"Pensé que podía volar, Así que ¿Por qué me ahogue?, Nunca sabré porque todo se esta viniendo abajo"
Narrador Omnisciente.
¿Qué?
¿Nagisa no había enviado el mensaje?
Eso tenía que ser una mala broma ¿No? Su cuerpo empezó a temblar por la impotencia que sentía, por la culpabilidad que creía dentro de el. ¿Qué haría? ¿Cómo podría disculparse?
Mierda, había actuado como un estúpido desde la primera vez que lo vió. Ahora ¿Con qué cara le miraría de nuevo?
Su preocupación incrementó recordado lo ocurrido el día anterior a su boda.
—¿Qué pruebas...tienes?
Nakamura se acerco a él sentándose enfrente de su escritorio cafe.
—Ábrelo —Le ordenó—. Abre ese folder.
Señalo los documentos que anteriormente había dejado caer en su escritorio.
Karma lo tomo entre sus manos, sientiendo como temblaba y abrió el folder.
—El mensaje que Nagisa te envió fue a mediados de Octubre, tres semanas después de que llegaras a Australia —Comenzó a explicar—. Pero curiosamente el teléfono de Nagisa fue marcado como perdido unos días después de que te fuiste.
Le señalo una hoja donde se veía el recibo del teléfono y específicamente la parte donde veía subrayado con rojo —Como ella había dicho—. Ahí se mostraba la fecha de el extravío del teléfono.
—Esto...
—Cállate no he terminado —Le interrumpió—. Esto ya es una prueba de que el no fue. El mismo reportó su celular como perdido y se compró uno nuevo.
—Pero esto no lo libra del todo —Trato de evadir lo que era más que evidente—. El se caso con Asano como compruebas eso, fue con el con quién me engañó.
Nakamura negó.
—El padre de Nagisa me dijo que su hijo, no conoció a Asano hasta cuando cumplió los veinte años de edad.
—¿Y su boda qué? —Cuentiono cruzándose de brazos.
—Se caso con Asano para no dejar a su familia en la calle.
La duda se manifestó en el rostro de Karma.
—En la época donde nuestro amigo tenia veinte, la empresa de los Shiota cayo muy bajo, perdió mucho dinero y se iban a quedar en bancarrota. La única ayuda que obtuvieron fue por parte de la empresa de Asano, pero a cambio pidió la mano de Nagisa, el no se pudo negar, no quería que su familia quedará en la calle.
Karma se quedó callado.
—Eso demuestra porque ni su padre ni el mismo Nagisa manejan su propia empresa, por los acuerdos que tuvieron con los Gakushuu.
De nuevo no respondió nada.
—¿Es que no te das cuenta? El no ama a Asano puede que toda su vida haya sido infeliz.
Dijo esto último, refiriéndose a lo que el menor le confesó horas atrás en el hospital.
—No se casó con el por amor —Suspiró—. Puede que no se refiriera a Asano en el mensaje ¿Qué tal si fue alguien mas?
—El padre de Nagisa me informó que desde que te fuiste el solo vivía para estudiar, siempre esperándote y siendo fiel —Le explicó—. El solo te ama a ti y estoy segura de que aún lo hace.
—¿Que tal si solo invento eso su padre?
Cuestionó solo para encontrar una falla en las pruebas de su amiga. Solo para no aceptar que el estaba equivocado.
El semblante de Nakamura cambio, ahora estaba muy enojada.
—¡Por dios Karma! ¡¿Cómo puedes decir eso?!
Gritó levantándose de la silla.
—Puede que solo lo intentará, es decir ¿Por qué nunca supe de la bancarrota de su empresa? Si en verdad paso ¿Por qué no nos pidieron ayuda a nosotros?
Escusas, es todo lo que decía.
—¡Porque ellos se la rechazaron! ¡Tu familia rechazo a los shiota! —Respiró hondo tratando de calmarse—. Mira, simplemente dime ¿Tu apoyarías a la familia cuyo hijo destrozo el corazón del tuyo? Obviamente no.
—Eso es mentira —Bajó la mirada—. Me estas mintiendo de igual manera.
—¿Qué dijiste? ¿Qué te estoy mintiendo? —La miró con furia y desprecio—. Pregúntale a tus padres, ellos podrán decirte la verdad ahora me tengo que ir.
Agarro su bolso y se acerco a la puerta.
—Nakamura por favor no tomes esa actitud.
—¿Cuál actitud Karma? —Se detuvó enfrente de la puerta.
—Una actitud infantil, como si fueras una niña chiquita, ya no tenemos cinco años, por Dios.
—¿Soy yo la que esta tomando esa actitud? Ni siquiera quieres escucharme, no tratas de analizar lo que te dijo, todo lo evades. Solo por qué tienes miedo de afrontar la verdad.
Karma abrió y cerró la boca sin responder nada.
—Te dejare eso ahí —Refiriendose al folder—. Cuando tomes una actitud madura me avisas y no miento sobre la empresa Shiota, pregúntale a tus padres.
Abrio la puerta de la oficina pero antes de salir se detuvo nuevamente.
—¿Qué quieres decirme ahora?
—Tu lo viste Karma, sabemos los dos que Nagisa ha cambiado pero para mal. Sus ojos, los dos ya nos dimos cuenta que no tienen el mismo brillo que antes —Suspiró—. Si te animas a leer los documentos, puedes ir al hospital central ahí confirmarás todo.
Salió cerrando la puerta a su paso.
Karma suspiro y tomó el puente de su nariz. Nakamura tenía razón, no quería afrontar la realidad, no quería aceptar que lastimo a Nagisa cuando no lo merecía.
Pero es qué, el no quería tener remordimientos.
—Joven Akabane, sus padres desean verlo ¿Los hago pasar?
La contestadora de su escritorio sonó, tomó el teléfono y contestó.
—Si por favor.
Iba a aprovechar aquella visita y comprobar lo dicho por Nakamura.
Fin del capítulo once.