La lluvia escurría por las ventanas de las casas y mojaba las avenidas de la inmensa ciudad de Tokio, al ser domingo la gente prefería quedarse en el calor de su hogar, jugar los pequeños de la casa o sencillamente estar bajo las mantas con esa persona viendo una película. Las cosas son diferentes cuando tienes diablillos en casa y tu único día para tener paz y divertirse lejos de esa persona que te acosa y la personita que requiere mucha atención, queda completamente arruinado, claro está que llegara la persona que lo impida y proponga algo más. Y ahora hay estaban comiendo en el departamento un conjunto de personas que tenían las personas anteriores en casa, en el departamento de una persona que no las tenía.
Los chicos comían y hablaban amenamente, cierto castaño de ojos verdes anfitrión de la reunión carraspeo la garganta atrayendo la atención de los otros 5 comensales, que voltear haciendo absoluto silencio.
-quiero que sepan que...- se mordió el labio inferior y bajo la mirada avergonzado-yo tendré un bebe.
La reacción de los presentes fue variada, unos se quedaron con la boca abierta cómicamente, unos tiraron la cuchara que estaban a punto de meter a su boca y algunos escupieron la bebida.
-Mi-Misaki explícate por favor- aquel chico de ojos chocolate y cabello castaño tratando de recordar ls novios que el otro había tenido últimamente.
El chico asintió y tomo aire para mirarlos.
-hemos sido amigos desde hace años, y solo ustedes saben que l único que más he querido en este universo es un bebe, algo mío, algo que gracias a mi condición puedo conseguir- acomodo su cabello detrás de su oreja y los miro para así continuar con su discurso-pero francamente me he hartado de esperar quien pueda darme l que quiero, por curiosidad hice una cita en una clínica y bueno, el doctor me reviso y estoy completamente capacitado para una inseminación- el chico espero la reacción de todos-
-Misaki yo creo que deberías de esperar hasta que estés completamente seguro- dijo un ojiverde parecido a Misaki llamado Ritsu Onodera
- Creo que Rit-chan tiene razón- dijo un pelinegro de ojos cafés llamado Kisa Shouta
- No se Misaki ¿estás seguro?- le pregunto dudoso un Rubio cenizo y ojos color gris azulados llamado Shinobu Takatsuki
-Si Misaki yo te apoyo en todo y lo sabes pero ¿no sería bueno que esperaras?- dijo un ojiazul con el cabello color chocolate llamado Chiaki Yosnhino
- Si, piénsalo es mejor que esperes-comento Hiroki
- Si Misaki piénsalo- dijo Ritsu y Kisa asintió con la cabeza
- Es que ustedes no entienden- dijo mirando a todos- todos están esperando un hijo o ya los tienen, tu Kisa tienes a Yukina-san y tuvieron hace 3 años a Nagisa-chan, tu Hiroki, Nowaki-san te adora y hace año y medio nació Yuna-chan, Ritsu, tu tienes a Takano-san y hace seis meses nació Ikuto-chan, Shinobu tiene a Miyagui-san y hace dos semanas te enteraste que tienen 3 meses de embarazo y tu Chiaki tienes a Hatori-san y llevas 8 meses de embarazo- finalizo sin haberles quitado la mirada, estaba claramente molesto por las opiniones de sus amigos, casi hermanos.
No podían negar que Misaki tenía razón desde que lo conocieron lo que más ha anhelado era ser padre, compartiendo esa felicidad con una persona que amara, sin embargo también sabían de los numerosos patanes que ha conseguido como novios, todos y cada uno de ellos solo han querido sexo del pobre castaño o dicen amarlo y lo han hecho sufrir de maneras muy dolorosas y aunque su decisión ha sido muy extrema ellos no le podían dar la espalda ya que era como su hermanito y varios de ellos se debían de imaginar lo frustrante que seria que tu amigo Shinobu que es más chico que tú, ya estuviera embarazado y ni siquiera se lo imaginaba ni mucho menos lo esperaban tan pronto.
Le sonrieron todos dulcemente y se pararon de sus asientos dirigiéndose a él, dándole entre todos un cálido abrazo... Bueno Chiaki lo abrazo lo más que le permitió su gran abultado vientre.
-Quiero ir contigo con ese dichoso medico entendiste- dijo Hiroki revolviéndole el cabello.
Al oír esto Misaki asintió enérgicamente.
-Nosotros igual- dijo Ritsu y Kisa lo miro con la mirada más seria que pudo hacer.
-SERÉ TÍO OTRA VEZ!-grito Chiaki emocionado
Todos rieron ante el gesto del chico y se volvieron a sentar en sus respectivos asientos para seguir comiendo, la comida pasó entre risas y preguntas respecto al embarazo.
Las parejas de los respectivos chicos que estaban en el otro lugar, otra reunión de hombres bien parecidos y guapos se llevaba a cabo en el departamento de un escritor.
-Y, Hatori-san ¿cómo le ha ido con Yosnhino-kun?-pregunto un chico alto cabellos de un negro azulado y profundos ojos azules llamado Kusama Nowaki
Todos prestaron atención al hombre el cual respondió
- Sorprendentemente mejor de lo que yo creía- contesto tranquilamente un joven de ojos color gris y cabello color castaño llamado Yoshiyuki Hatori
-Ja ¿en serio? Por qué lo dices- Le pregunto un Pelinegro de ojos de un hipnotizaste color miel llamado Takano Masamune
-Bueno-comenzó a explicar pegando la espalda al respaldo del sillón- él dice que no quiere que él bebe sienta tensiones y digamos que descarga sus cambios de humor, más específicamente cuando yo le digo algo según el hiriente, de otra manera- dijo suspirando
-¿Cómo?- pregunto un chico alto de ojos color miel y cabello castaño llamado Kou Yukina ladeando la cabeza sin comprender mucho.
-Hace 2 semanas fuimos a su revisión mensual y nos dijeron que sus niveles de azúcar deben de bajar ya que están muy elevados -suspiro y continuo- eso le puede hacer daño al bebe y ayer tuvo un antojo- levanto la vista y se dio cuenta de que todos lo miraban con atención- yo le dije que no se lo podía cumplir y se fue muy enojado a su estudio-tomo la cerveza que estaba en la mesa y le dio un sorbo antes de continuar- eso lo hacía desde el tercer mes cada que iba a empezar una pelea el me dejaba hablando y se encerraba. Sorprendentemente salía de allí más relajado y yo no sabía que hacia hasta ayer.
-¿Y qué hace? por qué Shinobu esta insoportable- comento el más grande de todos un hombre de ojos profundos negros y cabello del mismo color
Suspiro, saco una hoja de su pantalón, la desdoblo y se la paso a Nowaki (que estaba a su lado) l.
-¿Eres tu?- le pregunto tratando de aguantar la risa y paso el papel a Miyagui.
Este solo al verlo soltó una carcajada y luego se lo paso a Yukina que hizo lo mismo que él.
-Se supone- dijo encogiendoce de hobros- después de la pelea se encerró, ya había pasado mucho tiempo y me preocupe- tomo otro sorbo de la cerveza y continuo- lo encontré dormido encima de su mesa y varios dibujos así- dijo señalando el papel, el cual estaba casi roto ya que Takano se lo estaba tratando de quitar a Yukina de las manos-abajo de su cabeza
El dichoso papel era un dibujo de el colgado de una palmera, gritándole mil y un disculpas a Chiaki, abajo de él había 3 cocodrilos esperando para almorzar y en una esquina se veía un pequeño dibujito de Chiaki riendo malévolamente y bajándolo lentamente con la mano de la cuerda.
-Pues ya desearía yo que Shinobu fuera así-suspiro Miyagui con cansancio.
-Bueno y ¿tú qué? he Akihiko -pregunto Takano
-¿Yo que de que o como que?- le respondió un peli plata de lindos ojos color violeta sentado con las piernas cruzadas en un sillón individual un poco separado de los demás llamado Usami Akihiko.
-Hay por favor, no te hagas si todos aquí sabemos que te fascina Misaki-kun- le dijo Takano.
-¿Quién te dijo semejante mentira?- dijo fingiendo inocencia
Takano suspiro cansado ante las palabras de su amigo, como odiaba que lo trataran de idiota, porque solo había 2 personas en todo el universo que se atrevían a hablarle así y eran él y su adorado niño ojiverde
Akihiko al ver que su amigo pelinegro perdía la paciencia dio una sonora carcajada y decidió dejar de tentar su suerte
-No lo sé- dijo sinceramente atrayendo la atención de todos los presentes
-¿Por qué lo dice Akihiko-san?- le pregunto Nowaki viendo que Akihiko bajo la cabeza y tenía su flequillo tapándole los ojos
-Bueno es que pienso que no pasaremos a mas que solo ser amigos- dijo suspirando tristemente
-Bueno si no le confiesas lo que sientes como quieres que se entere- le dijo Hatori- el chico será muy listo pero no es adivino
-¿No le has dicho nada aun?- le pregunto Miyagui asombrado- por dios por que tantas largas solo dicelo lo máximo que puede pasar es que te rechace
-Eso es lo que me da pánico-le contesto-que pasaría si le digo mis sentimientos, me rechaza y no me vuelve a dirigir la palabra ni como amigo- dijo levantando la cabeza-él es mi todo y no lo soportaría
-Bueno querremos o no tiene razón, Takahashi-kun es muy tímido y seguro que si lo rechaza no podrá volver a verlo a los ojos- dijo Nowaki haciendo que el pobre novelista perdiera todos los ánimos de declararle sus sentimientos
-Tienes que decírselo ya me harte de verte suspirando por los rincones como quinceañera enamorada-dijo Takano- por dios o ¿que acaso no eres hombre?- sabía que le estaba picando en donde más le duele
Akihiko levanto la cara enviándole una mirada fulminante, como se atrevía ese editorucho de pacotilla a hablar así del gran Akihiko (hago lo que quiero cuando quiero, donde yo quiero y a la hora que quiero) Usami
-Si lo soy-dijo entre dientes
-¿Entonces qué demonios esperas?-le pregunto Takano con una sonrisa triunfante en su rostro- saca tu celular- le ordeno y el escritor lo hizo- y mándale un mensaje diciéndole que le tienes que decir algo muy importante y que lo esperas en- se puso la mano en la barbilla pensando- Marimo's Books&Coffe a las 4:00 p.m porque tienes algo muy importante que decirle-dijo sonriendo con superioridad al ver que su amigo escribía todo lo que le había dictado- y ahora envíalo
------------------->
Envíando mensaje-Mensaje enviado
Demasiado tarde se dio cuenta lo que había hecho fijo su vista en Takano que tenía una sonrisa triunfante en el rostro y viéndolo con superioridad
-Veale el lado positivo Akihiko-san-dijo Yukina-al menos se sacara ese peso de encima
Suspiro, ha estado enamorado del hermano de su amigo desde hace 3 años, antes había estado enamorado de Takahiro pero luego conoció al pequeño ojiverde con el cual había podido abrirse sin tener miedo a ser juzgado, ese castaño le soporta sus niñerías, arranques de enojo e incluso su humor después de sus extensas horas de trabajo.
Mientras el pequeño castaño recibía el mensaje de Akihiko y se le dibujaba una pequeña sonrisa en su rostro.