La mañana se me hizo tan corta que por primera vez deseé que las clases durarán más, fui el último en entregar el examen, no porque no supiera, más bien por qué no quería salir.
Casi obligado y sin ninguna prisa camine hasta la cafetería intentando evitar lo inevitable, avancé hasta la última mesa del casino, la que está junto al ventanal
-Qué onda - saludé, me apoyé sobre la pared y me metí a la boca el bombón que Erick me entrego
-¿Que tal el examen? - preguntó Jasón
-Hum...- levanté los hombros restándole importancia, voltee hacia la ventana, el manto grisáceo de ayer seguía allí
-Pensamos que para el último día, podríamos ir a Hunan's... ¿Qué opinas? - me pregunto Ángel
-Eh... si claro, está bien
-¿Lo conoces? - indagó Erick
- ¿El qué?
-Hunan's ¿Conoces el lugar?
-Hum... - ladee la cabeza, la verdad es que no, no conocía ese lugar -No... Pero enseguida me dirán que es.- dije poniendo pose de chulo. Ángel rió
-Edwin explica - dijo dándole un codazo al mencionado
-¿Qué? ¿Por qué yo? - protestó
-Ja Jajaja solo hazlo, que a ti te queda mejor- bromeó Jasón, yo no le vi la gracia
-Eh... pues... es un bar - tartamudeo
-¿Qué clase de bar? - pregunte sin siquiera mirarle
-Ah... es... - todos empezaron a reír, así que ya molesto pregunté
-¿Es qué? - al voltear a ver, la cara de Edwin me confundió, estaba rojo hasta las orejas intentando ocultarse tras su flequillo sin mucho éxito
-Es un bar ¡Gay!- gritó Jasón, abrí la boca incrédulo.
-¿Están de broma?
-No- la voz de Edwin sonó más grave de lo normal, estaba molesto -¿Tienes algún problema contra los gays?- pregunto cruzándose de brazos
-¿Debería?- contesté imitando su postura.
Silencio... incómodo silencio.
-Eh... bueno... mañana hay examen así que me retiro, Aidan ¿Te vienes conmigo?
- ...Claro - tome mi mochila y camine al lado de Ángel, despidiéndome con un gesto de los demás. Mi hermano podría ser lento para algunas cosas, así mismo podría ser el único en darse cuenta de otras y en este momento agradecía eso
En total silencio caminamos hasta el piso que compartíamos...
Entramos a la habitación, lance mi mochila a la cama y saque mis apuntes sentándome sobre la misma.
Ángel que se había mantenido en silencio todo el tiempo hablo, y para que hablo.
- ¿Me contarás? - preguntó acomodándose sobre su cama
- ¿Qué? - contesté sin mucho interés
- Lo que viste... - dijo eso último en un susurro, que de no haber sido porque a esa hora la mayoría estaba en la cafetería o las afueras de sus facultades, no habría escuchado
- ¿Dónde? - aparte la mirada de mis apuntes para dirigirla a mi compañero
- ¿En el salón de Edwin? - preguntó casi con miedo. Y para menos, mi gesto sereno cambio a uno de molestia. Chasqueando la lengua, pase una mano por mi cabello desordenándolo
- Creo que ya lo sabes, ¿Para qué debería decírtelo? -
- ¿Qué?
- ¿No lo sabes? - pregunté sarcástico
- no... No sé de qué hablas - respondió. Empezando a morderse el labio inferior como cada vez que se ponía nervioso
- ¡Oh! Vamos Z, ¿Gunan's? no puede ser coincidencia - dije haciendo énfasis en ese "Z" que él sabía muy bien que solo lo llamaba de ese modo cuando quería intimidarlo
- no... No sé - murmuró mordiéndose con más fuerza el labio. Me baje de la cama y camine hasta la suya. Sin dejar de mirarlo me pare enfrente de él
- Dime Z, ¿De quién fue la idea de ir a un bar gay? - entrecerré los ojos buscando presionar a Ángel hasta que hablara. Y cuando apartó la mirada supe que había ganado
- ¡Fue Edwin! – dijo en un gritó. Sonreí.
- ¿Aún quieres saber lo que vi?