Capítulo 21: ¿Nada tienes que perder?....
Besaba aquellos labios como si fuesen néctar dulce. Una adicción sin consecuencia, una droga que no mataba, pero causaba un gran dolor agónico después de consumirla. Un dolor profundo, en el pecho. Haciendo que los latidos fuesen cada vez más lentos, que respirar sea una pesadillas continua y eterna, costaba tanto vivir…Pero. Prefería morir ante las más bajas torturas, que dejar de tener esa adicción tan fuerte que tenía con aquellos labios amargos que pertenecían a su adorado amo. Su único amo.
-Ah…-suelta un suspiro al separarse, mira a su amo con sus ojos entre abiertos, mientras la respiraba poco a poco regresaba a el- ah… ah… ah…. –su respiración costaba, pero aun así se mantenía aferrado al pecho de su amo- ma… más… -le pide apenas puede articular algo- ¡más!...
-Yami…- ese día era de las pocas veces que lo llamaba por su nombre- eres como plastilina en mis manos….-acaricia las mejillas de su demonio, desde las mejillas, el cuello, los hombros, las caderas y los muslos- tiemblas del puro placer con solo rozarte con mis dedos….-se relame los labios- me deseas tanto…. –aprieta con sus manos las caderas de sus demonios- como yo te deseo…-baja sus manos a su trasero y lo aprieta.
-¡ah!...-suelta un gemido suave- ¡amo!
-Yami…-va hacia su oreja y le susurra- ¿Por qué me amas tanto?...-muerde su oreja y comienza a bajarle los pantalones- si… para mí solo eres una herramienta que complace todo mis deseos…
-Por qué soy masoquista amo….-su ama baja sus pantalones hasta las rodillas, el demonio ya acostumbrado, se da la vuelta y se pone en cuatro frente a el- “Y por qué ya no sé vivir sin usted…”
-Yami…-dice en apenas un susurro mientras se baja el cierre- Eres mi Herramienta.- dice en tono firme mientras se coloca tras de él, sacando su miembro erecto- Y nada más….
-¡¡AAH!!-gime de placer al sentir el miembro de su amo entrar en él, cerro con fuerza sus ojos mientras sus mejillas se ponen rojas- “Lo sé amo, lo sé…”….¡¡¡AMO, AAAH!!!
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-Me debes una…-le dice aquel pelinegro de bellos ojos esmeralda- una muy grande Pegasus…-le extiende una carpeta blanca llena de papeles, el detective toma la carpeta y la abre, mientras leía el contenido de la misma sus ojos poco a poco se volvían cada vez más grandes haciendo notar su enorme sorpresa y confusión.
-¿Es esto cierto?...-susurra aquel hombre de cabello plateado mirando al chico de ojos esmeralda, el cual sonreía de lado con una expresión egocéntrica y ciertamente burlesca, el pelinegro no le responde solo le sonríe y asiente confirmando lo que el hombre de cabellos plateados pensaba.
-Duke, eres mi salvación….-se levanta, va hacia su maletín y sin abrirlo se lo entrega al pelinegro- te mereces tu pago…-el pelinegro abre un poco el maletín y ve todos los billetes que este contenía.
-Esto es más de lo que te pedí…-susurra sorprendido.
-Te lo mereces…-dice el detective mientras se sienta- tengo mucho que trabajar e investigar Duke, puedes retirarte…
-je…-cierra el portafolio- no es tan fácil Pegasus….-susurra- yo quiero…. Participar en este caso, ha despertado mi curiosidad.
-Me lo suponía…-el hombre de cabellos plateados sonríe de lado de una manera divertida- será un placer tenerte aquí Duke…-estira su mano hacia el oji-esmeralda y él la toma estrechándola.
-No, el placer será todo mío….
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-Un paciente psiquiátrico, con un grave nivel de esquizofrenia y bipolaridad, con una enorme dificultad para diferenciar la realidad de lo que vive en su mente. Prófugo de un viejo psiquiátrico, no hay registros, no hay nada…. ¡¡¡ ni sé me su nombre!!!....-dice aquel viejo doctor hablando solo, teniendo una conversación consigo mismo- Todo parece ser sacado del guion de una película….
-Esto me consume la vida, si es que aún tengo algo de vida… no tengo mucho que perder, no tengo nada que perder ya. Di la vida en esto, ¿y de que me sirvió? , de nada…. De absolutamente nada. Dar todo por tu trabajo, no disfrutar la vida en sí solo me mata, me acaba, me marchita….-susurra mirando el techo, regañándose a sí mismo- Fuiste un tonto, perdiste lo que más amabas en el mundo, tu familia. El más bello tesoro que la vida pudo darte y tu querido idiota lo perdiste….
-Ya no puedes decirte que tienes miedo….-murmura cerrando sus ojos- por qué el miedo solo es el reflejo de perder lo más querido, pero tú….
…Te has quedado sin nada…
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Se levanta el cierre del pantalón, se acomoda la camisa abotonando algunos botones, mira por detrás de su hombro. Ahí estaba, dormido entre las sabanas su demonio, con marcas pequeñas por todo su cuello y pecho, mostrando su posesión sobre él, sonríe con un aire prepotente. “Nunca me traicionará…” piensa atrevidamente, seguro de cada palabra. Mira nuevamente a su demonio para asegurarse de que estuviese ahí y luego sin decir palabra se marcha del cuarto, cerrando la puerta silenciosamente.
En ese momento, el ser demoniaco abre sus ojos despacio, sin menor ruido se sienta sobre la cama, su ser desnudo era cubierto solo por la fina y delgada sabana de la cama blanca. Miro hacia el techo melancólicamente, su mirada fría y sin vida, por unos cuando momentos cobre vida y se estremece. Lagrimas cristalinas y amargas caen lentamente por sus mejillas. Un horrible dolor se apodera de su pecho. El dolor de ser masoquista, de amar pero no ser amado. Una herramienta….
-Solo soy una herramienta para usted….-susurra aquel ser, mientras hechas sus cabellos aun lado, dejando al descubierto sus cuernos, que por ahora se encontraban pequeños- nada más…-murmura mientras otro lágrima amarga cae de su ojo y se pierde en el mar blanco de la sabana que cubría su cuerpo pálido.
Ese humano acabará contigo….
-Lo sé…-responde cerrando sus ojos, sin parar el flujo de sus lágrimas.
Debes de matarlo antes de eso suceda….
-No puedo…-responde en tono suave.
¿Vas a dejarte morir… sin luchar?
-No tengo otra opción…-responde en el mismo tono.
¿Por qué…?
-Por qué…-una nueva lágrima se derrama- Lo amo….
Entonces…. Muere por ese amor asesino…
-Ya estoy resignado a morir desde hace rato…-sonríe.
No podemos comprender…. ¿Cómo pudiste caer así…?
-Tranquilos…-susurra el demonio abriendo sus ojos- yo tampoco comprendo eso, ni lo comprenderé jamás…
((((FUERA DEL CUARTO))))
Tú…
-¿Mmm?...-el niño se voltea al oír una voz, pero no ve nada tras él, solo el espejo de su sala, que lo refleja- ha de ser mi imaginación…
No lo es….
-¿Eh, quien ha dicho eso?....-mira a los lados, nadie a su alrededor- Si estas escondido, es mejor que salgas de una vez…
No tiene caso, no me verás igualmente…
-Ok… me estoy molestando…-dice el niño frunciendo su ceño- ¿¿¿Quién demonios está ahí???
¿No reconoces mi voz?.... Qué triste, pensé que me recordarías….
-¡¡¡Sal de una vez…!!
Mírate al espejo….
-Solo veré mi reflejo….-susurra el niño mirando el espejo fijamente, estaba ahí reflejado como siempre, pero por un segundo…. El espejo se encontraba roto- ¿¿ah??...
¿Te asustaste?....
-¡¡¡Maldita sea!!!-grita el niño mirando a todos lados, su alrededor comenzaba a distorsionarse- ¡¡¡¡¿¿¿¿Qué clase de broma es esta????!!!!
Ninguna broma…
Solo….
Estas despertando de un largo sueño…. Querido Yugi….
-¿¿¿Un sueño????...-grita al aire, de repente todo vuelve a ser normal, la habitación, el espejo no se encontraba roto, todo estaba como antes- ¿Qué fue todo eso…?