“Al menos mañana será otro día…” era su único consuelo.
Y con esa última frase y la lagrima un en su rostro… se durmió…
A la mañana siguiente, las cosas estaban muy silenciosas. Pues los mafiosos, aun no se habían acostumbrado a los dos nuevos invitados, que gracias a Aria y Mamma, estarían viviendo con ellos por un buen tiempo.
-B-buenos días….- decía Al, el cual estaba bastante incomodo en esa mañana. Anoche había escuchado llorar a su hermano mayor…
///Flash Back///
-Al… lo siento….- mientras se aferraba más a su hermanito.
///POV de Al///
¿Hermano?, ¿Qué es lo que pasa?, ¿Por qué…? ¡¿POR QU… SIEMPRE ES LO MISMO?!, pensaba con impotencia. Tú llorabas a mi lado, aferrándote a mí, como si me fuera a escapar a algún lado. ¿Hermano que sucede?, por favor…. Dímelo… quiero saber, la razón por la que siempre me pides disculpas cuando crees que duermo. Hermano… te perdono… no sé qué paso… ¿fue tan malo lo que hiciste para llorar de esta manera?
Tú eres mi hermano, lo único que tengo ahora, la única familia también, no digo que la abuela Pinako y Winrry no cuenten, claro que cuentan, pero… tú eres mi hermano de sangre, estamos para apoyarnos el uno al otro, ¡SOMOS HERMANOS!, nadie más nos ayudara más que nosotros mismos…
Hermano… ya no llores así por favor… te perdono… te perdono… pero… perdóname a mí también… perdóname por olvidarlo todo y hacer que tú cargues con esto solo…. Perdóname…
En ese momento me removí un poco y te abrace, al instante te encogiste un poco, como si mi contacto te lastimara… hermano, yo no te voy lastimar, jamás lo hare, tenlo por seguro.
-Hermano… te… quiero- te lo dije como si estuviera dormido. No me atreví a decírtelo debidamente, no sabía si te enojarías por fingir estar dormido y escucharte llorar… aparte… aunque diga que quiero recuperar mis recuerdos… me da miedo… tengo miedo de saber la verdad… soy un cobarde, por eso hermano, no me pidas perdón, quien te debe disculpas, soy yo.
-También te quiero Al…- me lo dices luego de un rato y con un tono herido… hermano, no sufras más, lo siento, lo siento, tratare de recuperar mis recuerdos, te aseguro que lo hare y sufriremos juntos, pero por favor… ya no llores…
En ese momento el sueño me gano…
Buenas noches hermano…
///Fin del POV y Flash Back///
-Buenos… días…- respondía Tsuna de la misma manera. Lo qué acaban de decirle anoche tampoco lo había dejado dormir bien.
///Flash Back de Tsuna///
El sonido de que estaba entrando la llamada comenzó a sonar, hasta que desde el otro lado de la línea le contestaron
-“¿Bueno?, ¿qué pasa Décimo?, nos acabamos e ir de ahí”
-Si… lo siento Shamal-san, es solo que creó que estoy enfermo- decía no muy seguro.
-“¿Enfermo?, ¿Cómo se siente?”- pregunta el otro un tanto preocupado.
-Bueno, me he sentido un tanto extraño- empezando a relatar lo mejor que podía- me siento algo mareado y débil, en varias ocasiones mi corazón late tan fuerte que siento que en algún momento me dará un paro cardiaco, y tuve en varias ocasiones del día de hoy muchas fiebre…- termino de relatar sus “malestares” no muy seguro de haberse explicado bien- ¿Qué opina Shamal-San?, ¿Debería ir al doctor?- dijo esperando respuesta del doctor.
Pero del otro lado de la línea solo se escucha un “Umm~” pensativo.
Para Tsuna ese momento se estaba volviendo eterno, ¿era tan malo lo que tenía?, ¿acaso una enfermedad incurable?
“¡CANCER! “Llego a la conclusión en su cabeza, estaba muy asustado, ahora solo debía esperar la respuesta del hombre al otro lado de la línea.
-“¿Desde cuándo te sientes así?”
-Desde este día- fue su respuesta.
-“¿Desde la mañana?, ¿Por qué no me lo dijiste?”- le reclamaba enojado el doctor, Tsuna solo pudo encogerse de hombros ante el regaño.
-No… no fue desde esta mañana, fue más tarde…- trataba de justificarse, aunque era cierto, él no tenía esos malestares cuando se despertó.
-“¿Desde cuándo fue entonces?”- preguntaba interesado el otro.
-Ummm…- en ese momento Tsuna se tomó un rato para pensarlo, hasta que se decidió a hablar- Fue cercas del atardecer, más o menos, creó que cuando llego Elric-San y su hermanito- dijo seguro de su respuesta, pues si lo pensaba bien, como por esa hora se había empezado a sentir mal.
Por el otro lado de la línea no se escuchaba nada.
-¿Shamal-san?- pregunto Tsuna asustado de que le hubiera colgado por tardar en responder.
-“¡ah sí!, sigo aquí…- decía el doctor con un tono de voz extraño, esto asusto a Tsuna- Y ¿Cuándo sientes que aparecen estos síntomas?”-pregunto.
-¿Eh?, pues…- “¿Cuándo aparecen?, creó que cuando estoy cercas de Elric-san” pensaba Tsuna mientras su rostro se ponía de un color carmín- Cuando… estoy… cercas de Elric-san…- y fue ahí donde el Décimo Jefe de la Familia Mafiosa más poderosa cayo en cuenta- ¡NO ME DIGA QUE ELRIC-SAN ME CONTAGIO CANCER!, ¡¿Y AHORA QUE HARE?!, ¡¿Cómo SE LO DIRE A MAMÁ?
Gritaba muy asustado el chico de ojos color miel, mientras pequeñas lágrimas salían de sus ojos y una enorme aura depresiva se formaba alrededor de él.
-Eh vivido tan poco…- decía mientras sus ojos eran un mar de lágrimas.
-“Jajajajajajajajajajajajaja- se oía del otro lado de la línea, al parecer a la persona proveniente de la voz le estaba dando un ataque de risa.
-¡Shamal-san!- pronunciaba Tsuna el nombre del tipo con un tono sorprendido y triste, ¿era acaso que su muerte era divertida?
“Nunca lo espere de él…” decía en total penumbra el joven vongola.
-“jajaja tranquilo Décimo, sé que le pasa, y antes de decirle que es, permítame darle el dato, de que el cáncer no se puede contagiar jajaja”
-¡¿Entonces que tengo?!- preguntaba asustado y avergonzado de que el doctor no parase de reír.
-“Ciertamente, usted está enfermo, y lo que tiene, es probable que se cure y también es probable que se quede con ello hasta la muerte”- decía con un tono burlón que Tsuna paso por alto, estaba tan asustado por la palabra “muerte” en la explicación de Shamal.
-¿Q…Qu..Qué… e..s… es?- tartamudeaba, mientras sus piernas temblaban y su alma abandonaba su cuerpo.
-“Usted, joven Vongola, lo que tiene, es la enfermedad del enamoramiento, usted se a enamorado”
-¡¿QU… TIENES QUE ESTAR BROMEANDO?!-gritaba totalmente desconcertado y con la cara de un rojizo demasiado… ¿rojo? “¿Enamorado?, ¿Pero de quién?”
-“No bromeo Décimo, si no me cree, investíguelo usted mismo, buenas noches”
Tsuna solo se quedó petrificado.
-¿Amor?, ¿Por quién?, pero… ¡¿Qué es el amor?!, amo a mamá y a papá, pero no me siento así cuando estoy con ellos… ¿entonces?- se pregunta el Décimo Capo.
Y con su pregunta de “¿Qué es el amor?” se quedó toda la noche en vela.
///Fin del Flash Back///
Y descontando el problema al que se enfrentaban los dos menores, la mañana al parecer no iba muy bien.
Desde que se despertaron y se dirigieron todos al comedor, Reborn, Hibari y Gokudera, no paraban de mirar amenazadoramente a Ed.
Ahora todos se encontraban en el comedor.
Era un comedor en el que podían estar catorce personas, a la cabeza Tsuna, a su izquierda Yamamoto, Ryohei, Chrome, Mukuro, Ed y Al, a la derecha estaba Gokudera, Lambo, Ipin, Spanner , Shoichi y Coronello , al otro extremo, estaba Reborn.
El único que no se encontraba con todos en la mesa era Hibari, el cual tenía una mesa personal, especialmente para él, en una de las esquinas del comedor, ya que no le gustaba estar rodeado de “Herbívoros inútiles”
Sin duda el silencio era muy pesado, pero nadie se atrevía a decir nada para romperlo.
Tsuna y Al solo miraban como el hermano del segundo era observado por la tormenta, la nube y el mejor hitman del mundo con una mirada asesina, sin embargo, a Ed no parecían molestarle, la verdad era que le daba igual, cosa que molestaba a los tres de sus agresores.
-Aquí… esta la comida Decimo-sama…- decía una de las muchas criadas que trabaja en la mansión, tenía un cabello castaño oscuro, ojos negros y un traje de criada normal, empujaba un gran carro de comida, el cual estaba lleno de diferentes platillos.
-S…Si… gracias- respondía Tsuna con muy pocos ánimos.
La chica entendía la razón, pues el ambiente en el que se encontraban todos, era muy pesado como para resistirlo. Así que solo se limitó a avanzar con su carrito por cada uno de los lugares de los ocupantes de las sillas, dejando sus platos con comida frente a ellos de una forma rápida y sin decir palabra alguna, una vez terminada su tarea, con un suspiro de alivio, salió a toda velocidad del lugar, casi parecía flash.
Incluso Lambo, Ipin y Ryohei no hacían movimiento alguno.
Ya después de la increíble huida de la sirvienta, todos empezaron a comer sus platillos dejando de lado la pelea unilateral de miradas. El desayuno consistía en un capuchino, pan focaccia o ciabatta para acompañarlo, un tazón de frutas con yogurt natural y cereal encima, jugo de naranja y bistec con verduras.
Al miraba el plato maravillado, él jamás había preparado de esos platillos tan elaborados, pues su hermano solo llegaba a comer a casa de vez en cuando, por lo ocupado que estaba con su trabajo.
-Wow... esta… comida si es de calidad ¿no?- preguntaba Al, con una sonrisa nerviosa a Tsuna, animándose así, a romper el silencio.
-Sí, bueno… yo prefiero las comidas sencillas, pero Reborn insiste en comer así jajaja- terminaba de decir con una sonrisa nerviosa y una gota de sudor nerviosa en su frente.
-Ya veo…- no hubo más que decir, y de nuevo el comedor entro en la depresión del silencio.
-¿Cómo harán para volver-kora?- preguntaba Coronello después de unos minutos.
En cuanto formulo su pregunto Al se puso un tanto nervioso, sin embargo, Ed tomaba el jugo tranquilamente, al parecer la pregunta no le afectaba tanto.
Todos miraban a Ed con atención, pues, ayer les había dicho que todo era de probabilidad, así que, el cómo volver, era algo que tenía en duda a todos, más porque se trataba de abrir una puerta e ingresar a otro mundo, eso sonaba imposible.
Ya cuando termino de beber, bajo el jugo y miro a Coronello.
-Ayer se los dije- y luego de decir eso siguió comiendo. Eso no respondía la duda de nadie, pero él tenía la razón, ayer lo había explicado muy bien.
-Disculpa Elric-San, ¿Te puedo preguntar algo?- pregunto un tanto asustado Shoichi.
-Ya lo estás haciendo- respondió Ed, pero sin ser tajante o frío.
-Si… tienes razón… es solo que, tengo un poco de curiosidad, tú entraste a dos mundos, diferentes, descontando el de nosotros, ¿cómo eran esos mundos?- preguntaba no muy esperanzado en que le respondiera.
Ed dejo de comer, y mostro una cara de completa frialdad. Esto asusto tanto a Al, como a Tsuna y Shoichi.
-El segundo mundo, al que fuimos a parar- comenzó a decir con un tono seco, sorprendiendo a todos, ya que ninguno pensó que le fuese a responder- era muy problemático, lo más seguro es que se encuentre en medio de una guerra en este momento.
-¿Una guerra?, ¿por qué?- pregunta Tsuna un tanto sorprendido.
-El lugar en que nos encontrábamos era Alemania, y una vieja loca inicio una organización que se llamó Nazi e iban a empezar una guerra mundial por culpa de un idiota, fue por eso que trate de encontrar la manera de regresar a nuestro mundo lo antes posible, pero como lo ven, fallé- termino de decir lo último con algo de enojo.
Después de decir aquello, muchos se quedaron pensando.
-¿Podría ser que estás hablando de la primera guerra mundial que estallo en 1933 por culpa de Adolf Hitler?- preguntaba muy interesado Shoichi.
Ed enarco una ceja.
-Sí, ¿lo conoces?- pregunto bastante en guardia.
-Para mi suerte no, eso paso antes de que yo naciera, exactamente hace 80 años.
-¿80 años?- preguntaba Al muy sorprendido- ¿En qué año estamos?
-En el 2013- respondía esta vez Spanner.
-Parece ser que los tiempos de los otros mundos son diferentes- comentaba Reborn mientras bebía de su capuchino.
-Ciertamente- respondía Ed.
-Hermano, ¿en serio iba a estallar una guerra mundial?- Preguntaba Al bastante desconcertado y molesto- ¿por qué yo no lo sabía?
Ed tomo de su jugo de nuevo, el café ni lo tocaba, pues este contenía a su enemigo natural.
-¿Por qué habría de decírtelo yo?, si te hubieras tomado la libertad de leer el periódico una sola vez te enterarías de las cosas- lo dijo de forma burlona.
-¡Hermano!- dijo haciendo un pequeño puchero triste. Después bajo levemente la cabeza.
“¿Por qué nunca me entero de nada?” pensaba con algo de tristeza. Ed al notar esto puso su mano sobre su cabeza y la acaricio dulcemente, eso basto para que a su hermanito se le pasara el berrinche y siguiera comiendo felizmente.
-¿Y el mundo de ustedes?- preguntaba ahora Tsuna muy interesado y sonrojado, por hablarle al rubio mayor.
En ese momento Al puso una cara melancólica, ya que no recordaba mucho de este. Ed lo noto, y no pudo evitar sentirse culpable, cosa que Tsuna noto un poco, pero no estaba del todo seguro.
-Nuestro mundo, era también un mundo algo problemático, los países solían tener problemas todo el tiempo, y los perros del ejercito eran muy problemáticos, pero dejando de lado todo eso, era un lugar muy hermoso. En primavera, nacían unas hermosas flores azules…
-¿Flores azules?- preguntaba Yamamoto muy impresionado.
-¿Eso es posible?- preguntaba ahora Gokudera.
En ese momento Ed sonrió, para sorpresa de todos, era un sonrisa muy hermosa, pero a la vez, se notaba algo de dolor en ella, pero eso solo lo noto Reborn.
-No hay nada imposible.
Dijo de una forma tan genial que hizo sonrojar a más de uno.
-Y… Elric-San…- decía nervioso Tsuna- ¿Cómo podemos ayudarte?
Ed se lo pensó por un rato, ya lo estaban ayudando bastante con solo dejarlos alojarse ahí.
“No… no es momento en pensar si nos estamos aprovechando o no, tengo que regresar a Al a nuestro mundo”
-Necesito toda la alquimia que se ha desarrollado en su mundo, así como avances químicos, científicos, médicos, históricos y demás, necesito estudiar todo lo de este mundo.
-¡¿POR QU… ES NECESARIO SABER TODO LO DE NUESTRO MUNDO AL EXTREMO?!
Todos miraron a Ed, la pregunta de Ryohei tenía sentido, para la sorpresa y miedo para todos.
-¿Entonces?- preguntaba también Reborn.
Ya que si solo necesitaban de la alquimia, que es la química y ciencia, no entendían por qué quería saber todo.
-La alquimia consta de tres pasos- empezó a decir Ed, el resto solo lo veía atentamente- la primera es la comprensión, el segundo y tercero, es la división y reconstrucción. Básicamente, al abrir la puerta, voy descomponer una parte de su mundo para pasar al nuestro, para ello requiero saber todo lo que pueda de este mundo, es cierto que solo necesito saber de su química y ciencia, pero, cuando uno lee un libro, nunca lo inicia desde la mitad o lee solo el final.
-Muy cierto- decía Shoichi pensativo. Lo que decía Ed tenía sentido.
-Entonces, nosotros te proporcionaremos la información que necesites- decía Tsuna muy animado por ayudar a Ed, aunque sentía una pequeña opresión al pecho al pensar que se iría tan pronto.
“¿Otras vez?, ¿Por qué?” se preguntaba el oji-miel al sentir esa sensación que Shamal le había dicho que era amor, ¿en serio lo era?, era lo que se preguntaba desde la noche anterior el oji-miel, ya que no sabía cómo podía estar enamorado y menos de quien.
“Más tarde le preguntare a Gokudera-kun, él sabe muchas cosas” fue la conclusión a la que llego el capo.
-¿Por qué nos ayudan?- pregunto Ed repentinamente, con un tono desconfiado que se hacía notar.
-Hermano…- decía en vos baja Al en tono de reproche. Ya que le pareció muy mal educado de su parte actuar así cuando les estaban ofreciendo ayuda.
Pero Ed no lo podía evitar, el hombre no puede recibir algo, sin dar algo a cambio antes, y ellos no habían dado nada por lo cual los ayudaran.
En eso Tsuna se quedó sin palabras, el solo quería ayudarlos, aunque no sabía bien por qué, solo sentía la necesidad de cuidarlo y protegerlo.
“¿Cuidarlo y protegerlo?, ¿quiero hacer eso?, pero… ¿Por qué? Y de ¿Qué?... ¿Acaso podría hacerlo” se cuestionaba mentalmente el oji-miel, otra vez su intuición se estaba volviendo loca.
De repente sentía un instinto protector, otro de profunda tristeza, uno más que se hacía notar en su pecho, haciendo que su corazón pareciera un vibrador y ahora, sentía una fuerte sensación de peligro, ¿Qué le pasaba?
-No lo sé…- contesto Tsuna sinceramente y distraído por el mal presentimiento que tenía. Eso dejo más desconfianza en Ed- Supongo que porque puedo jaja- dijo después de forma despreocupada.
Cosa a lo que los amigos de Tsuna sonrieron, era tan típico de él.
Ed en sí, no supo que pensar, ¿decía o no la verdad?, le habían mentido tantas veces que había aprendido a desconfiar de las personas, aunque no parecía que Tsuna mintiera.
“Pero aunque no lo parezca, ¿Cuántas personas no me han engañado igual?, deberé tener cuidado con él” fue su conclusión.
-No creas que te ayudaremos gratis- decía ahora Reborn escondiendo su mirada bajo su fedora.
Ed no se sorprendió, de hecho hasta lo relajo oír eso.
-¡Reborn!- regañaba Tsuna, haciendo un tierno puchero.
-Cállate Dame-Tsuna, si quieren que los ayudemos, tendrán que darnos algo a cambio.
“Equivalencia” pensó Ed tranquilamente.
-¿Qué quieres?
-En primera, sin secretos.
Ed se lo pensó por un momento.
-De acuerdo- fue su respuesta rápida, eso sorprendió a Reborn. Aunque claro, Ed no tenía la intención de cumplir eso.
-Y la segunda- dijo mientras convertía a León en su arma preferida- creó que ya saber cuál es.
-Por supuesto- dijo Ed, mientras chocaba sus manos y convertía una parte de su brazo en una cuchilla.
Tsuna y Al, igual que los otros de la habitación, a excepción de Mukuro y Hibari, se asustaron, pensando que iniciaría una batalla entre ellos dos.
Pero no era para nada el caso.
-¡Reborn no puedes pelear con e….- pero el pequeño jefe mafioso no pudo terminar su oración, porque un humo negro invadió toda la habitación.
Hibari y Mukuro usaron sus armas como ventiladores para quitar el humo rápido y ver al agresor, pero este ya no se encontraba ahí, al igual que…
-¡TSUNA/D…CIMO!
Su cielo había desaparecido…
Continuara…
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