Al día siguiente, como tantas veces habían despertado, dos cuerpos se hallaban frente a la chimenea, desnudos y envueltos en un montón de mantas polares algo desordenadas ; Shuichi le había dado la sorpresa más extraña que se podía dar: ser su musa.¿ Y porque no? Él siendo una Venus de Milo, junto a sus sonrojadas mejillas y ese comportamiento atrevido debido al sake, había despertado en Eiri una lujuria animal que no pudo controlar. Se pasaron horas haciéndolo, perdieron la cuenta …. y también la razón.
El primero en despertar fue Eiri( como siempre) , le dolía la cabeza como si le hubieran pegado con un martillo, pero recordaba lo que había hecho, pues para que negarlo, tenía buen aguante frente al alcohol. Se giró y observó a Shuichi a su lado, todavía con los guantes puestos y el cuerpo marcado con besos y chupones ( cortesía de Eiri) mientras que las mantas cubrían sus piernas y su cadera. “ Es una verdadera belleza” pensó “ pero nunca lo sabrá de mis palabras “ ( sonrisa maligna), se agachó y besó su frente aprovechando que éste no era consciente, pues mostrar su lado romántico no era precisamente lo que más le gustaba; aún así , lo sabía, aquel mocoso había dado la vuelta a su vida, y gracias a ello sintió otra vez el sentimiento de satisfacción que le generaba escribir , había vuelto un poco de la inspiración que le faltaba.
La vida en aquel pueblito continuó, a diferencia de que Eiri aprovechaba las horas que Shuichi no estaba en casa para comenzar o modificar algunos manuscritos, lo hacía a escondidas y lo guardaba en un lugar suficientemente seguro para que éste no husmeara , no se sentía preparado para decírselo, sino Shuichi se pondría otra vez más pesado de lo que era con ello y no le apetecía sentir presión encima, ni más rechazos.
Por otro lado , Shuichi trabajaba en otro restaurante a jornada parcial para poder ayudar a Yuki económicamente y no sentirse como un aprovechado; Yuki era todo lo que tenía ahora, su relación si bien no se consideraba un lazo amoroso como el de las parejas, tampoco podría decirse que eran dos extraños que se encontraban de vez en cuando solo para follar.
Shu comprendía que aquello podría quebrarse o romperse en cualquier momento, ya que la forma de entrar en la vida de Eiri no había sido la más ortodoxa. Sin embargo, era su manera de ser, actuaba casi sin pensar, dejándose llevar , ya fuera arriesgado o no, y por esa forma de ser se había metido en tantos problemas. Pero no, todavía no era hora de contarle la verdad a Yuki, ahora solo debía ayudarlo, y que éste cumpliera su sueño de escritor, aunque ello le costase broncas y rechazos.
Pero … se estaba cansando de ello, no de Yuki, sino de esa vida; Yuki tenía un talento grande y se conformaba haciendo trabajos que no le llenaban ese vacío que ahondaba su pecho .En sus manuscritos, que eran novelas románticas, relataba de manera tan sutil y angustiante lo que sentían sus personajes, los cuales eran tan reales que se podía meter en su piel y sentir lo que ellos sentían; Yuki los había escrito con pasión y lo sabía, aunque éste no lo quisiera admitir.
El invierno pasó, dejando lugar a la primavera ( en la cual Yuki tuvo aguantar la dichosa alergia de Shuichi a las gardenias) y finalmente al insoportable y caluroso verano. Shuichi y Yuki decidieron coger más trabajos para ahorrar y poder permitirse un viaje más o menos decente y alejarse de la soledad, pues con los salarios normales que tenían en el pueblo solo les permitía costearse la vida allí.
El dueño de una pequeña urbanización de casas situada no muy lejos de la casa de Yuki necesitaba gente para darles una capa de pintura y así estas fuesen más atractivas a la vista. Shuichi, no muy convencido por las palabras de Yuki aceptó “ Solo serán unas pocas casas y nos pagarán bien “ , eso le había dicho el rubio, pero Shuichi no era tonto, insistió en preguntar cuánto serían pagados , no aceptaría una miseria sobre todo haciendo un trabajo tan duro en pleno calor, era de locos.
Dispuestos a pintar aquellas casas, Shuichi comentó molesto :
- Yuki, me habías dicho que eran casas pequeñas , ¡y tienen dos pisos cada una ! En qué demonios estabas pensando cuando aceptaste esto ¡ y encima no tenemos que pintar una, sino cinco !!! Esto es explotación !!
- Mocoso, ya te dije que no era para tanto, además nos pagan un buen salario – mintió el rubio. Para qué negarlo, el salario era el mismo pero en vez de cinco tenían que pintar las quince casas que había ahí. Era tonto porque aceptar por haber aceptado la oferta? Si, pero en aquel pueblo ninguno de los trabajos le ofrecía mas de 30000 yenes y si querían viajar y poder salir de ahí necesitaban un mínimo de 100000 yenes, Japón era tan caro…
Se pusieron manos a la obra, para disgusto de Shuichi, cuyo cuerpo era más pequeño y ofrecía menor resistencia a pesar de ser hombre. El calor hacia que sus ropas se pegasen al cuerpo y la piel de Shuichi adquiría su tono bronceado mientras que en Eiri el color rojizo hacia una leve aparición.
- Yuki , haha , pareces un cangrejo, ponte protector solar !!
- Cállate , mocoso !
Tardaron como tres días en pintar la primera casa, Shu ya ni disimulaba su cabreo mientras pintaba , desde luego aquella era la oferta más estúpida que Yuki hubiera aceptado. “ Esto se hará eterno “ era lo único que podía pensar.
En aquellos días de tortuosa labor mientras Yuki se dedicaba a terminar una de las casas , oyó como un click de una cámara a su espalda lo sacaba de su concentración.
- Pero que haces mocoso! Dame eso!
- No, hahaha, si te ves bastante apuesto con ese mono manchado de pintura, esta foto pasará a la posteridad – reía sin parar el pequeño
- No me hagas enojar !! De donde sacaste esa cámara* ?. Rompe esa foto – Eiri estaba enfurecido, detestaba las fotos.
- Vamos Yuki, no seas aguafiestas, esta cámara la tenía guardada , pero nunca tuve ocasión de usarla. Podríamos hacernos una!!- gritó entusiasmado
- Muérete!
- Por favor! Por favor! – le observaba con ojos llorosos, aquellos ojos que lo tenían jodidamente cautivado.
- Y que obtendré a cambio?
- Mmm, mi cuerpo? – dijo con una pícara sonrisa
- No, sigue trabajando
- Oh Yuki por favor!, solo será una , siempre es bueno conservar recuerdos y no tenemos ninguno juntos
- Mmgh, bueno, está bien , pero solo será una , y si sigues jodiendo con más fotos, tu linda cámara acabara en el contenedor de los reciclados !- Jodido mocoso, siempre acababa convenciéndolo de hacer cosas idiotas, y él como otro idiota terminaba cediendo, pero aunque no lo quisiera admitir en el fondo le gustaba hacer cosas diferentes con aquel extraño que apareció en su vida como el fuego que tanto le faltaba.
- Vamos Yuki! , sonríe, la cámara esta temporizada para unos cinco segundos
- No, lo que faltaba
*CLICK *
- Yuki, otra por favor, en esta no me dio tiempo a sonreír – dijo insistente Shuichi
- Okey, pero ya la ultima eh? bastante estoy cediendo hoy
- Siiii, espera que vuelvo a colocar el temporizador
Shuichi se acercó corriendo a Eiri y se colgó de su brazo mientras mostraba una de sus usuales y dulces sonrisas.
*CLICK*
- Mira, hahaha, salieron perfectas , la segunda es la mejor de todas – comentaba con alegría mientras se las mostraba a Eiri.
Eran unas fotos normales, pero ahí estaban, Eiri con su mono azul manchado de blanco mirando serio , mientras Shu se colgaba a su brazo, con aquellos pantalocillos y camiseta que le quedaba tamaño elefante , era tan adorable, él y su infantil sonrisa. Esas fotos serían un gran recuerdo a pesar de que nunca lo admitiría delante de Shuichi.
Ese día siguieron con su trabajo, mientras Shuichi fue a por unas bebidas en un kiosko cercano, se aproximó un coche, para ser exactos un Mercedes bastante elegante, del cual bajó el señor Yamamoto , dueño de aquella urbanización y el que le había dado ese trabajo.
- Como va ese trabajo , señor Uesugui? – comentó de una manera algo prepotente
- Bien bien, es duro trabajar a pleno sol del día
- Eso no me interesa, cuánto tardará? Como puede ser tan lento? Ya debería llevar unas ocho o nueve , y todavía van cuatro?
- Siento las molestias, pero como le dije , el trabajo es duro- Yuki controlaba su voz, ese tipo era realmente insoportable aparte de explotador, pero el dinero era necesario si quería largarse de allí.
El señor Yamamoto iba continuar con su perorata cuando una vez voz chillona los asustó, y por el tono que tenía aquello no iba a acabar bien. Shuichi traía un rostro frunciendo el ceño y mirando con odio a Yamamoto.
- Como que nueve u ocho? No se suponía que nos pagaban por pintar cinco casas? Si quiere que pintemos tantas casas más le vale ofrecernos una suma de dinero más alta!!!
- Quien te crees, mocoso de mierda? Esa suma incluso está de más para este trabajo, y yo no acepté,sino el idiota de tu novio!
- Y usted es un explotador! No le hable así a Yuki, no sabe con que gran escritor está hablando, el día menos esperado le restregaremos su mierda por la cara!!
- Me importa una vaina lo que sea este tipo, quiero el trabajo acabado en una semana!!
- Pues auméntenos el sueldo!!
- No , y si no acaban el trabajo no les pagaré ni un mísero centavo del trabajo que hicieron- y dicho esto , el señor Yamamoto empujó a Shuichi haciendo que éste cayera de culo al suelo.
- Ah , pues no nos piensa pagar ni aumentar el sueldo…? – Shuichi se levantó todo encabronado y cogió el bote de pintura que estaba a su lado , tirando toda la pintura sobre el capó del coche del señor Yamamoto, quien observaba anonadado como su hermoso Mercedes estaba siendo arruinado
- Shuichi no…!!!- quería detenerlo Eiri
- Mire si tanto le gusta que pintemos, aquí tiene, y le da un look más deportivo a su sobrio coche - dicho esto se alejó haciendo un gesto obsceno con las manos a aquel hombre tan despreciable.
Mientras tanto , Yuki intentaba detener al señor Yamamoto que quería ir a golpear a Shuichi .
- Estúpido loco!!! Y usted Señor Uesugui, esto se descontara de su sueldo! Y no quiero volver a ver a ese crio de mierda por aquí !- gritó soltándose y subiéndose al coche para largarse.
Cuando éste se fue, Eiri fue corriendo a casa, donde se encontró todo hecho un desastre , Shuichi estaba sacando las cosas del armario, y tirando las cosas por la ventana .
- Pero a ti que mosca te ha gritado!! Que te crees!!- Eiri estaba encolerizado , sabía que Shuichi era impulsivo pero aquello había tocado fondo.
- …
- Mírame cuando te hablo , imbécil!- cogió de la cara a Shuichi y lo empujó contra la pared , pero éste no respondía, simplemente le miraba desafiante con una mezcla de rabia y tristeza.
- …
- Contéstame , maldita sea!! Por que tienes que arruinarlo todo? Ese trabajo es lo único que nos permitía largarnos!!
- Y tú? Como te atreviste a mentirme!? Porque te dejaste engañar por semejante sujeto?- decía por fin de su silencio, su voz reflejaba su enorme disgusto.
- Yo sabía lo que había, pero sabes que aquí los trabajos no son tan bien pagados más allá de la manutención!!
- Ese tipo se lo merecía! Viste como nos trató, y tú no te mereces esto, tu perteneces a otro mundo, no deberías estar haciendo ese tipo de trabajos!!- Si, era terco, quizás el más grande existente y por haber , pero se rehusaba a que desprestigiaran a Yuki.
- Y tu que sabes eh?!!!... No hables sin saber!!... mocoso de mier…!!!
- Si , sé que es lo que hay, pero tu talento no debería estar despreciándose haciendo esto, me niego, me rehúso!!
- …
- Eiri, larguémonos, con lo poco que tenemos, vamos a cumplir el sueño que necesit…- dijo intentando apaciguar aquel ambiente tan tenso.
- Cállate , no sabes lo que dices!!
- Entonces qué piensas hacer? Seguir negándote a ello? Ver como tu vida pasa y desperdiciar el don que se te ha otorgado? Dime piensas hacer eso o que ¡!!? No lo pienso permitir!
- Pero que don ni que don?! Estás loco o que te has fumado?! Si rechazaron esos manuscritos es porque no valieron nada, sino ya….- no quería recordar, se le hacía doloroso.
- Así que fue por eso que lo dejaste?!!- necesitaba urgentemente cambiar de tema, no quería pagarlo con Shuichi
- Cállate y déjame dormir! mañana tengo que ir a arreglar el desastre que causaste hoy
- Osea ,que piensas volver ahí?!! – aquello ya era el colmo, encima iba a arrastrarse a ese tipo estúpido para la miseria de sueldo que le ofrecían
- Si, déjame en paz y no rompas más cosas , te recuerdo que es mi casa
- Vete a la mierda!!!- y con esto dio un portazo que hizo temblar toda la habitación.
Shuichi se quedó meditando en el salón , mirando al vacío, a veces sentía que su razón se iba y no podía controlarse, y aquello le asustaba. No quería dejar que Yuki , aquel hombre que se había metido en lo más hondo de su piel y su corazón, se dejara tratar así , el no lo merecía, haría lo que fuese posible para que el disfrutara de lo que merecía, no importa cuánto le costase, después de todo , Yuki no era como Ryuichi.
Debían marcharse a una ciudad, pero evitando volver al comienzo de todo, no debía dejar que lo encuentren, Yuki era ahora su ancla. Miró en su mochila,y encendió el viejo celular que había apagado desde hace tiempo para evitar que lo contactaran, e hizo su llamada con una pequeña sonrisa :
- Hiro?....
El despertador hizo que Eiri se removiera de la cama , tenía un tremendo dolor de ojos, y unas agujetas terribles del trabajo físico que conllevaba pintar las casas, a parte del mal sabor que conllevó la discusión con su musa. Se dispuso a buscarlo pero al parecer no estaba en casa, pero sus cosas sí, lo cual era un alivio. Desayunó y se fue a trabajar, meditando soberanamente lo que habían discutido el día anterior.
Yuki hacía su trabajo fervientemente, pero en su mente no podía parar de pensar en Shuichi, ya llevaban como un año viviendo juntos, y pensar que el mocoso dijo que solo sería una semana, que tan descarado podía llegar a ser? Pero aunque fuera así, Shuichi era lo que llenaba parte de su vacío, era raro, revoltoso, gorrón, chillón , infantil y lo peor: jodidamente impulsivo; pero lo aceptó así , al igual que Shuichi se acostumbró a su seria y poco afectuosa personalidad. En el fondo, encajaban las piezas del puzle y sentía comodidad a su lado.¿ Por que no buscar nuevas oportunidades como decía el pequeño? La respuesta: era demasiado cobarde , aparentaba ser fuerte, pero el rechazo era lo que más temía.
Después de la muerte de Kitazawa sensei, se había vuelto más cerrado. Aquel profesor era quien le había inculcado el amor a la literatura en sus años de secundaria, pero lamentablemente, una fuerte enfermedad lo azotó y fue como si perdiera uno de sus pilares. Cuando Kitazawa sensei murió , nadie más lo apoyo en su “ sueño”, su padre era una persona tradicional más bien cerrada de mente, su hermana Mika apoyaba todo lo que decía su padre junto al molestoso de su cuñado que no sabía más que meter cizaña para que trabajase en su empresa de Marketing; y finalmente, su pequeño hermano Tatsuha, que era todavía demasiado inmaduro para entenderlo.
Por eso Shuichi había calado tan hondo en él, tan inocente, insistente y determinado en sus actos, que nada lo derrumbaba , admiraba esa fortaleza.
Decidió que era hora de continuar su trabajo en vez de seguir imaginando sueños que no podían ser, pero una señora anciana que era su vecina se acercó a él .
- Joven Eiri, cuando nos iba a decir que se mudaba? Toda la juventud de este pueblo se marcha – decía con una triste mirada la anciana
- Mudar? – Eiri estaba confundido ¿ De que hablaba?.
- Si, el joven Shuichi esta empaquetando todas sus cosas….
Antes de que la anciana pudiese continuar , Eiri había salido corriendo ¿ Qué rayos estaba haciendo Shuichi?
Lo que se encontró no fue muy agradable, Shuichi en la puerta , con todas las maletas de cosas importantes y los manuscritos metidos en una carpeta que sujetaba en la mano ¿ Como los había descubierto?. Iba a preguntar, pero un fuerte olor a gasolina lo dejó pálido.
- ¿Nos vamos ya?- preguntó inocentemente Shuichi mientras sostenía en una de sus manos una lámpara de gas encendida .
No, no era capaz de hacerlo…
- Espera Shuichi no…
Shuichi solto la lámpara y la casa empezó a arder.
- Loco de mierda que haces?!!!
- Vamos Yuki!! , perderemos el bus – y dicho esto cogió una maleta y empezó a correr.
Eiri no tuvo otra opción que seguirlo, maldito mocoso!!
“Por fin comenzarían una nueva vida, Yuki tendría lo que tanto anheló, te amo Eiri”….
Continuará …..