Me removí un poco, sentía los párpados muy pesados, creo que mi “coyotito” estuvo bueno, no sé por qué, pero me siento muy relajado, muy tranquilo, a veces pienso que la vida se quiere congraciar conmigo y me trata bien, digo, no es justo que me haga sufrir todo el tiempo, soy un ser humano y merezco ser tratado con delicadeza…
-Amor…- esa voz, no he abierto los ojos- amor…- un nuevo susurro, ¿qué querrán? Estoy durmiendo…- amor…- ¡ya! Lo lograron, abro poco a poco los ojos, tengo una vista borrosa, no logro distinguir bien de quién se trata…
-Mmm… ¿Papá?- sonrío plácidamente, es mi papá…
-No, no soy tu papá soy tu novio- ¿mi qué? Abro bien mis ojitos y veo a un George completamente en pelotas frente a mí…
-¡Ahhhhhhhhhhhh!- grito asustado… ¡Un chico encuerado! Por el movimiento brusco ruedo por la cama y caigo de nalgas al piso… ¡Oh, oh! Siento como mi cuerpecito se me parte en dos, comienzo a arrugar la boca haciendo puchero y conteniendo las ganas de llorar…- Me duele…- mi boca empieza a temblar y una lagrimita se asoma
-No llores rubiecito, ven mi amor- se levanta de inmediato y me carga con cuidado poniéndome en la cama de nuevo- Ya ¿viste? No pasa nada rubiecito lindo- me sonríe, vaya, creo que ya es natural en él, sonríe como antes
-Es que… es que me duele mi traserito- sigo haciendo puchero
-Bueno, es que… no sé, ¿lo siento?- se rasca la nuca
-Eres muy salvaje George- le reclamo
-Pues si es tu primera vez obvio te va a doler sea despacito o fuerte, recuerda que un pene por el…-
-¡No lo digas! Eso es vergonzoso, ¿qué pensaría la sociedad?-
-Que te amo bobito- me recuesta en la cama y me besa
-Bueno, pensándolo bien, puedo vivir con eso- lo abrazo y nos volvemos a besar.
El torrencial aguacero cesó, ahora solo era una ligera llovizna, bajo con cuidado la escalera, tengo un dolor de culo que no se lo deseo a nadie, duele pero podré vivir con eso. George baja conmigo, desde ese día somos novios oficiales, entonces tiene la obligación de llevarme a casa.
-Espera, ve más despacio que a mí es al que le duele- le digo porque camina muy a prisa
-Lo siento es que no me acordé que te duele el culo-
-¡Oye! Deja de decir culo, se escucha vulgar, solo yo puedo decir que me duele el culo-
-De acuerdo- me sonríe y seguimos caminando a la puerta, y ¡Tarán! Alguien abre la puerta principal antes que nosotros: mi suegra.
-George…- habla la señora saludando a su hijo- Oh disculpa, tenemos visitas… un momento- me ve y piensa un poco- pero si eres tu Mikel- la señora me recuerda, desde que la conozco siempre es amable conmigo, es bonita, muy bonita pero no más que mi mami..
-Hola señora-
-Vaya, es una sorpresa verte por acá de nuevo-
-Pues ya ve las sorpresas de la vida- sonrío y ella me regresa el gesto
-Bueno má, lo llevo a su casa luego vengo-
-De acuerdo, pero está lloviznando ¿no prefieren que los lleve en el coche?- ¡Si! No tendré que sufrir caminando
-No má, nos vamos por nuestra cuenta- ¡No George! Como a ti no te duele
-No, mejor si George, la llovizna puede volverse a aguacero y… y… me puedo enfermar de gripa y… y… me puedo morir de pulmonía- para esto yo ya abrazaba el brazo de mi suegra
-Si hijo, mejor los llevo- mi novio puso los ojos en blanco, pero mi culo merece respeto si camino mucho me puede ir mal, ¿Qué tal si termino todo chueco por una caminata? No, no, mejor en coche.
Tardamos unos minutos en llegar, la señora, Kate se llama, me platicaba de cómo George se convirtió en un bravucón, y pues, bueno, eso lo sé de sobra, yo era su víctima preferida, y creo que lo seguiré siendo. Al ver mi casa, se detuvo…
-Bien Mikel, que te vaya bien y visítanos cuando quieras- me sonrió, no sabe que si vuelvo a esa casa mis asentaderas pagarán las consecuencias
-Claro- me disponía a salir cuando me dijo…
-Y me saludas a mis consuegros- mi cara se puso blanca… ¿consuegros?
-¿C… cómo?- pregunté nervioso
-Ay, por favor, no soy estúpida, ya sé que son novios y… mejor digo solo eso-
-¡Mamá!- George reclamó
-Ya, no discutamos que hace frio y a Mikel le puede hacer daño, ve con cuidado hijo-
-Si señora, gracias- mi vergüenza ahora me hizo cambiar a color rojo. Me despedí de Acoste agitando la mano y me retiré.
Abrí la puerta de mi casa, mis papás estaban sentados en el sofá viendo T.V.
-Ya vine- avisé
-Si hijo- contestó papá y ambos voltearon a verme, iba a seguir caminando pero si me veían se darían cuenta de que mi caminar era “extraño”
-Iré a mi cuarto, tengo sueño-
-Si mi amor- respondió mamá
-Por cierto, ¿Dónde andabas? Estuviste fuera casi todo el día- papá, mi carcelero preguntó
-Pues, salí con Nick a ver unas películas- entrecerró los ojos, creo que no me toma enserio, mis ojos bailan y mi sudor comienza
-Bien, pero cuando vayas a tardar avísanos- me dio una última scaneada y volvió a ver la televisión, para mi fortuna lo hizo, no me quiero ni imaginar lo que haría si me ve caminar así de raro, creo que tendría serios problemas.
Caminé hacia mi alcoba, me detuve unos instantes…
-No me ha molestado…- pero que tonto, ya no lo hará, mi viejita ya no está. Me encuentro frente a la que era su alcoba, la extraño mucho, es ahora cuando me estaría metiendo en serios problemas. Sonrío amargamente y entro a mi cuarto, todo lo hago con cuidado, porque el trasero me arde un montón, a parte que el dolor no es de mentira… ¡Me duele mucho! Caí lentamente en mi cama, saqué el guardapelo de mi abuela, lo abrí y supe una vez más que tomé la decisión adecuada. Me removí recordando esa mañana tan inesperada, tan dulce, tan dolorosa pero tan satisfactoria, creo que mi vida comenzará a cambiar.
Con el paso de los días me comunicaba con George por Facebook, papá me tenía muy chacadito, entonces no quiero que a mi novio… ¡Siiiiiii mi novio! Le pase algo malo.
Ya estábamos casi por entrar al colegio, sin embargo aún estábamos de vacaciones, esa tarde fuimos al parque cerca de mi colonia, mucho se van a la playa o a otra ciudad, yo no, mi papá trabaja y por lo mismo no podemos, sin embargo aprovecho mis ratos de escape gracias a Nick y su novia Tina (sí, esa plástica enamoró y ligó a mi empírico amigo) para salir con George, estamos los cuatro sentados tomando un granizado, ya son las cinco de la tarde entonces ese lugar está muy apacible y agradable…
-Vaya, es empíricamente imposible que no te dieras cuenta que este bruto te cortejaba- comentó Nick mientras George reía y me tomaba la mano
-¿Quién diría que estabas enamorado del feo?- dijo ella
-No es feo, es el ser humano más bello del mundo- me besó la mejilla
-¡George! Estamos en un lugar público, nos van a ver y le contarán a papá… entonces él me encerrará, te matará y no viviremos nuestro tórrido romance de juventud… ¡Noooooooooooooooooooo!-
-¡Cálmate!-gritó divertido mi amigo- eres empíricamente preocupón- bueno, a veces creo que exagero, pero quienes conocen a mi padre sabrán que no miento.
-Y ¿cómo se hicieron novios?- pregunté a ese par de heterosexuales
-Bueno, pues fácil, me gustó y o sea… ¡pick! Decidí cazarlo- dijo Tina
-En resumidas cuentas ella les contó, me molestaba, criticaba y peleaba conmigo todo el tiempo, comencé a tomarle cariño a sus groserías y un día mientras me golpeaba le pregunté si sería mi novia y aceptó-
-Pero te golpeaba con amor bebé… o sea, yo siempre te cuidaré cosita- se besaron en los labios, me gusta esta pareja, creo que las secuaces de la bruja mayor no están corroídas con su maldad.
Mi novio y yo nos reímos, estos dos son una pareja muy dispareja. Disfrutábamos de nuestros granizados cuando pasó eso que nunca hubiera querido que pasara… Jake Thomas se puso frente a nosotros cuatro. Tragué duro, mi novio de inmediato se puso de pie, parecía resorte o algo similar, pues no pasaron ni dos segundos cuando él se ponía delante de mí.
-¿Qué quieres Thomas?- con una sonrisa algo descarada le respondió
-Hablar con él- me señaló, yo me quise hacer bolita, hacerse bolita es un consejo muy bueno, cuando te quieran golpear hazte bolita y duele menos.
-No tienes nada que hablar con él muñeco de plástico- otro alfil en el frente: Nicholas
-¡Hola Jake!- saludó Tina, es cierto que no es tan mala, pero si muy estúpida, creo que no se ha dado cuenta del asesinato que está a punto de cometerse
-Apártense que debo hablar con ese rubio- dio un paso rumbo a mí y de un empujón George lo detuvo
-Acércate más y te sacaré toda tu bella y plástica sangre del cuerpo-
-Solo quiero hablar con él- me miró- tenemos algo pendiente-
-No tien…- George iba a decir algo pera interrumpí
-¡Déjalo! Tiene razón, debemos hablar- me puse de pie y fui donde él- chicos, siéntense que yo vuelvo.
Caminamos a unos metros lejos de ellos, era momento de aclarar con él también la situación.
-Muy bien Jake, ¿qué deseas?-
-Me quedé esperando tu respuesta- lo soltó sin más- te ofrecí algo, que estoy seguro siempre quisiste-
-En parte tienes razón- contesté y su sonrisa descarada reapareció
-¿Ves? Tu quieres, entonces ¿por qué no respondiste?-
-Dije en parte, y te lo explico… antes yo deseaba tanto estar contigo, salir contigo, que me prestaras atención, que siquiera me miraras, lo quise mucho, con todas mis fuerzas, en quise estar contigo, sin embargo la situación cambió, la elegiste a ella, te fuiste tras ella y yo respeté tu decisión-
-Pero recapacité, ahora quiero estar contigo- me iba a tocar, instintivamente me hice para atrás, en primera porque no me gustaría que me rozara siquiera y en segunda porque bastaría un solo toque para que George le caiga a golpes.
-Hubo muchas personas en mi vida, hubo quien quiso rescatarme de mi mismo, quien me protegió, quien me amó… yo era un pobre adolescente feo y sin ilusiones, con ganas de ser amado por alguien tan lejano como tú. Pero al irte pese a quedar destrozado sirvió para mi redención, pude salvarme de mi mismo, puedo luchar y engañar a medio mundo, pero vencerme, ganarle la batalla a uno mismo es la lucha más cruenta que pueda haber, el cielo me mandó ángeles a rescatarme, mi abuelita que ya descansa en paz, mis papás, mi tía Beth, no la conoces tal vez pero ella fue quien más me ayudó a ser el Mikel que ves ahora mismo, y George, él que siempre ha estado aquí, a mi lado-
-¿Eres tonto o qué?- sonrió- ¿No recuerdas todas las veces que te molestó, agredió y tiró? ¿Solo porque estuvo en lo de tu abuela ya es un héroe?-
-Es cierto lo que dices, fue malo conmigo, pero dentro de su error está su incondicional compañía y amor-
-¿Amor? ¿Acaso crees que él te ama? Solo está contigo porque ya no eres feo-
-No, hace un tiempo una persona mencionó algo como esto… “Nadie te va a querer tanto, como aquella persona que te quiso cuando nadie más lo hizo” y esa persona está allá sentada aguardando impacientemente a que me dejes tranquilo-
-Eres más tonto de lo que pensé, te ofrecí todo y lo rechazas por eso- dijo despectivamente señalando a George, me estoy enojando, puede que sea un bruto, tonto y hasta enojón, pero nadie excepto yo tiene derecho a tratarlo mal, mi George es intocable para los demás.
-No te refieras a él de esa forma, él es un gran chico, mucho mejor que tu-
-¿Mejor que yo? No me digas, yo soy más guapo, más listo, soy perfecto, justo lo que necesitas…- subí mi ceja derecha, ¿quieres la verdad Jake Thomas? Pues la tendrás…
- Ese de ahí es George Acoste Lake, un chico excelente y mi novio… no quiero un hombre de cuento, no busco a alguien perfecto, quiero alguien natural, alguien que sepa amar, que me enamore hasta los huesos, y ese… afortunadamente no eres tu… ¡Idiota!- jum, pos este, vi su cara de ¡WTF! Pero no me importa, ahora más que nunca sé que tomé la decisión adecuada, me iba cuando me tomó del brazo…
-¿Me dijiste idiota?- se enojó, quien lo manda a meterse con mi George, iba a decirme algo insultante pero…
-Solo necesitaba un motivo- el puño de mi novio se estampó en la perfecta y plástica cara de Jake… el puñetazo hasta a mi me dolió- Vuélvelo a tocar y el resto de tu carita terminará igual-
-¡Ayyyyyyyyyyyy! O sea, eres un animal, bruto, salvaje, tonto… eh… eh… ¿qué más es insultante? ¡Ah si! Mensoburro- ¡No lo puedo creer! Esa cabellera, esa voz, esos insultos tan imbéciles…¡Daphne!- O sea, son unos muertos de hambre, vagabundos y sin clase, ¿qué te pasa George? No te han enseñado a no agredir a la gente, o sea bye con tu vida- se agachó para socorrer al plástico
-¿Qué haces aquí?- cuestionó Jake molesto
-O sea, no me lo agradezcas, vine más rápido que una nube- sí, es ella, nadie podría confundirla
-¿Cómo sabías que estaba aquí?-
-Pues Tina me lo dijo, me llamó hace unos minutos, y llegué a rescatarte, o sea, ya sabes no, rescatarte, tú, mío-
-¿Con que separados no?- le dije sarcásticamente
-Ay… pero que monito, mi nombre es Daphne y el tuyo es…- ¿será posible que no me reconozca esta torpe?
-Mikel Riviere- le dije
-Estás bromeando ¿verdad? Tu eres pariente no sé, de Brad Pitt, mientras que ese esperpento es más parecido al lonje moco-
-Soy Mikel Riviere- se quedó con la boca abierta…
-No lo puedo creer, ¿el feo más feo del universo eres tú?-
-Sí, soy yo… y tu novio andaba detrás de mí- venganza, dulce venganza
-¡¿Qué?!- volteo su cara hacia el tonto golpeado- Eso no es cierto ¿verdad? O sea, ¿cambiarme por el feo?-
-Ex feo- corregí
-Wherever, no me importa ¡Feo!- soltó a su novio y se puso frente a mí desafiante- No sé qué te hiciste, pero no importa, sigues siendo el feo, sin personalidad, si nautoestima y gay-
-Te equivocas cerebro de mosca, soy simpático ya no tan feo, tengo una personalidad, sí, soy gay y qué, pero sobre todo: tengo dignidad e inteligencia, dos cosas que seguramente no conoces ni por equivocación… mejor levanta tu gran premio y regresa por donde viniste-
-Já, sigues siendo un idiota, yo no recuerdo por donde vine, me trajo el chofer… ¿ahora quién es el tonto?- si con eso cree que me ganó, digamos que sí, me gano en lo imbécil
-Ok… Jake Thomas, no quiero verte en lo que me resta de vida, sé feliz, con tu otra mitad- el sarcasmo no es lo mío, pero en estos instantes es necesario.- Por cierto ¿cómo es que llegaste tan pronto Daphne?-
-O sea, eres tan tonto como un dinosaurio, obvio, porque estaba en la ciudad, vine por Jake-
-¿No ustedes ya habían terminado?- pregunté por curiosidad
-No, obviamente no, me dijo que venía de vacaciones y como toda mujer tengo intuición y sabía que una zorra se le resbalaba, o sea, Tú-
-¿Yo? Si supieras quién estaba detrás de quien no dirías eso- me ofendí, ese cretino aún no terminaba con Daphne, definitivamente no era lo que yo pensaba, Jake Thomas no es tan bueno como aparentaba.
- De acuerdo, es todo tuyo, yo ya tengo a la persona que amo- tomé de la mano a George y nos dimos la vuelta
-¿George es gay?-
-Sí, soy demasiado gay, así como tú tienes excremento de ratón en lugar de masa encefálica-
-¡Un momento! ¿Qué demonios es masa encefálica?- es una completa idiota, que bueno que vino por su novio, amante, free o lo que sea.
-¡Amiga! Se refiere a tu cráneo, es obvio- lo bueno es que Tina me empieza a caer bien, puedo soportar sus tonterías.
Comencé a caminar con George, no me interesaba continuar escuchando, Jake Thomas volvió por un rato de diversión, eso está más que claro, creyó que encontraría al tonto que babeaba por él, pensó que estaría esperando a que me diera un poco de atención, lo que ignoraba era que varias personas llegaron luego de él, mi tía, la maestra Cassey, hasta Deborah, no soy el mismo niño, no soy el tipo de dejo destrozado, ahora soy el novio de George Acoste, el amor de mi vida…
-¿Ya se van?- preguntó Nick
-Sí, aquí huele feo- contestó mi novio
-Tienes razón… ¡Tina! Vámonos- la chica plástica dejo a sus “amigos” y corrió donde su novio, ese es amor, siempre fue fiel seguidora de Daphne, pero ahora la dejaba por Nick, ojalá estos dos sean felices.
Los cuatro caminamos por aquel parque, éste comenzaba a oscurecerse, los rayos del sol dejaban poco a poco de iluminar. Tal vez haya quienes prefieran que Jake tenga un final más triste o que Daphne pague todas las que debe, ¿pero saben qué? Ellos están recibiendo su merecido, créanme que no hay mejor castigo que quedarse juntos, Jake tarde o temprano volverá a intentar engañarla, ella lo descubrirá y el infierno iniciará de nuevo, como dicen las abuelitas, todo en esta vida se paga y ese par es su propio castigo.
Yo solo sé que quiero ir de la mano con mi novio a dónde él me quiera llevar… George… Mi George…
VARIOS MESES Y CLASES DESPUÉS…
Estamos todos hechos un alboroto porque se nos hizo tarde, se suponía que debemos estar desde las diez de la mañana en la escuela y son las nueve, no nos hemos arreglado siquiera y la razón es sencilla: mi tía Beth. Esta mujer llegó anoche a casa, viene con su bebé, ya nació, es una nena y adivinen como se llama, pues nada más ni nada menos que Francine, mi prima se llama como mi abuelita, bueno casi no exactamente.
-¡Rosetta! ¿Dónde está mi corbata rayada?- papá está como loco, dejó su ropa para el último momento.
-Estaba sobre la cama, recuerdo que ahí la deje- mi mamá ente ponerse los pendientes, acomodarse el peinado tiene que ayudar a papá.
Mi tía en cambio está tan tranquila como si nada, se metió a mi cuarto para ayudarme…
-Mira, si con esta camisa te ves bien guapo mi amor- me acomodaba el cuello de la prenda que me trajo, pronto Francine comenzó a llorar, la levantó de la cama, mi cama y comenzó a mimarla- ¿Qué paso mi nena hermosa?- le hablaba como se le habla a los bebés, muy bobo- ¿Por qué llora la princesa de mamá? Mi bebé linda… eso sonría… qué bonita es mi nena- al parecer a mi tía le cayó muy bien la maternidad, ama con locura a su hija, y me alegra mucho; Víctor no vino con ella por su trabajo, más adelante vendrá a recogerla, por lo pronto ella vino a mi graduación. Luego de la muerte de mi abue, la tía cayó en cama debido a lo fuerte de la noticia, sin embargo logró recuperarse por su bebé, tuvo un embarazo difícil y luego de mucho batallar nació Francine, pesó 3.400 kg y midió 48 cm ¡una gigante!
El nombre se lo puso en honor a mi abuela, pues a ella no le tocó conocer a la nieta. Desde hace algún tiempo ya no siento a mi viejita, no sé por qué, antes bien que percibía algo de ella, pero tiene mucho que ya no, ya no la siento cerca, no sé la razón.
-Mikel- me sacó de mis pensamientos mi tía- ¿puedes cuidar un momento a Francine? Iré a prepararle su biberón-
-Claro- la puso en mis brazos y se fue, es tan chiquita, tiene unos ojitos muy lindos, me recuerdan a los de mi abuela, es una niña hermosa- Hola bebé, soy Mikel, tu primo mayor, espero que nos llevemos muy bien- se removió mientras me miraba, tomo uno de mis dedos con su manita, los bebés son tan lindos, pensar que esa manita algún día crecerá y tendrá que enfrentarse el mundo real y despiadado, me acerco y le beso la frente- pero yo también cuidaré de ti preciosa- lanza un ligero gemidito, esa niña es un encanto. La pongo en la cama y me volteo para alistarme, veo entonces en la silla una corbata… ¡la corbata de papá! Seguramente cuando mi mamá me trajo la ropa se vino la corbata, la pongo en la cama junto a Francine y llamo a papá.
-¡Hey aguarda! No la arrugues que es de tu enojón tío- se le intento quitar, demasiado tarde, Francine pese a tener unos cuantos meses tiene una gran energía, tan grande que pudo arrugar y manchar de saliva la prenda, ella solo ríe juguetona
-¿Para qué me hablaste Mikel?- oh, oh… no es bueno que me vea con su corbata maltrecha en la mano…-¡Mikel Josafat Rivere Segovia! ¿Qué le hiciste a mi corbata?-
-¿Yo? Yo no le hice nada- es verdad, yo no fui, es más la rescaté.
-Seguramente fue la bebé no- ¡exacto fue ella!
-Sí… fue Franc…- volteo y la niña está durmiendo plácidamente, ¿qué se supone que ocurre aquí?
-No puedo creerlo Mikel, culpar a una nena inocente que aparte está dormidita, que bajo has caído, dame eso, tendré que buscar otra- me arrebató la corbata, pero es cierto fue ella, cuando mi papá se va Francine abre los ojos y me sonríe… los bebés no pueden ser traviesos ¿o sí? Creo que estoy en problemas… a lo mejor y acaba de llegar una nueva inquisidora a mi vida…
La escuela en la entrada tiene un gran letrero finamente escrito y con un búho con birrete:
“Felicidades Graduados”
Generación 2010 – 2013.
Tengo nostalgia, todos iremos a la universidad, será nuestro último día en la preparatoria, de cuando mi historia comenzó a ser conocida por todos ustedes tenía 16 años, estoy a punto de cumplir los 18, ¿Cómo pasa el tiempo no?
Comencé a hacer más amigos, y ahora, no soy Mr. Popularidad, pero ya tengo personas que me parecían, es la primera vez que soy tan feliz en la escuela. Llego con mi familia, papá, mamá, y la tía Beth cargando a Francine. Pronto mis amigos me llaman para ir con ellos, dejo a mi familia en su lugar y voy con ellos.
-Mikel, tengo algo que darte…- me dice Nick, noto que busca algo en su bolsillo y saca una tarjeta con una flor amarilla dibujada
-¿Y esto?- la veo con intriga
-Hoy conocerás al admirador que te mandó tantas flores en estos tiempos- ¡No lo puedo creer! Lo conoceré…
-¿Por qué tan feliz amor?- es la voz de George… se va a enojar, si se entera que voy a conocer a esa persona se enojará, no es que me interese, solo quiero agradecer sus detalles, pero mi novio es muy celoso y puedo tener problemas.
-Pues nada, ya sabes por la graduación…- sonrío
-¿Y esa tarjeta?
-¿Tarjeta? ¿cuál?- la escondo
-Mmm… no sé, pero siento que me ocultas algo…-
-No, nada…- no quiero mentirle- escucha amor, tengo que ver a alguien, alguien que se ha portado bien conmigo, prometo no tardarme ¿si?…
-¿Vas lejos?-
-No, es aquí en la escuela, me quiere decir algo y pues no creo que tarde mucho… ¿sabes que te amo verdad?-
-Sí… yo también, si no fuera porque tu papá está por ahí te besaba- solo sonreí, ese es mi chico, confía en mí.
Caminé y noté que mi novio se iba con los demás. En qué lugar… qué lugar… ¿la bodega? Ese sitio es al que venimos George y yo a besuquearnos…
Camino por estos pasillos, veo tantos recuerdos, aquí lloré, aquí fui feliz, aquí me besó por primera vez George, esta escuela ha sido la mejor de todas las que he tenido, sin duda alguna la voy a extrañar, mi adorada preparatoria, aquí conocí lo que es el dolor, la traición, pero también el amor… ahh… el amor.
Sigo caminando y ya casi llegaba a la bodega cuando ocurrió algo curioso. Un chico de cuarto lleva en sus hombros a uno de segundo, es delgadito, de cabello peinado como de niño bueno de rayita al lado. Me quedo estático, es una escena muy peculiar, no se ve todos los días a un chico cargando a otro para…. ¡ah! Lo arrojó al depósito de la basura…
-¡Oye! ¿Qué crees que haces?- le grito al grandulón ese, pese a ser menor que yo es un grandote, tengo miedo por mi vida… claro, pero hay un colega en problemas
-¿Qué?- me encaró- A ti que te…- no terminó pues me estaba mirando y se quedó mudo, creo que lo asusté, me estoy poniendo fuerte. Sin decir más se fue apresurado, mi fuerza impacta a cualquiera. Me acerco y lo veo acostadito en la basura, un jovencito de lentes, muy debilucho por su complexión
-No creo que te guste estar en la basura ¿o sí?- le sonrío
-No- hace un puchero, conozco muy bien la sensación de estar allí
-Ven, te ayudo- le doy la mano, hace cuanto tiempo pasé por esto, verlo como observador externo es muy distinto, ahora quien sufre es otro y la verdad sea como sea no me agrada, ser violento con otros no tiene sentido, solo demuestra la miseria que hay en cada persona.
-Gracias- su cabeza tiene una cáscara de mango la cual quita dejando un rastro de esa fruta en su cabello
-Me recordaste a alguien- le digo mientras le ayudo a acomodarse el uniforme
-¿A quién?- dice tembloroso, está muy avergonzado por lo que pasó
-A mí, yo también pasé por esto, y se de sobra que no es bonito-
-Para nada, ese tonto me agarra de su puerquito, no se vale- se queja el pobre chico
-Recuerda que el valiente vive hasta que el cobarde quiere, y te puedo asegurar que es real, aquel “valiente” que me tiraba hoy no puede estar sin mí-
-¿Tú también eres?- agachó la vista y aclaró la garganta- bueno, eres de la onda ¿verdad?-
-Si por onda te refieres a…- lo hice que se acercara a mi y al oído le dije- gay, si, soy gay-
-Wow, no sé como alguien pudo hacerte esto a ti, se ve que eres un chavo a todo dar, no te ofendas pero estás guapo, no puedo creer que te molestaran como a mí-
-Ay amiguito, las cosas cambian mucho- le sonreí, él ya se notaba más animado- ¿Cómo te llamas?-
-Miguel, soy Miguel- esto sí que es raro
-Bueno, Miguel yo soy Mikel y recuerda lo que te dije, se valiente para liberar al cobarde-
-Muchas gracias, lo haré- el joven flaquito, de cabello bien peinado y de lentes se marchó, solo hay una diferencia entre él y el viejo Mikel… ¡el pelo! El mío era horrendo. Ojalá todo fuera tan fácil, ese chico que tímidamente regresa a la explanada tendrá un camino muy difícil por recorrer.
Regreso a mi cita, conoceré al admirador de las flores, en la entrada de la bodega veo una rosa amarilla tirada, debajo tiene un papel, lo levanto y éste dice: entra. Sonrío y obedezco, quién será, quién será…
-Hola…- me saluda… ¡Es George! ¡Mi George!
-E… eres tú… ¡Eres tú!- sin perder tiempo corro a sus brazos, él es mi admirador secreto, él es mi chico de la flor amarilla, mi amado George…
-¿Pues quién más sería si no yo?- me abraza, nos miramos unos segundos
-Te amo- lo beso, en esa bodega fue nuestro primer beso, y aquí mismo nos damos el último como estudiantes de esta escuela, aquí descubro a mi amado admirador, ese que siempre estuvo a mi lado. Permanecimos así por varios minutos, sus abrazos son mi droga, lo amo tanto, mi amado tormento.
Luego de un rato a solas él y yo volvimos juntos a la explanada, era nuestra graduación y teníamos que ir, a parte que mi familia estaba allí. Al ir llegando noté como mi papá nos miraba, al parecer estoy en problemas, ¿qué más evidente que algo hay si vuelvo con un chico, feliz de la vida y con una flor en la mano? más claro ni el agua.
Todos los egresados estamos en nuestros lugares, la maestra Cassey es quien conduce la ceremonia de clausura, es una gruñona, pero con un corazón grandote, eso sí, si te metes a su clase ten la seguridad que tendrás mucho ejercicio…
-Bueno, bueno… ya…- seguían los cuchicheos- ya guarden silencio…- volvió a decir por el micrófono y nadie le prestó atención- ¡Que se callen!- gritó y en automático hubo silencio- Muy bien, ahora escucharemos las palabras de despedida por parte del alumno Mikel Riviere- dijo en tono dulce y me mencionó, mis compañeros aplaudieron, me eligieron a mi para despedir a la generación, vaya que lo sufrí. Iba subiendo y la oí…
-¡Ese es mi gallina! Digo gallo- ¡No! ¡No lo puedo creer! La miro a lo lejos… ¡Romi! Mi amiga del alma está en mi graduación, agita su mano para que la vea, no es necesario, sabría reconocerla sin ningún problema, mis ojos se cristalizan, nunca creí ver la aquí, la adoro, simplemente la adoro, le respondo agitando mi mano, si no fuera por la distancia a la que estamos pensaría que está llorando. Respiro hondo, hoy he tenido muchas sorpresas, debo decir mi discurso, vamos Mikel, tu puedes…
-Ho… hola…- le pego la micrófono para cerciórame que en verdad sirva, por el ensordecedor ruido creo que si- Lo siento- sonrío como mono- Pues… mmm… es mi turno. Soy Mikel Rivere, tengo 17 años y próximo a cumplir 18. Tengo la fortuna de ser quien porte las palabras para despedir a tan genial generación. Hace tres años entramos en esta escuela provenientes de diferentes secundarias, para unos fue fácil la adaptación, para otros no tanto. Lo importante de esta etapa es ser feliz, realmente uno como adolescente pasa por muchas situaciones, unas bonitas, otras no tanto… ¿quién no pasó una vergüenza aquí? ¿Quién no se llevó una sorpresa? Somos afortunados de poder coincidir en este sitio. Hace mucho los conocí, hace poco nos comenzamos a llevar bien. Nunca he sido el gran cerebrito ni mucho menos el más guapo, de hecho soy conocido como el feo, bueno ahora ex feo- mis papás me miran atentamente, mi tía y Francine igual- a veces pensamos ¿por qué la vida nos lleva por tantas desgracias? Y hoy con mi corta y escueta sabiduría digo: es para que aprendamos a ser mejores cada día. Hace tiempo una persona muy importante que ya no está aquí me dijo “Recuerda que solo los valientes sobreviven para verse cubiertos de gloria”, debemos ser valientes y enfrentar la vida, nos pondrá retos, nos hará caer, nos hará llorar, pero también nos hará felices por completo- Mi tía lloraba mientras abrazaba a su hija, mamá igual, papá dibujaba una sonrisa de satisfacción en su cara, George, él me miraba con todo el amor del mundo- Hoy a punto de decir adiós, me alegra haberlos conocido a todos, a ustedes las plásticas, a los góticos, a los flatulentos como Willy- el muchacho sonrió como si recibiera el honor más grande –a los amigos- esto era para Romina y Nick- y al amor- mi novio y yo intercambiamos miradas de cómplices – Esto es un ciclo, por un lado iremos saliendo nosotros y por otro los nuevos nos reemplazarán, sé que habrá un nuevo flatulento, un nuevo gótico, nuevas plásticas, nuevos bravucones, sé que habrá muchos nuevos Mikel Riviere, pero todos y cada uno debe aprender a vivir para ser feliz, para conseguir la meta de tener lo que ansiamos, para encontrar lo que tanto buscamos: nuestro bienestar. Muchas gracias a todos ustedes por conocerme y por dejarse conocer, con algunos no me llevé muy bien, con otros nos orinamos de la risa, somos compañeros, hay un dicho que reza: “Arrieros somos y en el camino andamos” algún día nos volveremos a encontrar, espero que nos recordemos y saludemos con cariño… gracias maestros, gracias a todos los que hicieron posible el cumplimiento de esta meta, gracias papá, gracias mamá, gracias tía, gracias abuelita donde quiera que estés- en ese momento un viento me rozó la cara, respiré hondo, esa fue en verdad la última vez que sentí a mi abuela.- Por último, soy Mikel Riviere, puede que sea feo, pero re-simpático… ¡Arriba los feos!- los aplausos de escucharon, siendo realistas las mayoría de la humanidad es fea, y pues un pequeño homenaje para todos nosotros no hace daño… ¡arriba el feo!
Bajé del estrado con mis piernas temblando, pff… misión cumplida. Poco a poco dieron el último pase de lista, todos los egresados subimos al escenario para recibir nuestro diploma, por fin somos pre-universitarios, vamos por más, por mucho más. Los aplausos, las lágrimas, las despedidas llegaron a mis oídos; las plásticas lloraban desconsoladas, los bravucones se despedían con un golpe, así es la preparatoria, una preparación para la vida.
-Pero qué discurso más gay- mi Romi llegó, un abrazo luego de tanto tiempo se siente bien- y vaya, vaya, vaya… lo feo se fue por el drenaje, mírate, estás guapísimo- sonreí nerviosos, no subí ninguna imagen de mi nuevo look a Facebook, por lo cual Romi no me conocía así
-Ya, me avergüenzas mujer-
-Hola Romina- con voz ronca apareció mi chico
-Hola George, si vienes a molestar de una vez te digo que…- no temrinó de hablar cuando quedó atónita mientras veía como George me besaba en los labios-¡Oh por todas las cosas homosexuales del mundo! ¡Por fin se declaró!- gritó como loca, pero este chico si que es estúpido, me besa delante de todos…
-¡Mikel Josafat Riviere Segovia!- ¡es papá!
-Esto tiene una explicación lógica, lo prometo- empujo lejos a George- solo deja que invente una y te la digo-
-Nunca más saldrás de casa, irás a un monasterio, el más lejano del mundo- Nooooooooooooo… nooooooooooooo… ya no soy señorito, ¡pero no quiero irme!
-Ay ya basta Jerome- mi mamá entró en acción
-Sí cuñado, ya deja a mi sobrino en paz-
-Claro, como no es Francine por eso no te importa que un sucio gañán ponga sus puercas manos en mi hijo- ¡Ay padre! Si supieras que no solo han sido las manos… pero mejor eso solo lo sigo pensando
-Señor, yo… yo quiero a su hijo- ¡Oh por todos los cielos! Romi contempla la escena aterrada, Nick, quién apenas apareció también
-¿Oíste Rosetta? Este chico suena gracioso diciendo cosas por las cuales recibirá un golpiza- comentó divertido mi papá
-Es enserio, soy novio de Mikel- ya valimos gorro
-¡Rosetta! ¡Tráeme el rifle del coche, hoy mataré a alguien!-
-¡Consuegros!- nooooooooooooo, los papás de George
-¿Consuegros? ¿Qué le pasa mujer? – dijo papá indignado
-Ah… ya todos sabemos que este par anda junto desde hace rato- ahora intervino el padre de mi novio, ¡esto se va a poner feo!
-¡¿Qué?!- mi progenitor se morirá de un infarto…
-George… ¡vámonos!- tomé a mi novio de la muñeca y me lo llevé, papá entró en fase asesina, nos matará si no huimos…- ¡luego vuelvo má… Romi no te vayas y Nick, a ti te veo luego!- grité mientras corría, noté como varios detuvieron a papá, seguramente iba tras nosotros.
Corrimos, corrimos y corrimos como locos durante un buen rato, llegamos al centro comercial…
-Espera amor… tengo ganas de orinar-
-Ay no digas orinar… di mejor hacer del uno- lo regañé
-Bueno, como sea, ya vuelvo…- entró al baño público. Yo mientras sabiéndome a salvo me senté en la banca de afuera, papá nos va a matar, nos va a matar…
-Hola- me asustó el saludo…
-¿eh?... ah… hola- saludo agitado, son tres chicos deltante mio, el que me saludó es un jovencito bajito con cara de buena onda, se nota muy tierno y amable, el más grande es pelirrojo, musculoso y con un aspecto de chico “nice”, el último es un chico normal, medio rollizo, un joven como tantos
-Me gustó mucho tu discurso, fue bonito- comentó el tierno
-Quién diría que el horriblemente feo ya no sería tan feo- dijo el pelirrojo
-A mí un amigo me dijo que te hiciste cirugía plástica- el chico normal habló
-¡Fahrid! No seas grosero, no le digas feo, y tú Jean Carlo deja de inventar cosas, Mikel no se operó- el niño tierno me defendió
-Tú eres muy inocente Mark, pero este niño seguro se metió bisturí-
-O le metieron otra cosa- el pelirrojo mencionó, pero ¿qué me metieron?
-Ya basta, solo nos acercamos para felicitarte, nos alegra mucho tu graduación, te deseamos suerte en la vida-
-Muchas gracias… ¿Mark cierto?-
-Sí, bueno, nosotros nos vamos, tenemos que planear muchas cosas, ojalá nos vaya bien-
-Ojalá, mucha suerte… mejor dicho… ¡Éxito!- los tres se dieron la vuelta y se fueron así como llegaron, que chicos tan extraños
-¡Listo!- salió George del baño
-Ya era hora, hagamos tiempo antes de que papá nos mate…- lo tomé de la mano, pues si ya lo sabe papá, mamá, Romi, Nick, Tina, la escuela entera… que lo sepa el mundo
-Aguarda…- me detuvo- cuando corrimos sete iba saliendo esto del bolsillo por eso casi me caigo hace un rato, por atraparlo- mi guardapelo
-Eh… muchas gracias, esto es muy importante para mi-
-Es un medallón bonito, algo viejo, pero está bien-
-Esto, es lo que me ayudó a elegir bien al amor de mi vida-
-¿Esta cosa te ayudó a escogerme?- me preguntó sorprendido
-Si amor…- lo abrí- mira…- quedó estupefacto…
-Pero si es…- lo callé con un beso
-Te amo George AcosteR-
-Te amo Mikel RiviereA… te amo con toda mi alma…-
A veces la vida no es tan como la pintan en las películas o en las telenovelas, obviamente en esos dos géneros existe la chica hermosa de dientes perfectos y mirada azul celeste que cautiva al millonario de la historia… ¿por qué será que esa es la cara que nos venden respecto a la belleza? Hasta la más pobre y miserable de las protagonistas son perfectas, y según la trama son más pobres que los niños de la calle ¿cómo demonios le hacen para ser tan perfectas siendo terriblemente pobres?...no lo sé. Mi nombre es Mikel Riviere, tengo 17 años, como podrán imaginar soy feo, pero un feo que aprendió a ser feliz, no soy como las protagonistas de novela, pero soy un chico humano, uno real con ganas de ser feliz, y quiero serlo al lado de mi amado tormento… mi George Acoste.
FIN