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La lucha del amor por maxi anime

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Notas del capitulo:

Hola a todos, me disculpo por tardar en actualizar, como vieron hace un tiempo actualice un fic de una pareja algo extraña XD, pero me gusta esa pareja, no sé porque. El cap digamos que me costó un poco, espero les guste, siento que le falta algo al cap, bueno cualquier cosa en el siguiente estará lo que le falte a este.

Cuando Athena y los otros regresaron a la tierra mostraban caras largas y tristes, en especial Shun que no daba crédito de lo que había escuchado, su mayor temor volvería a hacerse realidad y el debía dar la noticia, al igual que Athena. Cuando pudo reunir a todos se dio con una grata sorpresa, aunque esperaba no bajar los ánimos, delante de ella y por bendición de los apotropeos que estaban en el Santuario otro de sus santos dorados había sido revivido, el fuerte y poderoso santo de Tauro, Aldebarán, quien parecía reír alegremente ante las miradas de todos.

 

-Me alegra verlos a todos- sonrió no solo de ver al nuevo integrante sino también las sonrisas en los demás, los santos a cada lado.

 

Los seis a su derecha sonriendo ante los últimos acontecimientos, Mu con el pequeño Kiki de la mano, Aldebarán sonriendo con alegría, Saga y Kanon mirando con una gran sonrisa a la espera de buenas noticias, Death Mask con una sonrisa de burla, Aioria mirando a su hermano frente a él y a su lado Ikki que bufaba molesto al ver la preocupación de Shun en frente. A la izquierda estaba Shiryu, algo tenso, ahora ocupando la armadura de su maestro, a su lado Milo mirando de reojo a Camus, Aioros charlaba con Shura, evadiendo a Seiya que cada tantos momentos quería su atención, Camus estaba hablando con Hyoga e Isaac, los dos como sus fieles guardaespaldas, y Afrodita miraba seriamente a Death Mask.

 

-Tengo una noticia que quizás le saque sus sonrisas- exclamo seria, lo que hizo que todos la miraran preocupados- Me temo que son malas y quizás no deberían escucharlas, Camus ¿tu hermano ha despertado?

 

-No, sigue en cama, me dijeron que le tomara mucho tiempo en recuperarse, por la sangre sanadora que me paso- respondió.

 

-Apolo tomo una decisión y Hermes dio a difundir la noticia, a pesar de Artemisa y yo no estábamos de acuerdo, Poseidón volverá al cuerpo de Julián y sus Generales fallecidos aun serán revividos, Kanon e Isaac volverán al fondo marino donde es su lugar como generales- comenzó a hablar seria y a la vez acogida- Los dioses guerreros de Asgard también serán revividos, al menos con ellos no hay problema, los espectros de Hades también serán revividos y con ellos…

 

-Yo debo ir al Inframundo como Avatar de Hades- interrumpió Shun tristemente- lo siento a todos, quizás la única buena noticia de todo esto es que según la diosa Afrodita y la propia diosa Tyche me lo aseguro, el gran amor de Shiryu es alguien a quien derroto y será revivido.

 

-¿Alguien a quien yo asesine y será revivido con todo esto?- pregunto haciendo cuentas- quedan pocos…

 

-No cuentes a los espectros, que ni los conociste, ni a los santos de plata, según la diosa Afrodita también Shun tiene un enamorado secreto entre los santos aquí presentes-Acoto Marin sonriendo.

 

-Y para terminar con todo esto, Apolo está decidido, no sé cuándo se llevara a cabo, pero la decisión sobre Céline está tomada.

 

-¿Qué decisión?- preguntaron todos unísono, Camus comenzó a tambalearse, venía a venir la resolución.

 

-Ante todo lo pasado se ha declarado a Céline, Apotropeo de la convalecencia como rebelde a los dioses, si bien Seiya y los otros son rebeldes a los dioses pero el Apotropeo es mayor la falta cometida por un hombre que por cinco,  Seiya y los otros fueron contra los dioses con tal de terminar un régimen, Céline comenzó a ir contra el orden natural…

 

-No…Athena no- comenzó Camus a tambalearse y fue cuando se desmallo, Hyoga e Isaac rápidamente lograron agarrar a su maestro antes de que callera al suelo.

 

-CAMUS- grito Milo acercándose a tomarlo entre sus brazos.

 

-Athena… ¿lo van a matar?- pregunto Saga tragando saliva- ¿no es suficiente con lo que quieren hacer? Revivir a todos aquellos que quisieron destruir la tierra.

 

-Es para remediar las injusticias cometidas, se ha roto el circulo de la vida y se debe matar al responsable para que no vuelva a ocurrir- explico mirando  a Camus- creo que lo mejor es sacar a Camus del santuario, es preferible que no esté presente cuando los dioses se ocupen de su hermano.

 

La reunión se terminó de manera abrupta para todos ante lo que acababan de escuchar y lentamente se fueron retirando del templo del patriarca, cada quien bajo hasta su templo, aunque rápidamente todos se aglomeraron en el templo de Acuario, donde miraron intrigantes la habitación de huéspedes donde dormía Céline. Milo llevo a Camus hasta su cama donde lo recostó y a pocos segundos decidió acostarse a su lado, tenía que pensar demasiado a partir de ese momento, seguir las ordenes de la diosa, Camus se separaría de uno de sus alumnos, su hermano seria asesinado y todo por algo que comenzó solo como una buena acción, un pedido a gritos que solo quince años después logro realizarse aunque no de la manera que se pudo esperar y que ahora se convertiría en un gran dolor para su aguador.

 

En la sala todos se miraban de una manera casi espectral pareciera que las noticias que les dieron eran puñales en el corazón que lentamente los desangraban ¿Por qué cuando al fin había paz ahora tendría que haber una separación tan dolorosa? Isaac instintivamente se abrazó a Kanon, estaba feliz de estar al lado de su maestro después de tanto tiempo, se hacía una idea de ser el niñero del bebé que llegaría meses después, de formar una vida con Kanon en el santuario o quizás ir a Siberia con él, cualquier que fuera la elección solo importaba estar con Kanon y, ahora, debería volver al fondo del mar, dejar de ver a su maestro y su mejor amigo, aunque tenía un consuelo, Kanon. Kanon lo abrazo posesivamente para tranquilizarlo, en primer lugar sentía que todo sería más doloroso para el que para el resto siendo Isaac tan joven, de haberse reencontrado con quienes consideraba su familia y ahora, tan pronto que la recupero debía perderla,  y el, a pesar del pasado que llevaba sobre sus hombros, también se separaría de su hermano gemelo, a pesar de haber luchado a su lado en la guerra contra Hades ¿era justo eso?

 

-Me gustaría que se me explicara todo- pidió Aldebarán quien apenas sabia un poco de todo, pequeños fragmentos desde que había  regresado a la vida, y su despertar no fue del todo placentero, ya que despertó sobre fría piedra en medio de su templo.

 

-Ese chico dormido en el cuarto hace días, es el hermano mayor de Camus- explico Saga.

 

-Lo que sabemos es que Camus y su hermano son hijos de un médico que asesino a enfermos de tuberculosis, su madre fue enfermera en el mismo hospital, esta contrajo la enfermedad pero por gracia divina ambos nacieron sanos, la madre de ambos murió, el padre nunca se hizo cargo- explico Aioria- La madre de los dos los dejo en un monasterio antes de morir, Céline fue recogido para ser un Apotropeo del dios Asclepio, un sanador, Camus para ser santo dorado, en el caso de Camus por ser pequeño se selló su memoria o algo así entendí para que no recordara a su hermano.

 

-Tenía tres años Aioria, no era necesario que se le sellara la memoria, solo el tiempo paso y al no estar con su hermano, Camus lo olvido- acoto Mu-Céline comento que año tras año pidió estar con su hermano, ya que el entrenaba para ser Apotropeo, casualmente los dos entrenaron en Siberia, pero claro Céline era un simple mortal para cuando Camus cumplió los siete años  y él ya era un Apotropeo ya no podía seguir pidiendo, Camus era santo dorado de Athena para aquel momento, eso los termino por separar, año tras años Céline pidió por estar con su hermano, acogerlo, tengamos en cuenta que a los siente años aún era un niño  y pasando los años él lo veía con otros ojos, quiso separarlo de la orden de ser necesario, la respuesta siempre fue un no, finalmente cuando fallecimos contra Hades solo allí se le dio el Sí, para que Camus estuviera con él.

 

-Por lo que Céline dijo a Nachi y también nos han dicho a todos nosotros- acoto Shaka- Camus es propiedad de su hermano ya que este se ocupó de pedir a los dioses por él, los dioses dejaron a Camus a cargo de su hermano, también ninguno de nosotros es santo de Athena pero por las situaciones ya nombradas las cosas cambiaron, Camus está bajo el amparo de su hermano mayor desde que revivió y esto lo dejo fuera de la orden, Athena nos dijo por respeto  a Camus que ninguno volvería a ser santo dorado.

 

-Pero el desgraciado de Santorino es el culpable de todo esto- interrumpió Aioria- el maldito fue el que robo nuestros cuerpos, todo estaría bien para Camus si solo a él se lo hubiera revivido, probablemente Isaac y Milo también hubieran tenido esa posibilidad al ser ambos tan importantes para Camus, pero no estaríamos en este predicamento.

 

-Un hermano mayor que lucha por su hermanito- interrumpió Ikki abrazando a Shun- yo haría lo mismo, sin dudarlo.

 

-No eres el único, Touma dijo lo mismo en la Luna con respecto a mí, pero el daño está hecho, Céline y Santorini se pasaron de las manos- acoto la amazona de plata de brazos cruzados- No se puede matar a ninguno de ustedes, los dioses accedieron a que estén vivos, pero Céline, como fue quien comenzó todo esto debe ser castigado por arremeter contra el orden natural de la vida.

 

-¿Quién es Santorini?- pregunto Aldebarán comenzando a entender.

 

-Es amigo de Céline, tenemos entendido que quien ínsito al robo de más de un cuerpo cuando Céline solo se ocupó de Camus- explico Aioria- Mu, Shaka y yo fuimos revividos por él, para evitar  el suicidio de Camus o al menos eso nos dijeron, Saga y los otros fueron revividos para hacer un intercambio, ellos cinco por Camus que había vuelto al santuario con nosotros,  que no paso por el estado de Camus al regresar del templo de Asclepio.

 

-¿Qué paso al regresar del templo de Asclepio?-

 

-Camus enfermo, estaba muy grave, después nos enteramos que el bebió algo que no debió y que ahora lleva dentro de el a un alma, el alma de un niño que su propio padre asesino y que el conoció de manera extraña- explico Aioria- aun no me creo que el allá hablado con un fantasma.

 

-¿Sabes que es lo que me indigna acerca del padre de Camus?- exclamo Death Mask en burla- que según supe el castigo que se le dio no es castigo para él, fue encerrado como alma que el asesino en un sanatorio abandonado, donde el trabajo, supuestamente para que estas almas lo atormentaran, pero le dieron todos los privilegios, las almas de ese lugar son atormentadas por él,  cuando debió hacer pasado lo contrario.

 

-Es verdad, Camus nos habló de Mortimer, el fantasma del niño que conoció- acoto Mu- La alma de ese pequeño le dijo a él y nosotros lo escuchamos, sentía terror del llamado señor negro.

 

-Céline lo ha enfrentado muchas veces, siente un gran rencor hacia él, no solo porque fue entrenado para salvar vidas y para sanar a las personas, sino por este ser su propio padre y haberlo abandonado mucho antes de nacer,  es un ser temible que ha acumulado odio y egoísmo, muy violento y temible , tiene un rostro casi demoniaco- interrumpió la Apotropea del tratamiento- yo lo he visto desde lejos, si Hades tenía un aura negra, el aura de esa alma lo supera, no tiene forma humana, Céline asegura que nunca vio su rostro, solo dos orbes negros en vez de ojos y que siempre tiene una sonrisa siniestra, como si acabara de hacer algo, también se cuenta que durante el día puede escucharse su voz por el sanatorio cuando hablaba, tiene una voz fría, seca, y los ecos del pasado suelen ser frases que te erizan la piel, durante la noche el aparece solo para demostrar que está allí y que ese es su lugar, que siempre lo sera.

 

-No me quiero cruzar con ese tipo- bufo Death Mask- Camus tiene un padre más terrorífico que yo.

 

-Todos son más terroríficos que tu Death- bromeo Afrodita.

 

-Disculpa- interrumpió el santo de Libra quien se había quedado pensante desde un principio- ¿si pudiéramos ocultar a Céline donde no se lo encontrara los dioses podrían cumplir con su cometido de asesinato? Lo de las Marinas es inevitable, pero creo que es importante que una vida se salve por todas las que este se ha ocupado de salvar ¿no lo creen así?

 

-¿Y dónde planes llevarlo? ¿Al medio del mar?- pregunto Death Mask mirándolo en burla.

 

-No, a dominios fuera del alcance de Zeus.

 

-¿Y eso donde es?- pregunto Saga- ¿dominios fuera del alcance de los dioses?

 

-Dioses griegos exactamente, el lugar más seguro que se me ocurre es Asgard, tierra de Odín, Si un guerrero que sigue ordenes de Zeus intentara asesinar a alguien en Asgard estaría declarando la guerra contra Odín ¿no es que queremos paz? Quizás podamos ganar tiempo en tanto Céline pueda recuperarse para poder defenderse o al menos abogar en lo que ha ocurrido.

 

-Shiryu tiene razón… ¿Cómo lo llevamos?- acoto Shura.

 

-Un grupo deberá ir a Asgard, si es cierto lo que se ha dicho los dioses guerreros han sido revividos, será necesario demostrar que estamos yendo en son de paz y necesitamos de su cooperación- exclamo Saga pensante- si ellos nos ayudan podríamos armarnos para evitar que otra vida si pierda y cambiar el rumbo de las cosas, no necesariamente lo que quiere el dios Apolo.

 

-¿A qué te refieres?- pregunto Aioros.

 

-Necesitaremos apoyo, y mucho- aclaro el de Géminis- Shun será llevado al inframundo, Kanon e Isaac al fondo del mar, y valla a saber uno que pasara con nosotros.

 

-Que así sea, por el bien de la paz- interrumpió Mu- Shiryu e Ikki fueron los que más estragos causaron entre los dioses guerreros, sino me equivoco, creo que con ellos dos serán suficientes para ser de mensajeros.

 

-No te hagan, quieren ir a ver quién es el famoso que te ama lagartija, al que estas predestinado- exclamo en burla Death Mask golpeándole con el codo al ahora santo de libra- Dos diosas aseguraron que era uno de quienes asesinaste.

 

-Ya deja de decirme lagartija.

 

-Lagartija.

 

-Soy el santo de Libra.

 

-¿Al menos tienes una idea lagartija?

 

-Tengo una idea de quién puede ser- exclamo sonrojado- y si no es el, me jugare por él.

 

-Está decidido, entonces, Ikki y Shiryu se irán a Asgard, llevándose al hermano de Camus, llévemelo a un lugar seguro.

 

Un sonoro si se hizo escuchar entre las paredes del templo, todos de acuerdo con el plan que se estaba formando en pos de la paz o al menos eso creían. Esa misma noche, en medio de una fuerte tormenta de verano los dos santos de Athena, quienes demostraron su fidelidad incontables veces hicieron lo que creyeron correcto, llevándose el cuerpo de un débil Céline lo más lejos del santuario.

 

Los días trascurriendo lentamente, transformándose pronto en meses y ante la mirada atónita de todo el santuario comenzando a llenarse de vida por la aparición de los santos de plata, también lo hizo la interrumpió de un dios, quien no tuvo ningún contratiempo en llegar hasta los aposentos del patriarca, donde era esperado por los santos dorados y por el patriarca Saga. Athena miraba con cierta tristeza al ver a Poseidón adentrarse solo por un objetivo, llevarse a sus marinas separándolos de aquellos a quienes eran unidos.

 

-Lo siento Athena, ellos me pertenecen y lo sabes- exclamo la voz del joven Julián Solo, aunque tenía un claro tono celestial, la voz de Poseidón.

 

-¿No hay una forma de evitar todo esto?- pregunto cruzándose de  brazos- son mis santos.

 

-Dos de ellos no lo son, al menos uno de los dos no llego a portar una armadura, los dos vienen conmigo, sus escamas los esperan- dijo serenamente- Isaac, Kanon.

 

-Si señor- bajaron la mirada ambos.

 

Isaac abrazo a su maestro y a Hyoga posesivamente, no queriendo separarse de ambos, se sentía feliz viviendo nuevamente a su lado, sin rencores del pasada, recordando viejas épocas e incluso forjando nuevas, pero él sabía que era cuestión de tiempo para regresar al fondo marino.  Ante la insistencia del dios del mar  y dos de las marinas, Bian y Eo, regreso con ellos, sin más, despidiéndose de todos, cabizbajo. Kanon despidió a Saga bajando la mirada aunque internamente ocultaba algo más, sabía que su hermano hallaría la manera de que todo terminara en paz y la clave no era otra que el propio hermano mayor del santo de Acuario, oculto de todo en las tierras nórdicas.

 

En el norte del mundo, tierra reinada por las tormentas de nieve y el frio casi al extremo, en el extremo norte de Europa, una fuerte tormenta azotaba la región. Cubiertos por gruesas capas dos santos avanzaban a paso lento, llevando sobre una camilla cubierta un cuerpo inmóvil, camino al palacio del Valhalla, hogar de la sacerdotisa Hilda de Polaris y sus dioses guerreros. A paso lento y sin detenerse caminaban intentando salir de aquella tormenta y buscar refugio, pero a simple vista lo único que encontraban eran los arboles congelados por el frio y más nieve a su paso.

 

El menor de ambos miro al frente, esperando ver algo conocido, mas solo vio nieve y más, el menor de los dos levanto la mirada al ver las gruesas capazas de nieve por delante, bajo la mirada dando un largo suspiro antes de continuar y fue cuando un recuerdo asalto su mente, soltó la camilla, dejando a su camarada con el cuerpo a cargo y comenzó a buscar de manera rápida entre la nieve, un lugar específico, donde la nieve no estuviera tan profunda. Hallo aquel lugar sin demora, cerca de un acantilado y a paso rápido comenzó a sacar los casquetes de nieve que se habían formado en los últimos meses, producto de las ventiscas, ante la mirada de su camarada saco un cuerpo, a un guerrero, de armadura azulada y cabellos casi celestes, cercanos a un color blanquecino.

 

-Phenril- exclamo tomándolo en brazos sacudiéndolo, toco su pecho, asegurándose de sentir sus latidos y en efecto, el corazón del dios guerrero latía con lentitud- Phenril, despierta.

 

-Shiryu- exclamo su compañero acercándose- los demás dioses guerreros deben estar también al despertar.

 

-Lo imagino- exclamo seguro de aquellas palabras, sacudiendo lentamente al dios guerrero de Épsilon- Phenril, despierta.

 

-¿crees que es el?- pregunto incrédulo el caballero de Fénix.

 

-Puede ser, él y yo somos contrarios en todo sentido, el no confía en las personas y yo sí, él fue al único que no quise matar.

 

-Todos tenían un motivo, Shiryu.

 

-Alberich se merecía que lo matara- acoto sin dejar de sacudir al dios guerrero- Phenril, despierta.

 

-Déjalo, ya despertara.

 

-No puedo dejar que despierte solo, sería que lo abandonen nuevamente  y eso está mal…Phenril, despierta por favor- le pidió tomándolo entre sus brazos- no te voy a dejar solo, te lo prometo.

 

El dios guerrero de épsilon se movió lentamente y comenzó a abrir sus ojos, encontrándose con un rostro conocido, intento moverse para alejarse de aquel, pero se sentía bastante débil, por lo que se resignó, cerro sus ojos y se dispuso a esperar, fuera lo que fuera a pasar él no se opondría, vivir o morir en ese momento no le parecía que hubiera diferencia entre una y otra, el resultado no variaba, ambos significaban la misma cosa.  Contrario a lo que paso por su mente sintió calor, abrió los ojos solo para verse rodeado por un cosmos dorado que lo cobijaba, derritiendo la nieve a su alrededor, dándole fuerzas y esto le dio más deseos de vivir en ese momento. Comenzó a derramar lágrimas, sin saber porque, solo lo hizo, se sintió afortunado, afligido y contento, no pensó que todo fuera posible, pero así lo era.

 

-Phenril, Bienvenido- exclamo el santo levantándolo en brazos.

 

-¿Bienvenido?- pregunto débilmente sin entender, aunque el calor que sentía fue suficiente razón para hacerlo cerrar sus ojos y acobijarse en los brazos de aquel que lo confortaba, no le importaba nada en aquel momento, mas solo cerró sus ojos lentamente y disfrutar de aquel momento.

 

-Oye, no te duermas…Phenril, necesito tu ayuda, anda, despiértate…que te despiertes...Phenril prometo darte algo si te despiertas.

 

-¿Qué?- pregunto totalmente relajado, sin pesarlo.

 

-Ventajista- exclamo en burla- necesitamos dos cosas, uno, si sabes de algún lugar para sanar guerreros heridos, una fuente, un lago, un manantial o lo que sea, necesitamos llegar allá.

 

-Conozco un manantial… ¿Estas herido?- pregunto abriendo levemente los ojos.

 

-Yo no, pero nuestro amigo si, y necesita toda la ayuda posible, y en segundo necesitamos llegar lo más pronto posible al castillo del Valhalla para pedir ayuda a Hilda.

 

-Me siento débil, no me puedo mover- exclamo con una voz casi apagada.

 

-Puedo llevarte en brazos a ese manantial para que recuperes fuerzas, solo guíame.

 

El dios guerrero giro apenas su cabeza buscando algún lugar que ubicarse, viendo a los lejos el bosque de coníferas, señalo con la mirada hacia aquel lugar a lo lejos y bajo la mirada lentamente. Shiryu comenzó a caminar a donde había señalado, mientras Ikki llevaba sobre su espalda a Céline, abandonando la camilla en la fría nieve, pronto se adentraron al bosque y el dios guerrero comenzó a dar más indicaciones mientras avanzaban hasta que sintieron un vapor que los rodeo, siguiendo el instinto del dios guerrero de Épsilon los dos santos se internaron en el bosque hasta su lugar de destino.

 

Posiblemente en todo Asgard ese debía ser el único lugar donde el frio no azolaba, el pasto verde y flores de diversos tamaños y colores indicaban que se acercaban a un lugar donde otra temperatura se sentía, animales pequeños corrían por aquel sendero buscando alimento y se escondían en los árboles, totalmente poblados de un verde claro.  El matinal era un lugar que podría describirse como mágico,  un estanque de agua que emanaba vapor, rodeado de piedras que daban más que estética y los animales que bebían agua tranquilamente antes de salir corriendo.

 

-Es aquí- exclamo el santo de cabellos negros- Phenril.

 

-Si…el vapor a veces es suficiente- acoto calmadamente- con los lobos cuando recibíamos algún daño nos internamos aquí…para curar nuestras heridas o cuando van a nacer crías.

 

-Gracias Phenril, muchas gracias- exclamo más tranquilo bajando al suelo al dios guerrero, solo para sacarse aquella capa que lo cubría del frio, dejando ver la armadura dorada que ahora portaba.

 

Ikki hizo lo mismo, sacándose la capa para dejar ver su brillante armadura y quito lo que cubría a Céline, para luego comenzar a sumergirlo dentro del manantial. Shiryu hizo exactamente lo mismo con el dios guerrero para que este recuperara fuerzas.  Pasaron los minutos y nada parecía haber surgido efecto, hasta que de pronto Céline despertó, en un principio aturdido hasta que lentamente fue recobrando el sentido.

 

-¿Dónde estoy?

 

-Bienvenido a Asgard, temporalmente debes refugiarte aquí- contesto Ikki, mirando a su compañero como sacaba al dios guerrero del agua, el cual apenas se movía- Apolo quiere tu cabeza.

 

-¿Te sientes mejor Phenril?- le pregunto el santo dorado- tienes que sentirte mejor.

 

-Me siento pesado- exclamo el dios guerrero abrazándose al de brillante armadura color oro.

 

-Quizás necesite descansar Shiryu- acoto el santo de fénix- llevémoslo al palacio para que descanse, para mañana el estará bien.

 

-Es posible, muy bien, Phenril, duérmete mientras te llevo al castillo.

 

Los dos santos volvieron a caminar directo al imponente castillo que a los lejos comenzaba a divisarse, y no fue para sorprenderse que mientras caminaban de la nieve comenzaran a levantarse los dioses guerreros caídos que iban encontrado. Para la fortuna de ambos no fueron otros que los más pacíficos, que entre ellos conocían, Mime, dios guerrero de Eta, Syd de Mizard, dios guerrero de Zeta y su hermano gemelo, Bud de Alcor, sombra de zeta. Dentro del castillo no encontraron a otros que los dioses guerreros de Alpha, Beta y Gamma, arrodillados ante Hilda jurándole nuevamente lealtad, quien junto a su hermana no cabían del  asombro.

 

-Alberich no debe tardar- interrumpió el santo de Libra- Señorita Hilda de Polaris, somos emisarios del santuario.

 

-No nos han querido decir a que han venido- exclamo Syd arrodillándose ante la sacerdotisa, aunque estaba seguro que venían pacíficamente, o eso aparentaban.

 

-¿Phenril no puede estar en pie?- pregunto Sigfried mirando al dios guerrero en brazos del caballero dorado- un momento ¿Por qué Shiryu de Dragón lleva una armadura dorada?

 

-Es una muy larga historia- respondió sonriendo- Phenril dice sentirse débil.

 

-Se hace el débil, siente el cosmos que lo acobija y le gusta- interrumpió Alberich adentrándose, camino hasta un pilar donde se recargo cruzándose de brazos.

 

-Hay mucho tiempo-fue la voz de la sacerdotisa que lleno el recinto de pronto- podrían comenzar contando desde el principio, no he sabido de ustedes, santo de Athena, desde que terminó la guerra de Asgard.

 

-Muchas guerras han pasado desde entonces- Miro el santo de Fenix a los dioses guerreros, los cuales no cabían de asombro al escuchar que más guerras se habían disputado, para ellos no había pasado ni un día desde el final de la guerra en la que ellos cayeron abatidos.

 

Los dos santos de Athena comenzaron a contar lo vivido desde la finalización de la guerra de Asgard, batallas disputadas, las grandes pérdidas, los terribles y alegres momentos que pudieron tener en ese lapso de tiempo entre guerras y más guerras, las traiciones y las redenciones. Ante la mirada de los dioses guerreros, estos dieron por sentado que habían pasado varios meses, quizás un año cuanto mucho, la historia podía ser inverosímil pero se estaba hablando de la orden, de dioses, de cosas posibles dentro de lo que ellos sabían y los últimos acontecimientos no era algo que querian perder detalles, ya que por ellos habían regresado a la vida.

 

-Si entendimos bien- exclamo Sigfried mirando al muchacho que había venido con ellos y que no había pronunciado una sola palabra en todo el trascurso del tiempo desde que llego- el tipo ese pertenece a una orden de Apolo.

 

-Asclepio, soy Apotropeo de Asclepio- corrigió Céline.

 

-Pero Apolo es padre de Asclepio, lo que hace que también estés a su orden- acoto el dios guerrero- Por ese tipo, que comenzó queriendo solo revivir a su hermano, se revivió a todos los santos dorados, menos al santo de libra que se rehusó, por ello Shiryu asedio a santo dorado, pero ahora los dioses quieren su cabeza.

 

-Hasta que Céline pueda defenderse por sus propios medios, queríamos pedir su ayuda, para protegerlo, Céline dono mucha de su sangre por la vida de su hermano, nosotros, los santos de Athena, estamos seguros que él no merece el castigo a la muerte, no tenía malas intenciones.

 

-Las puertas del palacio están abiertas para ustedes, después de todo lo que hicieron por Asgard y por mí- exclamo Hilda- quédense cuanto gustes, nadie los sacara de aquí.

 

-Gracias, señorita Hilda- sonrió Shiryu- ¿Dónde puedo dejar dormir a Phenril? Dice sentirse débil.

 

-Phenril, levántate, eres un dios guerrero, desciendes del dios guerrero más fiel a Odín, levántate de una vez, no estas para comportarte de esa manera irrespetuosa, tienes deberes que cumplir  y comportándote así no ganaras otro trato.

 

-Dragón dile a Sigfried que no hable-pidió el dios guerrero de Épsilon- me siento débil.

 

-Phenril, ya no soy santo de Dragón, ¿no escuchaste? Soy santo de Libra.

 

-Para mí siempre serás el santo de Dragón.

 

-Las habitaciones están subiendo las escaleras, escojan donde se sientan más a gusto- sonrió la sacerdotisa- Sigfried, si Phenril se siente débil lo mejor es dejarle que descanse, posiblemente mañana el recobre sus fuerzas.

 

-Pero señorita Hilda.

 

-Sigfried, he dado una orden.

 

Continuara.

Notas finales:

Gracias por leer, espero les allá gustado, bueno, guau no puedo creer que este fic llegara al capítulo 17, bueno estamos cerca del final, eso sí, mi fic más largo tiene 25 capítulos pero es un fic de otra categoría ¿ustedes que creen este fic merece superar en capítulos a mi fic más largo?

Adelantos del próximo cap:

Para los amantes del Patonejo (yo soy una) Shun antes de irse al inframundo corta su relación con Hyoga por lo que le dijo la diosa Afrodita, pero el caballero de Cisne no tiene en planes separarse de su conejo. Camus no sabe dónde está su hermano y planea salir a buscarlo, Milo no planea permitir ello. Athena junto a Saga intentan buscar una solución por la paz para lo que ocurre, pero Saga sigue en pie con su plan, utilizando a Céline como su arma. Mientras en Asgard Céline quiere regresar con su hermano cuanto antes, siendo siempre impedido por los dos santos que lo vigilan por su seguridad, Shiryu busca hacer cuentas de quien será aquel a quien está predestinado según los dioses. Todo eso y más, o quizás menos en el siguiente cap.

A una cosa mas, GILLIAN, estoy trabajando en lo que me pediste :)

Un abrazo y hasta la proxima.


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