Cuando Lían termino con su horario de trabajo, se alisto para retirarse ya daban mas de la medianoche y si quería descansar al menos unas cuantas horas, le era muy aconsejable el volver a su apartamento. Inesperadamente para el esa noche de trabajo fue muy animada para el, la verdad es que muchos sucesos de esa noche quedaron grabados en su mente sin poder sacarlos, al igual que una extraña sensación de incomodidad, pensó que probablemente eran cosas suyas por el cansancio tratando sin mucho éxito de que se olvidase, muy pocas cosas dejaban un impacto en el y ciertamente esta era una de esas, a la mente de Lían se le vino la cara y nombre del travesti Seferión, un raro nombre pensó además de una rara persona, responsable de la mayoría de sus inquietudes, el travesti le dio mala espina como si su sola presencia fuese el inicio de un acto en el que lamentablemente el se sentía como uno de los principales personajes de la historia, en todo caso no creía que volvería a ver al hombre, o mas bien no quería y si por alguna razón sus caminos se volviesen a cruzar Lían decidió que simplemente pasaría de largo, era lo mas prudente en su pensar.
No tardo en llegar a casa, inmediatamente se quito el traje y su chaleco, para tenderlo en el armario, quedando medio desnudo, en el costado del tronco se podía apreciar el tatuaje de una rosa muy bien ella con gotas de sangre cayendo de por el tallo con espinas, el tatuaje iba desde el costado de la cadera izquierda agarrando parte del abdomen subiendo hasta llegar al pecho, habían tres rosas de color rojo vino, una en el pecho otra en la curva entre el pecho y el abdomen y la ultima en la cadera, el tallo se enredaba uno con otro mostrando pequeños capullos. A Lían le gustaba mucho ese tatuaje el mismo había hecho el diseño, así como también había pintado un cuadro del mismo, el titulo que le había puesto era “dulce néctar de tus pétalos” muchos pensaban que su arte era muy oscuro, pero la verdad es que era original sus pinturas buscaban el resaltar la belleza del dolor en si mismo, la hermosura de la tristeza y sufrimiento, el secreto oculto detrás de ellos, eso era lo principal que Lían hacia resaltar. La gente muchas veces lloraba al ver sus pinturas, se hundían en la misma a la vez que se maravillaban, Lían sabia muy bien el significado de cada una de sus pinturas y que era lo que cada pintura representaba.
Se quito el pantalón para colgarlo y después se dirigió al baño para quitarse el olor a alcohol. Se vistió dentro del baño y cuando salio se preparo algo sencillo de comer, al terminar agarro un cuadro y lo puso en el caballete, donde en una mesita al lado estaba la pintura. Lían fue trazando línea tras línea con el lápiz, a simple vista pareciera que nada mas son líneas puestas a la zar pero simplemente era la estructura de lo que Lían planeaba hacer, se estuvo 5 horas inmerso en el cuadro hasta terminarlo, le coloco una manta encima a pesar de que la pintura aun estaba fresca y la dejo así, vio el reloj viendo que eran las 6 de la madrugada, se quito su camisa blanca llena de pintura y se recostó en el sillón familiar observando el techo de madera con atención como si fuera lo mas interesante del mundo.
Empezaba a las 9 y su trabajo de la mañana era en mas o menos media hora en una cafetería del centro, suspiro y se levanto, se dio otro baño, y se cambio con ropa casual, una camisa roja manga corta a botones y unos jeans rotos azules, se puso unos tenis cafés y salió del apartamento con todo y la mochila puesto que después se dirigía hacia la universidad, su cabello ya estaba atado en un pequeño bulto atrás de su cabeza, algunos mechones le caían por el lado izquierdo, se colocó sus lentes y salió del edificio.
En el camino a la cafetería reviso su celular para revisar su horario escolar, y de un solo el pronóstico del tiempo donde decía que en la tarde iba a estar templado, sonrió un poco satisfecho, en cuanto a su horario le tocaba historia del arte, seguidamente diseño grafico en las dos materias le tocaba ir junto con Alejandro, los demás tenían diferentes clases. Al llegar al centro a penas visualizo a un par de personas que iban camino al trabajo, o a una madre llevando a su hijo o hija a la escuela, la cafetería en la que trabajaba quedaba justo al lado del parquecito dándole un excelente aire reconfortable y sencillo con el montón de arboles a los alrededores dándole un toque silvestre.
Al llegar a la cafetería paso por los asientos del exterior viendo de reojo a un hombre leyendo el periódico con un café en mano, le conocía era un cliente regular por las mañanas se podía ver a simple vista que el hombre era muy reservado, pero también era muy amable, tenia el cabello castaño era muy agradable a la vista los ojos eran de un color azul oscuro, que reflejaban tranquilidad, un hombre muy pacifico.
Entro a la cafetería, pisando el piso de madera. Adentro era igual de reconfortable que afuera el lugar se iluminaba por los rayos de sol, las mesas quedaban cerca de las ventanas y separadas por ciertas divisiones de café, justo en la entrada se encontraba con la barra en donde pedias tu orden. En la barra estaba un hombre ni tan viejo pero tampoco tan joven de edad media para ser mas preciso, era un poco pequeño de cabello pelirrojo y ojos verdes azulados.
–Señor. –saludo Lían, llamando la atención del pelirrojo.
–Lían, ya llegaste…buenos días que tal tu noche?. –pregunto el hombre en una voz ronca mientras preparaba el café.
–Igualmente…mi noche un poco alborotada pero bien. –respondió con simplicidad Lían caminando hacia la puerta de la barra, agarrando un mantel blanco y poniéndoselo alrededor de la cadera, ahí no había uniforme así que trabajaba con la ropa con la que llegaba.
. –Ohh…eso espero…hijo me ayudarías a limpiar las mesas por favor. –pidio amablemente el señor con una sonrisa.
. –Por supuesto. –respondió Lían, percatándose de la ausencia de alguien. –Y la Señora?. –pregunto Lían por la esposa del dueño, este sonrió y le señalo el otro lado de la cafetería donde se encontraba una hermosa mujer igual de pelirroja regando las plantas, con mucha felicidad.
. –Ya veo. –Dicho eso Lían se concentro en limpiar las mesas una por una, el café se iba llenando de a poco. Eran pocas personas las que llegaban cuando el iba en la mañana, después venían los demás empleados, ahí Lían se encargaba de tomar las ordenes y de servirlas, y sin ninguna complicación así lo hiso.
. –Gracias por tu ayuda Lían, se te hace tarde para ir a la universidad, ya puedes irte que dios te acompañe chico. –dijo la esposa del dueño, Lían le sonrió amablemente agarro sus cosas y se fue sin hacer rodeos en otros lugares, caminaba tranquilo sin que nada le perturbase sentía el viento mecer su cabello, la gente iba y venía el pasaba desapercibido entre ellos como uno mas, no le molestaba, no le alegraba y tampoco le llamaba su atención ser uno mas, el tema le era indiferente en su mundo pocos entran, los demás están de sobra, esa era la manera de pensar que llevaba, y era feliz así.
Al estar a una cuadra de la universidad Lían se deshizo la cola y esta le cayo toda en la frente se quito los lentes y los guardo en una caja pequeña para ellos, guardo la caja en su mochila y siguió caminando hasta entrar a al campus. Como siempre todos lo veían extraño, algunos repugnados, y el resto pasaban de el sin ningún problema, Lían ni se daba cuenta.
. –Lían tardaste, hoy nos toca técnicas de confección. –Dijo Alejandro acercándose a Lían, quien asintió con la cabeza, Alejandro acerco su brazo rodeándole los hombros apretándolo fuertemente.
. –¡Bien! No importa mira, traje unos diseños perfectos, la colección de otoño va a ser la mejor, me inspire tanto en lighting arow. –seguidamente Alejandro no dudo de hablarle sobre sus nuevos diseños de ropas y las exposiciones de su madre en la cuales el había colaborado haciendo la mitad de los diseños y en la organización del desfile de moda, Alejandro era bien conocido como el genio de la moda o el rey de la creación de la moda en la universidad era popular en todos los cursos y muy conocido en otras áreas nada que ver con la de el, se hicieron amigos cuando Lían al ver un diseño suyo lo utilizo en unos de sus cuadros para una exposición, Alejandro que había pasado por pura curiosidad a la exposición quedo fascinado con el cuadro y persiguió a Lían repitiéndole una y otra vez que no el había hecho relucir a no mas poder su obra de arte dentro de otra obra de arte, Lían exhausto se resignó a seguir huyendo de el.
Al llegar al salón de clases entre el parloteo de Alejandro y la bulla de los de su alrededor llego a sentarse en su asiento para recibir la clase a pesar de que sería inútil puesto que esa clase la daba Homero un hombre celoso de el por haber avanzado y superado a muchos entre ellos a su profesor, quien no entendía como había podido quedar debajo de un mocoso sin chiste como le había llamado anteriormente entre un montón de berrinche, al menos no le quitaba puntos adrede puesto que Alejandro era siempre su pareja y el profesor admiraba a Alejandro para el profesor el era alguien de respetar, en cambio el no era nada para Homero.
. –Y como te decía quiero que seas mi modelo exclusivo para la temporada de invierno. –concluyo Alejandro haciendo saltar un poco a Lían de su asiento sorprendido.
. –Que?. –murmuro incrédulo, Alejandro rio por lo bajo.
. –Que quiero que seas el modelo estrella de mi pasarela, Lían eres alguien muy increíble, eres alto, muy guapo, atractivo para los demás con solo verte verdaderamente, y sobre todo eres inconscientemente seductor con una elegancia y encanto natural que solo tu dispones… quiero que tu seas quien haga resaltar mi tan amada colección, lo hice pensando en ti mi colección fue hecha para que nada mas tu fueras capaz de exhibirla en su total resplandor. –Lían se quedo completamente sorprendido, no era que no se apreciase a si mismo simplemente no le parecía buena idea, tenia un mal presentimiento y quería negarse, pero la manera en que Alejandro de hablo le dio a entender de que este quedaría muy decepcionado si le daba una negativa.
. –Sabes que es lo que pienso de eso. –trato de debatir, Alejandro sonrió enormemente como si ya se hubiera esperado esa respuesta.
. –Por supuesto que se que no te gusta nada que la gente te preste mas atención de lo necesario y aunque a mi me parece mas que absurdo respeto tu decisión, pero no te preocupes esto no significa que quedaras en boca de todos, bueno si quedarías en boca de todos pero no se darían cuenta de que eres tu, ¡Vamos! Hombre te prometo que nadie se enterara de ti, y cualquier información que quieran obtener será totalmente negada. –Alejandro se veía muy seguro de si mismo, a Lían no le sorprendería que el ya tuviese todo arreglado, le miro con duda, no se podía quitar ese mal presentimiento pero pensó que no era malo hacer un pequeño sacrificio de vez en cuando después de todo Alejandro le a ayudado mucho, de muy buena gana.
Suspiro cansadamente.
. –Esta bien, pero no tengo ni idea de como hacer de modelo que te quede claro. –acepto finalmente Lían derrotado.
. –Ya veras, que lo harás espléndidamente no te preocupes ya tengo al entrenador listo para tus pequeñas clases de modelos, incluso tengo al director perfecto para ti, ¡Gracias Lían!. –podía ver a la perfección como Alejandro estaba rebosando de alegría, sonrió ligeramente feliz olvidando la mala sensación que lo había embargado minutos antes.
Cuando había entrado al aula este como era usual le daba una cara de asco a Lían, y empezó a dar la clase, haciendo preguntas adrede para que Lían se equivocase mas eso jamás sucedió puesto que este respondía una tranquilidad que le hacia irritar, sobre todo le enojaba la indiferencia del chico y la atención que Alejandro tenia con este.
. –Señor Neón deje de interrumpir al señor Asfard. –dijo el profesor homero cuando vio a Lían preguntarle algo a Alejandro.
. –Ooo profesor no se preocupe no me importa además ya terminamos. –respondió Alejandro alegremente, el profesor hiso un sonido de aprobación hacia el y miro con malos ojos a Lían. Cuando termino la clase Lían y Alejandro se separaron, Lían caminaba hacia la biblioteca a encontrar material cuando fue interceptado por el profesor homero.
. –Señor Neón, me gustaría hablar con usted. –dijo el profesor Homero parándose derecho tratando de quedar a la misma altura que Lían puesto que aunque era considerado alto, Lían era considerado muy alto y desaliñado.
. –Usted dira. –respondio en voz baja sin sonar intimidado sino tranquilo, y paciente. El profesor gruño por lo bajo y le dijo.
. –Aquí no, es un tema un poco ´privado si no le molesta. –se notaba que trataba de ser cortes a regañadientes. Lían lo pensó por unos segundos, para ver si le convenía después de todo realmente necesitaba el material pero no era urgente.
. –Bien. –acepto, el profesor sonrió maliciosamente. Lían pensaba que su profesor debería de ser mas disimulado.
. –Bien, ven sígame. –dijo el profesor dando media vuelta para dirigirse hacia su despacho con Lían detrás de el , en total silencio, al entrar en el despacho el profesor Homero hiso sentarse Lían en un sillón frente a una mesa baja, el profesor se sentó enfrente de el y le miro con sus ojos azul oscuro, como si estuviera tramando algo.
. –He visto que usted se lleva muy bien con el Señor Asfard. –empezó aparentemente tranquilo el profesor.
. –Si, es mi amigo. –estas palabras hicieron fruncir un poco el ceño de su profesor.
. –Amigo?... ya veo, estoy muy seguro de que usted es un hombre competente Señor Neón…pero. –Lían ya sabia lo que su profesor le hiba a decir, la única razón por la que seguía ahí sentado era porque se le hacia interesante de alguna forma.
. –No creo conveniente que alguien como el Señor Asfard se involucre con alguien como usted…ya sabe el Señor Asfard es poseedor de un gran talento para el diseño tiene un futuro por delante muy alentador, personas como el no deberían de estar con…personas que no se adecuan a el. –dijo el profesor Homero haciendo una pausa para recibir alguna reacción de Lían, que nunca obtuvo. Lían estaba levemente impresionado de lo sutil de sus palabras el se esperaba algo mas directo, tal vez era algún tipo de consideración? Pensaba.
. –Ah. –dijo como respuesta, y sin aparente emoción, el profesor enojado ante la indiferencia de Lían opto por ser mas hiriente.
. –Bueno por si no me ha entendido, lo que trato de decirle es que la porquería no debería aferrarse a las sabanas blancas, en otras palabras gente sin ningún valor como usted debería de mantenerse alejado de alguien increíblemente prometedor como el Señor Asfard. –
. –Mmn. –
. –¡Ya deje de contestarme con monosílabas!. –el profesor ya enojado se había parado y agarrado a Lían del cuello para que se levantase, este se levanto y quedo frente a su profesor.
. –Es que no entiendes lo que te estoy diciendo, podrás tener un gran talento pero lo cierto es que no vales nada, solo hay que darte una mirada para saberlo, crees que no lo se? Eres uno de los temas principales entre los profesores. –sonrió arrogante. –que tu familia, simplemente te hecho a este país a tu suerte porque no te soportaban, porque no querían que fueras una molestia para ellos, alguien como tu no merece ni la mas mínima consideración. –Lían no parecía reaccionar con nada de lo que el dijese cosa que le hacia enojar aun mas. –¡Eres un incompetente!.
Puff
El profesor no supo como pero de un momento a otro había sido lanzado para el sillón contrario tan fuerte que sintió que su espalda se quebraría, volteo a ver a Lían que estaba parado frente a el derecho no usualmente curvado como solia estar, y con parte de su cabello hacia un lado dejándole ver su cara. Se quedo sin habla, y con un gran miedo creciendo dentro de el. Lían le miraba tranquilo desde arriba sus hermosas facciones no mostraban ninguna emoción y sus profundos ojos dorados impasibles eran increíblemente aterradores, el profesor Homero sentía que se hundía terriblemente en sus ojos quemándose vivo, estaba aterrado y maravillado a la vez. No podia evitar sentirse una sabandija enfrente de el.
. –A mi…poco me importa lo que usted piense de mi, no es mi problema que usted tenga celos o un absurdo complejo de inferioridad ante mi, así que si tiene algo que decir sobre las malas compañías de Alejandro dígaselas usted a el. –la voz de Lían era tranquila y profunda, en un tono de voz no bajo sino regular pero su voz penetraba mas que nunca en los oídos del profesor.
. –Tu…tu..t..tu. –trataba de articular el profesor sin éxito palabra alguna sin saber porque. Lían miro su reloj dándose cuenta de que ya casi era su próxima clase, se arreglo la camisa y volvió a acomodarse el cabello saliendo del despacho dejando al profesor perturbado dentro. Después de unos minutos el profesor se tranquilizo y oyo la puerta abrirse, movio la cabeza para ver quien era tan rápido que por poco se pudo haber roto el cuello.
. –Ya ve profesor le aconsejo que no se meta con el o sufrirá unas terribles consecuencias…sobre todo de mi parte. –dijo Alejandro apoyándose en la pared al lado de la puerta con las manos cruzadas.
. –Señor A..Asfard. –logro mencionar el profesor con voz temblorosa.
. –Escuche todo. –sonrió maliciosamente. –absolutamente todo…digame profesor como se sintió al ver a semejante ser humano ante sus ojos? Aterrado por su silenciosa ira mas mortal que cualquier otra o maravillado por sus hermosas facciones y ojos. –Alejandro se deleitaba y divertía al ver a su profesor tan desencajado. Había buscado a Lían para decirle que sus clases se cancelaron y se lo encontró siguiendo al profesor, su curiosidad pudo mas y se encontró escuchando toda la monótona conversación en la que estaban.
. –El…no puedo decir nada. –el profesor se encontraba cabizbajo agarrando su cabeza entre sus manos, de alguna manera aun se sentía dentro de esa mira.
. –Que se siente ser derrotado por una “porquería” como el, nuevamente en todos los sentidos?...creo profesor que usted ya se dio cuenta que la verdadera porquería que había era…usted, no se si ha oído esta frase profesor “Dios los hace, ellos se juntan” es imposible que yo me haya ido a juntar con alguien mas bajo que la basura, nosotros somos perfectos nadie lo niega y por eso es que estamos juntos. Gente como usted es la que esta muy lejos de entendernos y alcanzarlos es mas ni siquiera es capaz de mirarnos bien. – Alejandro rio ante la cara desecha de su profesor y salió del aula encontrándose con Lían esperándolo.
. –¡Hola!. –dijo animadamente Alejandro a sabiendas de que lo había escuchado, Lían suspiro y dijo.
. –Nos vamos?. –
. –Por supuesto además tenemos que empezar tus prácticas de modelo, Lían te espero en mi casa mañana en la tarde has espacio en tu agenda. –Lían suspiro, cansado pensando en lo apretado que estaba realmente no podía creer que hubiese aceptado.
Después de todo su periodo de clases, fue a su trabajo concluyéndolo para llegar a su casa sin ningún percance, al llegar a su casa como siempre se preparaba para ir a su trabajo nocturno.
Cuando llego observo detenidamente todo el bar por si acaso veía al hombre travestido, pero afortunadamente para el, el hombre ya no había venido y eso sin saber porque le quito un gran peso de encima, siguió con su trabajo normalmente sintiéndose placenteramente mas tranquilo.
En un gran edificio, donde los departamento de policía de mas alto rango y mas se encontraba un departamento especial donde gente excepcional y de los mejores trabajaban, reconocidos por todo el mundo, temidos por la mayoría incluso por sus compañeros de rangos menores les temían y respetaban, se consideraba un departamento secreto para dominio publico, puesto que muy pocos sabían de ellos. Lo curioso de este departamento es que se subdividía en 3 grupos, cada grupo tenia a su líder y estos operaban todo en conjunto con los demás grupos, por separado pero siempre conectados.
. –Jefe, Derek a encontrado una abertura a las ratas blancas, pide permiso para la intromisión. –informo Tulio a Seferión líder del primer eslabón.
. –Que se infiltre, que busque las paradas y que se aprenda los planos y vías de comercio oculto. –dijo en voz autoritaria y aterciopelada agradable a oídos humanos así como atemorizante en algunas ocasiones.
. –¡Si!
. –También, Tulio, ponte en contacto con Dante, necesito que me encuentre agencias de trabajo cercanas a la empresa del Ruso. –ordeno viendo unos papeles de su escritorio.
. –No será necesario, ya te e buscado la información que necesitas. –dijo un hombre alto con bata blanca de cabellos castaños claros ojos miel oscuro y sonrisa autosuficiente. Seferión sonrió satisfecho y tomo el folder en que tenia Dante.
. –Ooo una agencia de modelos?. –dijo con una sonrisa interesada.
. –Así es al parecer, la agencia mas cercana a nuestra presa es una agencia de modelos asociada con el, ademas de que aunque no parecen estar relacionados con el caso hay una persona en particular que creo que te gustaría conocer. –dijo Derek dando pequeños detalles.
. –Austin Gerrero, acusado una vez por tener negocios implícitos denuncias que fueron totalmente relevadas por no tener pruebas suficientes contra el hombre, se logro hacer con la agencia que la manejan originalmente la madre y el hijo, el al parecer es un tio lejano cercano a la Señora, quien le recomendó asociarse junto con la empresa Rusa para la patrocinación de sus colecciones. –siguió Derek.
. –Ya veo, si ese es el caso entonces el hombre podría estar fuertemente involucrado en el caso, además que por lo que veo aquí, también podría ser el responsable de un fantasma lavado de dinero.
. –Buscan un fotógrafo profesional y particular para un modelo especial según me he informado, quieren que sea discreto y sobre todo que se desentienda totalmente cuando sus deberes hayan culminado. –Derek se había sentado en un sofá cómodamente tomando de un te ya servido por Tulio.
. –Mmmm y e de suponer que el encargado va a ser Austin si no me equivoco el hombre a pesar de todo es un gran director. –sijo Seferión tomando aciento en el sofá de cuero negro individual cruzando elegantemente las piernas y apoyando su barbilla en su muñeca.
. –Así es, además de que se es bien conocido de que tiene una inclinación hacia el otro lado, creo que note costaría absolutamente nada sacarle la sopa al hombre. –Seferión alzo una ceja y le miro sin expresión alguna por unos segundos, después sonrió gatunamente como gato que va por su presa. Derek cerro un ojo y mirándolo con el otro dijo.
. –Ya mande la solicitud, falsa identidad, reputación robada con autorización, dirección, instrumentos, nombre y apellido, no creo que quieras utilizar un disfraz esta vez, empieza mañana jefe. –saco una caja de cigarrillos y se llevó uno a la boca, metió su mano en un bolsillo de su túnica y saco un encendedor, encendiendo el cigarrillo después.
. –Por supuesto. –dijo mirando con sus verde grisáceos ojos el humo que salía de la colilla del cigarrillo.
Al siguiente día Lían estaba mas que cansado, se había quedado en turno hasta muy tarde atendiendo y haciendo varios trabajos a la vez, por la falta de personal, al llegar a la casa se hecho en su cama y durmió como pocas veces lo había podido lograr, profundamente.
Se levanto con pereza y fue a prepararse al baño se lavo el pelo y enjabono completamente, al salir secaba su pelo con una toalla ya teniendo los jeans puestos se acercó al armario y recordando la sesión de practica que Alejandro le había dicho miro críticamente su guardarropa. La verdad no se sentía con ánimos pero como había aceptado, tenia que hacer su esfuerzo y poner un poco de el, miro su ropa sacando una camisa manga larga negra, y opto por quedarse lo jeans que traía puesto, se puso sus calcetines blancos y unos zapatos verde pasto de tela, se amarro las agujetas y se paro en busca de su celular para llamar al trabajo de construcción.
. –Hola?. –dijo Lían.
. –Ahh Lían muchacho buenos días, como estas? Ya comiste? Vas a la escuela?. –su jefe lo atiborro de un montón de preguntas .
. –Buenos días, estoy bien no se preocupes, pero quería pedirle si me podia dar unos días libres?, lo que pasa es que un amigo me pidió su mi ayuda y yo no pude negarme. –
. –Mmmm eres uno de mis muchachos mas diligentes será difícil sin ti, pero igual te dare los días después de todo te lo mereces, tómalos como una pequeñas vacaciones Jajajaja. –
. –Gracias. –
. –No agradezcas, bueno hijo te dejo mi esposa ya despertó chaou. –colgó, Lían sonrió agradecido. Ato su cabello como usualmente lo hacia, agarro sus cosas y salió de su casa camino a la cafetería.
Mientras tanto en una gran casa, amplia lujosa y elegante se encontraba Alejandro entrevistando por segunda ves al fotógrafo frente a el.
. –Mmmm no me convences. –dijo Alejandro sentado enfrente de un hombre muy alto, cabello largo ligeramente ondulado color cobrizo atado a una cola en la punta de lado reposando en su hombro izquierdo, de ojos verde grisáceo y de unas perfiladas facciones, finas pero no por eso deja de ser masculinas, el hombre en frente de el era estúpidamente hermoso, ¡por dios! Tendría la belleza de algún linaje divino, el solo hecho de no nada mas ver la cara sino también el cuerpo, una perfecto cuerpo obviamente muy bien formado “debajo de esas ropas que lleva de seguro oculta el cuerpo de todo un adonis” pensaba Alejandro.
“además tiene un excelente gusto en la ropa” el hombre tenia una camisa blanca con detalles negros como de fuego en un costado, un abrigo negro elegante, unos pantalones negros de mezclilla y unos zapatos grises.
. –Veas por donde lo veas no pareces un fotógrafo. –menciono Alejandro entrecerrando el mirar.
Seferión divertido por el escrutamiento del niño sonrió, por supuesto que el ya había pasado de sobra la entrevista con la madre, esto según la señora era para que su hijo se sintiera tranquilo.
. –A no? Entonces que le parezco?. –dijo disimuladamente juguetón.
. –Un modelo profesional muy solicitado por el mundo. –respondió Alejandro revisando su celular para ver sus mensajes de texto.
. –Me alaga. –
. –Mmmm solo digo la verdad, por otra parte…tal vez el se sienta cómodo con alguien semejante. –se dijo a si mismo sin mucha intención de que el otro le escuchase.
. –Ah, habla del modelo exclusivo?...me parece que ustedes se toman muchas molestias por un solo modelo, tan importante es?. –indago Seferión levemente interesado en el tema.
. –Eso en parte no debería de importante, pero para que dejes de indagar te dire solamente que el modelo es un buen amigo mio, cuesta mucho que acepte este tipo de propuestas así que tenia que hacer algunos arreglos y es por eso que tu estas siendo contratado en este mismo instante. Tienes que estar en el estudio de aquí en la tarde la 1 en punto no lo olvides. –concluyo Alejandro levantándose apurado y caminando hacia la puerta con el celular aun en mano.
. –Mmmm osea que se trata de mera preferencia?. –saco su celular y marco para que lo vinieran a traer.
….
Lían ya terminando su periodo de clases fue interceptado por Alejandro quien le agarro de la mano y lo llevo aun carro negro en donde entraron los dos por los asientos de atrás.
. –¡Seba avanza!. –grito Alejandro, el chofer empezó a conducir.
. –Era necesario que me arrastraras?. –pregunto Lían sobándose la cabeza por el impacto que había tenido al chocar con la puerta.
. –Por supuesto, no quería que me cambiaras de opinión a ultimo momento. –alego Alejandro observando a Lían de pies a cabeza.
. –Estas bien vestido veo que no tenias intención de huir.
. –Por supuesto que no, te lo prometí. –dijo Lían mirando por la ventana.
. –Bueno hoy tendras una pequeñas sesiones fotográficas, y mañana una practica por la pasarela, después…-Alejandro empezó a explicarle todo su horario de la tarde, Lían estaba severamente dudando sobre si haber dicho que si hubiese sido la mejor opción.
El camino era largo, pudo ver que pasaron por una carretera para llegar a una zona alejada de la ciudad llegando a una casa en la montaña. Lían bajo después de Alejandro y observo la gran casa con detenimiento, pensó que si el viaje iba a ser así de largo, el trabajo debía de ser peor.
. –Ya llegamos, no perdamos tiempo, vamos Lían. –dijo animadamente Alejandro jalándolo del brazo, al entrar pudo ver todo muy elegante e increíblemente grande pero muy hermoso.
Alejandro lo llevo a un gran cuarto en donde había mucha ropa.
. –Bien puesto que me gusta mucho la ropa que llevas solamente vamos a arreglar tu cabello. –Alejandro sento a Lían en una silla frente a un espejo y le empezó a peinar, dejándole su cabello peinado para atrás con un elegante flequillo adornando su agraciada cara. Después de eso se dirigieron al estudio, Alejandro le informo a Lían que tendría que cambiarse de ropa seguidamente, cada vez que lo requiriese.
Al entrar se encontró a un Señor de abundante barba de ojos negros en un traje gris a rayas.
. –Ohhh pero si tu debes ser el amado amigo de mi sobrino, un placer soy Austin Guerrero te acompañare como tu instructor y director. –Austin estaba encantado con Lían no mas verlo, era una lastima que nada mas lo pudiese usar una vez.
. –Bueno vez esas sabanas blancas en ese colchón tienes que posar ahí, quítate los zapatos no te preocupes lo haras bien solo se tu mismo. –dijo Alejandro dándole pequeños empujoncitos a Lían. Lían se quito sus zapatos y sus calcetines y se dirigió al colchón blanco con sabanas totalmente blancas, entreabrió un poco su camisa como le había dicho Alejandro.
Se sento en el colchón como le dijeron y espero a que viniese el fotógrafo que según le habían dicho estaba en la otra habitación alistando su cámara.
Seferión alistaba su equipo de fotografía, sabia perfectamente como se utilizaban ya que el en verdad si era un fotógrafo profesional pero nada mas como un hobby.
. –Fotógrafo el modelo esta listo. –aviso un hombre tocando la puerta. Seferión agarro sus cosas y salio de la habitación en la que estaba entrando a la del lado sin mirar al modelo puso el trípode en tres lugares con cámaras.
. –Los dejaremos para que hagas mejor tu trabajo. –dijo Alejandro saliendo de la puerta. No fue sino hasta que hubo acabado de ajustar las cámaras que se digno a ver al modelo, no pudo abrir mas sus afilados ojos de la impresión. Frente a el estaba el hermoso mesero detrás de los lentes observando retraído un cuadro de la pared, ni siquiera se había dado cuenta de que el ya estaba ahí.
Agarro la cámara de enfrente ajusto el ángulo y tomo la primera foto con flash haciendo que Lían le volteara a ver, su cara casi tan sorprendida como la suya o mas.
. –Es bueno verte de nuevo Lían. –
. –Tu. –señalo con la voz, Seferión sonrió juguetonamente.
. –Mira lo que hace el destino, quien pensaría que nos volveríamos a encontrar en estas circunstancias. –dijo con un ligero toque de burla, y de diversión.
Lían le miro con una ceja alzada, recapitulando su anterior mal presentimiento tenia bien presente que ese hombre no le traería nada bueno, pero tampoco era que pudiera salir de ahí huyendo sin una explicación clara, porque no la había. Lo miro con mas detenimiento parando en que Seferión estaba vestido normalmente con ropa masculina, a pesar de que podía notar ligeros toques de maquillaje, casi nada pero ahí estaba, y tenia que admitir que era muy atractivo y guapo, pero seguía teniendo ese instinto que le decía con todas sus fuerzas que se alejara de el.
. –Sere tu nuevo fotógrafo, llevémonos bien…querido. –dijo sonriendo risueño, pensó que esa parte del trabajo iba a ser muy entretenida.
Lían frunció ligeramente el ceño por como le había llamado, podía ver claramente que esa situación divertía al hombre frente a el, pero dejo sus berrinches para otro momento teniendo en cuenta el trabajo de su amigo.
. –Bien. –respiro profundamente.
. –Bueno te parece que empezamos ahora cariño?. –pregunto viendo el ligero efecto que causaba cuando se dirigía al menor de esa manera, no pudo ocultar su diversión.
. –Relájate, por ahora has unas poses libres no te tenses. –indico Seferión un poco mas serio. Lían hizo lo que le indico y se sentó en el colchón con una pierna flexionada y la otra a la altura del pecho dejando apoyar su cabeza en la rodilla mirando con su tranquila dorada mirada a la cámara, Seferión se estremeció al ver con todo detalle esos ojos tan tranquilos, profundos y nostálgicos que parecían que te envolvían y te hundían muy dentro de ellos. Tomo las primeras fotos indicando cambio de pose cada cierto tiempo, Lían tenia talento natural frente a la cámara, no se tensaba ni se ponía nervioso, sus poses eran naturales y provocativas, emanaba una sensualidad única que atraería a todo aquel quien le viera, pero que a la ves los alejaría.
Después de tomar las fotos, Seferión decidió irse al siguiente paso de un solo admitía que estaba un poco ansioso por el próximo paso, pero le resultaba muy interesante, una de las características de un fotógrafo profesional es que logra que el objeto de su mira se desenvuelva completamente, que quede totalmente al descubierto, incluso descubriendo la verdadera naturaleza del modelo.
. –Lían iremos al siguiente paso, quítate la camisa por favor. –pidió Seferión con una sonrisa ligeramente maliciosa. Lían dudo por unos segundo pero después fue desabotonando poco a poco su camisa dejando ver de a poco las partes de su bien formado pecho, hasta llegar al ejercitado y perfecto abdomen. Sin ninguna intención deslizo lentamente su camisa por sus brazos para quitársela, Seferión no desaprovecho para tomar cada escena que le parecía captura dora.
Seferión se sorprendió un poco al ver el tatuaje de Lían, aunque era mas que obvio que debajo de toda esa ropa se encontrase un muy perfecto cuerpo, pero el tatuaje le llamo de sobremanera la atención no se le veía mal a Lían es mas se amoldaba a la perfección con el.
En esta ocasión las fotos fueron de Lían arropado ligeramente con la sábana blanca, se impresiono al ver un montón de plumas debajo de las sabanas que cada cierto tiempo que se movía el estas también volaban, le hiso gracia y recordó un pequeño cuerpo envuelto en un manto de sábanas blancas y suaves como la seda que se le había sido dado en brazos alguna ves y que el hubo agarrado con una delicadeza y añoranza enternecedora. Miro el manto que posaba sobre su cadera, lo agarro y sonrió levemente acercando la sabana a su frente.
Seferión que era espectador, nada mas tomo una foto diferente a cuando tomaba varias de una misma escena, veía la melancolía, tristeza, nostalgia y una gran ternura a través de esos ojos no pudo evitar preguntar.
. –Porque tan triste cariño. –su voz sonaba suave y conciliadora, por primera ves le fue agradable el escucharle hablar para Lían. Alzo su cabeza encontrándose con esos ojos verde grisáceo que parecía que veían hasta en lo más profundo de ti, y en ese momento lo estaba viendo con una extraña mirada que de alguna manera le hiso contarle algo que lo encerraba en sus pensamientos y no lo dejaba salir.
. –Cuando era mas joven, vivía con mi familia, vivia con mi madre y cuatro hermanos menores que yo, mi madre era una música profesional, siempre estaba fuera casi nunca con nosotros por lo tanto yo era el que se hacia cargo de mis hermanos menores, casi como si yo fuera mama, sin embargo eso no significaba que mi madre no nos quisiese simplemente su trabajo no lo permitía. Adore a mis hermanos hasta el punto de la locura y ellos me adoraban a mi, tuve a cada uno de ellos entre mis brazos y para mi alegría venia un quinto miembro mas, nació una niña la nombre allegra porque me sentía tan feliz en ese momento…. –la cara de Lían veía con tristeza profunda la manta blanca que sostenía en su mano su voz era baja, casi un murmullo. –estaba en vuelta en un bulto de mantas blancas, se veía muy hermosa…lastimosamente minutos después me dijeron que mi mama no pudo sobrevivir al parto y que murió, no me resentí…me sentí triste por su muerte pero prometí que cuidaría a esa niña a mis demás hermanitos con mi vida…. pero por cosas que pasan ahora me veo alejado de todo aquello que atesore con mi vida. –sus ultimas palabras resonaron en un tono de profunda tristeza y culpa.
Seferión dejo la cámara y se acercó sigiloso a Lían, le agarro la barbilla y la elevo suavemente hacia el, sonriendo.
. –Eres alguien inesperadamente puro. –su mano de su barbilla paso a acariciar sutilmente con la yema de sus largos dedos la mejilla de Lían quien sin saber porque cerro los ojos disfrutando de aquella caricia.
Seferión no dijo nada mas, la palma de su mano reposaba sobre la mejilla del otro quien abría lentamente sus ojos teniéndolos fijos en los suyos, hundiéndose nuevamente en las profundidades de esa mirada negándose a apartarse.
. –Eres fuerte. –susurraba, su voz profunda viajaba por los oídos de Lían y le taladraban su cerebro mandando ligeros toques eléctricos por su cuerpo, se sentía completamente desnudo ante la mirada de ese hombre.
Por unos minutos ninguno dijo nada como si no se atreviesen a interrumpir ese momento pero Lían sintiéndose por demás extraño fue el primero en romper contacto desviando la mirada y apartando suavemente la mano posada sobre su mejilla.
. –Creo…que hay que seguir con la sesión. –recomendó Lían tratando de ocultar un ligero sonrojo en su cara que no paso desapercibido por Seferión quien sonrió coquetamente, se acerco a su oído sin que se diera cuenta y le dijo. –Si, empezamos cariño?. –Lían asintió con la cabeza alejándose discretamente del hombre detrás suyo.
Después de eso la sesión acabo sin ningún problema, Lían trataba de no pensar en lo sucedido en ese momento puesto que no era para nada conveniente menos teniendo al hombre en frente.
Después de que se acabo la sesión de fotos de hacerle cambiarse la ropa una y otra vez, se cambio con la ropa con la había llegado sintiéndose incomodo por la insistente mirada, afortunadamente Seferión no había dicho ni una palabra.
TOC TOC
Se oyo que alguien tocaba la puerta y casi inmediatamente después abría, Alejandro entro por la puerta encontrándose a Lían con la camisa sin abrochar, se acerco a el y se abalanzo en un gran abrazo.
. –Lían, que bueno que hubieses aceptado ser mi modelo ya veras como te compensare cuando todo esto acabe. –Alejandro se separo un poco de el y le abotono la camisa con cuidado innecesario.
. –Mmmm y cuánto tiempo tendré que estar en esto?. –pregunto con pequeñas esperanzas de que no fueran mucho.
. –Hasta el día del estreno de nuestra colección, no te preocupes tenemos suficiente tiempo. –dijo Alejandro acomodando el cuello de la camisa de Lían. Seferión observaba silencioso la platica entre los jóvenes sintiéndose un poco inquieto hasta que llego Austin para recordar parte de la agenda a su sobrino, y para llamarlo a el para aclarar algunos detalles de su trabajo, Seferión le siguió sin problema dejando a los dos jóvenes en la sala de fotografías.
Horas después Alejandro estaba con Lían en el auto junto con Seferión puesto que su tio le había ofrecido llevarlo junto con el de regreso a la ciudad, pero como tuvo algunos inconvenientes le dejo la tarea a su sobrino.
. –Bueno Lían, mañana de igual manera te vendrás conmigo para el trabajo, aclare unas cosas con mi mama y te vamos a pagar la cantidad justa para que no trabajes de gratis después de todo te estoy robando de tu otro empleo. –Lían asintió. –Sino como?. –dijo con ironía refiriéndose a la gran distancia del lugar, Alejandro iba a contestarle con una broma cuando el celular de Lían empezó a vibrar. Lían contesto.
. –Buenas. –
. –¡Lían estas con Alejandro en este instante verdad ponme en alta voz ahora mismo!. –grito Andrea desde la otra línea. Lían miro de reojo a Seferión que miraba por la ventana y que estaba al lado suyo.
. –Es realmente necesario?. –pregunto
. –¡SI!. –Lían suspiro y apretó el botón de alta voz.
. –/Ya estoy en alta voz?./ –se oía a Andrea desde la otra.
. –Eh? Andrea?. –pregunto Alejandro confirmándole a la otra su pregunta.
. -/COMO SE TE OCURRE METER A Lían EN ESE TIPO DE TRABAJO BIEN SABES QUE NO LE GUSTA, ES MAS ES UN NIÑO TIENE 16 AÑOS Alejandro SABES LO QUE ESTO PODRIA OCASIONAR.?/
Seferión abrió los ojos sorprendido de escuchar la edad de Lían.
. –Exageras, digo realmente eso no se aplica mucho a el…trabaja en la constructora, en un Bar y en las mañanas en una cafetería, es un adulto completamente que se vale por si mismo. –dijo relajado Alejandro restándole importancia.
. -/Y AUN SABIENDO QUE TIENE TRES TRABAJOS VAS Y LE OBLIGAS A TOMAR OTRO ESQUE ESTAS LOCO O QUE?/. –
. –En primera si estoy loco y en segunda se lo pregunte no le obligue, chao chao. –seguidamente Alejandro corto la llamada.
. –Se va a enojar mucho mañana. –murmuro Lían.
. –Tienes 16 años?. –pregunto incrédulo Seferión, Lían le miro.
. –Si. –
. –Enserio?...yo te veía de 19 años, vaya. –Al parecer du edad de verdad impresiono a Seferión, cosa que le divertido a Lían y rio un poco por lo bajo.
. –No eres el primero. –dijo con disimulada diversión.
. –Tal ves lo seas en edad pero tienes la suficiente madurez de un adulto, no solo en la apariencia también como persona. –agrego Alejandro respondiendo unos mensajes de texto. Seferión observo por unos segundos a Lían, quien le sostenía la mirada. Seferión sonrió de lado y Lían frunció ligeramente el ceño dando un suspiro y desviando la mirada.
El resto del viaje la pasaron entre pequeños comentarios que Iban y van sin problema, aunque Lían se mantenía callado con los ojos cerrados, apoyando la cara en la palma de su mano en dirección hacia la ventana.
Al llegar a cierta parte de la ciudad Lían le dijo a Alejandro que se bajaría y ahí termino su viaje juntos. En el caso de Seferión, este solicito que lo dejaran en un restaurante muy famoso de 5 estrellas en donde se iba a encontrar con unos de sus contactos.