Imagínate que comenzarás un nuevo ciclo escolar, tendrás nuevos compañeros de clases, algunos se quedarán así, como compañeros, otros podrán llegar a ser tus amigos, son dos cosas diferentes. Te encontrarás profesores de todo tipo, algunos serán los mejores, otros serán tu peor pesadilla, tendrás nuevas materias, nuevos horarios, aprenderás nuevas cosas, otras no las entenderás nunca aunque te expliquen miles de veces, tendrás que exponerte enfrente de todos tus compañeros nuevos, la típica presentación ante el grupo, aquella la cual te obligan esos profesores que no tienen nada que hacer el primer día de clases, tendrás que buscar por lo menos a alguien para no estar solo ese primer día de clases tan esperado. Puede que tengas a principios de ciclo compañeros que te caigan de maravilla, pero puede que algunos cambien con el tiempo y te termines juntando con la persona que menos te imaginabas. No te librarás de los típicos rumores del salón que todo mundo llega a hacer en un salón de clases, así como tendrás amigos, también tendrás enemigos. Aquellas personas que por alguna razón te odian, quieren verte caer… En términos finales, entraras a una escuela nueva. Pero qué pasa cuando encuentras a una persona diferente a las demás, a una persona que tiene un toque especial, que te hace sentir toques de electricidad al momento de verla, que te atrae más que otras personas, más que sentimentalmente, sexualmente.