-Soy Alphonse, Alphonse Elric, mucho gusto- Ed.
-Bueno Ed, Al, vayamos a dormir.
-Si- dijeron al unísono los dos hermanos.
Así todos se encaminaron a la puerta en la que estaba la madre de Tsuna y caminaron por el pasillo, al interior de la casa.
-¿A dónde van?- preguntaba Tsuna inocentemente.
-Ya nos vamos escoria, nosotros no nos meteremos en asuntos de otros.
-¡VOOOOOOOI! El jefe tiene razón, esto es asunto de ustedes, no molesten.
-Shishishi ahora si te matare ranita.
-Noooo…. Sempai…. No lo haga…- y Belphegor se fue persiguiendo a Fran, seguido del resto de los Varia.
-Nosotros también nos vamos- decía Enma- hasta luego Tsuna- y así la familia Simon se fue.
-También me voy.
-Igual yo.
-Y yo.
-Yo necesito dinero.
-Yo también hermanito, ¡te quiero!, y por ahí cuidas a mi avecita, ¿si~?
-Hasta luego Décimo.
-Nufufufu yo también Tsunayoshi-kun, lamento no pasar más tiempo contigo mi linda piñita, pero tengo asuntos que resolver.
-También me iré Décimo, voy a ir a América para perfeccionar mis inventos para usted.
-Yo también me ire, paseare con mi linda niña por Francia.
-Ho amor~~ eres tan tierno~~~ Te Amo Mucho.
-Nosotros también, tenemos asuntos de la familia que resolver.
-Hasta luego Tsunayoshi-kun.
-Hasta luego Tsuna-nii.
-Yo me iré con Aria-san por un tiempo Tsuna-nii, volveré más tarde, jeje.
-¿Te molesta si nosotros nos quedamos?
-Para nada, quédense cuanto quieran.
-Tsu-Kun, Mamma ira también de viaje con Papá, así que cuídate, ¿sí? Y no pelees.
-Lamento quitarte a Mamma así hijo, pero entiende que el amor hasta puede romper las barreras de la familia~~~~~~
Y así, los Varia, la familia Simon, Lal, Viper, Verde, Fon, Dino, Romario, Byakuran, Gianini, Bianchi y Shamal, Gamma, Aria, Yuni, Fuuta, Mamma y Iemitsu se fueron.
Dejando solo en la casa a la familia del décimo, Reborn, Coronello, Shoichi y Spanner.
-jajaja parece que ya somos menos, ¿no?- decía un sonriente Yamamoto.
-No digas lo obvio friki del baseball.
-jajaja cálmate Hayato.
-¡NO ME LLAMES POR MI NOMBRE!
-Gokudera-Kun, shhhh…. los niños están dormidos.
-¡Ah! lo siento Décimo.
-¡YO ME IRE A DORMIR AL EXTREMO!
-Tsk… herbívoros molestos.
-Kufufu también me iré a dormir, vámonos Nagi.
-Sí, Mukuro-sama, buenas noches Boss.
-Yo también descansare. Buenas noches Hayato.
-Tsk, no molestes. Buenas noches Décimo, espero que descanse muy bien hoy, y si no puede, no se preocupe, solo llámeme y yo haré lo mejor para que su sueño sea tranquilo y agradable, como su mano derecha tengo el deber de darle toda comodidad.
-C-claro Buenas noches chicos.
-¿Dónde podemos quedarnos nosotros?- preguntaba Spanner.
-Vengan por aquí, ustedes también- dijo Reborn señalando a Ed y Al- y tú vete a dormir Dame-Tsuna, que mañana tendrás mucho que limpiar.
-¡¿Eh?! , ¿Limpiar?- preguntaba confundido.
-Sí, eso- dijo el hitman abriendo una puerta y mostrando toda una habitación destrozada hasta el último piso de arriba, donde recién estaban todos; totalmente destrozada.
Tsuna se quedó con la boca abierta…. Tardaría mucho en limpiar eso…
-Aparte, mañana tendremos entrenaremos, hace tiempo no lo haces.
-¡Eso es porque siempre me tienes encerrado disparando, pegándome y haciéndome firmar papeles todo el día!- decía asustado Tsuna, no quería entrenar con su tutor… aun no quería morir.
-Me estas desobedeciendo- decía Reborn enarcando una ceja y convirtiendo a León en su arma favorita.
-¡HIEEEEE!, ¡NO PARA NADA!- mientras se agachaba y cubría su rostro con sus brazos.
-Bien- decía mientras mostraba una sonrisa sádica.
Tsuna suspiro de alivio en el suelo, al no ser agujerado en ese momento, pero luego saco otro suspiro de depresión por lo que le esperaba mañana.
-¿Estas bien?- preguntaba con su carita tierna Al, cosa que hizo que Tsuna sonriera.
-Sí, gracias- y le devolvió la sonrisa- buenas noches.
-Buenas noches- decía muy alegre Al.
Es ese momento Tsuna miro a Ed y se sonrojo un poco.
-Buenas noches Elric-kun.
Ed no hizo nada, solo se limitó a hacer un ligero movimiento con la cabeza y se dio la vuelta. Eso desanimo un poco a Tsuna.
-Mi hermano siempre es así, no le hagas caso jeje.
-¿Oh?, claro, hasta mañana decía Tsuna mientras entraba a otro pasillo y se perdía en él.
-Bien vengan por aquí- decía Reborn, primero llevo a Spanner y a Soichi a una habitación, cosa que llamo la atención de Ed.
“¿Dos hombres en una habitación?” pensaba con algo de duda, pero… “Nah~ a mí que me importa” fue su conclusión.
-Aquí hay están sus habitaciones- decía Reborn, apuntando dos habitaciones hasta el fondo de la habitación del segundo piso.
-Solo usaremos una- dijo Ed en lo que se encaminaba a la habitación.
-Buenas noches Señor- decía Al con una sonrisa y entro primero a la habitación.
-Si intentan algo los matare- amenazaba Reborn, mientras escondía su mirada bajo la fedora.
Ed dejo de caminar ante la amenaza y se giró para encararlo.
-Equivalencia de intercambio, ¿lo recuerda?- decía Ed sin emoción alguna, en su vos, mirada y expresión. Ante esto Reborn enarco una ceja- Mientras ustedes no intenten algo, nosotros no haremos nada.
-¿Dices que si te trato de matar ahora, me mataras?- decía con algo de burla en sus palabras Reborn- ¿sabes que soy el mejor hitman del mundo?, ¿qué me podrías hacer tú?
-Dirás lo que quieras, pero ¿sabes?, hace unos ratos en el jardín, no me parecías más que un inútil con un arma- decía con una sonrisa ladeada y burlona.
-Tsk… ya te lo advertí, intenta algo y morirás- mientras le daba la espalda y desaparecía en un pasillo que iba a la izquierda.
-Lo mismo digo- y Ed entro a la habitación en la que se encontraba Al, cerró la puerta detrás de él y vio que había únicamente una cama.
En la cual, estaba Al completamente dormido, Ed sonrió y le quito los zapatos, pues este apenas vio la cama se lanzó a dormir.
Pero luego la sonrisa de Ed se borró…
-Al…- susurro mientras se acostaba a su lado y lo abrazaba.
“Si supieras Al… de que ya no quiero cerrar los ojos, porque… tus ojos decepcionados me atormentan cuando lo hago… supongo que al final… tendré que pedirte perdón de nuevo, ¿no Al?, no… se me da muy bien hacerlo, pero me veo siempre con la necesidad de decírtelo siempre que puedo, aunque… lo más probable es que ahora… ya no entiendas de lo que hablo… ni quiero que lo hagas… Al, dime ¿me odiaras?, Cuándo recuerdes todo… ¿me odiaras?, si lo haces no te culpo… no hay forma de perdonar lo que te hice pasar… yo no me he perdonado… soy un cobarde, ¿cierto?.... si… lo soy… Al espero que algún día lo entiendas, la razón por la que mis ojos cerraba, cuando trataba de hacer el tonto cada que podía y te consentía con lo que me pidieras… todo era para no lastimarme… igual que hoy… sé que nada de esto enmendara lo que he hecho, y tampoco trato de redimirme, ya que…aunque lo desee… no puedo expiar ninguno de mis pecados…, Al, seguiré esto que he iniciado, le daré un fin, sin importar lo que me pase, eso me tiene sin cuidado desde hace tiempo… Solo vivo para protegerte Al… ya no busco amigos ni nada, estoy harto de las mentiras, de ser siempre usados y tratados como peones reemplazables… ya ni siquiera sé a dónde voy ni a quien espero… Al… ¿Esto en verdad es vivir?, ¿con este miedo?, ¿con esta inseguridad? Y ¿dolor?, Al… si yo gritara muy fuerte, tú… el verdadero TÚ…. ¿me oirá? ”
Esos eran los pensamientos del alquimista de acero… al cual… le recorría una lágrima criminal por la mejilla…
-Al… lo siento….- mientras se aferraba más a su hermanito.
“Al menos mañana será otro día…” era su único consuelo.
Y con esa última frase y la lagrima un en su rostro… se durmió…
Ese era el gran problema para el alquimista de acero, quien no encontraba solución a su desesperación.
Aunque no era el único que se encontraba sin poder dormir esa noche, el Jefe de la mafia también tenía sus problemas.
_Habitación de Tsuna_
El décimo jefe Vongola se encontraba acostado en su gran cama. Vistiendo un pijama azul, mirando el techo, como si fuera la cosa más interesante del mundo.
///POV de Tsuna///
¿Pero que me pasa?, desde hace ya un buen rato tengo ese sentimiento, ¿será que mi intuición se está volviendo loca?
Presiento peligro, dolor, desesperación… y otro… otro sentimiento que no puedo explicar… ¿Qué me pasa?, esa era mi gran duda, desde que Elric-san llego me siento extraño, aparte de todos esos sentimiento que tengo, siento otro que no puedo explicar, ¿qué me pasa?, jamás me había sentido así… ¿Qué me pasa aquí?, me preguntaba mientras tocaba mi corazón, este latía fuertemente hace unas horas… justamente cuando estaba con Elric-san… e… incluso ahora… ¿por qué el verlo y… pensarlo… hace que mi rostro arda?, tanto… desear que el llegara, y ahora… ahora que está aquí… no puedo definir como me siento… ¡¡¡¡¡¡aghhhhh!!!!!, ¡esto me va a matar!
¿Si estaré enfermo?, tal vez debería decírselo a Shamal…
Espero no se enoje por llamarlo.
///Fin del POV de Tsuna///
Tsuna se levantó de su cama y se encamino al baño, donde había dejado su celular después de bañarse.
Al entrar, se podía admirar un hermoso baño, el azulejo de un color blanco puro, un yacusi gigantesco, con las perillas de oro, un lavamanos de mármol, un enorme espejo que acaparaba toda una pared y un mueble de madera, el cuál contenía muchos productos de limpieza personal.
El baño era tan grande que podían entrar dos elefantes, ¡no espera!, ¡TRES!
“Aun no entiendo por qué Reborn quiere tantos lujos” pensaba Tsuna con una carita así =.=U
Después busco con su mirada un pequeño buro de mármol que estaba al lado izquierdo del ya mencionado yacusi, encima de este, se encontraba su celular, un celular smartphone android 4.1, sin duda al jefe de la mafia le iba bien.
Se encamino a este y tomo el celular, busco entre su lista de contactos y encontró al doctor que estaba buscando. Al instante le llamo.
El sonido de que estaba entrando la llamada comenzó a sonar, hasta que desde el otro lado de la línea le contestaron
-“¿Bueno?, ¿qué pasa Décimo?, nos acabamos e ir de ahí”
-Si… lo siento Shamal-san, es solo que creó que estoy enfermo- decía no muy seguro.
-“¿Enfermo?, ¿Cómo se siente?”- pregunta el otro un tanto preocupado.
-Pues vera…- y así Tsuna comenzó a relatarle el cómo se sentía, mientras que en otra habitación ocurría algo más interesante…
_En Otro Lugar_
Ya entrada la noche un rubio de ojos azules se encontraba en el baño de su habitación, quitándose su ropa militar para darse un delicioso baño.
Empezó quitándose la camisa blanca que tenía, luego los pantalones, calcetas y por ultimo ropa interior.
Después entro a la regadera y dejo que el agua templada callera en su bronceada piel.
Al inicio todo estaba bien, las gotas caían en su cuerpo y lo recorrían libremente, hasta que pudo sentir como unas manos se agarraban a su cintura.
Le sorprendió, pero no se molestó en darse la vuelta, ya sabía de quien se trataba.
-ohh… así que me ignoras ¿eh?- dijo el de patillas con la voz ronca a causa de la excitación.
-déjame en paz Reborn-kora- le respondió el otro con un sonrojo hasta las orejas.
Eso le causo satisfacción al azabache.
-No quiero, tú y yo jugaremos un rato - le dijo mientras afirmaba su agarre a la cintura del oji-azul.
-¿Jugar un rat… …- no pudo terminar de formular su pregunta, el azabache con su lengua caliente, había lamido el lóbulo de la oreja del militar-aahh…- gimió.
-Tengo ganas de tenerte hoy, ese maldito me hizo estresarme, así que al menos sirve para algo idiota- decía refiriéndose con maldito a Ed.
Y antes de que el rubio pudiera decir algo, lo volteo rápidamente, para seguir con un beso posesivo.
Metió su lengua a la boca del otro, la paso por sus dientes, tocando uno por uno, para luego lamer su paladar y todo lo que estuviera a su disposición, para después encontrarse con su lengua, a la cual ataco sin descanso.
Se movía en dentro de su boca a su antojo.
-R-R-Reb m-me- decía en medio del beso.
-¿Qué pasa? Habla claro- se burlaba el azabache, ya que la razón por la que el otro no pudiera hablar bien, se debía a que cada que abría la boca, se adentraba más a esta, sumando también que le robaba el aliento de los pulmones.
-estamos en el baño- dijo por fin, pero con dificultad- ahahaa.
-cierto…que interesante- dijo el otro con malicia.
Luego de eso lo tomo de sus glúteos y lo levanto, instintivamente el militar, enredo sus piernas a las caderas del azabache.
Pasaron de estar en el baño a la habitación, donde lo arrojo contra la cama con ninguna delicadeza.
-oi ten ma…. ¡aaahhh!- el azabache se había devorado su miembro entero.
-ya cállate… y… déjeme seguir…- le decía en medio de la felación.
Al rubio no le quedo de otra, por lo que mejor se quedó calladito, sintiendo como esa lengua caliente y húmeda lo recorría de arriba abajo.
Su lengua dibujaba su camino desde el lugar en que empezaba la erección y luego subía hasta la punta, donde lamia la punta de forma circular, en la rosadita punta salía un poco de pre-semen, el cual el de patillas lamia cada que volvía a aparecer… todo con una extrema lentitud.
-R-Re-Reborn…ahhhh ahaahaa- gemía.
-ahora ¿qué?- decía, pero ya sabía que pasaba.
-m-m-mmaaaaahhhas- pedía.
El otro solo sonrió de forma sádica.
-¿Qué tanto deseas que lo haga?
-por favor….- suplicaba desesperado, con las mejillas sonrojadas y pequeñas lágrimas en sus ojos.
El otro sonrió ante la vista.
Se lo metió a la boca completo y subía y bajaba a toda velocidad, se enredaba en su pene de una forma magnifica, el militar no sabría si aguantaría.
-¡aaahhaaahaa!- gemía como poseso, la lengua del mayor era realmente deliciosa, más cuando sintió como con su paladar lo apretaba- ahaahaa…ah- jadeaba también, sus pulmones estaban casi sin aire de tanto hacer sonidos indecorosos.
Arqueo su espalda cuando estaba a punto de venirse en la boca de su amante, pero este puso un dedo en su orificio, impidiendo que sacara toda su semilla.
-no…ahaa de-dejame…. Lleagar.
-no, aun no- dijo el otro malicioso.
Lo tomo de la nuca y lo sentó en la cama, desabrocho su pantalón y saco su gran miembro de este, poniéndoselo en la cara al rubio.
Este instantáneamente lo metió a su boca, lo lamia de arriba y luego bajaba a un ritmo desesperado, pues lo estaba, quería sentir a ese enorme pedazo de carne en su ano, le excitaba saber que dentro de poco aquel que era su amante estaría entre sus piernas embistiéndolo con brutalidad.
Le encantaba más que nada, ser follado de esa forma, de solo pensarlo podría correrse en ese momento, debido a su momento de libido, succiono con todas sus fuerzas el promitente miembro que estaba en su boca.
-aahh- gimió ronco el azabache, el cual comenzó a mover sus caderas, como le encantaba esa boquita, veía como su pene salía a gran velocidad de esta, hasta llegar al fondo de esta, el militar parecía atragantarse, pero aun así se lo comía con ganas.
El azabache por más que lo disfrutaba tenía que dejar ese lugar, ya que justo atrás lo llamaba algo más delicioso.
Levanto el rostro del que violaría justo en ese momento y lo giro, separo las nalgas y comenzó a lamer la entrada, pero solo superficialmente, dejándolo totalmente encharcado por ella, se alejó un poco para ver su trabajo y le dio satisfacción saber que lo hizo bien.
La entrada del ano del militar se encontraba totalmente rosa, y de ella se podía ver la saliva del azabache, la cual caía como si fuera savia, lentamente… se veía pegajoso y lo calentó más ver como esa entrada pulsaba, pidiendo a gritos que la penetrara una y otra vez.
No se hizo esperar, lo tomo con firmeza de las nalgas, y entro en el de una sola estocada.
-¡AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAHHHHHHHHHHHHHH!
-¿tanto te gusto?- se burló, no espero a que le contestara, lo envistió una y otra y otra vez, a un ritmo tan delicioso.
El militar estaba en las nubes, le dolía, pero le daba un placer inmenso, y más cuando toco su próstata.
-¡aaaaaahhhh!- al sentir que su punto G fue tocado apretó su entrada, causándole un gran placer al azabache, que le daba con más fuerzas.
El otro sentía que lo partían por la mitad, lagrimas salían de sus ojos, sus mejillas rojas como llamas y un camino de saliva que salía descaradamente de su boca, para caer a la cama.
-¡aahaaaha haaaaaaaaahhhhhhhaa!- gemía y gemía.
Esto al azabache le encantaba, apretó los glúteos del oji-azul y luego comenzó a repartirle nalgadas.
El otro estaba más que excitado al sentir los azotes en su trasero.
-si… si ¡SI OH! MMMAAAAAS MMMAAAAAHHHSSS!
-¿quieres más?- le pregunto el otro con voz ronca.
-siiii…. Onegai- dijo volteando su cabeza, mirando a los ojos al azabache con una expresión de placer puro y suplica.
-p-pues si quieres más…- le dijo mientras se acercaba a su oído y le susurraba sensualmente- … llora y grita fuerte…
Dicho esto, el azabache sentó al otro en sus piernas, haciendo que este lo cabalgara, el oji-azul subía hasta casi salir, para luego dejarse caer contra el duro pene del otro.
-R…yo…meehaaaa!
-yoahh… también- le dijo al comprender que su amado llegaría al final y él se encontraba en las mismas condiciones.
Lo subió hasta que su miembro saliera de la deliciosa entrada del menor.
El cual se molestó al verse privado de su placer, pero grande fue su sorpresa al verse nuevamente empalado por el pene del otro.
-¡AAAAAAAAAAAAHHH!- dio en su punto dulce y sin más se corrió, manchando con toda su semilla el abdomen de ambos.
El otro al ver su miembro aprisionado, se corrió en la entrada del otro, la cual se encontraba totalmente llena.
Ambos se acostaron en la cama, el oji-azul de espaldas y el moreno arriba de este.
-R…Reborn- dijo el otro con dificultad.
-¿Qué?
-¿Ya no estas estresado?- le pregunto con una voz insinuante.
El de patillas solo sonrió, y empezaron de nuevo…
Pero regresando a otro lado…
_Con Tsuna_
-¡¿QU… TIENES QUE ESTAR BROMEANDO?!-gritaba totalmente desconcertado y con la cara de un rojizo demasiado… ¿rojo?
Al parecer las dudas del Décimo habían sido aclaradas.
¿Y ahora qué hará?
Continuara….
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