasar todo el día juntos, tomados de las manos y platicando amenamente.
Yo podía dejar de comer, dejar de dormir, dejar de hablar e incluso dejar de respirar pero lo que nunca pude, puedo ni podré es olvidar nuestros momentos juntos y lo que significas en mi vida.
Estos dulces recuerdos siempre serán preciados para mí.
Siempre estarás presente en mis pensamientos. Éramos como una sola persona dividida en dos.
¿Recuerdas aquella vez cuando nos enamoramos?
Era como un sueño.
¿Recuerdas aquella vez cuando nos besamos por primera vez?
Sentía miles de mariposas revoloteando en mi estomago, casi podía ver corazones flotando.
¿Recuerdas aquella vez cuando nos mirábamos fijamente?
Nunca pude dejar de apreciar tus ojos, me enamore totalmente de ellos.
¿Recuerdas aquella vez cuando solo estábamos tú y yo?
Solos en nuestra burbuja, sin importar nadie más.
¿Recuerdas aquella vez cuando nos entregamos el uno al otro?
Tus uñas arañándome la espalda y tus piernas rodeando mi cintura, eran como tocar el cielo.
¿Recuerdas aquella vez cuando te fuiste de mi lado?
Solíamos hablar toda la noche hasta el amanecer, que importaba dormir si podía escuchar tu voz al otro lado de la línea. Podíamos hablar de cualquier trivialidad pero nunca nos aburríamos cuando estábamos juntos, el simple hecho de escuchar tu voz era como un anestésico para mis problemas, mi mundo era perfecto si tú estabas conmigo.
Siempre te decía lo mucho que te amaba y tímidamente me dabas un beso en los labios totalmente casto y puro. Eras tan inocente, nunca le hiciste daño a nadie y tenias un amor verdadero por las cosas simples de la vida.
Recuerdo que prometí que nunca te dejaría ir porque tú eras el amor de mi vida, sin embargo fallé. Perdí a lo único por lo cual estaba dispuesto a dar la vida, a mi alma gemela.
¿Recuerdas? De vuelta en la primavera.
Nuestro mundo era como una cajita de cristal, solíamos ir por aquel parque donde nos conocimos tomados de las manos como una pareja común y corriente, ajenos a las miradas rencorosas de la gente que pasaba, solo nos importaba nuestra devoción del uno para con el otro.
Estos recuerdos me asaltan cada noche mientras duermo, ha pasado tanto tiempo, pero a pesar de eso no he podido dejar atrás lo que pasamos juntos, no he podido olvidarte. Me niego a dejarte ir. Y cómo pensar en siquiera hacerlo, cuándo fuiste la persona más importante en mi insignificante existencia.
No importa cuánto tiempo pase, ni todos los intentos que hagan por hacerme salir de ésta depresión, tan solo no hay manera, no soy el mismo desde que ya no estás.
Debí haber dado mi vida por ti.
Debí nunca romper mi promesa de no dejarte ir
Debí machacar a esos malditos antes que te violaran y te mataran a golpes.
Debí estar ahí para impedirlo.
Tan solo eras entonces, un ángel roto de alas cortadas, mi ángel.
Nunca me lo voy a perdonar, solo espero que no me guardes rencor y me sigas amando igual que siempre.
Ahora mi mundo es obscuro y sin sentido, ya nada me afecta, me he vuelto un total desastre y he hecho de mi vida un verdadero abismo y estoy seguro que las drogas muy pronto me llevaran contigo, me estoy, prácticamente suicidando solo que elegí la manera más lenta de hacerlo pero la desesperación por volver a estar contigo es demasiado grande. Han sido ya, demasiados años. Sé que es muy cobarde de mi parte pero ya no resisto esta agonía.
Estoy seguro que en algún lugar me estas esperando, ya has aguardado por mucho tiempo. Supongo que debe ser un poco aburrido…pero muy pronto acabara la larga espera.
A lo lejos se podía divisar a un joven de cabello rubio parado bajo la lluvia frente a una tumba.
En la tumba podía apreciarse una inscripción
“En memoria de nuestro querido Tom. Siempre estarás en nuestros corazones”
—Hoy es un bien día para morir ¿no lo crees Tomi? Siempre odiaste los días nublados…
¿Recuerdas aquella vez cuando nos enamoramos?
¿Recuerdas aquella vez cuando nos besamos por primera vez?
¿Recuerdas aquella vez cuando nos mirábamos fijamente?
¿Recuerdas aquella vez cuando solo estábamos tú y yo?
¿Recuerdas aquella vez cuando nos entregamos en cuerpo y alma?
¿Recuerdas aquella vez cuando te fuiste de mi lado?
— ¿lo recuerdas Tom?