Capítulo 9: En la misma habitación nuevamente.
Habían estado toda la semana ensayando, pero el ambiente no era como antes, era un poco más tenso. O eso creía. La verdad ya no era tanto así, más bien Young Bae estaba muy triste por todo lo que había pasado y sabía que debía unas disculpas.
Vio a Seungri salir de la sala de ensayos a la hora del almuerzo, seguramente iría a comer así que salió tras él. Le siguió unos segundos, pero el menor parecía no darse cuenta de su presencia.
-Seungri… -le llamó, pero el otro siguió caminando.
-¿Quién osa llamarme? –Habló mientras seguía caminando sin siquiera darse la vuelta.
-Por favor… no seas inmaduro –decía Young Bae siguiéndolo.
-Dice el que arregla las cosas a golpes.
-¡Oye! –Le gritó y lo tomó del brazo- ¡Tú también me golpeaste!
-¿Quién comenzó? –Le miró serio y soltó mientras rápidamente seguía con su camino, la verdad no quería estar enojado con él y dormir con Daesung no era lo mismo. Pero de todas maneras él tenía un orgullo muy grande como para perdonarlo así como así.
-Vale. –Le tomó de la muñeca y le miró fijamente cosa que puso incomodo a Seungri- Me pasé, no debí gritarte y mucho menos golpearte, lo siento… Es solo que me enojé y no pude controlarlo, Seungri no seas así… eres uno de mis mejores amigos, puedo rascarte la espalda de nuevo antes de dormir, ver películas de terror, incluso ir al parque…
-mmm… no lo sé, estoy muy enojado contigo.
-Ri, créeme que si tú no fueras importante no te estaría pidiendo disculpas. –Le dijo seriamente y el menor pensó que moriría. Ok, no, eso era demasiado exagerado.
-Mmm… te perdonaré, pero no sé si quiero dormir contigo. –Quería hacerse de rogar un poco más.
-Oyes, no seas rencoroso. Aparte la cama de Daesung es chica y deben dormir mal… puedo comprarte un helado. –El menor era fanático de los helados.
-¿Helado? –Le miró restándole importancia.
-Sí. De chocolate.
-Que sean dos.
-Está bien. –Sonrió y lo abrazó mientras le desordenaba el cabello.
-¡Oye! ¡No creas que esto se queda así! –Se rió y se soltó- ¡No estás 100% perdonado, eh!
-Que rencoroso eres, Seungri. –Se reía mientras le movía la cabeza.
Salieron de la compañía hasta llegar a la heladería más cercana y entonces pidieron un par de helados. Caminaron unos momentos y luego se sentaron en el parque mientras conversaban. De vez en cuando el menor le hacia la ley del hielo a Taeyang para darle cargo de conciencia, pero muy pronto el mayor le hacía cosquillas y se le quitaba.
Estaban bien cuando la mirada de Seungri paró y se quedó mirando al otro extremo del parque. Era ella, entonces el mayor se dio cuenta y miró, al darse cuenta de que era ella bajó un poco la cabeza. Se sentía incómodo, no quería volver a pelear con Seungri y no quería hacer sentir mal a la chica. Miró a Ri y este simplemente sonrió un poco.
-No te diré que está bien, porque estaría mintiendo. –Dijo el menor mientras se reía, cosa que no entendió el mayor-. Iré a la compañía y terminaré el almuerzo. Créeme que no quiero estar aquí si está… ella. –No quería llamarle ni perra ni puta, sino seguramente terminaría en pelea-. No me haré el loco, me cae muy mal sabes.
-Ri…
-Mira hyung, yo ya te lo dije, lo que pienso y lo que sé… si tú crees o no es cosa tuya, no me meteré en eso, pero no me pidas que me lleve bien con ella, porque no será así –Intentó sonreír un poco- tú sólo has lo que para ti sea mejor, y lo que te haga sentir bien. Si ella te hace sentir bien, entonces ve. Pero si después sales mal, no te quejes, eh. –Se burló y luego le sonrió.
-Con todo lo que dices me haces pensar demasiado –se rió.
-Esa es la idea, que pienses mucho lo que harás, babo. –Le dio una palmadita y la mujer llegó hasta donde estaban ellos.
-Hola. –Saludó al mayor mientras le sonreía, luego se dio la vuelta y miró a Seungri y de la misma forma le saludó- Hola. –Hizo la sonrisa más hermosa y adorable de su vida para parecer una linda persona delante del moreno.
-Adiós. –Le sonrió también mientras se lo decía en su cara mientras Young Bae agachaba la cabeza y sonreía un poco, el menor ni siquiera disimulaba su odio por ella- Nos vemos, hyung. No llegues tarde, hay más ensayos.
-Está bien –le sonrió.
-Veo que ahora ya no están peleados… -dijo la chica mientras miraba a Bae y sonreía.
-Pues no… -le devolvió la mirada.
-Eso es bueno… pero siento que no le agrado –bajó la cabeza como si lo lamentara.
-Y seguramente no le agradarás… -intentó sonreír- no es fácil hacerlo cambiar de parecer… lo siento…
-Ya veo… -le enojaba mucho que el maldito enano hiciera cambiar la mente del moreno n menos de cinco minuto. Seguramente si le hubiera dicho días antes que no le agradaba al menor, Young Bae hubiese hecho lo imposible para decirle a Seungri que la aceptase. Pero ahora no.
-¿Por cierto, qué haces aquí? –Preguntó curioso, ahora ella salía de todas partes.
-Yo… solo iba pasando y los vi –sonrió- pero ya me iba, tengo que ir donde mis padres…
-Oh, pues… que te vaya bien… -sonrió mientras se despedía.
-Igual para ti… -sonrió de vuelta, ¿qué te vaya bien? ¿Sólo eso? ¡Maldita sea! Estaba muy enojada y ese enojo tenía nombre y apellido. Lee Seung Hyun.
Vio irse al moreno y entonces fue hasta su auto lo más rápido que pudo y arrancó como si no hubiera mañana. Miró muy bien y lo encontró, antes de que el menor cruzara la calle, ella paró en seco y se bajó rápidamente.
-¡Estás loca o qué! –Gritó mientras la veía- ¡Pudiste matarme, maldita loca!
-Hubiera sido más entretenido si te atropellara, ¿cierto? –Le dijo mientras le veía.
-No seas estúpida. Si me hubieras atropellado, seguramente mi abogado te hubiera secado en la cárcel. Después de todo, ¿qué abogado tienes tú? ¿Uno de cuarta? Eres una simple bailarina, yo un cantante, del mejor grupo de toda corea y próximamente de todo el mundo.
-Te crees la gran cosa. –Dijo muy enojada a punto de golpearlo.
-No me creo. LO SOY. –Se rió de ella en su cara y se dispuso a caminar.
-No he terminado de hablar. –Le dijo mientras le tomaba la muñeca- Dime, ¿qué le dijiste a Young Bae?
-Nada –se soltó y luego se limpió la mano como si le hubiese caído excremento.
-No seas idiota. Hace unos días moría por mí y ahora se comporta como si fuera nada. –Le dijo enojada.
-¿Así? ¿Qué tengo que ver yo en eso? –Le miró burlonamente- No he hecho nada en lo absoluto, tal vez él se da cuenta de que no eres más que una zorra necesitada.
-¡YA! –La mujer no lo pensó dos veces y le pegó una bofetada. El menor le miró indignado y luego solo se rió- ¡¿De qué te ríes?!
-¿Sabes que tú que sólo los animales arreglan los problemas a golpes? –Se rió. La chica ya no podía más con él, era un oponente demasiado fuerte- Si no tienes más que decir, me retiro. Tengo una agenda muy ocupada como para andar hablando en la calle con una bailarina de cuarta. –Se puso los lentes y se fue caminando mientras la chica chillaba de lo enojada.
Quizás se le había pasado la mano al llamarla zorra necesitada y menos decirle animal luego de pegarle. Pero él tenía orgullo y era demasiado egocéntrico, como para dejar que una mujer le hablara mal. La verdad se había comportado muy divo.
Luego de terminar los ensayos por ese día volvieron al departamento donde se estaban quedando. Seungri se dirigió a la habitación de Daesung para sacar sus cosas y volver a su habitación original con Young Bae. Entró, el moreno mantenía la habitación muy ordenada. De alguna forma se sentía más feliz de haber vuelto y sobre todo por hacer enojar a aquella maldita mujer que ya lo traía muy enojado.
El moreno entró con un paquete de galletas en la mano y la extendió hasta el menor mientras sonreía, el otro simplemente le quedó mirando y lo tomó.
-¿Y esto? –Preguntó mirando el paquete.
-Esto… hasta ahora has hecho mucho por mí, Ri –dijo mientras se sentaba en la cama-. Me haces reír, compraste un peluche tuyo, aunque eso fue muy egocéntrico. Me hiciste ir al parque donde terminé pasándola bien, me hiciste ir a patinar y en vez de dejar que yo callera caíste tú, incluso ahora ya no estás enojado después de la pelea que hubo… me siento agradecido.
-Deberías estar mucho más agradecido. –Se rió el menor burlándose.
-Lo estoy, desde prometo ser buen hyung –sonrió mientras le desordenaba el pelo.
-Si tú lo dices. –Se corrió, no le gustaba que le moviera su hermoso pelo. Iba a guardar la ropa cuando el moreno se paró y comenzó a hacerlo por sí solo. Entonces Ri solo lo miró y se quedó estirado en la cama.
-Trabaja esclavo –Se burló del mayor mientras comía galletas.
-¡Oye, no te pases! ¡No soy esclavo! –Le tiró la almohada y luego le quitó las galletas.
-Son mías, me las acabas de dar –se quejó.
-Recupéralas. –Le desafió y entonces extendió su mano lo más alto que podía y el menor intentó alcanzarla, pero lo que consiguió fue que el moreno se callera y consigo callera el Maknae también, encima de él.
Se quedaron mirando un par de minutos en un silencio eterno, ninguno dijo nada. Entonces el menor solo le hizo un poco de cosquillas a Young Bae y luego le quitó las galletas, se puso en pie y caminó hasta la puerta.
-Perdedor. –Se rió y luego salió de la habitación.
Se sentó en el sillón y luego llegó Ji Yong a su lado, vieron una película toda la tarde y luego llegaron TOP y Dae algo adormilados, habían estado durmiendo en sus habitaciones.
-¿Dónde está Young Bae? –Preguntó Ji mirando al Maknae
-Guardando mi ropa. –Se rió el menor.
-¿Young Bae guardando tu ropa? –Se rió TOP- Eso no lo creo.
-Es así, está disculpándose conmigo. –Ri se hacia el importante mientras hablaba mientras los demás le miraban algo asombrado, Bae nunca hacia esas cosas.
-Ver para creer… -dijo Ji Yong.
-Ok, miren –el menor se puso en pie mientras los otros tres le seguían, se paró en frente de la puerta y a abrió como si fuera a pasar un príncipe y entró rápidamente a su habitación.
-¡¿Qué mierda es esto?! –Gritó el Maknae. Al entrar le cayó una cubeta con agua desde arriba de la puerta.
-B-A-B-O. –Se rió Taeyang estirado en la cama- ¿De verdad pensaste que guardaría tu ropa? Ni siquiera guardo la mía –se reía.
-Te lo dije –TOP se burló y luego salió del lugar.
-Maldito, ¡me las pagarás! –Decía el menor buscando una toalla. Se comenzó a secar y lo miró. Se rió bajo haciéndose el enojado aún, de todas maneras era mejor así. Que se comportaran como antes.