El rubio sale y la noche se estaba acabando. A la mañana siguiente la pregunta será ¿Qué paso ayer?
Capitulo.................................7
La pereza era dueña de todos los que habían asistido a esa alocada fiesta.
-Oh si hermoso día libre.-dijo alegremente un rubio.-aunque esto apeste a sudor- .agregaba tapándose la nariz.
-Veo que si te quedaste.-musito Seto y luego bostezo.
-Tú casa es un desastre.-dijo Marik apareciendo sorpresivamente.-parece que la fiesta fue un éxito.
-¡Já! -rio Seto -. Obviamente
-Ya, estamos haciendo mucha bulla, aun es muy temprano, despertaremos a alguien.-dijo Joey.
-Gente que se debería haber ido.-termino de decir Seto.
-No importa, tengo demasiada flojera como para hacer algo, por cierto, gracias.-dijo Marik mientras estiraba sus brazos hacia arriba
-En fin, buscare a Mokuba.-dijo Seto sonando algo preocupado-.Marik ve a descansar en el sofá, o en la sala.
Los tres chicos se separaron e hicieron sus cometidos. En tanto en una de las habitaciones de invitados de Kaiba, en el segundo piso, un albino de despertaba después de su descanso en la bañera. Una agotada noche tuvo este, intentaba levantarse, pero repentinamente las imágenes del ayer pasaban por su mente.
*******************************************Flash Back********************************************
Cuerpo, sudor y un gemido agudo fue lo último que se escucho, Bakura se dirigió al baño. Abrió la perilla del lavadero y se remojo la cara, el agua helada chocaba con su aun caliente cuerpo.
-"En verdad me acosté con él…pero se siente distinto…"-pensaba viendo su rostro al espejo, sus grandes y rojizos ojos tenían una mirada de sorpresa-."No puedo dormir en esa cama... si se despierta antes que yo...oh mira la tina se ve cómoda, mejor descanso un rato y luego me voy"
*******************************************Fin del Flash Back************************************
El albino se levanto definitivamente con pesadez y rapidez decidió huir del lugar, tal como un ladrón, sin dejar rastro alguno.
-Mejor le pido un consejo a Marik, él sabrá que hacer.-susurro caminando a través de los amplios pasillos los cuales tenían marcas de zapatos, manchas de vino y demás signos de suciedad.
Caminaba con sigilo hasta haber alcanzado una distancia considerable con su anterior habitación. La duda carcomía sus entrañas, porque sentía ese sentimiento tan desesperante, quería que alguien le diera una explicación de esa extraña sensación. Se agacho y llamaba a su egipcio amigo mientras gateaba y observaba las aberturas de abajo de las puertas.
-Wuju Marik... sé que andas por ahí. -decía el albino para que alguien sorpresivamente le pateara el trasero agregando un tono completamente diferente se levanto y sin mirar a la persona dijo.- ¿Qué te crees?
- Que mala actitud, yo venía a decirte que estaba aquí.-dijo Marik riendo por la mala actitud de su amigo.
Las miradas acusadoras que se mandaban entre amigos volvían cómica la situación. Luego de un instante de silencio las miradas se convirtieron carcajadas.
-Ya dime para que me llamabas.-pregunto Marik entre risas palmeando la espalda de su amigo
-Ah... cierto.-contesto Bakura ideando una manera de entrar en tal conversación.- Veras...
-Vamos se nota que es algo importante, se directo por favor.-dijo observando cada gesto de su amigo, aburrido de no recibir una respuesta, empezó a chasquear los dedos y paro el tiempo.
El peli cenizo rodeaba su amigo para intentar descifrar la razón por la cual Bakura se encontraba tan nervioso.
-Parece que ha dormido poco, tiene unas ojeras muy grandes .Además, lleva algo en las manos...- decía Marik inspeccionando cada aspecto del albino-. Confió en él, me lo dirá más rápido, de algún modo lo descubriré
El ritmo y los chasquidos venían, nuevamente saliendo del trance
-Marik….-dijo Bakura con énfasis- ¿Para qué utilizaste tu poder?
-No me cambies de tema.-reafirmo el de ojos color lavanda-. Ahora me quieres explicar ¿Por qué estabas tan nervioso?
-Bueno…Veras….-empezó a tartamudear el albino.
-¡Al grano! –Dijo el peli cenizo algo desesperado.- Viniste por mi ayuda no es así.
-Sí, bueno empecemos.-dijo Bakura tomando aire profundamente-. Ayer…
-Todo lo que digas será utilizado en tu contra…-susurro el de pelos puntiagudos.
-Cállate, ayer estaba bajando las escaleras y me encontré con Ryou siendo acosado por Duke, creo que si era Duke. Luego de que se lo quisiera llevar a una habitación, me entro rabia, porque nadie puede tocar a mis súbditos, son solo míos. -decía suspirando ampliamente-. De ahí el me siguió a la habitación donde me encontraba anteriormente y el estaba borracho, yo un poco tomado…y en eso se me abalanza y tú ya sabes cómo termina esta historia.
-Huy, así que tuviste una noche más agitada que yo.-le guiñaba el ojo y le sonreía como un completo pervertido- . Cuéntame ¿Qué tal estuvo?
-Fue exquisito…-Bakura se mordía el labio-… Ese no es el asunto.
-No te entiendo amigo. -dijo Marik muy intrigado-. Siempre te acuestas con muchas chicas y las dejas como si nada.
-Pero…-dijo al punto de querer confesar algo.
-Ni que estuvieras enamorado-pregunto el peli cenizo-. No, eso es imposible…o sí?
-Eso es imposible…-dijo Bakura sin pensar mucho sus palabras.
-Amigo no pensé que tú siendo tan macho y sensual, además, de atrevido lo hayas hecho con un borracho. -reía y corría en otra dirección.- Creo que te olvidaste que Duke es un chismoso, esto todo el colegio lo sabrá.
Una mueca de disgusto junto a un tic en el ojo aparecieron en el albino al recordar las palabras que le había dicho al tal Duke.
-Le dije…. “No lo niegues amor, recuerda como gemías ayer” Oh por Ra, este no es mi día. –dijo corriendo para pedir un verdadero consejo a otro de sus amigos dejando extrañado a Marik.
Bakura corría bajo las escaleras lo más rápido que pudo, ahora buscaba a su tricolor amigo seguro él sabrá que hacer.
-Yamiiiiiiiiiiiiiiiiiiii ven aquí o le diré al mundo que te tiñes las el pelo de amarrillo. –decía pasando las habitaciones generales, gracias a que era probable que se encontrara ahí.
Otra vez el albino empezó a gatear para verificar que su amigo no estuviera ahí. Una puerta se abrió y se cerró bruscamente.
-Kuraaaaaaaa, deja de decir eso sobre mi ME IRRITA.-dijo furioso el tricolor tanto así que sus cabellos estaban más puntiagudos de lo normal-. Yo que pensaba en pedirte un consejo, sabes que ya me moleste. Hablamos luego tengo que cuidar a Yugi peluca de anciana.-dijo enfatizando las últimas 3 palabras.
Yami estaba a punto de entrar a la habitación anterior, pero no iba a ser tan sencillo después de aquellas palabras, porque su amigo en realidad no estaba de buenas.
-¿Con que peluca de anciana? Así estamos camaleón....ya vas a ver....-dijo tapando la boca de su amigo y cogiendo bruscamente la oreja de s amigo clavando sus uñas en ellas.-Vas a ver con quien te metiste.....-dijo entre risas.
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En ese instante, Ryou estiraba sus brazos ampliamente como si hubiera dormido la mejor siesta de su vida. Intento levantarse pero un dolor agudizado recorría su cuerpo.
-¿Pero qué rayos sucede? -se preguntaba Ryou al sentir una pesadez sobre su cuerpo, levanto la sabana que llevaba puesta y se encuentra con la sorpresa de que no llevaba nada puesto.- Y ahora... que fue exactamente lo que paso ayer. -tratando de recordar lo sucedido
En fallidos intentos por levantarse se rindió terminaba doliéndole mas. Juntando eso con su flojera, posiblemente se levantaría en una hora.
-"Y ahora que hago...." -pensaba el albino intentando agudizar sus sentidos para ver si encontraba una semejante voz.-"Vamos oídos ayúdenme de una vez por todas...."-sus oídos se encontraban tapados además de sentir ardor, se llevo las manos a las orejas.-"Espera....tengo mordiscos aparte están calientes, a eso le incluyo que estoy desnudo..Genial, creo que ya entiendo”
Un silencio intenso se hizo presente en la garganta del menor. Este tragaba saliva pero sentía aun mas áspera su garganta.
Lentamente articulando las palabras dijo.-Esto siig significa...que me acosté...Con BAKURA...no eso es imposible.-se replicaba Ryou cogiendo todas sus fuerzas para sentarse y poder observar desde un mejor ángulo la habitación. Lo primero que vio es su ropa tirada en el suelo, luego un vomito al costado de la cama y por ultimo una puerta abierta.
Se levanto con lentitud y como anciano fue a recoger su ropa. Se vistió y entro al baño se miro al espejo y vio un celular, decidió cogerlo sin ningún preámbulo al darse cuenta de que era suyo. Lo abrió y desbloqueo encontrándose con la sorpresa de 15 llamadas perdidas
-Estoy muerto.-dijo el albino para ver que 14 de ellas eran de su padre y con aura negativa.- Supongo que...este no es mi día dijo empezando a ver los mensajes.
-Hijo a qué hora vienes….cuídate
-Hijo dime si te vas a quedar a dormir a casa de un amigo
-Jovencito ya deberías haberme respondido, cuanto antes respóndeme
-Listo no me quieres responder, castigado, ya hablaremos cuando vuelvas.
-Sigues sin responder vas a ver… Mínimo no saldrás todo el mes
-Wuju castigado.-dijo con evidente sarcasmo.-
-Ryou eres tú.-pregunto una voz conocida.
-“No me digas que…..”- fue lo que pensó antes de cerrar bruscamente la puerta del baño
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Mientras tanto en la puerta principal se hallaba un pelicenizo con una mirada irritada.
-Joey Joey Joey te dije que vinieras antes.-dijo bufando sin darse cuenta de que había un espectador en uno de los 4 balcones de la habitación (n/a: recuerden que es la sala)
En eso un rubio corría frenéticamente a la llegada de su amigo, con molestia el egipcio se encamina a la dirección opuesta.
-¡Por qué te demoraste tanto! Te dije que nos iríamos máximo a las 3 son las 7 entiendes.-dijo con los ojos cerrados recordando más razones.
Con una imposibilidad de freno Joey cae encima de su amigo y sin precauciones cae sobre la mitad de sus labios, escena que fue claramente vista por el expectante.
-Puaaaagg no solo faltas la hora sino también me besas, tu sí que eres un caso perdido.-dijo Malik limpiándose la boca
-...olvidemos esto tenemos que irnos.-dijo el rubio moviendo su cabeza de lado a lado como un escalofrió.
Inevitablemente el espectador se harto, habían acabado con su paciencia.
-Así que no querías darme mi regalo porque salías con este.-dijo furioso Marik emanando ira a través de sus ojos.
-E..Esto, Tú, no es lo qué pare..Parece.-fueron las inútiles palabras de Malik.