No… no era la edad, no era la época, no era las diferencias de como crecieron, ni si quiera tenía que ver con la carrera que cada uno había elegido o le había tocado.
No… En definitiva no era eso.
Simplemente no se llevaban, no compaginaban, podían trabajar juntos, pudieron incluso salvar la tierra estando codo con codo, pero no se llevaban bien. Fuera de ser compañeros no podían ser ni si quiera amigos. Esa era la verdad.
Tony miraba en silencio a Steve, mientras terminaban de ponerle las esposas y “bozal” a Loki, recibía también una mirada por parte del Súper soldado, ¿Qué significaba aquella mirada? Quizá nunca lo sabría, contemplaba a aquel hombre que más que hombre era una leyenda, como había dicho, una que se superaba así mismo. Pero, ¿Qué había detrás del héroe? Podía presumir de ser de las pocas personas que sabían la respuesta a esa pregunta. Con informes, videos, investigaciones, con la gran memoria de JARVIS atascada de información del súper soldado, conocía hasta su vida personal, sus amigos… sus… ¿Relaciones? Aún le sorprendía que una mujer muerta le provocara tantos celos. ¿Celos?; Si, eso eran, celos en su estado más puro, celos de que por los relatos de su padre ella pudo acercarse a Steve, celos de que ella podía mantener una conversación con el sin que terminara en una discusión, celos de que a ella le llamara por su nombre y no por su apellido de una forma militar que dejaba entre ver que para el rubio él no era más que otro soldado y compañero de armas que luchaba a su lado.
¿Eso quería decir que le gustaba Steve?; No, a él no le gustaban los hombres anticuados, que ni en mil años tendría una relación de ese tipo y menos con él. Menos con un hombre que a opinión y palabras del Capitán, no valía nada sin su traje. Así que no, el no sentía nada por Steve y si lo sentía, se negaría a aceptarlo siempre.
_________________
Steve no podía apartar sus ojos de Tony Stark, sabía que el otro también le observaba, sabía que aquellos mares chocolate miraban cada uno de sus movimientos. ¿Le juzgaba? No… más bien le analizaba, eso, le analizaba, por que Tony analizaba todo siempre, para mover las piezas a su conveniencia. ¿Entonces por qué le prestaba atención? ¿Por qué le seguía aquel juego? No lo sabía, pero no podía dejar de hacerlo, de verle en silencio, de imaginar una y mil cosas en su cabeza, y es que navegando en lo que era ahora internet, esa cosa que de seguro era vital para Tony, había descubierto un montón de adelantos, de noticias, de novedades, la nueva libertad sexual entre ellas, y no podía de dejar de ver a Tony y relacionarlo con aquello, ¡simplemente no podía! Las imágenes bombardeaban por si solas su cabeza, con dos únicos protagonistas… ¡Demonios! ¡Pero si ni si quiera podían mantener una conversación normal sin llegar a los gritos! Para Tony él no era más que un anciano anticuado equivocado de época, le respetaba como estratega, como líder militar… Pero ni en sueños le vería de otra forma, ¡Pero vamos! Que él no podía competir con las estrellas y hermosas luminarias que desfilaban por la cama del afamado millonario.
Llegaron al punto en el que despedirían a Thor y a Loki, por debajo de los lentes oscuros de ambos aún sus miradas permanecían pegadas y pendientes del otro. No lo podían evitar, no estaba bajo su control.
¿Tensión sexual? Era lo que diagnosticaba Natasha y a ambos se los había hecho saber, por separado claro está, comentándolo de una manera tan sutil como solo la espía podía hacerlo. El millonario había soltado una carcajada, seguida de un ácido comentario sarcástico digno de él, que le daba a entender que él nunca consideraría algo así. En cuanto a Steve, este se había sonrojado un poco, siendo mucho más transparente que él anterior, pero al igual que este negando afanosamente que aquello fuera algo tal como “Tensión sexual”
Los Asgardianos desaparecieron y los restantes vengadores se despidieron entre ellos, él último estrechamiento de manos fue de Steve y Tony, fue uno fuerte y educado, que solo con tocarse corrientes eléctricas les llenaron por entero. Pero aun así sus rostros solo reflejaban una fría cordialidad.
_________________________
-Así fue Pepper… Nos miramos en silencio, nos despedimos fríamente… -un largo respiro-y en verdad me dolió- relato el genio con voz cansada, en el que era su nuevo taller, ubicado en la torre Stark que luego de la destrucción de su casa, había convertido en su nuevo hogar.
-¿Por eso comenzaste una relación seria conmigo? ¿Por eso te aislaste de todo y de todos en tu taller? ¿Steve era parte de esas cosas de Nueva York que querías olvidar? ¿Por eso casi mueres?- hablaba la mujer incrédula ante lo que su ex pareja, ahora amigo le contaba.
-Si… ah, básicamente.
-Eres tan infantil Tony, por eso lo nuestro no funciono.
-Puede ser… o puede ser porque te enfadaste cuando nos encontraste a mí y a ese modelo ruso en…
-Sí, sí… No recordemos eso- negó la chica- Ahora que lo pienso en verdad tienes una fijación con él. ¿Cierto?
-¡Fijación!- exclamo Tony parándose del cómodo sillón donde estaba- Yo no tengo una fijación…
-No, diría que más bien es una obsesión.
-¡Genial! Primero intento sincerarme con Bruce y él ni si quiera me escucha y ahora hablo contigo y me sales con que tengo una obsesión- hablo caminando para servirse algo de café.- Ninguno sirve para esto…. ¡Babas nunca aprenderás a hacer café!- regaño a la maquina que había derramado algo del liquido- Ve y límpialo, y cuidado con mojar todo mi equipo otra vez.
-Lo siento Tony, pero no somos psicólogos y créeme tú necesitas uno. – dijo al ver como regañaba a él inocente Babas.
-Pero si ya tengo uno.
-¿Así?
-Si, JARVIS – Llamo- Activa tu nueva modalidad de análisis psicológico y dame una observación de lo que le conté a la señorita Potts.
-Enseguida señor.
-¿Ves?
-JARVIS no cuenta, ¿Cómo una maquina te va a decir lo que sientes? mira lo que necesitas...
-Análisis completo señor.
-Háznoslo saber JARVIS.- dijo sonriendo, levantando su taza de café para darle un sorbo y avanzar de nuevo al sillón.
-Me temo señor que según los análisis, no solo de esta conversación, si, no también de archivos guardados en mí, finalizando con la colección que tiene de forma física alusiva al capitán, debo informarle que le doy la razón a la Señorita Potts, usted tiene una, fijación, obsesión y/o enamoramiento, hacia el Capitán Steve Rogers.- explico la inteligencia artificial, haciendo que Tony se ganara una mirada acusadora de Pepper.
-Es una maquina, ¿Qué puede saber él?- dijo antes de darle una trago a su bebida.
-Es tu maquina, dímelo tú.
-Señor Stark- llamo.
-¿Ahora qué JARVIS? Solo habla si te vas a retractar de lo que dijiste.
-No lo hare señor, pero es mi deber informarle que el mencionado Capitán Rogers está en la torre Stark, más exactamente en el elevador y si dirige hacia aquí.
-¿Y cómo supo que yo estoy aquí?
-Me tome la libertad de indicárselo cuando subió al elevador.
-JARVIS creo que necesitas serias reparaciones en tu sistema- ¿Por qué demonios Steve le buscaba? Si para él era mejor no verlo… eso, no verlo y así olvidarse de él… Aunque eso era difícil, dado que siempre estaba en contacto con él.
-Por el contrario Tony, creo que JARVIS está mejor que nunca. – negó Potts recogiendo los documentos que había llevado para que Tony firmara.
-¿Y ahora a dónde vas? – pregunto Tony al ver a Pepper avanzar al elevador.
-Creo que necesitaran privacidad… Dile que te gusta- dijo volteándose ligeramente antes de que el elevador llegara a su destino.
-Él no me gusta- negó cual niño pequeño- es más ni siquiera me cae bien.
-Tony si tienen peleas es por tu culpa, la etapa de molestar al niño que te gusta paso en pre escolar.
-Yo no le diré nada.
-¡Tony mira cuando alguien te gusta simplemente debes de ir y…!- se calló cuando las puertas del elevador se abrieron, dejando ver a un rubio que se notaba nervioso, y que abrazaba un cuaderno de dibujo.- ¡Steve! – Saludo alegre.
-Hola, Pepper- devolvió el saludo el rubio saliendo del elevador- Yo…
-Vienes a ver a Tony… Lo sé.
-Lamento si interrumpí…
-Ah, no, no descuida, charla de madre a hijo eso es todo- negó la chica subiendo al elevador- Adiós Tony, adiós Steve- se despidió con una sonrisa antes de que las puertas se cerraran.
-Hola Stark- saludo el rubio viendo al moreno que parecía demasiado cómodo en su lugar para moverse de él.
-Hola Rogers, ¿Qué te trae por mi humilde, y horrible según tú, Torre?
-Ya me disculpe por eso Stark- recrimino caminando a sentarse en un sofá enfrente del genio- Vine aquí porque estaba preocupado por ti.
-¿Qué? ¿Preocupado por mí? – se sorprendió ante esto y en el fondo una alegría se propago al saber que le importaba al soldado, sin embargo su lado “Stark” gano haciendo aquellas preguntas con sarcasmo.
-Escuche, y vi algunas cosas de lo que paso con el Mandarín y todo eso… tú- trago saliva y Tony pudo jurar que le dolió decir lo siguiente- Tú supuesta muerte.
-No es tan terrible como suena… los medios exageran Capitán.
-Lo sé pero…
-Pero ya está todo solucionado, no digo que un poco de ayuda unos meses atrás no me hubiera servido, pero ya ves… Me se cuidar yo solito.
-Tony, no entiendes, yo quería venir a ayudar, de verdad que quería, pero SHIELD me tenía al otro lado del planeta en una misión, no me entere hasta que vi en televisión lo de tu muerte, en ese momento quise regresar, pero me convencieron que ayudaba más haya… Perdóname por no estar aquí ayudándote como los compañeros que somos…- Steve era sincero, Tony no tenía la menor idea de cuánto había sufrido al enterarse de su muerte, lo mucho que se había desesperado, y cuanto había deseado regresar a América, pero tenía asuntos sin resolver y si Tony ya no estaba, ¿Qué caso tenía volver? ¿Qué caso tenía maldecir sobre una tumba el no haber estado allí para esa persona? Él mejor que nadie sabía que aquello no tenía caso, porque no había estado en la muerte de la mayoría de las personas que era importantes para él. Porque Stark lo era, era algo muy importante en su vida… Se había convertido en algo importante para él, fue quizá poco el tiempo que convivieron, de verdad muy poco… pero no así el tiempo que hablaban…
Porqué Tony no se lo había dicho a Virgina, pero JARVIS si lo sabía, ellos hablaban largo rato por el chat, mensajes y una que otra ocasional video llamada, el genio le había dicho que necesita practicar su manejo de la tecnología, ¿Y quién mejor que el gran Tony Stark para enseñarle? No se veían en persona, ¿Por qué? Porqué en persona, por alguna razón u otra terminaban discutiendo, como ahora.
-Estoy seguro que tenían razón al decir que ayudabas mas haya… Y la verdad como dices… solo somos colegas, no tienes por qué preocuparte realmente por mi…
-Pero lo hago…- interrumpió viéndole consternado- Me gusta hablar contigo Stark, me siento feliz cuando veo tus mensajes, contarte mi día por las noches y que tú hagas lo mismo me gusta… lo extrañe estos meses que estuvimos incomunicados… ¿Sigues con tus pesadillas sobre el agujero de gusano? ¿Aún no se lo cuentas a nadie?-pregunto interesado, haciéndole recordar al genio que Steve era él que primero se había enterado de aquello.
-Se lo tuve que contar a Pepper… por vivir juntos y eso…
-Entiendo- asintió con un tono que al otro le pareció, ¿Decepción?- ¿Cómo va su relación?
-Terminamos… No era para nosotros ese tipo de relación.
-Ah… Lo lamento.
-Descuida… - le quito importancia- la verdad es que… - se vio interrumpido por el sonido de algo al caerse, ambos giraron la vista hasta donde el brazo de robot mecánico había tirado la cafetera, mientras limpiaba su pasado desastre- ¡Babas! Harás que me arrepienta de conservarte- regaño el castaño para pararse hasta recoger un sombrero de papel donde se podía leer la palabra “idiota” para ponérselo- Tendrás que llevarlo de nuevo.- dijo sacando una pequeña risilla a Steve, había momentos como ese en los que al mayor Stark le parecía demasiado adorable.- En fin- suspiro volviendo a su lugar- ¿En que estaba?
-Tú rompimiento con Pepper.
-Ah… Sí, pues no funciono, así sucede a veces las relaciones simplemente no se dan lo de nosotros era una larga rutina… Aunque con la experiencia que tienes no sé si me entiendas, digo… ¿Virgen a los 90? ¿O me vas a dar la sorpresa de que ya….?
-No vas a empezar a molestar otra vez con eso- se molesto y sonrojo el rubio mirándole con el señor fruncido.
-Solo era un tema de conversación Rogers, no te molestes… Pero tienes que admitir que si es un poco raro eso… Dime, ¿Ni si quiera te gusta nadie?
-No quiero hablar de eso Stark. – desvió la mirada apretando con más fuerza su cuaderno de dibujo entre las manos.
-Bien, bien, ¿Entonces eso era a todo lo que venías? Porque ya viste que estoy bien.
-¿Me estas corriendo?
-No, para nada… - Si, si lo estaba haciendo, pero es que ver sonrojado aquel hombre era algo fascinante y atrayente para él por lo tanto no lo quería cerca- Solo creí que tendrías mejores cosas que hacer… como no sé… ya sabes trabajar en tu nula experiencia sexual- sonrío encantador.
-¿No puedes dejar de molestarme cierto?
-Creo que no… Pero es que tú te prestas Capi, es demasiado sencillo hacerlo.
-O quizá simplemente seas una persona irritante y molesta.
-¿Te lo parece? Yo creo que soy encantador.
-¿Para quién? ¿Para los que quieren tú dinero o para las que buscan meterse a tu cama?
-Para todos.- negó ya más serio, no le gustaba tocar el tema de las personas que solo buscaban su dinero.
-Si tú lo dices…
-Que linda forma tienes de venir a saludar a un compañero Rogers.
-Te recuerdo que tú empezaste.
-Claro yo siempre empiezo…
-Solo si fueras algo menos arrogante.
-Así es me estilo.
-¿Y volvemos a eso? ¿No puedes dejar eso de lado?
-Muy bien ahora que no traes tu traje me quede un poco sin argumentos pero escuche que le hicieron un lindo cambio de imagen.
-Eso no tiene nada que ver. Tu pretensión va más allá de un traje.
-Sí, tienes razón, a decir verdad tuve como cincuenta.
-Stark deja de comportarte como niño de pre escolar.
-¿Qué tienen ahora todas diciéndome que me comporto como niño?
-Ah… no sé, será… ¡Porque de verdad te comportas como niño!
-Bueno a diferencia de otros no soy un anciano anticuado.
-Y allí vamos otra vez- Steve se hecho hacía tras en su asiento suspirando- ¿Por qué siempre terminamos así?
-Así somos Capi- dijo Tony poniéndose de pie- No nos podemos llevar bien más que para combatir en las misiones.
-Yo creo que si podemos llevarnos bien. – Afirmo viendo al otro a los ojos.- Aunque Natasha dice que es…
-Tensión sexual- dijeron los dos a la vez.
-Sí, lo sé, a mí también me lo dijo.- siguió Stark- Pero estoy seguro de que no es eso.
-Claro, yo también se que no es eso- se apuro a decir el capitán- pero quizá sea algo parecido…
-No es nada parecido Steve, así sucede, a veces las personas no se agradan y ya…
-Pero tú si me agradas Tony- susurro el rubio en un tono apenas audible, bajando la vista, sorprendiéndose así cuando el otro se le sentó en las piernas, tomándolo de los hombros para recargarlo en el respaldo del sillón- ¿Qué haces Tony?
-Comprobándome de una vez y por todas a mi mismo que esto no es tensión sexual.
-¿A ti mismo….?
Los labios del capitán fueron sellados por los del genio, al principio no supo qué hacer, tenía los ojos abiertos como platos, mientras sentía los dientes y lengua del otro sobre sus labios, cuando se decidió a responder lo hizo con algo de torpeza a causa de la sorpresa y poca experiencia.
Esto causo una risilla en Stark al separarse, si Steve se comportaba así…quizá, quizá no era tensión sexual después de todo, su pequeña burla ocasiono que Steve frunciera el seño, Tony lo vio dibujando una sonrisa más en su rostro.
Sonrisa que dejo de serlo, cuando el chico de franjas y estrellas tomo su nuca atrayéndolo para besarlo… ¡Y eso si fue un beso! El castaño respondió con cierta desesperación ante el avasallante ataque, permitió a su boca ser invadida, enredando su lengua con la contraria, sus manos despeinaban el siempre ordenado cabello del capitán, mientras las manos del otro bajaron a su cintura, pegándolo a su cuerpo. No se besaban, se devoraban prácticamente.
Steve ni si quiera se percato de que su cuaderno cayó al suelo, emocionado como estaba al sentir aquel caliente cuerpo pegado al suyo. Al final el aire jugo de las suyas, siendo necesario para los pulmones, se separaron, mirándose a los ojos, ninguno se soltaba, las manos de Steve seguían ancladas a las masculinas caderas y las de Tony con suaves movimientos enredaban sus dedos en los mechones rubios.
-¿Qué esa mujer nunca se equivoca?- se quejo haciendo que ambos comenzaran a reír, en ese momento de relajamiento fue que Steve noto su cuaderno de dibujo tirado, con algunas hojas sueltas desperdigas, haciendo uso de su fuerza movió a Tony para apurarse a recogerlos no sabía que pensaba al llevar aquello allí. Aunque después de lo que había pasado, no tenía en si la menor idea de que pasaba por su cabeza, quizá como le dijo un día el genio sus años en el hielo si le afectaron.
Anthony curioso se agacho a recoger una de las hojas, topándose nada más y nada menos con una imagen de él mismo con su traje, no traía las mascara y tenía sus ojos cerrados, el traje parecía maltratado y había algunos rasguños en su rostro… ¿Podría ser de aquella vez…? Vio las hojas que el otro recogía, notando pequeños atisbos de lo parecían más dibujos de él.
-Steve…-llamo suavemente.
-Me gusta dibujar- fue todo lo que dijo el militar acomodando las hojas en el cuaderno.
-Lo sabía.
-¿Cómo?- cuestiono levantando la vista, viendo una mirada en Tony que nunca había visto antes.
-Lo sé, lo sé todo de ti, o al menos eso creía, se donde fuiste criado, se quienes fueron tus padres, se que te gustaba hacer, se como fue tu infancia, se todo de Bucky, de Carter del Coronel Phillips se de todas las personas que estuvieron cerca de ti hace años, y de las que están cerca de ti ahora- dijo algo ausente, pensando que dicho de esa manera si parecía una fijación.
-¿Por… por qué?
-Has sido mi héroe desde que tenía cinco, cuando te conocí le comente a Bruce que mi padre exageraba cuando hablaba de ti, pero… es que yo no quería admirarte solamente…
-Tony, ¿Qué estás diciendo?- pregunto acercándose a él lentamente, Tony ni lo notaba, había perdido su vista en el dibujo.
-¿Por qué me dibujas? ¿Por qué a mí?
-No lo sé… solo dibujo lo que… lo que me nace dibujar, y eso, eso has sido tú.- admitió algo apenado más cuando esos ojos se elevaron para verlo a él con escrutinio.
-¿Te gusto?- pregunto pero por respuesta solo recibió silencio -¿Qué si te gusto Steve? Ya sabes… gustar… gustar… Como cuando te gusto la teniente Carter.- explico acelerado, pero es que sentía su corazón palpitar a una velocidad increíble.
-No…-contesto el otro despacio, contrarrestando la velocidad del castaño-No como ella… ella me agradaba, tenía ideas románticas con ella…
-Ya veo…- dijo en suspiro doloroso.
-Pero contigo…-siguió ignorando las palabras de Tony.- Contigo es todo tan diferente, me levanto a media noche pensando en ti y me pongo a dibujar, me siento ansioso si no sé nada de ti, es una desesperación insana la que tengo hacia tu persona, las peleas que tenemos me aceleran por completo… Cuando supe que habías muerto sentí que ahora si estaba solo por completo…
Ante esto el de la armadura tomo despacio de las manos el cuaderno de dibujo, comenzando a hojearlo, para al terminar posar sus manos lentamente en el pecho del otro.
-¿Y qué sueños tenía conmigo exactamente Capitán?- cuestiono con una sonrisa pícara, haciendo sonreír al rubio también… ese era el Stark del que estaba… ¿Enamorado?
-No te lo pienso decir- negó contra su boca, ya que esta estaba a un par de milímetros de la suya- Stark…
-¿Hmm?- fue todo el sonido que salió de sus labios mientras los rosaba despacio contra los de Steve.
-Se que te dije que contigo no tenía ideas románticas o algo así… pero, ¿Puedo invitarte a una cita?- esta pregunta hizo a Stark separarse para ver directivamente la cara sonrojada del rubio.
-No puedo decir cuánto me gustan los atentos caballeros de antes- dijo sonriendo antes de besarlo esta vez de manera intensa, sosteniéndose del cuello, sintiendo al otro corresponder con una ternura que logro mover algo dentro del playboy.
-¿Eso es un sí?- cuestiono entre los besos cortos que empezaron a darse.
-Eso es un sí, Capitán bobo…