Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

¡Princesa por accidente! por Lacrima Eterna

[Reviews - 73]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Buenas noches a todos, por fin estoy de regreso, y me vuelvo a disculpar con todos por la tardanza de la actualización, pero como pocos sabrán, tuve un accidente y mi PC murió el pasado viernes T_T Quienes me siguen por twitter ya sabrán la noticia, pero para quienes no, les informo que perdí casi todos mis documentos y archivos u.u 
Por suerte mi padrastro me dejó su PC durante los días en que el mío estará en el taller, tiene solución me han dicho pero tardará ._. Así que estoy de luto T^T por eso tampoco había respondido a sus comentarios, lo siento.

En fin, sin más que decir, aquí les dejo un nuevo capítulo lleno de drama humorístico telenovelistico, espero que les guste. ¡A leer! 

– ¿Así que es este el lugar al cual siempre te escapas con tus amigos? Vaya, qué decepción –murmuró Loki mirando la entrada de la taberna con una leve mueca de decepción, mientras Thor sonreía avergonzado, acomodando bien la capucha sobre la cabeza de su hermanito evitando así que se le viera demasiado el rostro.

–Imaginé que dirías eso, por eso nunca te traje –comentó, abriendo la puerta de la taberna dándole paso a su hermano menor, quien le sonrió con sarcasmo y apatía antes de entrar.

Del local salía un olor algo apestoso para el fino olfato del pelinegro, aromas que mezclaban cerveza y carne asada con sudor y olor corporal masculino. Pero pareciera que el único que podía sentir aquella mezcla de olores era Loki, ya que todo el mundo parecía estar tan tranquilo bebiendo y comiendo, algunos cantando y otros conversando sobre sus hazañas con la espada.

Para Loki, quien estaba acostumbrado al ambiente del palacio, aquello le pareció horriblemente poco civilizado y elegante, era el territorio de los más brutos de los brutos y definitivamente sentía que no pertenecía a ese lugar. Agradecía que Thor no le hubiera arrastrado nunca hasta allí, o hubiera salido corriendo. Entre lo apestoso, sucio y rústico que era aquel lugar, el joven hechicero se sentía cada vez más fuera de lugar.

Ahora entendía por qué su hermano había insistido tanto en cubrirle antes con una capucha, se notaba que en aquel sitio entraban pocas o ninguna mujer. Era un lugar hecho para bárbaros.

–Prométeme nunca volver a traerme a este sitio, hermano –comentó Loki mientras caminaban entre las mesas abarrotadas de comida y gente a su alrededor, siendo dirigido por Thor hacia la parte trasera de la taberna– Da la sensación de que en cualquier momento me infecto con algo de lo sucio que está, además apesta. Eres en exceso poco romántico…

–Hey, fue idea de Sif, además ella es una chica y adora venir aquí –comentó el rubio, mirando de reojo el delgado cuerpo envuelto de su hermano.

– ¿Idea de Sif? Vaya, eso explica todo… Deberías cambiar de asesor, es sólo un humilde consejo de parte de tu hermano menor…

–Vamos, este sitio es genial, lo que pasa es que eres demasiado refinado a veces, deberías relajarte un poco más y disfrutar de los pequeños placeres… –tras decir esto, el dios del trueno se quedó mirando por largo rato los ojos de su hermano, quien había hecho una mueca de desagrado frente a su comentario.

Sin decir nada más, llegaron hasta el lugar donde estaban los otros. Era una habitación algo más privada, separada del resto únicamente por una cortina de trapos y trozos de cuero curtido para mantener el calor y mitigar el sonido proveniente de afuera. Al ver a Loki, o mejor dicho, a Lorreine, todos se pusieron de pie y la saludaron efusivamente, todos a excepción de Sif quien permaneció en su silla e hizo un simple gesto de saludo, sonriendo como sólo sabe hacerlo una mujer celosa: de forma amable y simpática, disimulando sus verdaderos sentimientos. La doncella sonrió de la misma forma y luego se quitó la capucha, dejándose la capa puesta para no ensuciar su vestido. Se sentó junto a su hermano y junto a Fandral, quien le miraba con un brillo extraño en sus ojos.

– ¿Y no trajiste a tu hermano, Thor? –Preguntó Volstagg, con un trozo de carne asada  en su mano– Creí que iba a venir…

Loki miró fijamente a Thor en ese momento, quien le devolvió la mirada con una leve sonrisa tranquilizadora.

–Loki está de viaje por unos días, la verdad no recuerdo a dónde fue, algo que tenía que ver con su cruzada por ser el mejor de los hechiceros…

–Ah, ya veo, espero que al menos no falte a tu boda…

–O que no te juegue una de sus tan simpáticas bromas durante ella –comentó Sif provocando palabras de asentimiento de parte de sus amigos.

– ¿Usted ya conoce al príncipe Loki, lady Lorreine? –preguntó Volstagg a la hasta el momento callada chica.

–Sí, tuve el placer de conocerle antes de que partiera –respondió, sin poder evitar cierto aire egocéntrico– Me pareció una persona bastante simpática y amable, además de inteligente –tras este comentario Thor simplemente rodó los ojos aguantando una risotada, Loki era increíble a veces.

–Cómo se nota que no lo conoce –comentó Sif– Loki es bastante infantil e inmaduro, siempre haciendo bromas como los niños pequeños y creyéndose la gran cosa.

–Vamos Sif –la detuvo Thor, frunciendo el ceño– Sabes que no me gusta que hables así de mi hermano.

–Aunque tiene razón Thor, tu hermano es bastante inmaduro –apoyó Hogun, antes de dar un gran trago a su cerveza.

–Y boco sogiagle, gejería gsalir más y hafer abigos–comentó Volstagg, con la boca llena de carne. Tragó antes de continuar– tal vez así su humor cambie un poco…

–Dudo que su humor tenga remedio –continuó Sif, mirándose las uñas– Además Thor, te lo hemos dicho miles de veces, Loki está celoso de ti.

–Eso no es cierto, Sif, chicos, ya basta –Thor se estaba molestando, mientras que Loki sólo escuchaba en silencio con la mirada baja y los puños crispados bajo la mesa.

–Déjalos Thor, sólo juzgan porque no lo conocen. La verdad tu hermano es bastante introvertido a mi parecer, pero bueno, él es así y no veo por qué tengamos que hablar mal de él –Fandral habló esta vez, soltando un suspiro cansado. Se acercó un poco a Lorreine y le susurró– Vaya mala impresión le están dando, ¿verdad? Sólo no les tome nada en serio y verá que son buenos chicos.

Loki se quedó mirando a Fandral sorprendido, mientras que Thor seguía discutiendo con los demás. Nunca hubiera esperado que Fandral pensara de esa forma, antes había pensado que los amigos de Thor eran unos antipáticos y estaba empezando a pensar que todos eran unos idiotas, pero ahora había sacado al rubio guerrero de esa categoría. Se daba cuenta que él también le había juzgado mal, antes pensaba que Fandral sólo era una cara bonita que pensaba en conquistar a todas las mujeres que pudiera, pero ahora se daba cuenta de que no era así.

–Te haré caso, pero dejemos las formalidades, por lo menos aquí –murmuró la chica pelinegra como respuesta, provocando una sonrisa en el joven quien la miraba con profundidad.

Mientras tanto Thor discutía con Sif, no entendía qué le pasaba y por qué estaba tan empecinada en hablar mal de su hermano. Temía que Loki se sintiera herido por las palabras de sus amigos, que se enfadara y se marchara, o que empezara a discutir con su amiga y terminaran peleándose y saliendo alguno de los dos heridos. Tan ocupado estaba tratando de detener a Sif, que no notó que su “prometida” se había acercado a Fandral y que ambos hablaban en susurros.

–Oye Thor, que te roban a tu novia… –comentó Sif de repente, mirando con cara de pocos amigos a Lorreine, quien reía quedamente por un chiste de Fandral.

Thor de inmediato pasó su mano por la cintura de “su chica” y la atrajo hacia él, mal mirando a su amigo quien también reía por su chiste.

–Hey, ¿qué pasa aquí? –Preguntó mirando ceñudo al otro rubio.

–Nada, sólo hablamos mientras ustedes discuten tan tranquilos, prefiero salirme de eso que me molesta –dijo Lorreine, mirando fijamente a Thor. Le había molestado que los amigos de su hermano pensaran así de él y tuvieran el descaro de ir y decirle todo eso como si nada… aunque claro, ellos no sabían que él estaba allí haciéndose pasar por una chica midgardiana.

–Perdónalos –comentó bajo el mayor, mirándolo avergonzado por la actitud de sus amigos.

–Descuida, no importa ya –comentó bajo el joven príncipe, para luego acercarse al oído de su hermano y hablar en un susurro quedo– Gracias por defenderme… en serio –tras decir esto se alejó con las mejillas ligeramente sonrojadas, mientras los demás vitoreaban a Thor y bromeaban a su costa.

–Vamos, chicos, que hay damas presentes –intentó contenerlos Thor, algo avergonzado aunque ocultándolo con una pose de molestia, mientras Volstagg y Hogun le decían que atacara luego o que se fueran a una habitación privada, y cosas por el estilo.

– ¿Damas? Yo sólo veo una, y está sentada junto a ti, Thor –dijo Fandral, pasando su brazo por los hombros de Sif– Las guerreras fieras no cuentan como damas.

–Claro, lo dices ahora que estamos rodeados de gente, pero mira cómo te pones cuando estamos solos… –comentó Sif rodando los ojos, ante las risas de los demás.

–Oigan, y ¿a qué hora traen la comida? Ya tengo hambre… –aquel último comentario de Volstagg hizo a todos estallar en risas y carcajadas, a todos excepto a Lorreine quien sólo esbozó una leve sonrisa.

*”*”*

La tarde poco a poco se fue volviendo un poco más amena para Loki, a quien ya le estaba empezando a cansar ese juego. Se suponía que era para molestar a su hermano y vengarse por haberle dejado en ese estado, pero descubrir cómo todos pensaban de él le había dejado con una nueva espina clavada en su pecho, una que esta vez era invisible pero que de todas formas dolía en su corazón. El chico en cuerpo de chica estuvo la mayor parte de la velada en silencio, escuchando simplemente, sintiéndose en veces fuera de lugar aunque Fandral siempre le decía algún comentario simpático o tranquilizador.

Por su parte el dios del trueno no parecía darse cuenta de nada, salvo de los comentarios que Fandral le daba a su hermanito, y esto lo traía un poco molesto y también celoso. No quería que nadie se acercara a Loki más que él, y por esto mismo, tenía la esperanza de hablar con su hermano cuando estuvieran solos y confesarle sus sentimientos, aunque todo terminara en total fracaso.

–Hey, Thor… Thor… ¿estás escuchando? –la voz fina y suave de Lorreine lo trajo de vuelta a la realidad.

– ¿Ah? Perdona, ¿qué decías? –preguntó el rubio luego de sacudir la cabeza. Se había quedado pensando en cómo declarársele a la persona que tenía en frente y no había escuchado nada de lo que la pelinegra decía.

–Olvídalo, nunca me escuchas –Lorreine rodó los ojos y dio un sorbo a su cerveza, para continuar hablando con Fandral– Así que, por eso dudo que mañana pueda acompañarlos, tal vez en otra ocasión…

–Ya veo, bueno, al menos ya sabes, si quieres vernos a todos en acción… Ya sabes dónde ir –Fandral actuaba demasiado amablemente para el gusto de Thor, quien colocó su brazo sobre los hombros de Loki, quien lo miró de reojo.

–A ella no le gusta la batalla tanto como a nosotros, Fandral –comentó, mientras los demás parecían interesarse nuevamente en la conversación.

– ¿Y qué cosas te gustan, Lorreine? –preguntó Sif, con aire desinteresado y dando un sorbo a su cerveza, la sexta ya de aquella noche. La verdad es que los chicos ya estaban bastante borrachos, a excepción de Loki quien apenas había tomado nada.

–Bueno, lo mismo que a todas las doncellas, ya sabes a qué me refiero –contestó la aludida, sonriendo con malicia.

– ¿Te gusta Thor? Vamos, dinos la verdad –El dios del trueno no pudo evitar atragantarse y empezar a toser, mientras Lorreine se sonrojaba ligeramente y lo miraba fijamente. Terminó por encogerse de hombros.

– ¿Te gusta a ti? –preguntó de vuelta, mientras la otra chica alzaba una ceja. Los demás escuchaban la discusión expectantes.

–Y qué si así fuera, ¿te pone celosa? –un rumor bajo recorrió la mesa, mientras Lorreine fruncía el ceño ante la mirada de superioridad de Sif.

– ¿Por qué debería estar celosa? Después de todo, soy su prometida, y tú nunca podrás estar con él. La verdad no te veo a la altura de una doncella…

–Yo ni siquiera te veo a la altura de una princesa, ni siquiera a la de una guerrera –las dos jóvenes estaban cada vez más cerca, pareciera que en cualquier momento una saltaba sobre la otra aunque ambas mantenían la compostura.

–Hey, basta ustedes dos, además, ¡yo estoy aquí! Dejen de hablar de mí como si no estuviera –las regañó Thor, tomando a Lorreine de la cintura y alejándola de Sif– Ya han bebido demasiado además.

–Corrección, tu amiga ha bebido demasiado. No soy yo quien ya está borracha –se defendió Lorreine, alejando el brazo de Thor por milésima vez en la noche y cruzándose de piernas– Alguien debería llevarla a su casa, ya apenas se mantiene en pie, pobrecita…

–Mojigata –murmuró bajo Sif, mientras era sujetada por los hombros por Hogun.

–Sif, ya basta, ¿qué te pasa esta noche, eh? –le preguntó Thor.

–Thor, ¿puedo hablar contigo en privado? –la pregunta de Sif le tomó por sorpresa, y suspirando pesado, se puso de pie y acompañó a la chica hacia otra de las zonas privadas, esperando escuchar sus explicaciones.

Lorreine se cruzó de brazos mirándolos salir con cara de pocos amigos, tenía unas ganas enormes de lanzarle un hechizo a la guerrera y hacerla pasar el ridículo más grande de su vida para que aprendiera su lugar. Volstagg y Hogun empezaron a preguntarse sobre qué estarían hablando Thor y Sif, haciendo incluso algunas apuestas.

– ¿Te sientes bien? –la voz del guerrero rubio empezaba a ser un calmante para Lorreine– Perdona a Sif, cuando se emborracha suele decir cosas hirientes sin intención…

–La defiendes bastante –comentó la chica, desviando la mirada hacia sus manos.

–Es mi amiga. También puedo ser tu amigo, si me lo permites, y defenderte cuando lo necesites –Fandral le sonrió amablemente, y Lorreine no pudo evitar devolver la sonrisa.

–Gracias, eres muy amable. La persona que obtenga tu corazón seguramente será muy feliz…

–Me gustaría que lo fuera –respondió el rubio en un susurro, mirando a la doncella fijamente, profundamente– Pero veo triste su mirada…

Lorreine se quedó mirando a Fandral, mordiéndose ligeramente el labio inferior. Eso no estaba bien, sonaban como las palabras de un enamorado. La chica bajó entonces la mirada nuevamente, se sentía mal por dentro. Porque ella en verdad era un chico, y no sólo cualquier chico sino Loki, y aquello no era más que un juego que se había salido de sus manos.

–Me pregunto –sus dos manos fueron tomadas en ese momento por las de Fandral– cómo podría hacer para que su mirada se alegrara y ella sonriera con alegría, no con falsedad…

–Fandral… yo… –Loki subió la mirada, soltándose de aquellas cálidas manos– No deberías desear esas cosas. Ni siquiera me conoces, podría decepcionarte. No sabes quién soy en realidad.

–Puedo hacerme una idea. Eres bonita, mucho más que cualquiera en este reino y no me refiero sólo a lo físico. Eres encantadora a tu manera.

–No lo soy tanto cuando me conocen. Créeme, no te hará feliz conocerme en realidad –Lorreine se puso de pie llamando la atención de los dos apostadores– Lo siento, es tarde y debo irme. Iré por Thor y me marcharé, nos veremos en otra ocasión… Gracias por todo –se disculpó y se colocó la capucha, saliendo de la habitación sin decir más, dejando a un confundido Fandral detrás suyo.

“¿Qué haces? ¿Te volviste loco? Es el mejor amigo de tu hermano y vas y lo enamoras, no olvides quién eres tú. Este hechizo ya ha durado demasiado, y empiezas a pensar como una mujer. No olvides quién eres, no olvides el destino que te aguarda, Loki… No te dejes llevar por sentimientos tontos, sólo te volverán más débil. No olvides tu lugar…”

–Esto es una estupidez… –murmuró para sí mismo, suspirando pesado. Loki no se consideraba una mala persona, tampoco cruel. No quería lastimar a Fandral ni jugar con sus sentimientos, no lo consideraba correcto después de ver cómo lo defendía. Quería encontrar pronto a Thor para salir luego de aquel lugar que ya empezaba a molestarle y hartarle.

Preguntó a uno de los trabajadores del lugar si había visto a su hermano, y una vez que por fin encontró el cuarto, ni se molestó en llamar antes de descorrer la cortina. Para su sorpresa, lo que vio le dejó mudo.

Sif y Thor estaban de pie en medio de la habitación, besándose apasionadamente como dos amantes desesperados. Loki se quedó mudo, con los pies pegados al piso sintiéndose incapaz de moverse. Y entonces, la rabia llenó su pecho, con más fuerza que nunca. Y sin poder contenerse, en tres grandes zancadas se acercó a la pareja y jaló a Sif de su cabello, mientras de sus manos salía un brillo verdoso, señal de su poder y magia, y la alejó de SU hermano.

Antes de que Thor pudiera reaccionar, Lorreine le había dado un fuerte puñetazo a Sif que la había dejado tirada en el suelo.

Notas finales:

Bueno, espero que les haya gustado este capítulo y no se preocupen, pronto actualizaré ahora que ya tengo donde escribir. Como ya saben, cualquier comentario es bien recibido, así como quejas, sugerencias, tomatazos, escudazos, zapatazos, un Loki amordazado, un Iron Man o un Capitán América también son bienvenidos, así como sus condolencias por el estado de coma vegettivo de mi PC T_T 
Nos leemos pronto...

Lacrima Eterna~


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).