Beatifull
[Harry Potter]
Nota: los personajes de Harry Potter no pertenecen, este fic es sin ánimo de lucro.
Luchemos contra el plagio entre más seamos, más se escucharan nuestras voces, no dejemos que personas inescrupulosas se lleven nuestro trabajo… propuesta liderada por Katrinna Le Fay y adoptada por Luna Shinigami.
Si el fic no es de tu agrado, no te gusto el final, el comienzo o las notas de autor, no te gustan los personajes, ni te agrada la autora, por favor, a riesgo de ser grosera, no comentes, pero si tienes una crítica constructiva decente, soy toda oídos.
Atentamente Luna Shinigami
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Chapter 2
I
El calor era fuerte en Septiembre, sobre todo en aquella región de Texas.
-¡Patrón mire! Está abriendo la florecita esta- grito un pequeño niño y Neville solo pudo sonreír a las ocurrencias del menor.
-Escorpión, no es la florecita esta, es una clase de orquídea del desierto, difícil de cultivar- le dijo con la paciencia que podía, que realmente era mucha.
Neville había cambiado tal vez mucho físicamente, convirtiéndolo en un hombre alto, con músculos definidos y unos seductores ojos oscuros, pero seguía siendo el mismo chiquillo interior, con la ternura y la paciencia que muchos no tendrían.
-la misma cosa, Patrón- rio el niño de ocho años, a pesar de todo, tratando con cuidado la flor y acercándose para olerla – Huele a sándalo- le aseguro.
-¿Y tú como sabes a que huele el sándalo?- le pregunto.
-Mi papa hace muchas cosas con hiervas, además las hierve y corta cosas para echarlas a un caldero, como las brujas- rio con las manos en la boca – claro que me dijo que él no era una bruja y lo hace para tener un pasatiempo, a veces me enseña a oler las cosas, dice que yo debería tener el don- el pequeño alzo los hombros – pero no me gusta tanto, me gusta más andar detrás de las gallinas y subido en los caballos-
Neville no pudo evitar sonreír ante las ocurrencias del pequeño, despeinándole el cabello rubio, liso, muy liso, mucho más de lo que lo tenía Draco, pero un poco más grueso.
Y hablando de Draco debería darle la cara, llevaba dos meses allí y aun lo trataba a distancia, y el rubio había demostrado ser un buen administrador y bueno con la gente, incluso no lo había visto insultar a nadie.
Suspiro y pensó que Draco Malfoy había cambiado de ser un gillipollas aun buen hombre y él había demostrado ser un héroe a ser un maldito traidor.
Se levantó tomando la mano del niño y salió al rancho donde todos trabajaban afanosamente, muchos le sonrieron, era un patrón joven y dejaba que ellos le guiaran en la nueva aventura.
-Mal.. Draco- le llamo, viendo que Scorpius salía corriendo con su papa.
-oh, lo siento patrón, Scorp suele ser demasiado travieso, no volverá a ocurrir- le dijo mirando con desaprobación a su hijo, y Neville sonrojado negaba.
-No, no, el escorpión es un buen ayudante de botánica, así no le gusten las “matas”, no lo retes por eso, es un chico muy bueno y a mí no me molesta…- le aseguro – solo quería saber ¿Qué hay de comer?- dijo de nuevo sonrojándose y Draco solo le sonrió mas sobriamente.
-Hay ternera asada con papas, la señora Sproud lo cocina delicioso, también hay jugo de tamarindo, vaya a tomarse un baño y ordenare que le sirvan la el almuerzo- le dijo Draco y Neville le sonrió como un niño pequeño.
-Gracias Draco, en verdad- le aseguro subiendo, cuando al lado de Draco, Merry silbo.
-que trasero el del patrón, esta para estrujarlo!- rio la muchacha
Draco negó mirando al chica y dándole un coscorrón – en vez de pensar en eso ve y dile a la señora Sproud que el patrón va a bajar a almorzar... y que mande el almuerzo a los empleados de los corrales- le dijo mirando a su hijo con una traviesa sonrisa y se arrodillo a su lado – vas a bañarte solito y a vestirte mi cielo, luego comeremos-
-si papa- dijo Scorp abrazándolo con fuerza y yéndose, Draco sonrió con melancolía, así hubiera sido el padre de Scorpius de pequeño, con esos inmensos ojos negros que lo hacían delirar, pero nadie le quiso, y él se juró amar y adorar a ese pequeño milagro que dejo en él.
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-la cena estuvo deliciosa, déjeme decirle a la señora Sproud que cocina mejor que en Hogwarts- dijo Neville mas que lleno y Draco asintió recogiendo los platos – espera Draco siéntate conmigo, comparte una copa-
-usted es el patrón- le recordó el rubio mirándolo aun así sentándose en la derecha de él.
-por Merlín no soy solo el “patrón” nos conocemos hace años, y aun me tratas como si yo… fuera…-
Draco le miro – como si usted fuera mi patrón, así le trato Longbotton, porque es mi patrón, yo trabajo para la esperanza- le recordó – y usted tiene un rango más alto que el mío, debo respetarlo-
-¡No! Es que no eres Draco! No eres el cabron del colegio que se metía conmigo por gordo, idiota y débil!- le grito levantándose- no eres lo que eras, es como ver a otra persona con tu rostro, Malfoy-
El rubio le miro y se levantó a su lado mirándolo – No, ya no soy Malfoy, soy Prince, no soy la sombra del cabron insensible porque todos aprendimos con los golpes de la vida y créeme Longbotton he recibido demasiados como para no cambiar, sino cambiaba seguiría siendo el mismo idiota que cuando era adolescente y no podía, tengo a mi hijo y eso es suficiente motivo para cambiar-
-¿Quién es el padre de Scorpius?- le miro serio el botánico.
-¿Por qué se vino a esconder a América?- le retomo el rubio, y luego negó – nadie quiere que le mencionen su pasado y ambos pasados están mejor así… es más- le tendió la mano el rubio – Mucho gusto soy Draco Prince-
Neville quedo en shock solo unos dos segundos, tal vez tres posiblemente, pero luego sonrió
-Mucho gusto Soy Neville Longbotton y espero ser tu amigo- le aseguro. Ambos rieron y Neville le encanto la sonrisa de Malfoy… digo de Draco, aquella que sonaba como una suave hada de invierno.
El pasado realmente no importaba, lo que importaba era el presente.
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Una noche fue terrible para Neville, había una tormenta bárbara de las pocas habitadas en Texas, tenían alerta de tornado y todos estaban despiertos.
Merry tenía alzado a un lloroso rubiecito mientras Draco y Neville tapiaban las ventanas.
-¡Patrón los caballos de la loma se soltaron!- llego uno de los arrieros- se pueden lastimar con el clima así-
Neville se puso la chamarra - ¿Cuántos escaparon?-
-cuatro, están hacia la loma, allá esta en cerco de allá no pasaran pero el resto de los empleados están haciendo un dique más alto con las bolsas de arena para que no se nos desborde el río-
Justo cuando iba a salir, Draco se hizo a su lado – iré con usted patrón conozco la zona mejor que usted- le dijo el rubio, beso a su hijo y se subió a uno de los jeep del rancho. – ¡Cierren las puertas!- ordeno el mayordomo de la “esperanza”
Los caminos estaban resbalosos por la lluvia y no veían bien, además a eso había que sumarle que iban en subida y el auto no tenía la abrasión al suelo.
-¡ALLI!- grito el rubio viendo los caballos tratando de derribar el cerco.
Se bajaron los dos, mientras el agua parecía castigarlos por algún karma del pasado y trataron de calmar a los animales, que estaban azorados por los truenos, calmarlos estaba difícil.
Un rayo cayó cerca y uno de los caballos rompió uno de los cercos partiéndose una pata, el agua caía más fuerte y Neville haciendo uso de su fuerza bruta, agarro los dos caballos sanos para amarrarlos al jeep y al otro miro a Draco como se quitaba la chaqueta y la rompía.
-Mi varita no la tengo y ¿Tu?- le grito Neville al rubio en medio de la tormenta.
Draco solo negó realizando un burdo vendaje sobre la pata del animal, tan negro como lo eran los ojos de Scorpius, tan oscuro como los ojos de su antiguo profesor de pociones.
Y así como un rayo que cayó de nuevo cerca de ellos, para Neville fue un rayo hacia la verdad.
Continuara…
Muchas gracias a aquellos que escribieron y dejaron Rwr y aquellos que leyeron, yo sé que no es una pareja muy popular pero hay voy. Advertencia, este fic no tendrá más de cinco capítulos :P llegaron mis musas crueles y no lo quiero arruinar.