Era mañana luminosa y calurosa y el día se presentaba interesante. Virginia entraba en el salón de la torre Stark, donde vivíamos todos los vengadores juntos, ya que Tony había insistido hace unos meses tras su reconstrucción .
- Buenos días a todos - mencionaba la directora de Industrias Stark mientras tomaba una taza con café que se llevó hacia los labios y pegó un sorbo.
- Buenos día Virgi, ¿Qué tal va la mañana?-
- Ajetreada, desde las seis que llevo revisando papel tras papel - dio un suspiro y otro sorbo de su café.
- Por cierto, ¿hoy vais de compras, no? -
- Así es, Tony dice que se ha levantado generoso y tiene ganas de compras, aun así sigue metido en la cama -
- Te acostumbras a sus caprichos Steve - mencionó tras ver la cara de este - te lo puedo asegurar- Virginia se sentó de sopetón en una de las sillas y echó la cabeza hacia atrás.
- Vente con nosotros, se nota que lo necesitas - comentó Bruce mientras mordía una tostada con mermelada.
- Gracias, pero aun tengo que terminar un montón de papeles -
- Pero se te ve muy estresada, te vendrá bien despejarte -
- Ya quisiera Steve, pero Tony estuvo hablando con un inversor de Japón y tengo una torre de papeles que me esperan en mi mesa -
- Te explota - menciono la Viuda Negra con su característico tono de chica ruda tras meterse una cucharada de cereales con trozos de fresa.
Me levanté y recogí la mesa, Clint leía el periódico mientras Thor terminaba de devorar las tortitas con chocolate y nata, y Bruce hablaba con las chicas. Fregaba los platos mientras pensaba en todo lo que había cambiado desde que nos conocimos, Bruce intentaba relacionarse más y no esconderse tanto, de echo hace poco había empezado una relación con Barton, Natasha era menos intimidante con nosotros y todo esto gracias a un chico que conoció con el que se veía cuando no estaba de misión, Thor seguía viendo a esa chica que conoció cuando lo desterraron, pero también se traía algo raro con Loki, lo visitaba con frecuencia al apartamento que este tenia en la ciudad, ya que su castigo fue despojarlo de sus poderes y que viviera como un simple humano, creo tiene una relación más que fraternal, y Tony y yo formamos pareja desde hace unos meses, fue todo un reto quitarnos la venda de los perjuicios de nuestros ojos, sobretodo yo, pero ahora no me arrepiento de nada.
- Creo que ya es hora de ir a despertar a Tony -
- No es un crío Steve - me regaño Bruce.
- Un crío con el cuerpo de un hombre, Bruce - reí y me dirigí hacía el dormitorio de Tony, abrí la puerta y pude ver la imagen que nunca olvidaría, Tony con unos bóxer negros que resaltaba su firme y prieto trasero, con las sabanas a medio tapar la cabeza apoyada en su brazo derecho y los labios entre abiertos, con la luz del reactor saliendo de su pecho daba una imagen muy sensual, el corazón se me aceleró y el estomago se me contrajo, moría por saltar encima de él y besarlo hasta quedarme sin aliento, pero me dio pena.
- J.A.R.V.I.S, sube las persianas por favor -
- Subiendo persianas señor Rogers -
- Gracias J.A.R.V.I.S. - me acerqué hacia la cama, me tumbé a su lado y poco a poco empecé a repartir besos por su cuello, Tony se removía y sus bellos ojos se iban abriendo lentamente, dejándome ver la imagen más bella que jamas había visto.
- mmm ¿tan temprano y tienes ganas de sexo capitán? - me dijo metiendo mano por dentro de mi camisa y su cara de seducción.
- Oh por Dios santo Tony, ¿es que no piensas en otra cosa? - protesté retirando la mano.
- Le has quitado todo el romanticismo a la situación - me quejé - en fin, levántate anda, ya estamos todos preparados, solo faltas tú. -
Me levante de la cama y lo deje arreglándose.
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Ya nos encontrábamos en el centro comercial, cada unos quería ir a un lado diferente, y empezaron a discutir como críos, hasta Natasha discutía, Bruce quería ir a ver material del laboratorio y por consiguiente Clint también pues el iría donde fuera el doctor, Thor quería ir a ver las maquinas de deportes, Natasha a la tienda de zapatos y Tony a la zona de videojuegos, era este último el que se comportaba como si tuviera cinco años.
- A la zona de videojuegos, que mejor lugar para pasar el tiempo-
- ¡No!, yo quiero ir a ver zapatos-
- ¡¿Para que quiere una asesina ir a ver zapatos?! ¿acaso los matas con el tacón?- se burlaba Tony
- ¿Quieres comprobarlo? - Natasha me dio miedo.
- Yo digo de ir a ver los materiales de laboratorio, y Clint esta conmigo -
- Claro que esta contigo, si no seguro que lo dejabas sin sexo -
- Agg pero serás pervertido -
- Vete a por tus zapatitos de princesita -
- Mejor a la zona de entrenamiento, hay que entrenarse -
Y tras que Thor dijera eso, otra vez empezaron a gritar, donde las palabras se confundían y no me enteraba de nada, me empezaba a dar vergüenza , eran adultos convertidos en críos.
- Eee …- intentaba hablar pero no me dejaban, hasta que me cansé y grité:
¡DEJAD DE COMPORTAROS COMO UNOS CRÍOS, QUE ESTÁIS MONTANDO EL ESPECTACULO! -
Era cierto, todo el centro comercial estaba pendientes de ellos.
- Bien, Thor vete a ver las máquinas, Bruce, Clint vosotros iros a ver los materiales, Nat compra los zapatos que quieras, Tony tu ve a pegar tiros a la zona de los niños yo iré a ver ropa, dentro de 2 horas aquí, y no quiero que rechistéis - Tras poner orden cada uno tomó su camino y Tony me siguió
- ¿No vienes conmigo? - me preguntó con incredulidad.
- No Tony, necesito ropa y tu quieres ir a jugar con los videojuegos - seguía andando hacia la tienda de enfrente
- Te acompaño - dijo finalmente
Me paré y me giré hacia él.
- No hace falta cariño, ve a los videosjuegos -
- No, no eso puede esperar, quiero ir contigo -
- Bien, vamos entonces -
Entramos en la tienda, Tony puso cara de que esa tienda no le gustaba para nada, miraba la ropa y soltaba su risilla de Ni de loco compro esta porquería yo seguía viendo algunas camisetas por allí y allá, tampoco era de mi estilo la verdad.
Fuimos a unas cuantas tiendas más en donde compré unos cuantos pantalones vaqueros , pantalones de mezclilla, camisas, camisetas y unos par de zapatillas, he de decir que me reí mucho intentando que Tony no se metiera conmigo en los probadores, cuando me metí en el primero Tony entro detrás y al correr la cortina me dijo
- ¿No te da morbo hacerlo aquí? -
Eso con la cara más morbosa y sexy que pudo poner, sentí como mi cuerpo se tensaba y mi mientra Tony me quitaba la camiseta, más me entraba ganas de ceder, pero recobré la compostura y lo eché de allí.
- Ni en tus más húmedos sueños Stark -
A la vuelta para reunirnos con los demás y comer pasamos por una tienda de ropa interior y Tony insistió en que entráramos, el color de mi cara lo decía todo, intenté negarme, pero ganó. Al entrar Tony cogió unos cuantos bóxer de color negro, azul oscuro, blanco y otros de color rojo.
- Toma y a ver si te desprendes de eso calzoncillos de abuelo-
- Tony, no pienso comprarlo, no los necesito -
- Oh valla que si, los necesitas urgentemente -
No insistí más y fui a mirar más a fondo la tienda, tras dar una vuelta a la inmensa tienda llegamos a una parte que me pareció supergraciosa, una parte de ropa de Los Vengadores, había de todo desde zapatillas hasta ¡tangas!. Mire a Tony y lo vi concentrado viendo una camiseta sencilla con el escudo del Capitán América en todo el centro, el cuello de la camisa era rojo, el borde de las mangas azules y en la parte trasera una imagen del Capitán.
- ¿Te gusta la camiseta Tony? - Le dije suavecito al oído con voz burlesca.
- Eh.. Que dices, esto es para críos, además ¿para que querría yo una camiseta del Capitán América? Quien realmente mola es Iron Man - dijo con defendiéndose así mismo como cualquier niño defendería a su héroe favorito.
Me reí de su cara y mientras me iba a pagar la ropa interior le dije.
- Tranquilo Tony, nadie pensaría que eres un crío por llevar esa camiseta -
Salimos de la tienda y fuimos a reunirnos con los demás, comimos y charlamos de lo que nos habíamos comprado, Natasha, enseñó unos cuantos vestidos que quitaban el hipo, y unos zapatos que si se quedaba sin armas bien podría utilizarlos para matar, Thor dijo que mando a casa unas maquinas para ejercitarse, que en cuanto llegara a casa las probaría, y unas cuantas cosas para Loki, definitivamente esos dos tienen algo pensé, y Bruce le enseñó a Tony el material comprado, era ya que era el único que entendía de lo que hablaba el doctor, Clint enseño unos cuchillos que había comprado después de haber ido con Banner.
Tony estaba un poco silencioso, raro en él, pero no le di importancia, supuse que estaba cansado de todo el día andando. Tras la comida, Clint propuso de ir al salón de juegos a echar unas partidas de billar, o lo que tuviéramos ganas, la idea era genial, así que pagamos la cuenta y nos dirigimos hacia allá, a mitad de camino Tony dijo que se le había olvidado la cartera en el restaurante así que dijo que nos adelantáramos, a la hora apareció mientras nosotros íbamos por la 4º o 5º partida de bolos.
- ¿Dónde estabas, me tenias preocupado? -
- Lo siento, han tardado un rato en encontrar la cartera en objetos perdidos, y además e tenido que rellenar unos papeles-
- Está bien, no pasa nada, ¿juegas? -
- Prefiero una partida de billar, voy a por una copa -
- Ok-
Tras eso pasamos el resto de la tarde jugando al billar, sobre las doces fuimos para la torre, cuando llegamos Virginia estaba viendo la tele con un gran bote de helado.
- Hola chicos, ¿qué tal esas compras? -
Nat saltó y se sentó al lado de Virgi
- ¡Helado! ¿Que peli es? - le robó la cucharilla y empezó a tragar helado.
- Los vengadores - y se echo a reír - Por cierto Tony, la compra que as echo a llegado, la tienes en tu habitación-
Mire con intriga a Tony pero este me esquivaba la mirada y le preguntó a Virginia
- ¿No lo habrás abierto? - ese tono era demandante, ¿que me estas ocultando Stark? Pensé con enojo
- No, no soy una cotilla como tú Stark-
Tony corrió hacia la habitación y yo detrás de el, cuando llegué tenia una bolsa en la mano a punto de abrir.
- ¿Qué es eso Satrk? - me notaba mi enojo en la voz
- Nada - intentaba esconderla detrás de él
- ¿Es que no confías en mí? - mí voz ya no denotaba enojo si no tristeza , seria que aun no confiaba en mí para contarme las cosas, me pregunté.
- Es solo una tontería Steve, hazme caso -
- Muy bien - volvía a haber enojó en mi voz pero esta vez mezclado con tristeza, así que di media vuelta y me marché, no antes sin decirle:
- Creo que esta noche será mejor que duerma en mi habitación-
No vi la cara de Tony, pero tampoco quería saberla.
Fui a la terraza de la torre a tomar el aire, me tumbé en una de las tumbonas que tenia Tony allí que utilizaba para tomar el sol o simplemente para estar conmigo, pasaba el tiempo y el resto del equipo se fueron a sus habitaciones, todo quedó oscuro. Pasó como una media hora cuando me dio vi una tenue luz azul, sabia a quien pertenecía y me moría de ganas de ir y abrazarle, pero aun sentía molestia porque Tony me estuviera escondiendo algo.
Sentí los pasos tenue, eso significaba que estaba descalzo.
- Te vas a congelar, otra vez -
- No tiene gracia Tony -
- Desde luego Rogers eres un crío -
- No confías en mi -
- Si confío, es solo que me atosigas, tienes que aprender a que no todos te van a decir lo que tu quieres -
- Eso suena más propio de ti que de mi - y suspire, es cierto, llevaba razón.
- Si te das la vuelta te enseño lo que he comprado - me dijo al oído abrazándome por la espalda
- Confiaré en ti Tony, no tienes por que enseñarme nada- y le di un beso, lento, suave, poniendo todo mi cariño en el, demostrándole que confiaba en él - vamos a la cama -
Nos separamos y fuimos hacia la habitación, iba tras Tony , con la mirada fija en la imagen del Capitán América de su camiseta y …¡¿Capitán América?! Grité en mi mente.
- ¡Tony! , tu camiseta - Dije incrédulo
Tony se giro y me miro con la cara un poco avergonzada
- No quería que pensaras que era un crío-
- Oh! Por Dios Tony - y me tiré encima de él, ¿se podía ser más dulce ? - Vamos a la cama, te voy a echar el mejor polvo de tu vida -
Arrastré a Tony hacia la habitación, le empujé hacia la cama y me monté encima de él, el resto ya sabes lo que paso.
- ¿Vaya y todo eso por una camiseta?
- Duérmete - dije abrazándome a él y apoyando la cabeza en su pecho, estábamos los dos sudorosos, y acalorados, olí su olor corporal, me encantaba su olor y más mezclado con el sudor, lo hacia tan varonil, pero relajaba y empezaba a quedarme dormido, y antes caer en los brazos de Morfeo escuché.
- J.A.R.V.I apunta , Me encanta ir de compras con Steve -
- Apuntado señor -