Un niño de aproximadamente cinco años toco la puerta de un viejo teatro abandonado, algo en su corazón le decía que ese podía ser un buen lugar para quedarse, unos minutos después la puerta se abrió dejando ver a un hombre como de veintitrés años con cabello plateado largo y ojos chocolate
-¿Hola?-dijo al ver que nadie estaba, al menos eso es lo que el creía, hasta que volteo hacia abajo y se encontró con dos enormes ojos azul grisáceo llenos de miedo y tristeza, el mayor al verlo lleno de sangre se espanto y lo cargo, entro con el, una vez dentro muchos otros niños se juntaron alrededor de el, los que mas destacaban era uno como de siete años de ojos color rubí y extraño cabello de color negro, rubio y rojo en picos, a un lado de el estaba otro como de ocho años su largo cabello blanco hacían juego con su blanca piel algo sucia, sus ojos color rojo sobre saltaban, también había un pequeño como de seis años de cabello color celeste y ojos del mismo color, a un lado de el y tomado de la mano de este se encontraba uno de siete años de cabello negro agarrado en una coleta alta y un par de hermosos ojos verdes, atrás de todos se encontraba un par de hermanos tomados de la mano, el mas chico de siete años tenía el cabello color crema y ojos violeta, su hermana tenía el cabello negro largo y lacio y sus ojos eran del mismo color que el menor, ella tenía nueve años, todos miraban al pequeño
-Yami prepara el baño para nuestro nuevo integrante-el de cabello tricolor asintió y fue al baño improvisado que tenían, empezó a llenar baldes de agua para llenar la tina, una vez que estuvo llena puso un calentador eléctrico ya que no tenían gas, después de unos minutos el agua estuvo caliente, el peli blanco por su parte ya había llevado jabón, shampoo y unas toallas, el peli plata le pregunto al pequeño si se podía bañar solo o le ayudaba, este no contesto y solo se bajo de las manos del oji café, este entendió el mensaje y se llevo a todos los niños para que el menor pudiera bañarse a gusto, después de unos minutos estuvo limpio, uno de los niños le había dado ropa para que se pusiera, por desgracia todos en aquel lugar eran mas grandes que el y le había quedado muy grande, en cuanto llego a donde todo estaban un par se rieron y otros se enternecieron, el mayor se acerco a el y le acaricio su cabello negro que le llegaba hasta la mitad del hombro-¿Cómo te llamas?-el menor se entristeció y bajo la mirada, todos al instante comprendieron que era mejor esperar a que el les contara. Así fueron pasando los días, la mayoría del tiempo se la pasaba pegado al peli blanco que comprendía la situación hasta que una noche todos estaban bailando y cantando, en cuanto el menor vio esto sonrió, el tricolor en cuanto lo vio ahí y sonriendo se acerco y le ofreció su mano, este de inmediato la acepto y se pusieron a bailar, el peli negro rio hasta que cayeron rendidos
-Soy Yami Atemu ¿Tu como te llamas?-el oji azul sonrió y hablo por primera vez desde que llego
-Soy Mokuba-el oji rubí se sorprendió pues no había pensado que en realidad le fuera a contestar, pero después se alegro, el pequeño por fin se estaba adaptando a su nuevo estilo de vida
-Mokie te diré-el menor se alegro ante el apodo y asintió sin dejar se sonreír, a partir de ese momento esas sonrisa no se borro
-Pues yo soy Bakura-dijo el peli blanco sentándose a un lado del oji azul que de inmediato lo volteo a ver
-Ladrón no te metas-comento el oji rubí a lo que el otro solo le echo una mirada de esas que si mataran
-No molestes faraón-así siguieron peleando un rato hasta que el peli negro los detuvo carcajeándose por la riña de niños que estaban teniendo
-Pues yo soy Noah-dijo el peli celeste que estaba detrás del oji azul, este lo volteo a ver y le revolvió sus cabellos pues le habían causado intriga por su inusual color celeste
-Yo soy tu sueño echo realidad-dijo el oji verde acercándose al menor, tomo una de sus manos y la beso de forma seductora haciendo que este se sonrojara
-Nahh no le creas el es Duke Deblin, como los lentes-dijo Yami molestando al otro que le echo una mirada fulminante, en eso los hermanos se acercaron y el primero en hablar fue el menor
-Nosotros somos Ishizu y yo Malik Ishtar-dijo con una mirada bondadosa, el peli negro sonrió y se paro para saludarlos como se debía
-Saqueador de tumbas ¿Y eso que hablas?-el peli crema solo lo ignoro y siguió hablando con el peli negro
-Uyy creo que te ignora ¿Qué se siente faraón?-dijo echando tierra el peli blanco, así se inicio otra pelea entre los dos hasta que el oji chocolate entro y ambos se callaron de inmediato
-Chicos chicos ¿Qué imagen le están dando a nuestro compañero?-dijo tranquilo, los otros dos se miraron con culpa y bajaron la mirada arrepentidos, el mayor se acerco al oji azul y le acaricio sus cabellos
-Bien así que te llamas Mokuba-el otro asintió con una enorme sonrisa en su rostro que contagio a todos, el peli blanco noto de inmediato el cambio que estaban teniendo sus niños ante la llegada del pequeño
-Si señor, ese es mi nombre… pero yo no se el suyo-ante esto todos quedaron sorprendidos, se les hacía un poco raro que alguien le hablara así al oji café
-Tienes toda la razón, mi nombre es Maximillian Pegasus y como puedes darte cuanta soy dueño de este teatro-el peli negro vio el teatro que hasta ese momento no se había parado a contemplar, estaban tras bambalinas, se notaba que era muy viejo pues había demasiado polvo, la construcción en si se estaba viniendo abajo y había moho de la humedad, pero aun así al pequeño le pareció maravilloso aquel lugar, con una manita de gato pensó que podía llegar a quedar magnifico, desde ese momento eso fue lo que mas deseo, ver el teatro reconstruido
(Diez años después)
-Mokuba te esperan en la mesa siete-dijo una castaña de ojos azul mar, el adolecente asintió y salió de la cocina, traía puesto una camisa blanca de manga larga, encima de esta un chaleco negro y unos pantalones de vestir del mismo color, su largo cabello lo tenía agarrado en una coleta alta
-Ya voy Tea, es que estaba desayunando-dijo apenado a lo que la castaña solo negó divertida y le dio una libreta y pluma para poder escribir el pedido, el menor tomo los objetos y salió al restaurante, ahí en las mesas estaba lleno de chicas que iban a verlo mas que nada, este llego a la mesa mencionada y con una amable sonrisa hablo-Buenos días ojou-sama ¿Qué desea comer el día de hoy?-la muchachas que estaban sentadas se derritieron de inmediato, se notaban los corazones en sus ojos al ver al joven, apenas y podían hablar
-Yo quiero el especial de hoy-dijo suspirando una de ellas, la otra solo asintió con la cabeza como diciendo que ella también, el peli negro sonrió y escribió en su libreta lo pedido por las jovencitas
- En seguida se los traigo ojou-sama-dijo y se retiro caminando elegantemente, al pasar por las mesas las demás clientas solo suspiraban, al llegar a la oficina solo rodo los ojos con gracia-Recuérdame algo ¿Por qué soy el único mesero?-le dijo a la castaña que solo rio ante esto, el menor solo negó y entro a la cocina por el pedido, al entrar noto que era como un caos solo que raramente organizado, había tres cocineros, Joey Wheeler, Tristán Taylor y Serenity hermana de Joey
-Hola chicos, me pueden preparar dos especiales-dijo amablemente a lo que los demás asintieron, el castaño de ojos del mismo color se acerco a el y le dio un plato con un pequeño pastel de chocolate
-Feliz cumpleaños Mokie-dijo con una sonrisa a lo que el menor se sorprendió, ni el mismo se acordaba que ese día era su… cumpleaños por decirlo de alguna manera, no se acordaba de que día era el verdadero y por ello Max le había asignado el día que llego al teatro como cumpleaños
-¡Se acordaron!-dijo feliz y se sentó en una de las sillas que había en aquel lugar, el rubio y la peli roja se acercaron y entre los tres le empezaron a cantar las mañanitas, al finalizar el menor pensó en un deseo-deseo tener el dinero suficiente para arreglar el teatro-pensó y le soplo a las velitas, todos aplaudieron y lo abrazaron
-Feliz quintoajecimo cumpleaños-dijeron al uní solo, el menor sonrió y acepto el abrazo el cual no duro mucho pues tenían que seguir trabajando, el rubio se separo y fue por la orden y se la entrego en una charola de metal al peli negro
-Vamos que las clientas esperan por su príncipe-bromeo a lo que el peli negro solo negó, tomo la charola y salió de la cocina, así paso toda su mañana, entre clientas enamoradas y un par de clientes a los cuales Tea atendía, al finalizar el menor quedo rendido, para su mala suerte todavía le quedaba mas trabajo
-Regreso al rato Tea-dijo cuando termino de cambiarse, ahora tenía una sudadera negra de cuello de tortuga, unos jeans deslavados y unos vans negros regalo de Tea hace un año, ese año había sido una chaqueta de cuero negra que el menor llevaba deseando desde hace mucho tiempo
-Claro Mokuba, que te valla bien-el menor asintió y salió por la parte trasera que era para los empleados, al salir noto la hora y se echo a correr pues llegaba tarde, al llegar al parque central noto que Bakura y Yami ya lo estaban esperando, una vez que estuvo delante de él ambos lo abrazaron
-Feliz cumple peque-dijo el tricolor, el menor se sorprendió pues no pensaba que tanta gente lo recordara, a el se le había olvidado por completo, en cuanto se separaron Bakura le tapo los ojos en lo que el oji rubí acercaba algo a el, en cuanto sus ojos estuvieron libres abrió los ojos y noto que delante suyo había una funda de guitarra, de esas duras, este miro a sus amigos con mucha sorpresa
-No me digan que…-no pudo terminar la frase pues las emociones le estaban ganando, los otros dos asintieron con la cabeza al comprender lo que decía, el peli negro se acerco a esta y la abrió, ahí estaba una guitarra negra con detalles en plateado, era acústica-No lo puedo creer… mil gracias-dijo y la tomo entre sus manos, se puso la correa y vio a sus amigos, casi hermanos para el
-No tienes porque agradecer, es por parte de todos en el teatro-dijo el peli blanco, el menor sonrió y se subió a la barda de la fuente que había en el centro del parque, muchas personas pasaban por ahí, y aun mas a esa hora, empezó a tocar algo tranquilo
-I was dreaming of the past,
And my heart was beating fast
I began to lose control
I began to lose control
I didn’t mean to hurt you
I’m sorry that, I meet you cry
Oh I… I didn’t want to hurt you
I’m just a jealous guy
I was feeling insecure
You might not love me any more
I was shivering inside
I was shivering inside
I didn’t mean to hurt you
I’m sorry that, I meet you cry
Oh I… I didn’t want to hurt you
I’m just a jealous guy
I didn’t mean to hurt you
I’m sorry that, I meet you cry
I didn’t want to hurt you
I’m just a jealous guy
I was trying to catch your eyes
I thought that you were trying to hide
I was swallowing my pain
I was swallowing my pain Oh...
I didn’t mean to hurt you
I’m sorry that, I meet you cry, cry, cry
I didn’t want to hurt you... No
I’m just a jealous guy
I’m just a jealous guy
I’m just a jealous guy
I’m just a jealous guy
I’m just a jealous guy
Al terminar de cantar noto que su nueva funda tenía un par de billetes, esto causo que una enorme sonrisa se apoderara de su rostro, sus amigos por sus parte lo veían a lo lejos con una sonrisa, después de un rato decidieron que era hora de trabajar ellos también y se fueron a sus respectivos parques , así transcurrió unas horas hasta que noto que era hora de regresar al restaurante, tomo su funda que tenía ya por lo menos unos quinientos yenes guardo su guitarra y se apresuro a regresar, al llegar se cambio de nuevo no sin antes un par de elogios para su nueva guitarra, así siguió su trabajo hasta que dieron las nueve de la noche y era hora de cerrar, ayudo a Tea a bajar la lona y se salieron por la parte de atrás, cada quien se fue por su lado, el por su parte se quedo unos segundos viendo el restaurante, era color crema y en letra cursiva estaba escrito el nombre del restaurante, “Maid Shitsuji” estaba en color negro haciendo que resaltara, volteo a la calle, era ya de noche y apenas se veía los pies pues no había faros, eso no le preocupo pues la zona era muy segura y se sabía el camino de memoria, se puso su nueva chaqueta pues estaba empezando a refrescar, echo una última mirada al restaurante y empezó a caminar hasta que escucho unas llanas y sintió un golpe en su pierna izquierda, callo del susto y hasta ese momento noto que en frete de el había un coche