¿Qué hacemos? Y lo más importante del asunto ¿Cómo demonios sabe mi abuela que Romi es lesbiana? Ese secreto solo yo lo sabía, ¿cómo pudo ser posible que ella lo sepa?
-¿Qué fue lo que dijo anciana?- preguntó Daphne algo sorprendida
-¿Yo?- la abuela se señaló, ¡ahhhh! Ya metió la pata, ahora tendrá que solucionarlo, mientras contenía a mi amiga para que no le arrancara la dentadura postiza a mi familiar.
-O sea, obvio sí, ¡tú!-
-Pero que muchacha tan altanera, en mis tiempos a los adultos se les hablaba de usted- respondió la abuela muy ofendida.
-No, pero si esto es el colmo, invade mi privacidad con mi novio y todavía quiere que la respete, pues déjeme decirle que los cavernícolas nunca respetaron a los dinosaurios, mejor se los comían- ¡Ay no puede ser! Esta torpe ya volvió a decir algo estúpido.
-Oye- mi abuela le dio un codazo a Jake, él le prestó atención y le preguntó- ¿esta niña va a la escuela?-
-Sí, si va a la escuela- no pudo evitar soltar una risita, ¡hasta mi abuela con Alzheimer se dio cuenta que esa tipa es más estúpida que un teletubbie!
-Pero qué desperdicio, pobre de su papá que paga para que sea tan tonta- Daphne al instante alzó una ceja y comenzó…
-¡¿A quién le dijo tonta?! Mire anciana, mejor cómprese un mapa y ubíquese, yo soy una “genia” o sea ¿me entiende? Mi inteligencia es muy superior a la de esa rara y este feo- nos señaló, la mujer mayor la miró como si no la comprendiera, mi archienemiga quedó con la mano extendida por habernos señalado, en ese momento, mi abue abrió su cangurera y luego de buscar por unos segundos sacó una moneda de cincuenta centavos…
-Toma mija, pero sería mejor que trabajaras, andar pidiendo limosna tan joven es muy malo, no seas floja- ¡la confundió con una vagabunda! Olvidamos por completo que Romi y yo estábamos nerviosos y junto con mi amado Jake nos soltamos a reír, evidentemente Daphne no estaba para nada contenta por lo cual comenzó la batalla en la entrada del centro comercial…
-¡Pero déjame y le arrancaré su peluca!- entre los tres la agarrábamos, estaba loca, de soltarla se le iba encima a mi abuela- le voy a dar su limosna, nadie me trata así- se veía furiosa, mi abuela se giró viendo el estacionamiento.
-No seas abusiva es una anciana- comentó Romi
-Si Daphne, dice puros disparates, ya ves lo que dijo de Romina- ¡ay Jake! Para qué lo recuerdas- está mal de su cabeza, debes comprenderla- remató, al menos hizo algo para dejar de lado su inoportuno comentario, a veces creo que mi abue Francisca es genial, a veces.
-¡Suéltenla!- gritó mi amiga, y como la otra no se tranquilizaba ocurrió algo inesperado- ¡Que te calles!- le dio dos bofetadas, Jake y yo abrimos los ojos desmesuradamente, si no mataba a mi abue, mataba a mi amiga, pero alguien iba a terminar en la morgue esa tarde. Sin embargo, el efecto fue otro, se calmó, pareciera que entró en relajación…-Así se calma a una fiera- comentó orgullosa- y de una vez te digo, si te metes con la abuela Francisca te metes con nosotros, todos debemos respetarla ¿verdad abuela?- giró su cabeza en mi dirección, yo la giré en dirección de Jake, Jake miró a Daphne y Daphne… ¡Oh, oh!... Daphne no miró a nadie por una razón… ¡Mi abuela había desaparecido!
-¡Abuela!- grité, ya no estaba, escudriñé todos los aparadores que tenía cerca y en ninguno estaba, ¡No puede ser! Les dije que alguien iba a terminar en la morgue, si mamá se entera que perdí a la abuela seré yo quien esté muerto y lo peor del caso ¡me iría al otro mundo virgen! ¡Nooooooooooooooooooooo!-¡Ayúdenme a encontrarla por favor!- me desesperé tanto al no verla que mi ojitos color miel comenzaban a cristalizarse, es verdad que la abuela me hace enojar, me mete en problemas, mete a mi amiga en apuros, no me deja ver a gusto mis telenovelas, me asusta por las noches, pero en verdad la quiero, y no deseo que nada malo le pase, estoy muy asustado…
-Ay pues que se la coman los gatos, yo no te ayudo feo- contestó Daphne muy indiferente
-No puedo creer lo que escucho, eres una insensible- habló Jake- si no quieres ayudar no lo hagas, pero entonces no digas nada- se molestó, acercándose a mí, me vio a punto de llorar, extendió su brazo y me otorgó unas suaves palmadas en la espalda- tranquilo Mikel, la vamos a buscar, no llores porque sé que la abuela está bien- hubiera saltado de alegría si no fuera por lo apanicado que estaba, recordó mi nombre, es la primera vez que me llama así sin yo tenérselo que recordar.
-Gracias- gimoteaba- pero es que si le pasa algo será mi culpa- limpiaba con el dorso de mi mano las lágrimas que iniciaban a surcar mis mejillas…
-Ya, todo va a estar bien, vamos, te ayudaré a encontrarla-
-Y tú vas conmigo, torpe, insensible y boba- Romi jaló a Daphne del brazo mientras me dejaba con Jake…
-Pero… yo no…- se quejaba esa chica
-Cállate o te doy otras cachetadas, ¡camina! No pararemos hasta hallarla- desaparecieron de mi campo visual.
-Bien, debes estar sereno, si fueras tu abuela ¿a dónde hubieras ido?- me le quedé viendo, su pregunta era muy difícil, si fuera una anciana con gradual pérdida de memoria, iría a la luna y pensaría que estoy en mi casa, entonces pensar como mi abuela no era muy bueno.- Tienes razón, deberíamos buscar por todo el centro- interpretó mi gesto.
Así, fuimos al cinema, a los recreativos, tiendas de ropa, zapaterías, farmacias (un lugar muy probable) y nada, no la encontraba, para ser viejita y lenta caminó bastante rápido o se escondió muy bien, entonces comencé a temer más, imaginaba los rótulos del periódico del día siguiente “anciana muere ahogada en un charco fuera del centro comercial por negligencia de su nieto” ¡No! por favor abuela… aparece y prometo ser bueno contigo, no me asustes, sin poder contenerme lloré, mi abue no aparecía y ya teníamos media hora buscando…
-Ya, no llores, en verdad la encontraremos- me daba ánimos y nuevamente su mano se posicionó en mi espalda, al menos sentirlo cerca me hacía tranquilizarme un poco- Iré a la entrada que está cerca de la pastelería, tú ve al estacionamiento, si no la encuentro allá, te alcanzo donde estés ¿de acuerdo?- asentí y prontamente ambos corrimos al nuestros respectivos rumbos.
Ay mamá, todo por culpa de María Ernestina de los Ángeles, de no haber transmitido dos capítulos, no me hubieras pedido que me llevara a la abuela y en estos momentos no estaría tan aterrado.
Me acercaba al estacionamiento externo del centro comercial y escuché una voz muy familiar…
-No, le digo que los basureros son solo para tirar a la gente, no para arrojar las monedas y pretender que suene una canción, ya le expliqué que no es una rocola.- ¿Acaso era?... ¡lo que me faltaba! ¡George Acoste! Pero no estaba solo… ¡mi abuela! ¡Demonios! De los miles de millones de personas que existen en el mundo se tuvo que topar precisamente con el ser que más me odia desde hace años…
-¿Entonces no sonará la canción que quiero?-
-No señora, llevo media hora explicándole que no- era muy curioso, George es un bruto, salvaje y abusivo, sin embargo con mi abue se estaba portando muy gentil, como hace años era…
-Abuela- llegué corriendo y llorando, temía acabar en un basurero pero no me importó, gracias al cielo encontré a mi abuelita, ya después de dejarla a salvo permitiría que George me masacrara si así lo quería. La abracé sin contenerme-¡Abuelita!- lloraba mientras la estrujaba, en verdad me alegraba verla.
-Mi cielo, no llores porque te ves feo- me consolaba la mujer
-No llores Mikel…- ¿George me llamó Mikel? No lo puedo creer, cotidianamente me dice feo, espanto, horroroso, adefesio o alguna otra cosa de esa índole.
-Gracias George, gracias por cuidar de mi abuela- limpiaba las evidencias de mi llanto
-No es nada, ella siempre me cayó bien- me acerqué a él y le extendí mi mano…
-Puedes tirarme al basurero si quieres, no me opondré, es mi forma de pagarte por haberla cuidado-
-No, hoy no- me sonrió, wow, ya había olvidado como sonreía, desde hace años que a mí no me dirige esa clase de gestos.
-Gracias Geo…- oí una voz llamándome
-Mikel, ¡ya la encontraste!- ipso facto el rostro de Acoste se endureció y me mostró la cara de odio que siempre me dedica, era Jake quien me hablaba.
-¡Pero si ustedes últimamente andan muy juntos!- comentó mordazmente George
-No puede ser…- respondió en el mismo tono de desprecio Jake
-¡Niño! No debes de interrumpir, ¿qué no te enseñaron modales?- ¿Mi abue regañaba a Jake? Increíble, hace rato lo amaba y ahora pareciera que lo odia- Ay Georgito, ¿le vas a decir o qué?- el otro la miró con cara de “guarde silencio”
-¿Decir qué?- los vi sin comprender
-Ya me voy, y la próxima vez cuídala mejor… ¡feo!- volvió a ser el de siempre, por un momento me recordó a George que conocí hace años.
-Ya casi, ya casi lo hacía y llegas tú… niño malo- continuaba regañando a mi amado chico.
Luego de eso, regresamos a casa, Daphne en un descuido de Romi se escapó y seguramente se fue a “descansar” como ella dice, mi amiga al ver que ya estaba con mi viejita también se retiró, solo Jake me acompañó hasta mi hogar.
-Ay estos muchachos, la próxima vez tú los cuidas- mi abuela le hablaba muy fastidiada a mi mamá- no vuelvo a salir con ellos, todos se me perdieron y eso que iba cuidándolos, ¡niños tenían que ser!- se encerró en su cuarto, con gestos le dije a mamá que no entendía lo que había dicho, me creyó, es bueno que mi abuela esté senil, nadie le cree.
-Gracias, Jake, nunca olvidaré lo que hiciste por nosotros hoy- hablé
-Descuida, sabes… nunca te había tratado, pero eres un buen sujeto, tu abuela también me fue muy simpática, espero que seamos amigos- me sonrojé, de reojo descubrí a mamá mirándome orgullosa de estar con un chico guapo, ella quiere que tenga novio, entonces llegó el otro polo… papá.
Al no tener hijas, y pues bueno como de alguna forma yo cumplo con el rol me cuida mucho, me molesta y me hace repelar, pero cuando se trata de chicos, me cuida y si se entera que uno me gusta se pone muy celoso… ¡papá tenía que ser!
-Buenas tardes- saludó secamente mirando un tanto intimidante a mi adorado Jake
-Hola, buenas señor- y lo logró, incomodó a mi niño
-Ya es tarde Mikel, entra que seguramente ya está la cena, con permiso- eso fue lo único que le respondió a mi chico (a já)
-Nos vemos luego, gracias por todo-
-Ya te dije, no es nada- nos dimos la mano y nuevamente me gritó papá…
-¡A ver a qué horas Mikel!-
-¡Déjalo en paz Jerome!- mi mamá lo regañó.
Luego de unas miradas cómplices entre Jake y yo, entré a casa. Papá no se veía contento, como les dije cuida mucho a su hijo feo, me gusta pero también me da miedo, de seguir así su pobre, inocente y dulce hijo se quedará señorito, y ¡no! eso no lo permitiré, bueno o malo, feo o guapo, como sea, pero señorito no me quedo… ¡he dicho!
-¿Dónde andabas Mikel? Te perdiste la novela- comentó la abuela mientras cenábamos
-Abuela, pero sí salimos juntos hoy- le recordé
-¡Ah! Es cierto, recuerdo que me perdiste- continuó comiendo su sopa de guisantes tranquilamente mientras yo casi me atraganto por el gesto fúrico que mis papás me lanzaron…
-¿Qué tú qué?- cuestionó mi mamá
-¿Perdiste a la abuela Mikel? Seguro por andar con ese muchacho- secundó mi papá
-Ay, ese muchacho, tan bueno que es, y lo quiere mucho- intervino de nuevo la abuela, mi mami relajó su vena, pero al escuchar eso fue Jerome quien me quería encerrar en mi alcoba…
-¿Te… te quiere?- papá dijo conteniendo su ira, si en algo estimo mi vida es el momento… tres, dos… uno…-¡Ya terminé!- mi plato quedó bailando en la mesa, entonces papá fue corriendo detrás de mí y de una tacleada me derribó sobre mi cama.- ¡Mikel Josafat Riviere Segovia! Explícame eso que un chico te quiere-
-No sé de qué habla la abuela, ya sabes…- me acerqué a su oído susurrándole- está loca-
-¿Entonces no te quiere ese muchacho?- preguntó incrédulo
-No, pá, no me quiere-
-¡Qué alivio! Mikel, los hombres somos muy desgraciados, no quiero que te lastimen- me revolvió mis de por sí ya necios cabellos
-En eso tiene razón, tu padre es un desgraciado- intervino mi madre
-¡Rosetta!- mi padre se indignó
-¿Qué? Sólo usé las palabras que dijiste-
-Hijo, descansa y nada de novios ¡eh! Ahora iré a darle su merecido a tu madre- mi cara puso gesto de asco…
-¡Papá! No digas eso que me traumarás, hagan lo que hagan cierren la puerta y no griten… ¡iugh!-
Se fue, hoy en definitiva fue un día algo ¿estresante? Sí, eso, estresante. Espero que mañana sea mejor.
Ya me andaba y me encerré en el baño, me senté y puff… el alma descansó. Leía cómodamente mi libro de “Los caballeros las prefieren brutas”… wow, ¿será que Daphne finge ser idiota?... ¡no! ella sí es estúpida. Estaba tan entrado en mi lectura que me sumí en ese mundo de consejos prácticos, de un momento a otro alguien me dijo…
-Pásame mi encendedor- por inercia se lo pasé… un momento… ¿pásame mi encendedor? Me abrí la cortina de la regadera mientras seguía sentado en el retrete…
-¡Oh por todos los cielos! ¡Abuela!-
-¡Santo resucitado! ¡Un hombre!-
-¿Dónde?- miré a mi alrededor hasta comprender, dos segundos después, que se refería a mí. - ¿Qué rayos haces en la tina?-
-No, ¿tú qué rayos haces en mi cuarto?-
-Abuela, esto es el baño- comenté mientras tapaba mis partes privadas para que ella no las viera.
-¿Esto es el baño?... ah… eso explica porque la cama estaba dura… y… y… ¿y qué es ese olor?- mis mejillas se sonrojaron, creo que ya entienden a qué se refiere… ¡pero qué vergüenza!
-¡Abuela cállate!- luego de esos gritos, abrieron la puerta…
-¿Qué pasó?- mi mamá alarmada preguntó-¡Santo del cielo! ¿Qué demonios crees que haces con tu abuelita en el baño Mikel?-
-¿Yo? Pero si yo…- iba a justificarme cuando la senecta sale asustada de la tina…
-¡Pero qué horror! Ya no hay moral ni respeto por una anciana como yo, ¡Un hombre en el baño!- corrió asustada para afuera…
-Mikel, qué horror, tu pobre abuela tuvo que verte así… ¡vergüenza debería darte!-
-¿Qué ocurre mujer?- llegó mi padre, genial, toda la familia viéndome sentado en el escusado.
-¡Oigan fuera de aquí! ¿No ven que estoy ocupado?- los corrí, comprendieron mi enojo y salieron. ¡Abuelaaaaaaaaaaaaaaaaa! Otra vez por tu culpa…
Por fin, la escuela, al menos ya estaba lejos de casa y afortunadamente mi papá estuvo “tan ocupado” con mi mamá que olvidó la charla, o eso espero. Llegué y vi como Jake discutía con esa torpe…
-Ayer me quedó claro la clase de chica que eres-
-Pero prince, no es mi culpa que esa anciana sea tan imprudente y se pierda, no te enojes- lo tomaba de las manos, miserable, si tuviera una roca te golpeaba.
-Yo creí que eras distinta, pero lo que tienes de bonita por fuera, lo tienes de fea por dentro-
-¡No me digas fea! O sea, yo soy una bella mujer, me cuido, me hago manicura, plancho mi cabello y soy muy lista, no me trates mal o papi se enterará-
-Pues que se entere, terminamos Daphne-
-No, no, prince, no, no me puedes terminar…- al ver que Jake se iba le gritó- ¡Yo termino contigo! Tonto, insensible… ¡Fontache!- una alumna que iba pasando la corrigió…
-Es fantoche-
-Eso, ¡te odio! Ojalá te subas a un barco y explote como globo- definitivamente era una tonta. Jake caminó junto a mí, me dio una palmada y se fue al salón, suspiré, entonces, ella se me acercó…- Todo esto es tu culpa feo, y juro que te vas a arrepentir- me quitó las gafas y las tiró- te acabas de ganar una enemiga, tú y solo tú eres responsable- pude ver mis gafas en un charco con lodo.
Se marchó y yo recogí mis lentes, vaya, estoy en serios problemas, y estos aún no termiaban…
-¿Te divertiste con Thomas?- ahora, multipliquen mis problemas por dos, George Acoste se hallaba frente a mí. Igual que ayer me vio con odio profundo, ¿por qué ahora es así conmigo?- espero que sí, porque hoy probarás la basura… esperpento…- acercó su cara a mí, estaban muy juntas… demasiado juntas…