Faltaba media hora para que Kano tuviera que ir a la escuela de nuevo, se encontraba en su habitación, limpio y con su uniforme puesto, tratando de cubrir esa marca morada que había quedado bajo su ojo derecho, después de que su padre lo había golpeado el día anterior.
Hacía bastante tiempo que Kano había comprado maquillaje del color de su piel, para cubrir los moretones y marcas que le dejaba su padre en su cara cuando tuviera que salir de casa, ya que, le avergonzaba demasiado mostrar ese tipo de laceraciones.
-bien… parece que ya no se nota…-se dijo a sí mismo, observándose a un espejo que tenía colgado en su habitación.
Una vez que termino, tomo su mochila y fue directo a la cocina, donde estaba el almuerzo que había preparado hacía varios minutos para llevar a la escuela, lo tomo, se despidió de su madre (que se encontraba en la cocina, limpiando desesperadamente), y salió de casa, se alegraba que su padre y su hermano fueran perezosos que se levantaban tarde (Eran las 6:55 AM), así, tenía al menos un rato para estar en paz por la mañana antes de ir a la escuela.
Iba caminando tranquilamente, de camino a la escuela, por la calle menos transitada que encontró en el trayecto de su casa a la escuela, cuando de repente escucho que alguien le llamaba:
-¡Kazuki!-grito Yuki, llegando corriendo detrás de Kano.
-Hayate-san, buenos días-saludó algo sonrojado Kano.
-camino a la escuela ¿eh?
-sí, creo… jejeje…-se rio un poco Kano.
-¿eh?-dijo confundido Yuki, mirando fijamente el rostro de Kano.
-¿q-qué sucede…?-dijo Kano algo preocupado.
-¿Qué es esto…?-dijo Yuki frotando un poco con su dedo donde Kano tenía el moretón cubierto de maquillaje-¿maquillaje?
-¡n-no! ¡No es nada!-dijo muy alarmado, cubriendo el moretón, que después de que Yuki le había quitado el maquillaje con su dedo, estaba visible.
Yuki tomo la mano que cubría el moretón y la bajo lentamente, observando con cuidado dicho moretón.
-quien te hizo esto…-dijo molesto Yuki.
-na-nadie… no es nada, es solo una pequeña mancha…
-Kazuki… si eso fuera solo una mancha, ¿Por qué lo cubrirías con maquillaje? Obviamente es un moretón…
-bueno… es un moretón, pero, es que… ayer de camino a casa me caí y me golpee, es todo…-fue lo primero que se le ocurrió a Kano, pero, obviamente se le notaba muy nervioso.
-kazuki…
-es que… me da pena que alguien vea lo torpe que soy, por eso lo cubrí con maquillaje…-dijo, sacando el maquillaje de su mochila, y tratando difícilmente de volver a cubrir el moretón, pero sus manos temblaban-¿s-se nota mucho…?-le pregunto Kano a Yuki.
-no… no se ve…
-qué alivio…-suspiro Kano- ¿Cómo lo notaste…?
-ayer te lo dije, soy muy perceptivo…-Yuki estaba preocupado, sabía que ese moretón no era un accidente-bueno… vamos, llegaremos tarde si nos quedamos aquí…
Llegaron a la escuela, Kano entro directamente al aula, seguido por Yuki.
Una vez ahí, poco antes de que las clases comenzaran, estuvieron conversando un poco, pero Yuki, no podía simplemente ignorar ese moretón.
Una vez más, llego el descanso, Yuki se dio la vuelta y le dijo a Kano:
-¿trajiste almuerzo?
-si…-le respondió Kano.
-bien, ¿te parece si comemos juntos?
-cla-claro…-fue lo único que podía salir de la boca de Kano, se sonrojo.
Salieron al patio de la escuela, se sentaron en una banca y justo cuando comenzarían a comer, Yuki dijo:
-espera, traeré algunas bebidas-se fue.
Justo un minuto cuando Yuki se fue, llegaron los 3 tipos que le habían atacado el día anterior, y uno de ellos dijo:
-ayer te dejamos por que el presidente llego, ahora si no te escapas…
-esperen, yo… no quiero problemas…-respondió asustado Kano.
-¡cierra la boca!-le lanzo un puñetazo a Kano, quitando de golpe, el maquillaje que le cubría, y al mismo tiempo, machando del mismo maquillaje, el puño del agresor de Kano-pero que… ¿maquillaje? ¡¡jajaja!!-comenzó a reírse el bravucón, y cuando sus compañeros se dieron cuenta, ellos también comenzaron a reír, entonces, uno de ellos grito:
-¡¡escuchen todos, la princesita nueva usa maquillaje!!
Muchos chicos de alrededor, comenzaron a reírse, burlándose de Kano, sin saber los detalles.
Kano comenzó a llorar, no sabía qué hacer, se estaban burlando de él, y probablemente, los tipos le comenzarían a golpear de nuevo, en cuanto dejaran de reírse, así que no se le ocurrió otra cosa, se levantó y se fue corriendo mientras lloraba.
Yuki regreso con un par de sodas, pero cuando noto como todos se reían de algo, los tres tipos estaban parados justo frente a donde él estaba con Kano, y vio como Kano se iba corriendo. Lo más rápido que pudo, llevo los almuerzos al aula, y se fue corriendo a buscar a Kano.
Kano por su parte, estaba escondido en una caseta de los baños, sentado en el piso de dicha caseta, llorando.
De repente, se escuchó como alguien entró al baño, Kano estaba muy asustado, temía que esos 3 tipos le hubieran seguido hasta ahí. La puerta de la caseta se abrió, Kano no sabía que hacer más que cerrar los ojos, abrazarse a sí mismo y, esperar a ver qué pasaría con él, pero entonces, escucho una voz conocida:
-¿Kazuki…?-Kano abrió los ojos y vio como Yuki estaba ahí.
-Hayate-san…
-Kazuki, ¿Qué sucedió? ¿Estás bien?
-no… no estoy bien…
-¿Qué sucedió?
-por qué tienen que ser tan crueles…
-calma… no es tu culpa…-le ayudo a levantarse.
-Hayate-san…
-vamos, aún quedan 20 minutos de descanso, suficiente para que comamos, ¿no?
-si…-dijo Kano, secando sus lágrimas y sonriendo un poquito.
Ambos salieron y decidieron comer en el aula.
Las clases por fin terminaron, y una vez más, amablemente, Yuki le dijo a Kano si le acompañaba a casa, pero, Kano no quiso.
Kano llego a su casa. Siempre le gustaba asegurarse de que su madre estuviera en casa, ya que cuando ella estaba, su hermano y su padre no le hacían nada, pero eran distantes, las veces en las que ella estaba en casa por la tarde, y esa era una de las tardes donde ella no estaba.
-hey tú…-dijo el padre de Kano, que al parecer, ya estaba ebrio, y aun sostenía una botella.
-¿s-si padre…?
-de donde mierda llegaste…
-de la escuela…
-debiste haber dejado el desayuno listo…
-pero… sí lo deje estaba en la estufa…
-claro, y yo nací ayer…
-mira padre, trato de no ser irrespetuoso, hago todo lo que me pides, pero simplemente no lo soporto, ¡si por un momento dejaras de beber tu estúpido alcohol y no te embragarías, encontrarías el maldito desayuno por el cual me levanto todos los días a las 4:30 AM después de dormir solo 2 horas!-Kano había perdido los estribos.
-…-su padre había quedado desconcertado y comenzó a acercarse a Kano lentamente.
Kano comenzaba a asustarse, se notaba la ira en sus ojos, entonces, el padre de Kano levanto al aire la botella, Kano cerro fuertemente los ojos, pero el padre de Kano, le estrello la botella en el hombro. Por toda la casa, se escuchó el grito de Kano, el cual, rápidamente se llevó la mano derecha a su hombro izquierdo, pues estaba sangrando mucho y tenía algunos pedazos de vidrio enterrados, así que fue corriendo a la cocina por el botiquín de primeros auxilios, el cual llevo a su cuarto, se quitó cuidadosamente la ya manchada camisa del uniforme y comenzó a sacar los vidrios que tenía en su hombro.
Una vez que termino de curar su herida, se puso una camisa holgada, pero aun así, le dolía demasiado la herida.
Rápidamente, y aun con dolor en su hombro, que se había extendido a su brazo casi completo, llevo su camisa machada con sangre a lavar.
Con dificultad en la tarde, apenas y pudo hacer la cena, y para que no ocurriera lo mismo que el día anterior, fue y se encerró directamente en su cuarto.
Durante toda la noche, Kano no aguantaba el dolor, simplemente no durmió, ni siquiera la oscura seguridad de su habitación y el silencio de la noche pudieron ayudarlo.
Al día siguiente, tuvo que quitarse las vendas para bañarse, y cuando vio su herida, noto que, obviamente dejaría marcas cuando cicatrizara, pero eso ya no le importaba, su delgado cuerpo tenía ya, varías marcas que nunca se borrarían, que le recordarían toda su vida esos maltratos.
Preparo el desayuno y se fue.
Una vez más, en el camino a la escuela:
-¡Kazuki!-grito Yuki.
-Hayate-san…
-¿sucede algo?
-no, nada…
-bien, vamos a la escuela-le puso su mano amistosamente en el hombro que tenía herido.
-¡agh…!-se quejó Kazuki.
-Kazuki, ¿seguro que no pasa nada?
-sí, seguro… es solo que me duele un poquito el hombro… je…
-Kazuki… me estas escondiendo algo…
-¡¿Qué?! No, para nada, porque lo haría…
-Kazuki… solo déjame decirte algo… si necesitas algo… cualquier cosa… por favor, no dudes en acudir a mí…
-Hayate-san… gracias…-inconscientemente, Kano se lanzó a abrazarlo, ignorando por completo su dolor.
Yuki correspondió el abrazo de Kano, pero, cuando Kano se dio cuenta de que estaba abrazando a Yuki, se separó de él y se sonrojo lo más que pudo.
-¿Qué sucede?-pregunto confundido Yuki, no entendía por qué Kano había dejado de abrazarlo.
-perdona, lo siento, no fue mi intención…-Kano estaba muy avergonzado.
-no pasa nada, está bien…-Yuki le sonrió.
Kano se sonrojo aún más, pero interrumpió el momento diciendo:
-mejor vayamos a la escuela… llegaremos tarde…
Y Yuki le respondió:
-sabes, esto me parece un déjà vu-ambos chicos se rieron y fueron a la escuela.
Esta vez, Yuki trato de no dejar a Kano solo, para que nadie lo molestara, ya que, a Yuki, todos le tenían mucho respeto, y la verdad, a Kano le encantaba la compañía de Yuki.
La escena se repitió una vez mas, la amable petición de Yuki, de acompañar a Kano a casa, fue rechazada.
Una vez más, Kano regreso a casa, solo que, su padre no estaba, era rara la vez en la que ninguno de sus padres estaba, pero eso solo podía significar una cosa… su hermano sería más peligroso que nunca.
Kano salió corriendo directamente a su habitación, pero justo cuando iba a abrir, algo lo derribo al piso.
-¡¡aaghh…!!-grito al sentir una vez más, los efectos de la herida en su hombro.
-mejor cállate princesa… o es más… no te calles, después de todo… nuestros padres no están…
-Sho…-Sho, era el nombre de su hermano.
-mira… ahorita no está mamá para protegerte, así que, mejor, coopera o te dolerá…
-no pienso dejarte hacer esto…
-¿y que va hacer un chiquillo de 14 años con un hombro lastimado contra su fuerte y masculino hermano de 23?
-tu… como sabes lo de mi hombro…
-tu grito probablemente se escuchó hasta la calle ayer cariño… jeje… pero basta de eso… tenemos trabajo…-metió sus manos dentro de la camisa de Kano.
-¡Sho, basta!-le grito Kano.
-no…-comenzó a lamer su cuello.
-S-Sho… detente… esto no está bien…
-tu no estas para decidir lo que está bien o no… así que cállate y disfrútalo…-comenzó a desabrochar el pantalón de Kano.
-Sho… si me respetas como hermano… detente…
-¿y quién te respeta como hermano? Yo te quiero como mi puta personal…
-Sho…-nunca le había dicho algo así.
Sho metió su mano dentro del pantalón de Kano, el cual, simplemente no podía hacer nada, la fuerza de su hermano era más de lo que podía manejar.
Las lágrimas de Kano comenzaron a salir, simplemente, que su hermano le hiciera eso, no le gustaba nada.
Entonces, fue cuando Sho le jalo los pantalones y comenzó a desabrochar los botones de su camisa junto con los de la de Kano.
Kano lanzo un rasguño en la cara a Sho, el cual, le respondió con un puñetazo en la boca, que hizo que su labio inferior comenzara a sangrar, pero, aprovecho que el rasguño a Sho levantarse, salir corriendo y mientras corría, tratar de acomodar su ropa.
Logro salir de la casa, con la camisa mal abotonada, pero lo único que quería era huir de ese hoyo de sufrimiento.
Llegó hasta cierto parque cercano a su casa, se sentó en una banca y comenzó a llorar… no le importaba que la poca gente que pasara le viera raro, el solo quería desahogarse.
De repente, Yuki pasó trotando, con ropa para hacer deporte, pero se detuvo justo cuando vio a Kano llorando…
CONTINUARA…