Cuando llegan a casa del hospital, Gustav ayuda a Tom a llevar a Bill a su dormitorio.
-¿Quieres que te ayude a acostarle?
-No gracias. Puedo yo sólo. Baja y dile a David que lo siento mucho, por todos los problemas que he causado.
-No le des más vuelta. No tenemos ningún concierto que dar y la entrevista se puede aplazar, no corre prisa.
Cuando Tom se quedó a solas con su hermano le sienta en la cama y empieza a quitarle la ropa. Cuando le quita la camiseta ve que tenia sangre seca en el cuello y por el pecho, así que va al baño y empapa una toalla.
Al regresar ve que se ha acostado de espaldas y tiene un brazo por la frente. Está con los ojos cerrados y piensa que duerme, pero cuando se sienta en la cama abre los ojos.
-Te voy a limpiar, tiene sangre por el cuerpo-le explica.
Comienza a pasarle la toalla por el pecho y sube hacia el cuello. Cuando termina le ayuda a ponerse un camiseta limpia y los pantalones del pijama. Le ayudo a costarse de nuevo y le tapo con la manta.
Viendo que le cuesta mantenerse despierto decide dejarle descansar, ya hablarían más adelante.
-No hagas esfuerzos para mantenerte despierto, te han dado un sedante suave y te está haciendo efecto. Descansa ahora, ya hablaremos más adelante.
Bill asiente y cierra los ojos, pero notando que le cogían de la mano los vuelve a abrir.
-No te quiero seguir molestando, pero quiero que sepas que lo siento mucho, que reaccioné ante tu ataque y que siempre me odiaré por haberte golpeado, y que nunca lo volveré a hacer. Espero que me puedas perdonar.
Bill le aprieta la mano para darle a entender que si. Entonces Tom se inclina y le da un beso en la frente. Se levanta y sale de la habitación.
-¿Ya se ha dormido?-le pregunta David cuando sale al pasillo.
-Sí, está descansando. Ahora no hay que molestarle.
-Venía a ver que tal estabas tú, también te has llevado un gran susto.
-Estoy bien, un poco cansado.
-Entonces descansa, que yo me tengo que ir. Por cierto, no he llamado a tu madre porque sé que está de viaje, pero es mejor que la llames tú por si mañana sale algo en la prensa.
Tom asiente y se dirige a su habitación para llamarla. Eran las 11:30, así le podía echar la bronca por lo tarde que era y por lo que había hecho.
Cuando termina se pone el pijama, coge una manta y se dirige a la habitación de su hermano. Al entrar se encuentra a Gustav sentado en una silla.
-Oí que estabas al teléfono y vine a cuidarle hasta que volvieras. ¿Que tal con Simone?
-Ya sabes, me ha echado una gran bronca con razón.
-No te preocupes, que ya ha pasado. ¿Vas a dormir aquí?
-Sí, no quiero que se despierte y esté solo. Además, se lo debo.
-Entonces hasta mañana.
Tom se sienta en la silla y cierra los ojos.
-¿Tom?-gime Bill muy bajito
Se levanta enseguida y se acercó a la cama.
-Sabes que no debes hablar. Toma esta libreta y escribe lo que quieras. ¿Te duele algo? ¿Quieres agua?
-"Me duele la cabeza"
-Ahora te doy un calmante.
Le ayuda a incorporarse y coge el vaso que había en la mesilla con una pajita, que seguramente había dejado Gustav, y con la otra mano coge una pastilla que le entrega.
Bill se la mete en la boca y tomo un sorbo de agua. Cuando acaba se quedó mirando a su hermano y luego se pone a escribir.
-"Tú ya me has pedido perdón, ahora me toca a mí. Además, te debo una explicación. Me enfadé porque vi que querías más a una guitarra que a mí. Ya ves, tenía celos de una guitarra"
-¡Pero que tonto eres a veces! Todo por una maldita guitarra. Sabes que te quiero más que a nadie, incluso más que a mi guitarra favorita.
-"¿Vas a pasar la noche aquí? ¿En la silla?"
-Si quieres que me meta en la cama contigo pídemelo, como cuando éramos pequeños.
-"Ven a mi cama, Tomi".
Y dando la vuelta a la cama Tom se acuesta a su lado. Le atrae hacia sus brazos y le hace apoyar su cabeza en el hueco de su cuello acariciándole con una mano la espalda suavemente.
Bill cierra los ojos y se deja llevar por las sensaciones que va sintiendo con cada caricia.
-¿Te acuerdas? Como cuando éramos pequeños y te daba miedo la oscuridad, venias a mi cama y entonces yo te abrazaba y te frotaba la espalda pera que te durmieras enseguida.
Se queda callado un momento pensando en lo que va a decir a continuación, sabe que una vez dicho no habría marcha atrás.
-¿Te acuerdas de lo que hacía mamá cuando nos hacíamos una herida? Después de curarnos nos daba un beso en la herida para que no nos doliera tanto.
Cierra los ojos y cogiendo aire realiza la pregunta que tanto le estaba costando.
-¿Te duele el labio?
Bill le escucha con el corazón latiéndole muy deprisa. Cierra los ojos y asiente con la cabeza.
Entonces Tom se inclina y lentamente acerca sus labios a los de su hermano. Los deja allí y le da un pequeño beso. Se retira y luego se vuelve a acercar para volver a besarle, esta vez más profundamente.
-Con dos besos te dolerá menos.
Y diciendo esto cierra los ojos y se dispone a dormir. No ve que por las mejillas de su hermano rodaban lágrimas, esta vez de felicidad.
A la mañana siguiente cuando Gustav entra a ver que tal están los encuentra durmiendo muy juntitos. Sonriendo sale de la habitación. Todo volvía a estar bien, ya no habría mas peleas de hermanos.
¿O de algo mas que hermanos?
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español