Cap. 6 nuevos inquilinos.
No sabemos cómo exactamente cobramos forma humana o que es que nos llama a hacerlo, solamente conocemos que cuando la adquirimos es con el único motivo de proteger a nuestros dueños, cuando un juguete cobra vida usualmente lo hace por el amor que tiene su dueño hacia él y así es como nacen los amigos imaginarios de muchos niños, pero en mi caso se podría decir que yo más bien nací para cuidar a mi infantil dueño de sí mismo, Usami san es genial o al menos lo era antes que me consiguiera un marido del demonio, violador y oportunista, antes que llegara Misaki yo solía protegerlo en pequeñas cosas que se me permitían, tales como, serrar la llave del gas cuando a mi estúpido dueño se le olvidaba, apagar sus cigarrillos cuando este quedaba inconsciente en el sofá y amortiguar su caída cuando se desmayaba en las escaleras, fue un arduo y torturador trabajo si me lo preguntan y que fue lo que recibí a cambio de mi esfuerzo y sacrificio… ¡RECIBÍ UN VIOLADOR MARIDO INSACIABLE! Eso fue lo que recibí, un demonio que todas las noches abusa de mi inocente cuerpecito.
Aunque admito que he empezado a sentir cosas por Sato nadie quita que abecés me den ganas de arrojarlo del edificio, ¿cómo es que una persona puede ser linda y amable y de repente cambiar a un violador? Yo realmente no tengo la respuesta, pero a este paso lo único que diré es que me arrepiento de haber aceptado que lo extrañe un poco cuando Mahiro el sobrino de Misaki lo secuestro, ya sé que muy pronto todos estarán diciendo, pero hay que sundere es este chico, sin embargo, sus novios no son los que están en plan sádico ahora mismo.
-Suzuki juguemos al sado masoquismo…
-¡suéltame estúpido violador!!!
Solloce mirando con terror cuando Sato vestido como un príncipe gótico relamiendo sus labios miraba la mesita de la sala con indecisión donde había varios juguetes de aspecto extraño que simulaban penes.
-Mira este-dijo tomando un pene falso de color verde que tenía una pequeña púa alargada a un lado que juro por dios no tengo ganas de saber para qué sirve, retorciéndome intente con desespero soltarme de las sogas con las que Sato me había atado, después de todo quien diría que unas simples palabras como “Sato creo que te quiero, pero no estoy muy seguro si es amor” dichas minutos antes me llevarían a esto.
-por favor…no lo hagas…
Intente rogar con mi más inocente carita, pero para mí pesar en vez de que Sato desistiera de torturarme un bulto aún más grande apareció en sus pantalones y su rostro sonrojado y respiración errática me dijo que una vez más seria violado.
--¡demonios, tan lindo…me dan ganas de corromperte más de lo que ya te corrompí Suzuki! …no debes preocuparte amorcito que esto será muy, pero muy tortuoso y lento tal y como te gusta hehehehe…-musito asiéndome soltar un pequeño grito desesperado, sin embargo, antes de ser violado nuevamente el sonido de la puerta nos detuvo y adoptando nuevamente mi forma de oso de peluche me quede inerte junto a Sato quien con un pequeño suspiro frustrado también adopto su primera forma […]
-ohhh Misaki, pero que pervertido… si tanto querías sexo hard cord solo debías pedírmelo y yo te lo daría…
Expreso Usami al mirar una extraña y bizarra escena donde Sato estaba reposando en el suelo cerca de la mesa donde residían todo tipo de vibradores, mientras Suzuki en el sofá yacía atado, Misaki al mirar aquello si poder creérselo protesto- ¡yo no he hecho eso estúpido Usagi!
-por favor deja de acerté el tímido entiendo la indirecta…
-¡no hay ninguna indirecta yo no hice nada de eso lo juro!
Intento Misaki de afirmar mientras jugaba al juego del gato y el ratón con Usami quien al mirar como Sato y Suzuki se encontraban pensó que Misaki intentaba provocarlo, como era de esperarse pronto el escritor atrapo a Misaki y llevándolo al estilo cavernícola en su hombro y con desespero intento tomar todos los vibradores mientras Suzuki repetía mentalmente “¡por favor llévatelos todos, no dejes ninguno, no dejes ninguno!” –expreso con desespero, no obstante Usami no fue capaz de llevárselos todos dejando el vibrador verde con la púa a un lado en la mesa entre otros penes haciendo a Suzuki llorar internamente renegar por su estúpido Karma, por su lado Sato con ojos de buitre muy brillantes daba sus propias plegarias “¡llévatelo a tu cuarto, llévatelo a tu cuarto!” decía incansablemente mirando como efectivamente Usami arrastraba a Misaki a su cuarto y cerraba la puerta dando un ligero salto Sato cambio en seguida con una sonrisa depredadora, Suzuki no dándose por vencido decidió seguir en su forma de peluche.
-vamos Suzuki sé que quieres cambia ahora…
“ni lo pienses estúpido violador, mejor me quedare en esta forma, me niego a ser violado con penes de plástico” –repitió el chico indignado haciéndole llegar a Sato el mensaje a través de un enlace mental que tenían todos los juguetes que cobran vida cuando estos querían hablar aun en sus formas originales.
-está bien ya no los usare, cambia prometo no saltarte encima…-dijo el chico con cierto brillo malvado en sus ojos que por ningún motivo convenció a Suzuki, por lo que el osito orquestando un perverso plan cambio fingiendo sumisión.
-tienes razón…en realidad yo lo deseo, pero…me da vergüenza…
Dijo con una carita tan tierna e inocente que logro a Sato perder la cabeza pues ahora no precisamente estaba razonando con su muy pervertida cabeza sino con su pene-pero, antes que me complazcas quiero un stiptris-dijo Suzuki procediendo a quitarse la ropa lentamente y al estar medio desnudo en bóxer de color blanco con puntos rosa, se sentó en la mesa con las piernas abiertas en invitación, Sato relamiendo sus labios alejándose un poco de la mesa comenzó a moverse de modo sensual quitándose la ropa haciendo que al pobre Suzuki se le olvidara su plan, nunca espero excitarse al mirar a Sato sacarse su camisa de forma sensual y tortuosamente lenta, pronto y casi babeando al mirar a Sato comenzar a jugar con el botón de sus pantalones de golpe despertó al darse cuenta que estaba duro, “mierda me estoy volviendo un pervertido igual que él” gimió interiormente y con algo de esfuerzo y mucho, pero mucho auto control tomo todos los penes falsos y corrió con ellos a la ventana de la sala, mientras un shockeado Sato dándose cuenta de la artimaña tropezaba con sus pantalones al intentar atraparlo, Suzuki con una suave risa victoriosa miro a Sato sin esperarse que su cara de gozo seria borrada de inmediato por un pene falso de color verde con una púa alargada tirado cerca de la mesa, Suzuki emitiendo un pequeño sollozo corrió a recogerlo, sin embargo, era tarde pues un muy molesto Sato ya lo tenía en sus garras.
-parece como si el destino quisiera que te follara con esto…-Musito el chico con una sonrisa malvada acelerado el pulso cardiaco de Suzuki quien al intentar escapar tropezó con una pila de papeles que lo hizo maldecir a su estúpido y desordenado dueño, Sato con una aura oscura tomo a Suzuki entre sus brazos cargándolo como una princesa y por más que Suzuki intento liberarse fue imposible, Sato tirándolo al sofá de la sala bajo sus bóxer mirando sus blancos y tentadores montículos les dio una suave palmada mirando como estos se sonrojaban.
-alguien ha sido un marido muy malo y merece un castigo por eso…
-¡AHHH, prometo que ya no lo volveré a hacer, por favor Sato…no uses esa cosas rara conmigo!
Sollozo Suzuki obteniendo otra nalgada que lo hizo gemir medio de dolor y placer, su pene inesperadamente comenzó a nuevamente levantarse y la vergüenza impregno sus mejillas poniéndolas sonrojadas- ¡por favor deja de nalguearme no soy un niño!-protesto sintiendo como otra palmada caía en su trasero provocando que su pene llorara liquido blanquecino.
-si piensas que fácilmente olvidare lo que me hiciste estas muy equivocado, nadie se burla de mi Suzuki y en este momento pienso demostrártelo…-susurro en su oído su esposo seductoramente y dándole un beso en el cuello le quito el bóxer dejando ante su vista lujuriosa el sonrojado trasero, abriendo las mejillas de este, relamiendo sus labios observo el pequeño y rosado agujero que se encogía y expandía levemente como si esperara ser llenado levantando más el trasero de Suzuki logro que el pequeño agujero quedara más cerca de su cara y soplando aire caliente por su excitación miro como Suzuki retorciéndose dejo de quejarse.
-quiero que chupes mi pene mientras yo le doy un beso a tu pequeño y apretado agujero…-dijo Sato lamiendo alrededor de la entrada haciendo que Suzuki se arqueara con placer y gimiera como si estuviera en celo.
-no pued…AAAAAhhhhhhh…no…puedo….
Protesto siendo lamido- claro que puedes hazlo-contesto Sato dándole otra palmada en el trasero, sintiendo como gotas de líquido preseminal caían en su estómago, Suzuki con el rostro todo rojo miro el enorme pene con la cabeza roja enfrente de el, tomado una bocanada de aire y más que todo valor le dio un beso provocando que una gota de rico elixir goteara como una lagrima por el pene de Sato, Suzuki dejándose dominar por su lujuria le dio otro beso gustándole el sabor por lo que lamiendo sus labios le dio otro beso hasta que los besos se convirtieron en láminas y leves chupadas-aghhh ¡SI! Tan bueno…lo haces excelente Susuki sigue así…-lo alentó Sato al mirar como su pene era lamido como una paleta haciéndolo enloquecer, pero recobrando algo de su cordura intento seguir con lo suyo abriendo aún más las mejillas del trasero de Suzki sato siguió lamiendo el tentador agujero rosa al mismo tiempo que su mano comenzó a masajear las bolas de Suzuki, mientras que este apenas y podía creer lo que estaba haciendo, mas, sin embargo, no podía negar su hambre metiendo la roja e húmeda cabeza del pene de Sato en su boca chupo deleitándose del rico sabor del semen de su marido y al este meter la lengua por su conducto no pudo evitar gemir y morder un poco haciendo a Sato soltar un ahogado gemido de placer que hizo sentir a Suzuki dominante por lo que malvadamente y con un esfuerzo épico bajo su boca hasta que sintió el corto vello púbico de Sato haciéndole cosquillas en la barbilla, con asombro se felicitó por ser haber sido capaz de tragar todo el enorme y rico pene de su marido, con una risa ahogada por estar atiborrado de pene chupo con fuerza sintiendo como las manos de Sato y la lengua en su agujero pronto comenzaron a temblar, los testículos de Sato se hincharon más indicando que este estaba a punto de correrse, Suzuki sintiéndose victorioso no se lo dejo pasar a Sato- parece que alguien está por venirse y se suponía me castigaría por niño malo…-se burló acariciando el pene con su mano mientras hablaba, pero Sato con una mirada oscura se vengó, ampliando el agujero metió dos dedos tocando el punto sensible de Suzuki mientras que su boca se trasladó a su pene tragándolo de un solo golpe por completo, gimiendo arqueo la espalda al casi venirse, con desespero intento no pensar en la húmeda boca chupando y los resbaladizos dedos penetrándolo por lo que casi llorando de frustración se mordió los labios intentando frenar su orgasmo.
-No más…me voy a venir…
Rogo logrando que Sato parara aumentando su frustración-¿Por qué paraste?-pregunto conteniendo las lágrimas por el placer-porque si te dejara correrte esto no sería un castigo-musito Sato buscando entre los cojines del sofá algo y al encontrar un pequeño frasco con lubricante tomo el vibrador de color verde llenándolo de lubricante, el vibrador parecía un dulce siendo bañado en miel lo que hizo estremecer a Suzuki y lo despertó de su lujuria.
-¡ni se te ocurra poner esa cosa en mí!
Se quejó obteniendo una risa malvada de Sato-eso te pasa por burlarte de mí por lo que este es tu castigo…-dijo colocando el vibrador de color verde en su entrada y empujándolo sorprendiéndose al este entrar con facilidad y ser prácticamente succionado hacia adentro, la púa alargada del vibrador se posó en los testículos de Suzuki masajeando levemente estos a medida que Sato metía y sacaba el vibrador.
-¡AAAAhhhhhh!!! “tan bueno…pero…no…”
-no es suficiente ¿verdad? Suzuki…
Dijo una voz de ultra tumba y Suzuki temblando observando detrás de el miro como Sato lubricando su pene tenía una sonrisa siniestra en el rostro-¡no te atrevas, no cabrán!-se quejó obteniendo una palmada en el trasero que hizo al vibrador ir un poco más al fondo lo que lo hizo perder su cordura y dejar de importarle si sato le metía su enorme pene también, como era de esperarse Sato masajeando la cabeza de su pene en la entrada de Suzuki logro que esta se abriera un poco más haciendo que su cabeza fuera chupada-Ahhhh esta tan apretado-dijo Sato y con un colosal auto control deslizo su pene poco a poco deteniéndose debes en cuando, pues lo apretado del canal y el vibrar del juguete estaban a punto de hacerlo estallar, después de algunos mitos y gemidos de placer de ambos Sato logro estar totalmente enterrado en el estrecho agujero, ambos temblando se quedaron así por unos minutos conteniendo el orgasmo.
-no puedo más…estoy muy lleno…se siente taaaaahhhhhh….
-¡AAAhhhh! BUENO…rico ahhh ¿no Suzuki?
Dijo Sato con la respiración entre cortada y gimiendo mientras sentando en su pene a Suzuki quien temblaba de placer por lo que Sato tomando su mano le dio un amoroso y lujurioso beso de lengua mientras con su otra mano pellizco uno de los pequeños y erectos pezones de Suzuki al comenzar empujarse y salir del delicioso conducto, sus gemidos pronto se mesclaron con los gemidos de placer que se escucharon del cuarto de Usami al parecer ambos estaban teniendo sexo al mismo tiempo que sus dueños, lo que avergonzó a Suzuki y lo excito apretando dolorosamente el pene de Sato.-AAAAAHHHH Demonios…se quejó este empujando con mayor fuerza haciendo que ambos se perdieran en el placer, empujándose el uno contra el otro con mayor profundad, el sudor de cada uno se mesclo con el otro haciendo que el juego de empujar y meter se hiciera más resbaladizo y placentero, Suzuki mordiéndose el brazo se corrió sin poder evitarlo y su semen se esparció por todo su abdomen y parte de su rostro, minutos después con un lujurioso gemido Sato lo acompaño viniéndose en lo más profundo de su apretado de su pasaje, Susuki sin fuerza colapso en la mesa que estaba cerca del sofá respirando entre cortado, Sato igual de cansado y saciado salió de él sacando el usado juguete también solo para excitarse nuevamente al mirar un hilo de semen por el estirado agujero de Suzuki.
-demonios…mierda creo que este ha sido el sexo más intenso que hemos tenido…no me sorprendería si quedas embarazado…
-¡cállate deja de imaginar cosas tontas!
Expreso Suzuki hecho polvo dándole una pequeña patada en la cara a Sato, sin imaginarse que pronto su marido tendría algo de razón, Con ojos amenazantes y un aura oscura digna de todo villano Suzuki miraban en el sofá a las tres nuevas adiciones a la “familia”, entre las cuales estaban un pollo mullido de color amarillo, un conejo blanco y oso panda.
-La cigüeña los trajo hijos Suzuki…-dijo Sato con lágrimas contenidas en sus ojos provocándole casi a Suzuki un paro cardiaco quien con un estruendoso grito se negó a creerlo.
-¡IDIOTA NO SON NUESTROS HIJO!!!
Grito negando de lado a lado, mientras que por su lado Sato procedió a abrazar a los tres peluches como si estos fueran sus bebes lo que asusto aún más al tierno osito.
Continuara…