Callo del susto y hasta ese momento noto que en frete de el había un coche1 que por cierto no tenía las luces prendidas y de hay que no lo viera, estaba asustado y el corazón le palpitaba a mil por hora, casi lo mataban, del coche bajo un muchacho unos años mayor que el, se parecía mucho a su amigo Bakura solo que este tenía los ojos color chocolate y se veía mas amable, se acerco a el y le tendió una mano para que se pudiera para, este de inmediato la tomo y se levanto, en cuanto lo hizo noto un dolor en su rodilla pero prefirió ignorarlo, en cuanto volteo al coche noto que no era un coche como había pensado, mas bien era una limosina negra, de esta bajaron otras tres personas, una se parecía de sobre manera a su amigo Malik solo que este se veía un poco mas grande y tenía un aire de maldad, el otro era su amigo Yami pero en chiquito y tierno, sus ojos amatista lo miraban preocupado, también bajo una rubio de ojos morados, era muy guapa pudo notar, después de unos segundos bajo otra chica, era como de su edad, tenía el cabello rubio en dos trenzas y unos lentes que no le permitían ver el color de sus ojos, el tricolor se acerco a el preocupado
-¿Estas bien?-dijo mirándolo lleno preocupación, el peli negro salió de su trance y rio, asintió con su cabeza para despreocupar al joven
-Si solo fue el susto-el de ojos amatista soltó el aire que inconscientemente había estado aguantando, tomo el hombro del oji azul para respirar-pero oye ¿No tienes que prender las luces? Digo es de noche y si sigues así si vas a matar a alguien-recomendó el peli negro al conductor, este asintió, se notaba que no se sentía nada bien pues se había puesto muy pálido del susto
-Jejeje si no te preocupes el ya no va a conducir, creo que por hoy sus clases de manejo se acabaron-dijo la rubia y se acerco a el, se le quedo viendo unos segundos y luego le revolvió los cabellos-mi nombre es Mai Valentine-dijo y le tendió la mano que el otro de inmediato acepto
-Mokuba Pegasus-después de haber llegado al teatro había adoptado el apellido de su benefactor, todos adoptaban ese apellido para la sociedad, dentro del teatro era otra cosas, los que se sabían sus apellidos así se les llamaba
-Bueno Mokuba yo soy Yugi Motou, y ese paralizado es Ryou-explico ya mas tranquilo el tricolor, después de unos segundos la versión mala de su amigo se acerco y se le quedo viendo a los ojos, eso le causo un poco de incomodidad
-Marik-dijo a secas sin dejar de verlo, después de unos segundos rio en la cara de este, eso hizo que el menor se encogiera en si mismo
-Hmp yo soy Rebeca Hopkins-dijo despotamente, el peli negro se le quedo viendo y después de unos segundos abrió los ojos sorprendido
-Tu abuelo es el que investigo sobre Egipto claro, el descubrió muchas tumbas junto a tu abuelo me imagino-dijo refiriéndose al abuelo del tricolor, que quedo sorprendido ante las palabras de el menor, no pensaba que alguien supiera tanto, este solo asintió sin dejar de estar sorprendido
-Bien ya que casi te mata nuestro chofer ¿Qué te parece si te llevamos?-ofreció el rubia mas alta, este lo evaluó por unos momentos y volteo a ver al peli blanco que todavía no se reponía del susto, al verlo así se alerto
-Emm hablando de eso ¿Su amigo se siente bien?-dijo intentando sacar al oji café de sus trance, después de unos segundos lo logro, este salió del mundo en el que se encontraba y fue recuperando el color
-Lo lamento tanto-logro decir y empezó a revisar si el oji azul no estaba herido, este solo negó con la cabeza y lo paro
-Ya ya no te preocupes tanto, ¿Vale?-dijo sonriéndole, ante esto el otro se calmo y asintió-y por cierto no se preocupen, puedo ir caminando no queda muy lejos de aquí mi hogar-los demás negaron con la cabeza no estando muy de acuerdo con las palabras de este
-Ven solo déjanos avisarle “al señor”-dijo en son de broma la oji morado, el oji azul intento detenerla pero la mayor ya había entrado en el coche
-Oye Seto-dijo Mai en cuanto estuvo delante del peli café de ojos azules, este se notaba enojado y solo hizo un gesto indicando que escuchaba-bueno es que casi atropellamos a un chico y queremos ver si nos dejas llevarlo a su casa como forma de pedir perdón-eso era una enorme mentira la rubia lo sabia pues bien le podían pedir un taxi, lo que pasaba es que el menor les había caído bien
-No somos caridad, que se valla caminando-dijo a secas a la rubia esto no le gusto e hizo un puchero que al CEO le dio igual, de pronto a la rubia se le vino una idea
-Bueno en ese caso creo que el tendrá el derecho de demandarte y no creo que eso le venga bien a tu imagen ¿O si?-ante estas palabras el peli café se sorprendió pues tenía razón, en esos momentos necesitaba mantener a la prensa alejada de el ya que últimamente había tenido muchos roces con esta
-Esta bien, esta bien sube al mocoso-a la oji morado le agrado esa respuesta, salió de la limo dejando a un castaño muy enojado
-Bien Mokuba vamos-dijo tomándolo del brazo y lo subió al coche, una vez dentro todos se subieron, en el interior el oji azul menor estaba muy incomodo pues el castaño no lo dejaba de ver de mala manera, la rubia de trenzas se sentó junto al castaño y lo tomo e la mano
-¿Qué tanto le ves a mi novio?-dijo por demás enojada, el peli negro se sorprendió ante esto y solo negó con la cabeza mientras los colores se le subían a la cara, prefirió alejar la mirada del par y concentrarla en los demás
-Bueno Mokie ¿Te puedo llamar así?-dijo Mai a lo que el pelinegro sonrió y asintió feliz con la cabeza, el ambiente se estaba poniendo mas tranquilo, el coche avanzo y noto que en la cabina había un hombre que se notaba era fuerte, tenia el cabello café y usaba lentes lo cual le sorprendió pues era de noche, lo que lo tranquilizo fue que las luces estaban prendidas
-Si me puedes llamar así, de hecho todos así me llaman-dijo volteando la mirada a la rubia, esta sonrió y siguieron hablando
-Ya que te tenemos que llevar primero voy a llevar a mis colegas-hablo por fin el castaño, el pelinegro al escuchar su fría voz le dio un cosquilleo en el estomago que ignoro
-Okey, muchas gracias por llevarme señor…-volteo hacia los lados hasta que encontró las iníciales KC, el las conocía muy bien pues su amigo moría por un disco de duelo de eso compañía-¡Kaiba!-dijo sorprendido, no lo podía creer, estaba en la limosina del héroe de su amigo, no se le iban a creer lo mas seguro
-¿Puedes dejar de parecer niño de preescolar?- hablo la de lentes, el oji azul se deprimió un poco pero de inmediato se repuso y volteo a ver a la rubia con una sonrisa
-Lo lamento no quería enojarla señorita-los demás se sorprendieron ante la contestación mientras que la de lentes se enojo pues no esperaba ni quería esa reacción, volteo a otro lado enojada, el oji azul volteo a ver al tricolor pues no iba a seguirle el juego a una niña mimada-Oye Yugi-intento cambiar el tema, el oji amatista lo vio y le regreso la sonrisa
-Mande Mokie-el peli negro rio al notar que también lo llamaba de esa peculiar forma, le agradaba hacer nuevos amigos
-Eres duelista ¿verdad?-el tricolor se sorprendió ante esto, si lo era pero no era muy famoso, asintió con la cabeza-Lo sabía te vi hace unos meses en el campeonato de Kaibaland-expreso contento, el tricolor se alegro, no podía creer que alguien lo hubiera notado, había ganado pero como era para principiantes no le hicieron mucho caso y menos por el echo de que después de el jugo su amigo Seto, el rey de los duelos
-¿En serio? Que genial-así se siguieron hablando hasta que llegaron a la casa de este, de inmediato puso mala cara pues deseaba seguir charlando con el pelinegro-Bueno aquí me bajo yo, pero ven cuando quieras, seguro que a mi abuelito le va a encantar hablar contigo, me parece que sabes mucho de su investigación-el oji azul se sonrojo y asintió, el tricolor se bajo no sin antes darle su numero de celular y casa al pelinegro, había conseguido un nuevo amigo y no lo iba a perder, en cuanto el duelista entro a su casa el coche volvió a avanzar
-Ni te hagas esperanzas naco, su abuelo es una persona muy humilde no por eso significa que seas la gran cosa-intento hacerlo sentir mal de nuevo la de lentes, el pelinegro rio ante los vanos intentos de la adolecente de hacerlo sentir menos, el no lo iba a permitir pues desde que tenía memoria Max les había enseñado que nadie te podía hacer sentir que no vales sin tu consentimiento y el no lo iba a consentir
-Pues es algo que tenemos en común-dijo son dejar su típica sonrisa, ante esa contestación la rubia se enojo aun mas, los demás sonrieron al notar como la dejaba callada, no es que la menor les callera mas solo que algunas veces era muy pesada y mas con las personas que no eran millonarias, se ensañaba con ellas y eso les molestaba-Oye Mai-esta de inmediato lo volteo a ver con una sonrisa-¿Eres modelo?-la rubia se carcajeo ante esto, el peli negro no entendió la acción así que espero a que esta le explicara
-Pues si pero… ¿Cómo lo supiste?-el oji azul sonrió, a la rubia de lentes la presencia del menor cada vez se le hacía mas molesta
-Me lo imagine-la rubia se sonrojo ligeramente y después le sonrió, una nueva conversación se inicio, todos empezaron a platicar a excepción del CEO y la rubia menor
-Oye Seto-susurro la rubia a su novio, es asintió con la cabeza molesto, solo quería acabar de dejar a sus compañeros para irse de una buena vez a su mansión-¿Cómo no te molesta la presencia de eso en tu limo?-el oji azul se mosqueo ante esa pregunta ¿Eso? Si bien no le agradaba mucho su presencia pues hacía que los demás hablaran mas de lo que solían hacer esa despectiva forma de hablar lo molesto
-Eso es una persona y solo ignóralo-dijo a secas, la de lentes se molesto aun más, solo deseaba que el pelinegro se bajara y no lo volviera a ver en su larga existencia, en la siguiente parada se tuvo que bajar el peliblanco
-Oye Mokie, lo lamento mucho por casi atropellarte pero… me agrado conocerte, tomo háblame si un día de estos necesitas ayuda-dijo y le dio una tarjeta de presentación, este la tomo y noto que venía su celular y teléfono fijo
-Tenlo por seguro, eso si de chofer… jamás-dijo en son de broma, el oji café rio ante esto y asintió con la cabeza, se bajo y entro a su casa, el pelinegro se fue aprendiendo las direcciones por si algún día se ofrecía, el auto volvió a avanzar, ahora todo estaba en silencio, el pelinegro estaba viendo por la ventana fascinado por el lugar en el que estaban, era el lugar mas rico de la zona, o al menos de los mas ricos, nunca había ido para allá por obvias razones
-¡Ja! ¿El pobre jamás ha visto una casa decente?-eso si le había molestado ligeramente al pelinegro, ya le había colmado la paciencia, no era violento pero en esos momentos le daba tantas ganas cachetear a la rubia, se relajo y con una sonrisa contesto
-Pues casas así no había visto, pero e visto muchas cosas lindas, y no están precisamente delante de mi-dijo mientras la miraba a la cara dándole a entender de lo que hablaba, esta hirvió en enojo cuando lo escucho, Mai por su parte se carcajeo de risa al igual que Marik, Seto por su parte solo esbozo una ligera sonrisa
-¿Así que la gata tiene uñas?-el pelinegro no borro su sonrisa, se paro un poco y le tomo las manos, se las vio y después de unos segundos se volvió a sentar
-No me parece que no-Mai y Marik se rieron de nuevo, la rubia se tomaba el estomago pues de tanto reír ya le dolía, Seto agrando su sonrisa y se aguanto de soltar una carcajada mientras que la de lente estaba que se la llevaban la ****, el oji azul no dejo su sonrisa y regreso su vista a la ventanilla
-Seto dile algo, me ofendió-dijo esperando algo por parte de su novio, este volteo a ver al menor unos momentos y luego negó con la cabeza
-Mejor me abstengo-dijo con una sonrisa de lado que nadie a excepción de Mokuba vio, este le regreso la sonrisa y volteo a ver a la rubia que no cabía en si de enojo, estaba a punto de golpear al pelinegro pero se abstuvo, era una señorita, bueno eso pensaba ella, el resto del camino siguieron platicando hasta que fue el turno de Mai, su casa a los ojos del pelinegro era hermosa, era una mansión mas bien, blanca estilo Griego, tenía un camino de piedra y en el centro había una fuente que estaba iluminada, toda la mansión lo estaba, el jardín estaba lleno de rosas blancas y rojas, ni una rosa, es hacía un contraste hermoso, antes de bajar Mai le dio su teléfono para que le llamara
-Tu casa es hermosa-elogio el oji azul aun concentrado en la mansión, se imagino su teatro así de iluminado, y muchas personas llegando a ver la función del día, cada día seria una diferente para que nadie se aburriera de ver siempre la misma, gente de todo el país yendo a ver la puesta en escena, en la que el y sus amigos actuarían, también los domingos podría haber recitales de piano, violín, hasta conciertos, ante esa idea se lleno de entusiasmo, eso es lo que su corazón mas anhelaba, ese era su deseo desde que tenía uso de razón, o al menos lo que se acodaba, Mai se bajo y se metió a su mansión, el chofer arranco de nuevo despertando a Mokuba de su ensoñación
-¡Ja! Ojala se te allá quedado bien grabada la imagen porque tu jamás podrías tener algo así-hasta ese comentario no le importo, el tenía muchas ideas en la mente y estaba muy feliz, la ignoro olímpicamente y volteo a ver a Marik
-Marik, ¿Te gusta el teatro?-ahora que esa idea se le había clavado en la mente deseaba hablar sobre ello, el peli crema se quedo pensando, y negó con la cabeza
-Jamás e ido a uno-admitió tranquilo esperando a que el menor hablara pues sabía que lo iba a ser
-¿Por qué?-el ya sabía su respuesta, en Japón no había muchos y los que había eran muy caros y aburridos, el mismo había ahorrado por un año completo para ir a uno y al final se aburrió y se salió a la mitad
-No me atraen-confeso, el pelinegro sonrió, tenía una magnifica idea para que el oji morado entrara en su imaginación y por supuesto deseara ir a uno
-Bueno eso es lógico, no son muy divertidos hoy en día, pero imagínate una calle iluminada tenuemente, y en la esquina un teatro con muchas luces haciendo que resalte-el mayor cerro los y su mente empezó a maquinar la idea, hasta ahora le estaba atrayendo y por ello se había dejado llevar-hasta arriba tiene el nombre de “Cecilia” un pequeño nombre pero que hace que la construcción se vea mas atractiva, en la cartelera hay un concierto, extraño pero así es, uno de rock-en cuanto vio al peli crema noto que era rockero, entre sus cadenas y su collar que casi no se veía pero notaba que decía “Ramstein”, al oji morado le estaba atrayendo de sobre manera la idea, es mas hasta quería ir-al entrar notas que esta decorado con telones negros dándole aun mas el toque roquero, los asientos son cómodos, algo muy extraño en un consiento de se tipo, pero también existe un espacio en donde la gente puede acercarse mas, de pronto todo se apaga-el mayor dio un ligero brinco, pero no abrió los ojos, estaba muy absorto en su imaginación-poco a poco luces van alumbrando el escenario, de este empieza a salir del piso una batería, un micrófono, una guitarra y un bajo, de las esquinas salen los artistas ¿A quien te imaginas que sale?-el peli morado sin perder la imaginación respondió sin percatarse
-My Chemical Romance-el pelinegro asintió con la cabeza estando de acuerdo con esa idea
-Cada quien se coloca en su instrumento, la guitarra empieza a sonar tranquila, Gerald empieza a cantar “Welcome to Black Parade” de pronto las luces que eran blancas empiezan a cambiar de color, morado, rosa, verde y azul haciendo que el ambiente se penda, la guitarra suena con mas intensidad, la batería toca y el bajo apenas perceptible hace que la armonía sea perfecta-termia de hablar, el oji morado siguió un buen rato con los ojos cerrados, hasta que la canción imaginaria acabo, abrió los ojos impresionado
-Impresionante me llevaste a un lugar sin moverme-dijo con una sonrisa, el peli negro sonrió y solo subió los hombros
-Y dime ¿Irías a un teatro así?-el mayor sin pensarlo mucho asintió seguro de lo que pensaba, el daría su fortuna por ir a ese lugar todas las noches, seria un bien des estresante
-Dime donde lo has visto-pidió cortésmente, el peli negro borro por unos segundos su sonrisa pero luego la recupero
-Si me acompañas a mi casa lo veras