2. el secreto del libro antiguo parte 1
El auto se movía, Bill no sabía a donde ni por donde le llevaba, había intentado concentrarse en el camino desde el hotel, pero con sus vagos conocimientos sobre Francia le había resultado imposible, se había perdido en un instante. Sollozo por lo bajo y al auto paro, el motor dejo de funcionar, la puerta del conductor se abrió y Bill cerro los ojos aterrado, que quería ese hombre de el? Dinero? Sexo? Matarle? O era un fan loco?... todas esas preguntas se hicieron en la cabeza de Bill en un segundo, no sabia que hacer ahora…
La cajuela se abrió con el sonido de una llave, respiro mas rápido, sintiendo como unas manos le obligaban a sentarse, luego el frio de una navaja estaba cerca de su cuello, su secuestrador rozo con la navaja cuidadosamente la piel desnuda de Bill el cual abrió los ojos mirando a su secuestrador totalmente aterrado, suplicando en silencio de que no le asesinara. El pianista sonrió, tomo a Bill en brazos y le metió dentro de su casa, donde le drogaría y le dejaría en una habitación especial para el cantante
Tom abrió los ojos, se estiro en su cama y pensó
“5 minutitos mas y me levanto”
Se volvió a tapar con las sabanas y suspiro, pasó un poco de tiempo, se puso de pie finalmente y camino al baño, lucia cansado y sucio. Se lavo la cara y bajo a la cocina, donde no había nadie
-Georg? Gustav? Bill?- pregunto en voz alta, sin obtener respuesta
Suspiro y corrió a la habitación de su hermano, no había nadie, pero habían rastros de que alguien había estado ahí hace poco, la ropa y objetos de su hermano estaban desordenados, algunas cosas personales como su cepillo de dientes, no estaban en la habitación. Miro desconcertado y volvió a llamar a sus compañeros, rendido, tomo el un teléfono y marco el numero de Gustav
-Gustav, donde rayos se han metido?- pregunto Tom cuando la línea dejo de pitar
-ya ha vuelto tu hermano?- pregunto Gustav
-eh… no, que acaso no esta con ustedes?- pregunto Tom ligeramente asustado
-eh… te paso con Georg- respondió rápidamente Gustav alejándose del auricular
-Gustav?... Georg?... chicos?! Están ahí?!- pregunta Tom molesto
En la línea del teléfono se oyen susurros, como en una discusión, Tom llego a oír frases como “díselo tú!!” o “no!!! Tu!!! Eres su mejor amigo!!!...”. Trago saliva nervioso, no le gustaba nada aquella situación, alguien volvió a tomar la línea, una voz profunda sonó, una voz como cuando te avisan que tu madre ha muerto
-Tom
-David? Que pasa?- pregunto Tom asustado por aquel tono inusual en la voz de su representante
-necesito que te mantengas calmado- le respondió David
-estoy calmado!!! Maldición!!! Quiere alguien de una buna vez decirme lo que esta pasando?- pregunto ton al borde del colapso por lo nervioso que estaba
-Tom, tu hermano ha desaparecido, se ha informado que un auto, el único auto que pasaba a esas horas, te ha recogido, la policía va por ti Tom, creen que puedes ayudar- le dijo David al mismo tiempo que alguien abría la puerta
Se quedo en shock, ni siquiera sintió cuando los policías le tomaron, ni cuando llego a la estación de policía, solo recobro el sentido cuando estaba frente a un policía en una fría sala de interrogatorio, estaba tan confundido, donde estaba Bill? Había sido el pianista?
-te acuerdas de algo referente al auto o al secuestrador de tu hermano?- pregunto el oficial
-tenia… los ojos… el pianista…- balbuceo Tom en un susurro, estaba muy confundido y asustado, donde estaba su hermano?
-empecemos por el principio? Sabias que tu hermano estaba en el auto?
Se quedo en silencio, millones de preguntas estallaron en su cabeza
-como saben que se lo ha llevado el!!?? Si esta todavía ahí afuera? Como saben que ha desaparecido? El…- dijo Tom de golpe cuando el policía dejo algo en la mesa
Era su teléfono móvil junto con el de Bill, al igual que las llaves del hotel y dinero, todo empapado de sangre. Tom miro aterrado, mientras las lágrimas comenzaban a salir de sus ojos
-esta… muerto?- pregunto en un susurro
-no estamos seguros, encontramos sus pertenencias en medio de dos cuerpos destrozados, si no esta muerto, es seguro que la persona que asesino a esas dos chicas que encontramos le tenga ahora- respondió el policía
Tom se sintió mareado, hace menos de una hora estaba en su cama, tranquilo, no estaba en aquella horrible pesadilla…
-están… están seguros que… que… mi hermano… estaba en ese auto?- pregunto entre sollozos
-si, hay rastros de sangre de tu hermano que indican que estuvo donde se aproxima que parto el auto según los rastros recogidos- respondió el policía
-el pianista, así me dijo que se llamaba, o le decían, pianista- le dijo Tom
-recuerdas algo del auto o del pianista?- dijo el policía escribía los datos que le acaba de decir Tom
-tenia los ojos obscuros y al auto era amplio y viejo, es lo único, encontraran a mi hermano?- pregunto Tom
El policía no respondió
Bill estaba aterrado, soltó un grito, no estaba amordazado, pero si cegado, lo cual le ponía más nervioso. Estaba en una cama, atado con unos cinturones de cuero que terminaban en cadenas y el ataban a la cama, suponía que sus pies estaban igual, aunque no podía saberlo, estaba en ropa interior y tenia un extraño antifaz que se sujetaban con una correa en la nuca, quitándole la visión por completo. El ambiente a su alrededor era frio, y no sabia cuanto tiempo había pasado, solo que la cabeza le daba muchas vueltas
La puerta se abrió, Bill soltó otro grito y una bofetada cayo sobre su rostro re abriendo una de las tantas heridas en sus labios
-cierra la boca o te asesinare- advirtió el hombre que había entrado
Bill la cerro y ahogo un par de sollozos, intentaba bajar los brazos que estaban sobre su cabeza, por que le lastimaban y le incomodaba la posición en la que estaba. Sintió una mano en su nuca, levantándole la cabeza y forzándole a un beso, no se removió y entre abrió los labios dejando entrar la lengua a su secuestrador, el cual mordió un poco sus labios antes de profundizar el beso. Bill sollozo y fue liberado de los brazos de su secuestrador
-tienes que comer- dijo el hombre acercando algo a sus labios
Bill cerro rápidamente la boca, y volteo el rostro, recibiendo otro golpe
-si no quieres comer no te rogare- dijo el secuestrador
Sintió como algo era colado alrededor de sus labios y una inyección en el cuello antes de volver a caer en la inconciencia
No sabia donde iba, lo único que quería era caminar sin rumbo. Siguio caminando y supo a donde iba, estaba en la parte norte de la ciudad, frente a una tienda de antigüedades, donde antes había un libro viejo
Entro y una pequeña sobre la puerta titileo, un joven con los ojos azules le miro extrañado
-quien eres tu?- pregunto Tom
-soy el dueño de la tienda- respondió el joven extrañado por la pregunta
-y la joven que atendía esto?- pregunto Tom
-ella esta de vacaciones, ahora debo atenderlo yo- respondió el joven con cierto fastidio- bienvenido, por cierto
Tom miro curioso, no era la primera vez que entraba ahí
CONTINUARA…