Zico miraba sorprendido el lugar sabía que Hongdae era un lugar muy concurrido pero esa zona parecía desértica eso se debía que era muy peligrosa, caminaba lleno de seguridad tenía una misión en la cual no podía fallar de pronto llego a su destino que era la entrada a un edificio abandonado pero al ingresar se dio cuenta que había guardias quienes detuvieron su andar.
—Hey jovencito ¿Estás perdido? —Cuestionaban con sorna. —Vete a casa con tu mami.
—¿Yo? —Sonrió sarcásticamente —I'm a warrior.
El guardia solo lo miro fijamente para después dejarle entrar a un pasillo solitario donde solo una lámpara descompuesta alumbraba intermitentemente pero poco a poco la música llegaba a sus oídos, era bastante buena, cruzo una puerta y se vio inmerso en un lugar bullicioso, iluminado por tenues luces de distintos colores, el ambiente estaba al máximo fue cuando vio el escenario donde el logo de B.A.P estaba enmarcado y la cara de un conejo era iluminado, camino hacia la barra para tomar asiento mirando a miles de chicas y chicos disfrutar del sitio.
—¿Que le sirvo? —Cuestionaba el bar tender.
—Un tequila para entrar en calor. —Miraba sonriendo. —Disculpe ¿Qué debo hacer para felicitar al dueño de este lugar?
El cantinero solo le sirvió la copa sin contestar su pregunta y después atender a más clientes ya que el lugar estaba a reventar.
—Tiene mal carácter. —Contestaba un sonriente pelinegro. —Mi nombre es JR ¿Nuevo?
El extraño le estiraba la mano para saludarlo a lo que Zico contesto animadamente.
—Por así decirlo. —Contesto levantando los hombros. —Conoces al dueño.
—Son dueños —Interrumpía un rubio alto. —Son 6 personas o mejor dicho es el equipo llamado B.A.P. Mira ya llegaron.
Zico levantaba la ceja mientras observando como 6 personas hacían acto de presencia, se veían extremadamente elegantes (vestidos como en el Yate de OneShot) las personas comenzaron a rodearlos acosándolos con preguntas como si fueran estrellas de cine.
—El líder es el de cabello rojo se hace llamar BangYon Guk tiene un carácter de los mil demonios, el peliazul de piel blanca que está a su lado es el maknae y su alias es Zelo es muy lindo con todos pero es demasiado tímido, el castaño de lindos ojos es YoungJae respetuoso y muy inteligente pero si quieres vivir mantente alejado de él, el guardaespaldas que está a su lado es DaeHyun es el chico más solicitado y por último el sonriente ángel es JongUp casi no habla pero baila como los dioses y el príncipe del sitio HimChan es muy coqueto y no existe chica que se le resista. —Sonreía tímidamente JR. —Como te puedes dar cuenta son muy solicitados.
—Y son unos asesinos. —Interrumpía un rubio algo tomado. —¿Cómo crees que hicieron todo esto? Hacen trabajitos para algún gánster.
De pronto llegaron dos pelinegros quien también se veía bastante tomados, JR al ver en ese estado a su mejor amigo lo abrazo para que se recargará en su hombro y despeinar su cabello con ternura.
—No lo escuches esta borracho. —Se disculpaba un pelinegro. —No estamos seguros a que se dediquen pero la verdad es que tienen mucho dinero y siempre están rodeados de personas muy peligrosas.
Zico seguía observando a los recién llegados, las chicas los acosaban constantemente pero ellos contestaban con coquetas sonrisas a sus halagos. Bang sonreía de manera elegante mientras les susurraba algunas palabras a sus oídos pero de pronto se veía hastiado por las preguntas por lo que se levantó de golpe despidiéndose coquetamente de las chicas después de varios minutos el maknae también se despidió de sus compañeros dirigiéndose a la barra donde le dieron dos copas y una botella de vino estuvo bromeando unos minutos con el cantinero quien parecía otra persona, subió por unas escaleras hasta perderse en una puerta. YoungJae al ver la escena solo sonreía y le comentaba algo al oído a su compañero quien ya se estaba hartando de esas chicas, una sonrisa torcida cruzo su rostro por lo que se levantó jalando a su amigo quien se despedía con un tierno guiño de ojos. HimChan y JongUp también se pusieron de pie con un par de chicas para ir dirigirse a la pista de baile pero en el camino el mayor beso tiernamente la mejilla del más joven para después indicarle algo a lo que asintió levemente y después bailar.
Bang estaba en su escritorio leyendo unos papeles ya que tenían otro trabajito que hacer así que estaba planeado la mejor estrategia, miro de reojo por las ventanas para ver su negocio se sentía orgulloso de lo que era ahora aunque sabía que todo había obtenido de malas acciones eso no le importaba ya que había sido su decisión, ¿Buena, mala? Que importaba ahora solo era el resultado de sus decisiones, “El valor del nombre es lo que te hace a un lado” continuo sentado mirando los papeles hasta que alguien lo interrumpió colocando una copa de vino frente a su cara.
—¿Deberías tocar antes de entrar. —Comentaba con falsa molestia. —¿Qué quieres?
El peliazul sonrió con ternura para después pestañear con inocencia sentándose sobre el escritorio.
—Solo quería entrar a seducir a mi hyung. —Respondía tomando un sorbo de su copa. —¿Crees que este mal, hyung?
Finalizaba su respuesta con un puchero mientras se desplazaba por la mesa hasta quedar frente al mayor quien no dejaba se sonreír complacido. El joven de piel blanca coloco cada una de sus piernas a un lado de la silla jugando con ella, el mayor se levantó para quedar frente a él se acercó a su cuello golpeándolo una y otra vez con su intermitente respiración aspirando su dulce aroma a lo que Zelo cerró los ojos para perderse en esa emoción que provocaba tanta cercanía.
—¿Por qué quieres seducir a tu hyung? —Cuestionaba acariciando con su nariz el cuello del menor. —¿Que ganarías con eso?
El pelirrojo mordió levemente la parte baja del cuello de su compañero quien se estremeció por el contacto soltando un pequeño gemido sus manos estaban sobre la mesa así por lo que araña la fina madera.
—Mi hyung es una persona rica y poderosa. —Contestaba mientras le iba quitando el saco. —Anhelo el poder que tiene, deseo estar a su lado para derrotar a mis enemigos.
El pelirrojo soltó una carcajada con sorna para después besar tiernamente su cuello poco a poco iba soltando los botones para ir cubriendo de mordiscos su blanca piel, el peliazul logro quitarle el saco pero un mordisco en su clavícula detuvo su acción y tuvo que aferrarse a la espalda del mayor arañando su camisa.
—Soy de zero. —Contestaba besando su cuello. —Me gusta romper moldes, el poder que tengo ha sido por mis malas acciones ¿Aun así me quieres?
Hablo con voz profunda para dejar de besarlo colocando sus labios sobre los del menor para después abrir sensualmente su camisa dejando descubierto su marcado abdomen coloco sus manos a los costados del peliazul quien también se quitó el saco dejando ver su bello cuello ambos se miraban con pasión, se deseaban desde la primera vez que sus orbes se cruzaron, cada sección de su cuerpo se anhelaban aunque se conocían a la perfección cada día era como un nuevo comienzo.
—No, yo nunca dije que lo quería. —Respondió con aire de superioridad. —¿Crees que sería capaz de dejar todo en mi pasado por un cariño?
Zelo lo jalo del cuello de la camisa plantándole un beso, poco a poco fue introduciendo su lengua para disfrutar de ese sabor prohibido mientras se pegaba más a su cuerpo, frotándose con sensualidad.
—Yo no lo quiero hyung. —Volvía repetir. —Lo que hay en mi pecho es más fuerte que un sentimiento, más poderoso que un ideal. Amor es solo una palabra absurda que no logra abarcar lo que despiertas en mí. Decirte que Te amo sería una mentira porque lo que siento es más fuerte que esa estúpida palabra.
Al escuchar esas confesión Bang se abalanzó sobre él, besándolo con desesperación desnudo lentamente su hombro mordiéndolo con ternura mientras que el peliazul enrollaba sus piernas pegando sus caderas, una sonrisa torcida apareció en su rostro parecía disfrutar cada caricia ya que su piel vibraba al contacto llevándolo al éxtasis, en esos momentos solo existían ellos dos en medio de bullicio. Las caricias y los gemidos invadieron cada centímetro de esa habitación porque nuevamente una pareja de amantes se volvía a enamorar como la primera vez.
YoungJae estaba sentado en una esquina de la barra la cual estaba completamente oscura era un punto ciego en el club que nadie conocía, tenía una bebida en su mano derecha mientras movía su cabeza al ritmo de la música estaba disfrutando del ambiente hasta que alguien lo abrazo por la espalda besando su cuello con ternura.
—Me encanta tu colonia. —Comentaba agitado. —Es la que te regale en tu cumpleaños.
El extraño solo asintió le quitó la bebida y se la tomo el contenido de un solo sorbo para después continuar con su trabajo, el cual consistía en devorar cada centímetro de la piel de su amante quien solo reía complacido al ver como las personas bailaban en la pista, él continuaba preguntándole cosas a su compañero quien solo le contestaba con monosílabos.
—¿Sigues enojado conmigo? —Cuestionaba con molestia. —Es muy raro que estés tan callado.
—Sabes que odio que hagas esas cosas. —Contestaba pegado a su cuello. -Cuantas veces debemos discutir por eso, me cansa tener que estas con esas chicas coqueteando cuando puedo estar contigo y tú siempre tan alegre, veces creo que no tienes vergüenza ni respeto por mí.
El castaño bajo la cabeza mientras en su mente se repetía "Porque su belleza se esfuma cuando comienza hablar" sus pensamientos se esfumaron al sentir como una mano volteaba su rostro para después ser besado con hambre, poco a poco esa mano fue bajando para irse introduciendo bajo la camisa donde acaricio la tersa piel del joven quien al contacto se estremeció, en su cuerpo la temperatura fue subiendo mientras ambos peleaban por ver quien llevaba la batuta en la guerra de lenguas . Esos labios sobre los suyos lo llevaban a tocar el cielo, era adicto a esa sensación a esas manos, a esos besos, se giró para quedar frente a frente a su acosador.
—Prometo no volver a portarme mal. —Contestaba con un puchero. —¿Me crees?
—No, no creo en tus palabras. —Hablaba fríamente mordiendo sus labios. —Eres un mentiroso, ególatra y manipulador.
El castaño inflo los cachetes por los adjetivos que lo describían a la perfección por lo que decidió vengarse colocando su boca sobre una de las orejas de su compañero y comenzó acariciarla con los labios recorriéndola lentamente y mordisqueándola con pasión provocando que varios gemidos salieron de la boca del castaño, era música para sus oídos, escuchar como ese travieso muria lentamente por él continuo jugando hasta que una mano sobre su trasero lo detuvo.
—Entonces tendré que convencerte con mis acciones. —Susurraba al oído. —Para que vuelvas a creer en mí.
—Convénceme. —Contesto aguantando la respiración. —Vuélveme a hechizar con tu mirada, conviérteme en tu esclavo.
DaeHyun lo beso con pasión devorando cada centímetro de esa dulce boca para que después sus introducir una de sus manos en los pantalones de su compañero quien se colgó a su cuello para continuar mordisqueando su oreja, adoraban estar al borde de la locura cuando nadie podía verlos. JongUp bailaba alegremente mientras enviaba miradas coquetas a HimChan quien las contestaba aunque unas chicas los separaran ellos estaban en su propio mundo, su mirada se vio atrapada al descubrir entre la multitud a un peli plateado corrió a donde estaba para saludarlo.
—Zico que alegría verte. —Le comento abrazándolo. —¿Qué haces en Corea?
—Vine a visitarlos. —Contestaba. —Espero me acepten.
Un pelinegro se acercó al par de amigos con algo de molestia pero Moon le susurró algo al oído para calmarlo.
—Hola mi nombre es HimChan. —Extendía la mano con una sonrisa en el rostro. —Es un placer conocerte los chicos no han parado de hablar de ti.
—Gracias, igualmente. —Respondía algo apenado. —¿Dónde está Bang y Jae? Quiero saludarlos.
—Vamos te voy a llevar con ellos. —Respondía el castaño mientras lo jalaba del brazo.
Caminaron por el bar hasta llegar a un rincón donde no se veía nada, HimChan abrazaba a Moon de la espalda mientras le preguntaba algunas cosas al recién llegado.
—YJ mira quien está aquí. —Hablaba Moon en un rincón oscuro. —Es Zico ha venido a quedarse un tiempo.
De pronto de la oscuridad salió un sonriente YoungJae mientras trataba de arreglarse el cabello corrió abrazar al peliplateado, detrás de él también salió un molesto castaño ya que parecía que lo habían interrumpido en un buen momento ya que se estaba fajando la camisa saludo a Moon preguntándole quien era esa persona a lo que el pelinegro contestaba.
—Mira él es DaeHyunie. —Lo presentaba el castaño. —Es uno de los integrantes del equipo.
El mencionado solo movió la cabeza en señal de saludo y Zico contesto de la misma manera de cierta manera eran rivales ya que él también estaba interesado en esos bellos ojos, los cinco caminaron hacia la oficina de Bang al llegar tocaron la puerta, Himchan le susurro algo al oído de Moon quien comenzó a reírse pero eso solo fue una mecha para que el resto también soltara una carcajada ante la cara de asombro del invitado quien no entendía la broma ya que las dos parejas sabían que el líder le enojaba cuando estaba “Trabajando”.
—Estoy ocupado. —Se escuchaba una voz desde el interior. —No quiero que me molesten.
—Lo siento hyung. —Contesta aguantando la risa JY. —Pero Zico está aquí.
Se escuchó un poco de ruido desde el interior para que minutos después la puerta se abriera y un alegre líder saludara al recién llegado, los 5 visitantes fueron ingresando a la oficina pero la atención de Zico fue capturada por un joven que estaba sentado en la silla no podía ver su rostro ya que estaba dándole la espalada pero jugaba con sus piernas semigirandose.
—Me da mucha alegría verte. —Comentaba el líder. —Pero dime a ¿Qué haces tan lejos de tu hogar y los chicos de Block B?
—Pues viene a probar fortuna por estos lugares. —Contestaba. —Ellos se quedaron en Vietnam vine a preparar el campo para que en un futuro me acompañen.
—Me parece genial la idea. —Secundaba YoungJae. —Pero vamos a divertirnos esto merece una celebración.
El resto asintió por lo que decidieron bajar a la pista de baile pero antes de salir de la oficina Zico miro de reojo al chico que estaba en la silla ya que no se paró a seguirlos, quedándose solo en ese lugar, eso se le hizo muy raro pero parecía que nadie se daba de cuenta o que estaban acostumbrados a esa situación.
—¿No va bajar? —Comento el pelinegro al líder. —¿Se pelearon?
—Está haciendo uno de sus berrinches ya sabes que detesta que lo ponga en segundo término. —Contestaba. —Ya se le pasará.
Llegaron a la zona VIP del lugar donde había un grupo de personas esperándolos pero esta vez todos los integrantes se veían contentos ya que DaeHyun y Bang platicaban animadamente, las bebidas no pararon de llegar haciendo que todos estuvieran más contentos.
—Zico estas bellezas son las chicas del grupo Secret y Spica. —Comentaba HimChan. —Y estos guapos jóvenes son de MyName y BtoB.
El mencionado los saludo a todos y bailo con varias jóvenes esa era una verdadera fiesta a veces fijaba su mirada en Bang quien de repente se paraba y observaba en dirección a su oficina como si alguien lo estuviera cuidando desde ahí después se alejaba de la chica con la que bailaba para sentarse en la mesa y brindar con el resto. Zico se sentó en la mesa para platicar de varias cosas hasta que vio como el joven de piel blanca se acercaba a ellos en su rostro la molestia se veía reflejada en sin previo aviso se sentó entre el líder y una joven.
—Qué bueno que nos acompañas. —Decía a una pelirroja. —¿Ya estas mejor?
—Sí, gracias Noona. —Contesto tiernamente. —Pero estoy muy cansado y quiero ir a casa.
Todas las chicas se acercaron a saludarlo parecía que también era muy popular eso se debía a su linda mirada y enormes ojos que brillaban después de unos minutos se dignó a mirar al líder quien le pellizco la mejilla y una tonta sonrisa apareció en su rostro, el pequeño el susurro algo al oído.
—Bueno es tiempo de irnos. —Hablaba el líder a sus integrantes. —¿Te quedaras en nuestra casa verdad?
—Claro si me aceptan. —Contestaba Zico.
Los integrantes de B.A.P se despidieron junto con el nuevo integrante caminaron a la salida pero parecían celebridades ya que todos volteaban a verlos y se despedían con la mano antes de salir de lugar el celular de Bang sonó así que se fue a otro lugar mientras el resto caminaba al estacionamiento donde un orgulloso HimChan presumía su pequeño baby que era nada más ni nada menos que una Hammer color negra del último año.
—Es mi pequeño baby. —Hablaba orgullosamente. —Yo mismo arme el motor y le agregue ciertas curiosidades.
Los integrantes solo reían al ver como su Omma adoptiva se auto enviaba cumplidos, la pareja de castaños subieron en el asiento trasero parecían pulpos sin dejar de susurrarse cosas al oído mientras que Up y Kim subieron al asiento de en medio iban tomados de las manos, Zico iba subir al lugar del copiloto pero un peliazul le ganó.
—Ese es lugar de Zelo. —Hablaba un poco ebrio Moon. —Vente con nosotros.
El peliplateado se sintió algo tonto así que los acompaño después de varios minutos de esperar Bang subió al vehículo durante el trayecto continuaban con el ataque de preguntas al nuevo inquilino. La camioneta se estaciono en un edificio abandonado pero Zico no se dejó llevar por la apariencia ya se había sorprendido con el Antro así que sabía que esa solo era una fachada, entraron al lugar recorrieron varios pasillos hasta llegar a una puert, al entrar se pudo dar cuenta que el interior era muy contrastante con exterior del sitio, una enorme sala adornaba el primer piso, con una mega pantalla y varios videojuegos regados, la cocina era pequeña pero bastante limpia y elegante, había un pasillo al fondo donde unas escaleras se asomaban. Zelo quien seguía de mal humor así que solo subió por las escaleras sin decir nada mientras Bang solo movía la cabeza y se dirigía a la cocina.
—¿Quieres algo de cenar ? —Cuestionaba YoungJae. —¿Un emparedado?
Zico asintió con timidez, HimChan tomo asiento frente la televisión para ver las noticias mientras que Jong Up ayudaba a Jae a sacar las cosas para preparar la cena, DaeHyun solo estaba recargado en la pared observando todo, el peliplateado se sentó en uno de los bancos y miraba con atención lo que sus nuevos compañeros hacían. Bang preparaba un plato con dos emparedados colocando varios cherrytomatos a un lado, YoungJae llevaba varios emparedados preparados mientras los acomodaba en un platón también sirvió jugo y leche.
—Listo toma el que gustes. —Hablaba Jae. —Provecho
—¿Tu no vas a cenar? —Cuestionaba al ver el castaño se servía cereal.
—No la verdad no tenga hambre. —Hablaba mientras le echaba leche a su plato. —Solo quiero algo ligero.
DaeHyun se sentó en uno de los bancos y comenzó a devorar la comida, Jong llevo un par para compartir son su hyung quien miraba interesado la televisión, Bang tomo su plato junto con un enorme vaso de leche y se dirigió a las escaleras sin antes despedirse del resto, después de cenar uno de los castaños lavo los trastes, JongUp se había quedado dormido en uno de los sillones por lo que un pelinegro lo cargo en su espalda con ayuda de Zico,
—Gracias. —Agradecía el mayor. —YoungJae te mostrara tu habitación.
—Vamos te llevo. —Lo jalaba un alegre castaño. —Dae no vayas a dejar trastes sucios.
El mencionado solo respondía con un gruñido subieron por las escaleras al segundo piso donde había un pastillo que estaba algo oscuro solo había cuatro puertas, de pronto la del fondo se abrió y ahora un sonriente maknae salía en pijama con un plato y un vaso en las manos.
—Apúrate para que Daehyunie los lave. —Le indicaba el castaño.
Zelo solo bajo rápidamente las escaleras, Jae abrió otra puerta dejando ver una limpia habitación donde solo había una cama y un mueble parecía que hacía mucho que no la usaban.
—Es nuestra habitación para huéspedes pero como puedes ver casi nunca tenemos invitados. —Sonreía tímidamente. —Pásate.
Comenzó a sacar unas cobijas de uno de los roperos, el peliplateado se acercó por la espalda comenzando acariciar su cuello, la verdad ese chico le gustaba desde que lo conoció, aunque cuando estuvo en vietnam solo coquetearon un par de veces se había quedado con las ganas de probar algo más, poco a poco las manos de Zico fueron acariciando el abdomen del joven, Jae sonreía algo incómodo fue entonces que lo detuvo pero un gruñido los asusto provocando que voltearan a ver al intruso quien era el maknae que llevaba un cambio de ropa.
—Hyung te manda esto. —Decía extendiendo sus brazos con la ropa. —Pensó que estarías más cómodo. Mi nombre es Zelo no me presente anteriormente.
—Muchas gracias. —Decía algo apenado el mayor. —Gusto en conocerte.
—Bueno es hora de dormir, que descanses Zico. —Se escapaba el castaño. —Buenas noches baby Zelo.
YoungJae escapo adentrándose en una de las puertas el maknae también se dirigió a su habitación no sin antes desearle buenas noches al nuevo inquilino, Zico se recostó en su cama mirando el techo no había duda que Jae le gustaba pero Zelo despertaba algo en su interior, la puerta se abrió de golpe y una almohada fue lanzada en su cara miro al atacante quien era nada ni menos que DaeHyun quien llevaba una galleta en la boca.
—Para que descanses. —Decía más de fuerza que de voluntad propia.
Zico sonrió, la verdad no eran malas personas pero la duda creció en mente si solo había tres habitaciones quienes las compartían pego la oreja a la pared pero no se escuchaba nada miro por la ventana, se dio cuenta que los vidrios eran resistentes suspiro y se volvió acostar para quedarse profundamente dormido.