Siempre te amaré por SinnaeGrell

   Si hubiera sabido que esto iba a pasar… Nunca te hubiese permitido acompañarme. Nunca más podré tenerte a mí lado de nuevo con esa sonrisa que tanto me gustaba y calentaba mi interior con tan sólo un sentimiento que formaba miles más. Cuando por fin logré estar a tu lado, cuando por fin creí que todo estaba bien después de tantas cosas horribles, después de tantas dificultades… todo se venía abajo. Lo que habíamos construido juntos se desmoronó con sólo un rocé punzocortante. ¿Cómo pudiste ser tan distraído para no darte cuenta que te atacarían por atrás? Y yo, ¿cómo pude ser tan estúpido como para no prestarte atención? Porque… fuimos tan idiotas, tan confiados… Era una misión sencilla, pero todo se dificultó. Yo pensé que podría manejarla solo, pero tú te empeñaste en seguirme, para protegerme… Quién diría que todo habría terminado así. Y ahora… sentado frente a tu tumba, intento decirte lo mucho que te amaba y amo aún… todo lo que no podía decirte, todo lo que guardé tanto tiempo y ya no puedes oírlo. Aunque no estás, te amo, porque tú comprendiste lo que se encontraba en lo más recóndito de mi ser… Le diste una razón a mi vida y una flama alumbró mi existencia, siguiendo adelante pese a todo. Tantos años juntos… tantas risas y discusiones infantiles, tanto sufrimiento… pasamos tantas cosas que me da pena recordarlas; es muy vergonzoso reírse solo. Reírme de lo feliz que era y de lo miserable que me siento ahora. Al parecer, Dios está en mi contra, pues liberó la lluvia aun sabiendo mi dolor. El olor a tierra mojada se hace presente, al igual que las hierbas a mi alrededor parecen burlarse de mí.
   Quisiera poder contarles a todos lo genial que eras, lo increíble que fuiste… Todas las cosas grandiosas que hacías y decías, todos los malos momentos que superaste, todo lo maravilloso de ti… Pero todos esos recuerdos los quería sólo para mí: quiero que seas mío hoy y siempre, así como una vez también hubo un pasado en el que nos pertenecíamos el uno al otro… quiero que sigas siendo parte de mí, no quiero compartirte con nadie.
   Tu calor… Necesito esa calidez tan especial que sólo me otorgabas a mí y que era causada por mí. Necesito sentirte, sentir que eres feliz a mi lado, pero, qué ironía; estás, pero no estás… Te estoy hablando, pero sé que tu cuerpo no me escucha. Tu alma es lo único que me da esperanza de que sabes lo que estoy diciendo, lo que estoy sintiendo.
   Vamos, no sientas lástima por mí, es sólo que hace sólo dos días estábamos abrazados en donde solíamos entrenar, ¿cómo esperabas que reaccionara? Eres un tonto, ¿lo sabías? Sí, siempre te lo dije. Las lágrimas aparecen de la nada, no me di cuenta de cuándo comenzaron ni cuándo se mezclaron con la lluvia.
  Oye, ¿qué es esto que siento? Me arde el pecho y no puedo respirar correctamente, ¿es acaso alguna de tus artimañas y estás escondido en alguna parte, riéndote de la buena broma que me haces? Comienzo a reír de la desesperación… ¡Vamos, sal de entre los árboles y bésame de nuevo! ¡Dime que me amas! ¡Dime que me extrañas y que me necesitas! Te odio… eres tú la causa de que mi garganta se libere de los gritos de dolor. Y no cualquier dolor… la soledad es el peor de todos y… me dejaste solo. Tiemblo sin realmente querer hacerlo… tengo miedo. Tengo miedo de estar solo. Te necesito a mi lado para ser fuerte; por favor regresa, no puedo vivir en un mundo tan duro que arrebata vidas como si fuese cualquier cosa, sobre todo… no podía vivir en un mundo así, sin ti.
   ¿Recuerdas? Llegabas cansado de las misiones que la hokage te otorgaba, pero siempre me acompañabas un rato y caminábamos juntos entre la gente, ignorándolos a todos y sólo escuchando nuestras voces y palpitaciones. ¿Recuerdas todas esas noches? Esas noches que sólo éramos nosotros dos, sin tiempo, sin prisas, sin porqués, sin razones, sin cuestionamientos, sin miradas, sin murmullos, sin prejuicios, sin órdenes, sin pasado, sin futuro. Sólo nosotros y el presente de lo que sentíamos en ese momento. Oh, ¿recuerdas también todas nuestras promesas? Las de seguir nuestros sueños hasta poder estar juntos sin que nadie nos molestase ni a nadie le importase o le pareciese mal… Recuerdo que confiabas en mí más que en nadie, recuerdo también… lo mucho que tus ojos brillaban al despertar, luego de dormir bastante por lo cansado que te encontrabas. Tus brazos me rodeaban, dándome la esperanza de un futuro mejor, a tu lado y feliz… Ese calor lo echaría de menos.
   Bueno, realmente… Echaría de menos todo. Tus abrazos, tus susurros, tus palabras de consuelo, tus invitaciones a comer después de haber hecho un berrinche por molestarme contigo, tus sonrisas repentinas, tus manos frías y delgadas, tus ojos… que me hacían conectar tu alma con la mía. De verdad la veía, la sentía y la entendía… Te amaba más a cualquier otra cosa y quería decírselo al mundo. Te echaré de menos… te echaré tantísimo de menos. Ya no estás y no puedo hacer nada para regresarte a la vida.
   Cómo me hubiese gustado pasar más cosas contigo, haberte contado más historias de esas que se te antojaban interesantes antes de dormir, haberte dado un beso más, o quizá dos, quizá miles más… haberte dicho de nuevo te amo, haber peleado contigo otra vez porque sabía que eso llevaría a una reconciliación y terminaría escuchando esas dos palabras que tanto me gustaban y me hacían feliz. Pensé que esto duraría más. Pensé que mi felicidad sería un poco más duradera… pero así es la vida de alguien que escoge este camino: tú y yo estábamos conscientes y aun así, continuamos por ese peligroso sendero… pero tomados de las manos.
   Te extraño tanto…
   El dolor de mi pecho no desaparece y ya no tengo fuerzas de llorar una lágrima más, lo siento, sé que te mereces millones más… Ya tampoco tengo voz para gritar cuánto te amo, para maldecir a cualquier Dios que se hiciese responsable; sólo puedo acariciar la lápida que tiene tu nombre escrito en piedra, para inmortalizar la gran persona que fuiste.


                                                                                                                  Sasuke Uchiha

  
   ¿Quién diría que alguien como tú sería alcanzado por alguien como yo? Un simple chico que siempre estuvo tras de ti… Sasuke y Naruto. Nuestros nombres ni siquiera combinaban porque éramos polos opuestos. Pero aun así… pudimos estar juntos… aunque fue muy poco tiempo.
   Te echaré de menos… sólo espero el momento en el que sea mi hora para ir de nuevo junto a ti y volver a sentir la calidez que me brindabas. Te prometo que nunca, jamás, te olvidaré… porque te amé tanto, te amo demasiado y siempre, lo juro, siempre… te amaré de verdad, únicamente a ti.