Después de dos semanas que Tuna hablara con Reborn acerca del presentimiento que tenia, todos se sentían muy nerviosos, pues no sabían con que toparse y el hecho de que su jefe les dijera que el momento se acerca cada vez más, no ayudaba, pues próximamente seria el cumpleaños de su querido hermano, jefe, amigo, ahijado (por parte de Reborn), herbívoro y no querían tener problemas ese día, ya que la madre y padre del castaño vendrían a celebrar el cumpleaños de su hijo en dos días.
Por lo que se tuvo que poner más seguridad de la necesaria para contrarrestar al enemigo.
Pero para nuestro querido Hitman eso no era suficiente, por lo que los guadianés del decimo y el mencionado, daban rondas nocturnas por la habitación de nuestro cielo, a lo que nadie puso resistencia, ya que todos querían a ese lindo castaño de ojos miel y no permitirían que alguien se le ocurriera tocarle ni uno solo de sus cabellos castaños.
Por la misma razón el decimo capo de la mafia hizo un reunión, anunciando que ya pronto seria el día, y con el día se refería al DÍA SGUIENTE A ESE, por lo tanto tenían que dar lo mejor de sí, solo para proteger lo más importante para todos ellos su
CIELO.
-Decimo no se preocupe, pase lo que pase YO como su fiel mano derecha lo protegeré con mi vida- decía muy decidido un peli plata que respondía al nombre de Gokudera Hayato.
-no… etto… no lo tomes así Gokudera-kun- decía nuestro lindo castaño.
-jajaja, estoy de acuerdo con Tsuna- decía un chico sexy de ojos color ámbar llamado Yamamoto Takeshi, el castaño se sintió feliz de que su guardián de la lluvia entendiera su punto, ya que no quería que ninguno de sus amigos se lastimara, hasta que…- si alguien quisiera terminar con Tsuna, creo que todos moriríamos antes de eso jajajajaja.
Decía alegremente la lluvia, a lo que al castaño le salió una pequeña gota de sudor estilo anime, pero antes de que pudiera contraatacar con que no deseaba que nadie hiciera algo como eso el resto de los guardianes asintieron con la cabeza.
Decidió ya no pelear más, así que simplemente se sentó en la silla detrás de su escritorio para escuchar todas las locuras de sus amigos.
Cosas como: “no te tocaran nada, a menos que quieran que los muerda hasta la muerte” o, “kufufufu tranquilo Tsunayoshi-kun, los mandare al infierno con mis ilusiones”, y también “los golpeare al EXTREMO”, incluso los “ma ma ma, yo les are un rico sushi con sus propios dedos jajaja”, y un sinfín de cosas más.
Si que todos tomaban sus medidas, menos…EL… pero, ¿por qué?, hasta cierto punto ya deseaba que fuera mañana y poder encontrarse con esa persona, aunque seguro que si venía todos sus guardianes se le iban a echar encima, El sabia que la persona que fuese a venir no era una persona mala, claro que no, su instinto le decía que será una persona muy importante.
Pero como siempre, su amado tutor exageraba las cosas diciendo que “un buen jefe de la mafia debe saber enfrentase incluso con los enemigos desconocidos”, pero EL no era un enemigo, lo sabía, su corazón e intuición se lo decía.
Pero aunque intentara hablarlo con Reborn sabía que este no le hará caso, por lo que mejor opto dejarlo por la paz y esperar a ver lo que el futuro le traerá.
Con esos pensamientos dejo de hacer caso a la discusión que se formaba en su oficina y puso atención a la ventana, ya que como todas las reuniones pasadas, no quería detener las peleas…. No en realidad, no sabría cómo detenerla, ya que Reborn siempre se encargaba de eso, y ese día no estaba, ya que se fue a recoger a sus padres a Japón.
“solo me queda esperar”, pensó mientras observaba a unas ardillas subiendo con velocidad al árbol de sakura , que estaba frente a su ventana.
///En otro lugar///
Ya habían pasado dos emanas desde que los hermanos Elric decidieron volver a su mundo, y en esas dos semanas se la pasaron buscando al estupi… digo, XD a Envidia, ya que necesitaban una fuente de poder para activas el circulo de transmutación.
Hace como dos días que lograron encontrarlo y ahora todos se encontraban en la casa de los rubios, para que pudiera aceptar trabajar con ellos no fue nada fácil, pues el muy idio… envidioso, decía que ¿Qué era lo que ganaría?
/// Flash Back///
-¿¡acaso eres idiota!?- decía un muy enojado rubio- te estoy diciendo que con eso podremos volver a nuestro mundo, ¿Qué no es suficiente?
-si… tal vez si- decía de lo más despreocupado mientras jugaba con sus pies acostado en el suelo- pero me gustaría algo más.
-Envidia-san- decía el rubio menor- esta es una gran oportunidad, no creo que sea bueno que por solo caprichos deba de negarse- decía un poco irritado el menor.
-cállate- mascullo con ira- tu no lo entiendes… déjame hablar solo con tu hermano.
Al menor no le gusto nada eso, ya que el tenia derecho de saber lo que ocurría ahí, pero antes de que pudiera decir algo, su hermano mayor le mando una mirada de ternura indicándole que saliera de la habitación, cosa que molesto de sobre manera a envidia, pero solo se limito a bufar y apartar la miraba.
Al menor también le molesto, pero no le quedo de otra más que obedecer a su hermano y salir.
-bien… igual faltan algunas cosas para la cena- dijo asiendo un mohín, algo que causo ternura y gracias en el mayor, y algo de asco y ira en el chico de pelo negro verdoso.
-cuídate- dijo mientras se acercaba a él y le plantaba un beso en la frente.
-claro- dijo feliz el menor y salió de la casa.
-huy si “cuídate” que asco- dijo envidia ¿envidioso?, al mayor se le borro la sonrisa amable y lo miro con indiferencia.
-¿qué es lo que quieres? Y no me vengas con estupideces- dijo de forma fría.
-jujuujuju me pregunto ¿qué diría tu hermanito si viera esa faceta tuya que le escondes?- dijo de manera burlona, el otro solo lo fulmino con la mirada.
Por lo que opto dejarse de juegos, se levanto del suelo y se dirigió hasta el rubio.
-muy sencillo- dijo estando lo suficiente cerca como para que sus respiraciones se mesclaran, el otro no se inmuto- solo quiero que me agás el amor jajajja.
Al otro ese trato le dio asco, pero no mostro ni una sola emoción en su rostro, simplemente pensaba.
Si no lo hacía no había forma de volver, pero hacerlo con un ser repugnante como él era… repugnante, pero por otro lado si lo hacía volverían y n tendría por qué repetirlo de nuevo, es más cuando tuviera su alquimia simplemente lo mataría y ya, si muy sencillo, además no es como si fuera la primera vez que se acostara con alguien para conseguir lo que quiere, llevaba haciendo esa especie de intercambio equivalente desde que era niño.
El chico de cabello negro verdoso empezaba a desesperarse.
-¿y bien?- con eso logro sacarlo de sus pensamientos, lo miro en una mirada con un toque de asco que se pudo notar, pero el otro chico no le hico el menor caso.
-es un trato- respondió el rubio, el otro solo sonrió ante su afirmativa y luego sellaron el trato con un muy asqueroso beso, para luego dar paso a un momento de lujuria igual de asqueroso, claro antes de que regresara su hermanito y se enterara de eso.
///fin del Flash Back///
Todos ahora en el presente se encontraban en el centro de un círculo de transmutación.
-
bien… empecemos- dijo el rubio mayor mientras miraba a su pequeño hermano y a la lagartija.
Continuara…
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español