-Tú cállate y entremos. -dijo cogiendo su cadera y con un poco de fuerza lo cargo. - ¿así la princesita estará feliz? -pregunto mientras Ryou pataleaba.
...........................................................Capitulo 11
-Bakura suéltame.... -dijo Ryou intentando salir.
-No, no, no. -decía el mayor ignorando el fastidio del menor. -Ahora iré por un par de entradas.
-Entonces bájame. -dijo pegándole en el pecho.
-Si te bajo, te tendría que llevar de la mano. -dijo el más alto pensándolo.
-Como quieras, pero quiero tocar el suelo. -le decía el menor mirándolo seriamente.
El mayor lo bajo y le apretó bruscamente la mano. Caminaron hacia la entrada del parque de diversiones y el mayor saco su billetera.
-Deme dos entradas por favor. -dijo Bakura entregándole el dinero
-Que se diviertan. - dijo el señor dándole los boletos.
Cuando entraron Bakura le estrujo más fuerte la mano sacando que el menor se quejara.
-¿Que te sucede? -pregunto Ryou - Me vas a romper la mano...
El mayor rio y le respondió. - Quería ver que tan sensible eras.
Ryou lo miro con rabia y le clavo las uñas en la mano, pero en vez de que soltara la apretó más fuerte.
-No quieras compararte. -dijo con una sonrisa cruel, pero por más cruel que fuera era verdadera.
-...Como digas, pero acaso no íbamos a buscar a Yami y Yugi. -dijo Ryou dejando escapar un estornudo.
-Así que estás enfermo...no deberías haber salido. -comento soltando su mano.
-Gracias por tu apoyo... -dijo con una mirada seria y saco un pañuelo de su bolsillo. - y tu poco interés a lo que dije.
-De nada. -contesto jalando su brazo- .Entremos a este juego, me da mucha gracia ver como la gente se asusta.
-Pero se ponen a gritar como bebes, a mi me producen una jaqueca. -dijo Ryou.
-No tienes opción, al menos que quieras jugar algo más divertido. -dijo pícaramente Bakura.
-Claro... -dijo el menor con notorio sarcasmo.
-Vamos tú me acompañas y yo me divierto. -dijo el mayor para entrar a "La casa de los sustos"
Mientras tanto, en la casa de Malik, se encontraba Marik golpeando la puerta.
-¿Alguien está ahí? -decía desesperado.
Como no recibió respuesta, después de varios minutos se sentó a esperar. Después de aburrirse un rato, saco su celular y llamo a Malik.
-¡Aló! Malik, ¿estás ahí? -pregunto Marik levantándose del suelo.
-Hola ¿quién es? -respondió Malik desde su teléfono.
-¿Quien más mi amor? -le contesto Marik.
-Aggg eres tú, hasta nunca. -fue lo último que contesto Malik para cerrar la conversación y guardar su teléfono y entro al parque de diversiones.
Pago su entrada y directamente se dirigió a donde estaban su preciado dulce, su algodón de azúcar.
Caminando se dedico a pensar sobre cómo gastar su tiempo, estaba solo con poco dinero, no había muchas opciones y sabia que Marik lo buscaba. Al llegar al puesto que tanto anhelaba no pudo evitar toparse con esas extravagantes cabelleras.
-"¿Yami y Yugi? ¡Por Ra! ¿Están en una cita? “- pensó muy sorprendido Malik. -"Si es así mejor no los interrumpo" -fue lo que concluyo para tomar la decisión de no saludarlos y pasarlos de largo.
Camino al lado de los tricolores y estos seguían charlando.
-Así que te gusta el arte, las grandes obras de ciudades antiguas como ¿las pirámides o el gran coliseo romano? -pregunto Yami haciéndose el impresionado.
-Sí, me ponen a pensar sobre que habrán hecho las personas de ese entonces. -dijo Yugi tomando un sorbo de su malteada, viendo como Malik paso al lado, lo miraba con persistencia.
-¿A quién miras Yugi? –dijo Yami de alguna manera celoso
Yugi rio levemente ante esto. -"Que lindo se ve celoso" Nada, me pareció que el chico de ahí era Malik.
Yami volteo para comprobar lo que decía. Era verdad, ese chico era muy parecido a Malik, no solo era parecido era igual. Al no comprender el completo parecido, le dijo a Yugi para ir a comprobar si era cierto. Se levantaron y lo siguieron al puesto de dulces.
-Un algodón de azúcar. -dijo al chico peli cenizo que al instante contesto- Gracias.
Le tocaron el hombro y este se erizo. Volteo y sonrió cuando vio a sus dos amigos.
-Hola chicos ¿qué tal? -dijo Malik cogiendo un pedazo de su dulce.
-Hola...Malik ¿viniste solo? -pregunto Yugi- ¿No tenias que enseñarle algebra a Joey?
-Bueno...pasaron varias cosas. –Dijo Malik recordando a Seto- . Joey tiene mejores cosas que hacer...
-¡¿Estuviste con Joey?! -exclamo Yami con desesperación - Pero si hoy iba a tener su reconciliación con Seto
Malik rio y pensó.- "Así que se estarán divirtiendo" Bueno, para eso me fui.
-Ahhh ya me preocupaba. -comento Yami recordando a su amigo Marik- . "Le prometí ayudarlo y aquí está su amado chocolate jaja… debería avisarle, ya se" Me voy al baño espérenme aquí chicos.
-Ok. -contestaron los chicos al unisonó.
Se sentaron en una mesa cercana mientras que Yami se dirigía al baño. Los dos amigos empezaron a murmurar.
-Malik ¡Fue a mi casa para invitarme a salir! -decía emocionado Yugi (n/a: que bien murmura Yugi XD) - . Es tan lindo y sexy.
-Hay Yugi eres todo un exagerado. -dijo el peli cenizo remojándose los labios para verificar que no tuviera dulce. - Pero me alegra que estés feliz ¿Y tu abuelo?
-No era nada, me dio un susto al inicio, pero llegue y estaba barriendo. -dijo Yugi entre risas – A veces mi madre exagera.
-Hay...no hubiéramos dejado a Ryou solo si tan solo hubiéramos sabido esto antes. -dijo Malik suspirando.
-Pero Ryou está saliendo con Bakura. -dijo Yugi. - Y se estaban peleando horrible y Yami me dijo que los dejáramos, pobre debe estar sufriendo.
-Eres un.... para que te digo, yo me voy a buscar a Ryou, cuando lo botaron me conto de un sueño que lo perturbo todo el día. -dijo con las mejillas sutilmente rojas- Este es un depravado.
-No te vayas ¿No entiendo? ¿Ryou perturbado o depravado? ¿Cómo que depravado? -se preguntaba Yugi muy confundido.
-Es un secreto, aparte sobro en tu cita. -dijo Malik saliendo de ahí.
Mientras tanto, Yami hablaba por teléfono en el baño.
-Marik ¿Estás ahí? -decía Yami a través de su celular.
-Si, Yami, ¿qué sucede? dilo rápido no estoy muy animado. -dijo Mairk con notorio fastidio.
-Me amaras, así que cállate. Ya estamos en el parque de diversiones y nos encontramos con tu adorado Malik. Él está hablando con Yugi y mira que por lo que veo estará aquí un rato más. -dijo Yami y para terminar. -Espero vernos amigo.
-Espero no verte a ti. -dijo Marik cambiando completamente su estado de ánimo- . Necesito hablar con mi amor. -termino colgando.
Yami salió del baño y fue donde Yugi, al cual encontró solo.
-Yugi, ¿Malik ya se fue? -pregunto el mayor muy extrañado- "Esto debe ser una broma, Marik, me matara"
-Sí, se fue a buscar a Ryou. -dijo Yugi.
-Ah ok, sigamos conversando. -contesto el de ojos rubí acercándose al menor. - ¿No te parece que está haciendo un poco de frio?
-Sí, es verdad. -dijo Yugi tiritando levemente.
-Vamos toma mi casaca. -dijo el mayor cortésmente.
Mientras tanto los albinos estaban iniciando el recorrido en la casa de los sustos.
-Esto apesta. -dijo Ryou cuando empezaron los gritos de las personas de adelante y se tapo los oídos.
-Vamos es divertido, un par de gritos y el aura tenebrosa que le dan...de alguna manera es acogedora. -decía Bakura soltándole la mano y poniéndola en su espalda.
Siguieron caminando una que otra sorpresa por parte de Ryou que fueron bien ocultas. Como Bakura se estaba aburriendo de que este no se asustara lo miro y se le formo una curva sonrisa. Se le ocurrió una gran idea, miro su mano la cual estaba fría, miro que Ryou estaba desatento viendo alrededor para no caer asustado y luego vio su trasero.
-Está bien firme. -dijo Bakura apretando su nalga - .Cuéntame qué tipo de ejercicios haces.
Ryou estaba completamente sonrojado, y al fin dio ese grito que tanto esperaba oír. Bakura le quito la mano de su nalga y Ryou empezó a recordar su sueño. Tanta perversión en un solo momento que no podía articular las palabras.
-Err-eres un deg-degenerado... a-aléjate. -decía nervioso y mas sonrojado aun. -So-solo fue un su-sueño, un ex-extraño sueño.
-¿De qué hablas? -dijo algo asustado. - ¿Que sueño?
-En el que teníamos sexo. -contesto sin discreción haciendo que el otro quedara confundido y sorprendido.
-"Acaba de decirme que soñó que tuvimos sexo" -dijo dejando de lado la acción pervertida que había hecho. – “Este sí que es un tremendo pervertido”