- Miyagi...- me llamo despues de un rato en completo silencio
- Shinobu....- respondi a su llamado. Realmente no sabia que hacer o que decir o como comenzar, habia en mi mente un monton de dudas que queria aclarar y al mismo tiempo parecia que estaba completamente en blanco ya que no podia formular ni una sola oracion o pregunta.
- Yo.. esperaba que vinieras a buscarme, te espere los primeros dos años... Rizako me llamo una vez y me dijo que tu y ella habian estado saliendo mucho y me senti celoso y traicionado. Yo te estaba esperando y tu estabas con ella. Me converti en una persona mas fria, ya no queria que nadie se me acercara incuso las personas que empezaba a considerar amigos comence a alejarles porque no me sentia bien, no queria ser engañado de nuevo. Las cosas pasaron demasiado rapido en ese momento No queria responder tus llamadas, mis padres me decian que te llamara que solias preguntar mucho por mi. Yo... no queria ilusionarme y decidi esperar a que tu me buscaras. No supe lo de tu enfermedad hasta que mi padre me llamo. Tuviste el valor de decirles de nuestra relacion solo para saber en donde estaba. Aun me siento confundido ya que no se si creer en las palabras de Rizako o creer en los pocos hechos que hay ante mi.
- Shinobu, yo nunca deje de pensar en ti, de intentar hablar contigo. Siempre preguntaba por ti pero tus padres me decian que era tu petición que yo no supiera de ti. Incluso Rizako me dijo que tu no queria saber nada de mi. Se que ella sabia lo nuestro pero no pense que se fuera a meter de esa manera.
- Bueno, mi hermana se quedo sola para vestir santos al final, no era de esperarse que se molestara que tu si encontraras a alguien. - dijo sonriendo con la cabeza baja mirando su taza de cafe. - supongo que debi imaginarlo, pero no era muy maduro en ese tiempo.
- y Sheyla...- dije esperando ser y no ser escuchado.
- Ella es mi esposa, la madre de mis dos hijas.... - dijo de tajo volteando a verme pero su mirada era algo que no supe interpretar. - Sheyla estaba casada con un japones y vivian en Irlanda, pero su esposo era un apostador estaba enfermo y la aposto a ella y a su hija en una tirada la cual perdio y Sheyla y Hikari fueron entregadas. El hombre jamas las busco ni intento recuperarlas. Sheyla fue violada y maltratada hasta que logro escapar con un grupo de refugiados de Irak que buscaban una mejor vida en otro pais, ahi fue donde encontraron a Akemi. Akemi estaba sola sus padres habian muerto en un ataque por parte de estados unidos. Tambien paso por muchas cosas. Un dia estaba tomando el almuerzo en un parque cuando Akemi tomo mi bolso y salio corriendo,
Flash back.
Me encontraba comiendo, habia dejado el bolso a un lado, me distraje pensando en como estaria Miyagi, si estaria comiendo bien, si se vera más viejo de lo que ya se veia. Estaba perdido en mis pensamientos que no me di cuenta cuando una pequeña niña se paro frente a mi y tomo mi bolso para depsues echar a correr pero se tropezo lo que hizo que captara mi atención y la viera salir disparada con mis cosas.
No tenia mucho tiempo ya que la siguiente clase empezaria en una hora y debia regresar a la universidad. La persegui hasta un lugar que no habia conocido antes. La perdi de vista entre algunas cajas para volver a verla ya dentro de una casa.
Era una casa sin puertas, en un barrio que parecia sacado de una pelicula sensacionalista. No sabia donde estaba pero sabia que no era un lugar donde estuviera seguro considerando la forma de vestir que tenia. Me apresure a encontrarme con ella.
Entre a su casa y me encontre cara a cara con Sheya. Aunque no lo parezca ella es mucho más fuerte en caracter que cualquier hombre, incluso heterosexual, que habia conocido. Tenia en la mano una cazuela.
- ¿que haces aqui? - decia amenazandome con aquel objeto – largate...
-... Solo vengo por un bolso que me quitaron – dije levantando ambas manos. Algo que pude notar fue que estaa una pequeña niña detras de ella – no quiero hacerles daño – dije ya rendido.
- Akemi...- llamo a la niña la cual salio de arriba de la casa con el bolso en manos – regresale sus cosas. - dijo molesta. La niña solo la miro y me miro a mi obedecio y me dio mis cosas – ya vete, no necesitamos niños ricos aqui.
-... - solo asenti con la cabeza y sali del lugar, esa mujer si que daba miedo.
Regrese a la escuela, y le comente en parte la experiencia que habia tenido con aquelas personas omitiendo el detalle de que me habian quitado el bolso. El me dijo que hacia un tiempo se habian aceptado refugiados pero como eran demasiados decidieron crear algunos lugres en donde pudieran vivir sin causar realmente muchos problemas lo cual solo era darle atole con el dedo a toda la población. En ese lugar ocurrian mas crimenes en una semana que en lodres en un año y que la mayoria no eran ni siquiera investigados ya que los refugiados no eran conciderados como ciudadanos por o que a las autoridades no es importaba mucho lo que pasara y entre menos hubiera mejor.
Entre otros detalles me comentaba que la mayoria de las mujeres vendian su cuerpo para poder sustentar su vida. Este tipo de situaciones hacian que perdiera fe en la humanidad. Me entristeci de pensar y considerar logica la forma de actuar de aquella mujer. Además de tener que lidiar con todos los problemas de ahi que no podia simplemente cerrar la puerta para protegerse a ella y a sus hijas tenia que buscar la forma de criar a sus hijas.
Le pregunte si habia alguna forma de poder ayudarlos y me dijo que solo se podia considerar ciudadano a alguien que se casara con un ciudadano, algo parecido a lo que hacian en estados unidos.
Yo no estaba dispuesto a casarme con otra persona que no fuera Miyagi, pero sentia mucha pena por ellas.
Los días siguientes comence a llevarles cosas, les dejaba afuera latas de comida, dinero, ropa, entre otras cosas. En una ocaciones dejando formula de leche para la niña más pequeña me econtre frente a frente con Sheyla la cual me confronto de forma violenta diciendo que ela no necesitaba caridad. Le explique que no lo hacia por ser caridad ni esperando agradecimiento que simplemente me nacia hacerlo. Ella era demasiado desconfiada.
Segui haciendolo a pesar de que ella decia que no, poco a poco me fui acercando primero a Akemi la cual me conto lo que habia pasado con ellas desde que se conocieron y Sheyla poco a poco fue dejandome entrar a su zona de confianza. Nos hicimos buenos amigos despues de un tiempo. Me conto su historia, lo mal que la paso con aquel hombre. Que un de las esposa de ese hombre le ayudo a escapar y lo dificil que fue que incluso cuando sentia que se rendia, su hija Hikari le hacia seguir adelante.
Paso un año y decidi que quizas solo hasta que le dieran la ciudadania podia estar con ella y entonces se lo propuse. Se nego rotundamente; ella sabia mi historia, que estaba esperando a Miyagi, el amor que siempre le profese a pesar de la distancia y el tiempo; le dije que no seria para siempre que solo seria hasta que consiguiera la ciudadania para que pudeira encontrar un buen trabajo. Despues de una enorme discución que duro más de un mes acepto.
Nos casamos, fue algo sencillo, no queria que nadie se enterara para o meterla en problemas. Esperamos un año y adoptamos legalmente a Akemi. Poco a poco me fui acostumbrando a la vida así, llegar y encontrarla y a las niñas, que me dijeran padre, que las regañara y criara lo mejor posible. Sheyla busco trabajo tambien y encontro uno muy bueno. Pero aun no queriamos fijar fecha de divorcio, era más comodo así.
Decidi ir a Japón a buscar a Miyagi motivado por Sheyla pero fue ne ese momento cuando mi padre me llamo.
- Shinobu... - su voz más que seria sonaba triste- Le di tu direccion a Miyagi, no dudes que llegara en unos días, el me conto que ustedes dos desde hace un tiempo tenian una relación. Yo, cro que fui un pare bueno, no me molesta que seas así... Pero.. ¿por que no decirmelo?
- Lo siento padre..- solo atine a decir eso
- Escucha Miyagi esta grave, su cuerpo esta cada vez más debil. Por favor recibelo bien. Es una situación dificil. No se que sentimientos tengas, por lo que me dijo no sae que te casaste ni de tu relacion con Sheyla.
- Entiendo padre...- no sabia como podria reaccionar ante eso. Por fin habia tenido las hagallas para buscarlo y el viene hacia aca y no olamente eso sino que estuviera enfermo. No queria perderlo, no quiero perderlo. Colgue el telefono – Sheyla...
La llame y le explique la situación ella lo entendio y pidio sus vacaciones para eserar en la casa a su llegada, yo no podia hacerlo ya que mi trabajo solo prestaba vacaciones de una semana al año y ya las habia tomado cuando Hikari se enfermo y tuvimos que estar con ella en el hospital.
Estuvo esperando en casa hasta que Miyagi finalmente llego.
End flash back.
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continuara.....