De verdad podía ir a buscarlo? La opción lo tentaba, soñaba con estar nuevamente al lado de Deidara pero que pasaba si iba y Deidara lo rechazaba? Podría seguir adelante el solo? Y si Deidara ya lo había olvidado? Le estaría haciendo un bien si lo perseguía ahora?... Había pasado una semana desde que hablara con su hermano y con Naruto. Ese chico le había resultado sumamente interesante, podía entender un poco de la atracción que había sentido Sasuke hacia el hermano menor de Deidara, no obstante se reservaba su opinión al respecto, aun tenia demasiado presente como había reaccionado su padre cuando se entero de su relación con Deidara y no quería que Sasuke sufriera lo mismo. Había decidido mantenerse al margen de la relación de Sasuke y Naruto. No los detendría pero tampoco los apoyaría. Los dejaría hacer lo que quisieran, al fin y al cabo los dos eran grandes y sabían las consecuencias que vendrían si Fugaku o quien fuera intentara separarlos. Creía poder confiar en Naruto, la seriedad con que le había dicho que protegería a su hermano lo había sorprendido en un principio. El crío aun era inmaduro y un poco tonto pero Itachi pensaba que cuando se trataba de defender sus principios, Naruto podría enfrentarse a quien sea y ganar sin mucho esfuerzo… En esa semana había meditado acerca de todo lo que habían hablado en el aeropuerto y había llegado a una conclusión, primero debía hacer algo con su padre. No iba a permitirle nunca más que lo utilizara de esa forma tan cruel. Siempre había seguido las ordenes de su padre, había ido a la escuela que su padre quiso, había practicado los deportes que su padre consideraba de “alta sociedad”, había estudiado y sacado siempre las mejores notas porque los Uchihas eran perfectos y no menos de eso. Incluso de grande había seguido siendo lo que su padre quería. Estudiar y trabajar lo que Fugaku mandaba. Nunca había valido su opinión. Tuvo que dejar de ver a sus amigos cuando se gradúo de la escuela porque ellos no pertenecían a la misma sociedad… Todo eso estaba por terminarse… tomo su celular y marco un numero, un numero que hacia mucho tiempo no marcaba… del otro lado de la línea lo atendió una voz, una voz que no escuchaba desde que Fugaku había decidido que su primo no debía pertener a la familia por su sangre de falso Uchiha…
-diga- se escucho de forma autoritaria del otro lado del teléfono
-hola Shisui- fue su saludo
-Itachi?- escucho que el otro decía sorprendido- esto si es una sorpresa
-lo se, siento molestarte
-no es ninguna, para que llamas?- fue directo al grano
-necesito pedirte un favor
-de que se trata?
-es una larga historia
-tengo tiempo- contesto Shisui curioso
-veámonos, puedes venir a mi casa?
-ahora? Estoy un poco ocupado pero puedo estar ahí mas tarde
-de acuerdo, te espero
-pero Itachi me dejas con curiosidad, hace tiempo que no hablamos y llamas para pedir un favor, al menos adelántame algo…. Por los viejos tiempos- agrego al notar la vacilación de Itachi
-bueno… yo… voy a renunciar a mi apellido…
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Aun seguía dándole vueltas a aquel muchacho que había conocido la semana pasada. Después de haberlo dejado ir, había buscado en el archivo de la policía el expediente de aquel que tenia su mismo apellido, Madara. Lo leyó varias veces como si nunca lo hubiera hecho… Uchiha Madara, 40 años. Acusado de varios delitos entre los que se encontraba el tráfico de armas y de drogas. Habían logrado enjuiciarlo hacia algunos años pero nunca pudieron demostrar su culpabilidad y no habían tenido más remedio que dejarlo ir, aunque su hoja había quedado manchada. Ahora y después de mucho tiempo volvía a mirar aquella hoja llena de fotografías y notaba el gran parecido que tenia con Itachi… acaso serian parientes? Era sabido que los Uchihas eran una de esas pocas familias adineradas que podrían con su fortuna, comprar si se pudiera, un país. Además ahora que recordaba también estaba el padre de Itachi, Fugaku Uchiha, el afamado ministro de seguridad y jefe de la familia Uchiha. Podía ser todo eso una coincidencia? No, de ninguna manera podía serlo. En sus años de investigador había aprendido que las coincidencias no existen, todo tiene una causa y una consecuencia, el azar pocas veces juega un rol, todo esta premeditado, todos somos victimas de nuestras decisiones… recordaba todo lo que le había enseñado su profesor de artes marciales Chiriku. Dejo el expediente a un lado y se dirigió a la oficina del comisario, tenia preguntas que hacerle, quizás pudiera desentrañar algo de toda aquella maraña en la que se había metido. De camino al despacho de su superior un compañero que le tomaba declaración a una muchacha, le hizo señas de que se acercara…
-que quieres Yamato?- pregunto molesto
-se trata de esta señorita, dice que su hermano menor desapareció hace algunas semanas y no puede contactarlo…
-y que tiene eso que ver conmigo?
-que tiene una sospecha que quizás te interese…. A que te recuerda el nombre de Akatsuki?
-que!?. Quien es Ud. Señorita?- pregunto volviéndose hacia ella
-mi nombre es Temari. Temari Sabaku- dijo ella un poco cohibida por la actitud del policía
-soy Azuma, Azuma Sarutobi. Dígame que ocurrió con su hermano
-esta desaparecido desde hace dos semanas, no esta en su casa y no puedo comunicarme a su celular. No nos vemos con mucha frecuencia, por eso no he venido antes pero estoy empezando a preocuparme. Ya son muchos días sin saber de el…
-entiendo… que puede decirme de Akatsuki?
-bueno… es que todo empezó cuando nuestro padre llamo a Gaara para pedirle dinero….
A medida que iba escuchando el relato de aquella muchacha, iba sacando varias conclusiones. La primera era que, podía conjeturar que Madara aun seguía con su negocio de traficante del que además de comercializar ilegalmente con armas y drogas sospechaba que estaba la trata de personas aunque nunca había reunido las pruebas suficientes para culparlo por ese delito. La segunda conclusión a la que podía llegar era que el padre de Gaara estaba en manos de Akatsuki si no era que ya había muerto. Y la tercera conclusión era que Gaara había desaparecido por estar a merced de esa mafia… a esta conclusión había llegado cuando Temari le dijo, de forma inconsciente, que su hermano menor había atropellado a una persona hacia varios meses, a la que después de buscar gracias a sus contactos del buffet de abogados había averiguado que se trataba de Itachi Uchiha….
-esta inculpando a su propio hermano del accidente del señor Uchiha?- pregunto el doble de sorprendido por la revelación de Temari
-no es que quiera meterlo preso, es solo que no creo conveniente ocultarle información a la policía, llegados a este punto, además de que si tuviera los medios adecuados para encontrarlo, ya lo hubiera hecho. Por otro lado nunca llegue a decirle a Gaara quien había sido porque eso lo descubrí hace unos días- respondió Temari
-en efecto señorita Sabaku, hizo muy bien en venir aquí a pedir ayuda. Si usted quisiera, podría incluso ayudar en la búsqueda de Gaara. Tengo información que podría resultarle útil, aunque no puedo decirle nada aquí dentro- dijo azuma por lo bajo mirando desconfiado hacia su alrededor- acompáñeme por favor- le pidió levantándose de la silla y dirigiéndose hacia la salida.
- a donde vamos? Pregunto Temari al ver que azuma se retiraba
- a donde podamos hablar con privacidad, como llego hasta la jefatura?
-vine en conche
-le importaría que habláramos ahí?
-puedo confiar en Ud., señor Sarutobi?- pregunto desconfiada al notar la actitud del policía
-no tiene otra salida mas que hacerlo, si quiere encontrar a su hermano…
-es ese de ahí- dijo señalando hacia un coche blanco, un tanto viejo pero que estaba en buen estado
- bien, creo tener una idea de quien puede tener a su hermano- empezó azuma una vez dentro del coche
-de verdad?- pregunto Temari emocionada por la revelación
-sabe, yo no creo en las casualidades, en esta profesión no existen. Los investigadores, debemos tener especial cuidado con las pistas que obtenemos. Todo, hasta el mas mínimo detalle puede tener alguna relación en las investigaciones… hace unos días tuve la oportunidad de conocer a Itachi Uchiha en persona…
-el esta bien? Nunca pude averiguar nada sobre su estado de salud
-esta bien o eso creo. Pero no quiero hablarle de el sino de algo mas importante. Usted como abogada seguramente alguna vez escucho hablar sobre el grupo mafioso Akatsuki, cierto?
-si, pero que tiene que ver todo esto con Gaara?- pregunto ansiosa
-a eso voy a llegar- contesto azuma y agarro su cajetilla de cigarrillos- le molesta si fumo aquí?
-no- contesto aprisa Temari ansiosa por saber lo que el policía tenia que decirle
-he tenido la ocasión de investigar en el pasado a esta organización- empezó Azuma a relatar al tiempo que encendía un cigarrillo y lo fumaba- el líder del grupo es un Uchiha. Madara Uchiha.
-Uchiha?- pregunto sorprendida
-en efecto- contesto seriamente
-acaso también el ministro de seguridad tiene algo que ver en esto?
-también es Uchiha, cierto? No lo se pero empezare a investigarlo a el también
-entonces Itachi Uchiha secuestro a mi hermano para vengarse?
-no lo creo. Más bien sospecho que Itachi no tiene idea de quien fue su agresor. Aunque también lo investigare desde luego
-sigo sin entender del todo, aunque no me hubiera esperado nunca una cosa así…
-mire esto- le dijo alcanzándole dos fotografías, en donde podía verse a Itachi en una y la otra a Madara- este es el expediente que saque del departamento policial- le alcanzo un informe de varias paginas en donde se detallaba el historial de Madara.- son parecidos, a que no?
Temari miro primero una fotografía y luego otra. No podía creerlo, a todas luces podía ver el parecido de ambos. De piel blanca y cabellos oscuros con profundos ojos negros. Aunque había diferencias. Madara tenía una mirada fría, calculadora, como si esperara el momento adecuado de atacar a su presa y liquidarlo. En cambio Itachi, presentaba una mirada de ojos vacíos, como si al momento de la foto no estuviera prestando atención al objetivo de la cámara o como si no estuviera interesado en tomarse esa foto. Madara tenía el pelo largo y suelto y erizado, dándole un aspecto salvaje. Itachi, que también lo llevaba largo, lo lucia atado en una cola de caballo baja y lacio, tan lacio que de tan solo verlo en la fotografía Temari podía imaginar su suavidad y por un momento le envidio que lo tuviera de esa forma… dejo las fotografías a un lado y tomo el expediente de Madara y comenzó a leerlo…
-que pensaría señorita sabaku si le dijera que Uchiha Madara secuestro a su hermano menor, en venganza por el accidente de Itachi Uchiha?
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Con un vaso de jugo de naranja a medio terminar en la mano, Shisui termino de escuchar el relato de su primo. A pesar del tiempo que hacia que no veía a su primo siempre le había tenido afecto. De pequeños y cuando aun vivían juntos se habían llevado casi como si fueran hermanos. Los padres de Shisui habían muerto en circunstancias dudosas cuando el era muy pequeño y sus tíos, los padres de Itachi y Sasuke lo habían llevado a vivir con ellos. Desde entonces y hasta la edad de 13 años había vivido bajo el mismo techo que Itachi. Pero cuando cumplió los 13 años de edad un pariente político fue a buscarlo a la mansión Uchiha para llevárselo a vivir con el. Tras saber que su pariente sospechaba que Fugaku había participado en la muerte de sus padres y llevarle a el mismo esas inquietantes dudas, el padre de Itachi lo obligo a abandonar la mansión después de amenazarlo con que si volvía lo lamentaría y hacerlo abandonar su herencia como Uchiha. Despojado de todo lo que había tenido hasta el momento se había ido a vivir con su pariente. No obstante había intentado averiguar sobre las circunstancias de la muerte de sus padres y obtuvo un dato que lo inquietó. Su padre, Kagami Uchiha, había sido asesinado por Fugaku para que este pudiera asumir como la cabeza del clan y obtener de esa forma mas poder. Nunca había tenido el valor suficiente para vengar a su padre y había preferido alejarse de esa familia y adoptar el apellido de su pariente político. Ahora, después de tanto tiempo veía a Itachi atravesar una situación parecida a la suya… Itachi le había dicho que quería abandonar su apellido y todo por un muchacho. Sabia que para Itachi no debía ser fácil, si le había pedido ayuda debía de estar completamente seguro de lo que hacia. Enfrentarse a Fugaku significaba ganarse su eterna enemistad. Fugaku no hacia distinciones entre relaciones. Poco le importaba que fuera de su familia, eso lo había demostrado hacia tiempo… Shisui cavilaba sobre la situación de Itachi. No creía que a su primo le convendria renunciar a todo, estaba su hermano a quien Itachi quería por encima de todo. Recordaba cuando de pequeños jugaban los tres juntos e Itachi siempre se dejaba ganar por Sasuke para que este se sintiera aun mas feliz. Como lo mimaba y protegía de cualquier peligro y cuando algún niño se acercaba a Sasuke para jugar y mostraba querer aprovecharse, Itachi de lejos lo fulminaba con la mirada… Shisui siempre se había divertido mucho con ellos, eran los únicos de su “familia” por los que haría lo que fuera con tal de verlos felices… dejo su jugo de naranja sobre la mesa de vidrio. Miro largamente como las ondas del liquido producidas por el movimiento golpeaban contra la pared del vaso y finalmente levanto la mirada y la clavo en Itachi…
-tienes algún plan para lo que intentas, Itachi?- pregunto un tanto intrigado Shisui
-emmm, bueno yo, tenia pensado algo pero necesito de tu ayuda- respondió Itachi
-no necesitas decirme que no sabes como pedirmelo. Lo cierto es que hace tiempo empecé a pensar en mi mismo como un cobarde- hablo Shisui levantándose del sillón y dándole la espalda a Itachi- siempre me reproche por no haber vengado la muerte de mis padres, pero lo cierto es que Fugaku me intimido mucho y nunca me atrevi a hacer nada en contra de el. Debo de ser una deshonra para el clan, mi padre ha de estar muy avergonzado de su hijo…
-Shisui..
-Itachi, aun estoy a tiempo de corregir mi error?- pregunto desconsolado
-nunca es tarde para eso, primo- respondió fervientemente Itachi
-primo…. Hacia tiempo que no escuchaba esa palabra…. De acuerdo, entonces hagámoslo. Voy a ayudarte…