Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Mi Señor por CaedesDarkParadaise

[Reviews - 117]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

- Me llamo James, mi señor.- James hizo una mueca ante lo que iba a decir.- Su nuevo sirviente.

La expresión de Thomas se volvió granito. No podía dejar que viera un rastro de emoción en su rostro hasta que pudiera controlarlas.

Y menos un novato.

El tal James, con solo analizarle, se sabia que era todo un libro abierto.

Apenas escondía sus emociones. Thomas sabia que estaba enfadado, irritado y juraría que él era el objeto de su enojo. Pero no sabia porque.

- ¿Tienes algún problema conmigo?- le pregunto Tom con voz helada.- ¡Responde, sirviente!

James apretó los labios.

- No le conozco.- respondió altivo.- No tengo ningún problema con usted...mi señor.

"Una mentira más, una menos"

- Mentiroso.- le dijo Tom, y vio un rastro de sorpresa en el rostro del sirviente.- ¿Me conoces, acaso? ¿Íntimamente, tal vez?

Los ojos castaños de James se ampliaron y un jadeo broto de sus labios.

Tom continuo.- Si es así. No me guardes rencor.

Y compuso una sonrisa arrogante, aunque supiera de antemano que aquello que había salido de su boca era totalmente falso.

Thomas Riddle Jr. solo había tenido dos experiencias sexuales en su vida y de la última ni se acordaba. Nunca se refirió a sí mismo como un hombreriego. Podría decirse que acompaño durante un tiempo a Rabastan en sus citas, pero jamás saco provecho de ellas. …l tenia tantas cosas en la cabeza que termino por aburrirse. Pero ahora...

Observo de nuevo a James, quien le miraba por el rabillo del ojo con las mejillas sonrojadas. Luego suspiro y pronunció con cuidado:

- No nos conocemos de nada, mi señor. Y mucho menos íntimamente.- se aclaro la garganta.- Se lo aseguro, y tampoco querría.- Tom alzo una ceja.- Al fin y al cabo usted y yo somos de mundos distintos.- siseo. Dio una ojeada por la habitación.- Volveré más tarde cuando usted no esté para continuar limpiando.- compuso una sonrisa dulce y afilada. Un estremecimiento recorrió la espalda de Tom.- Mi señor.

Y salió sin más golpeando el suelo con zancadas toscas, y plantando a un Tom totalmente asombrado por su actitud.

¿Que demonios le habré hecho?

Tom cabeceo rápidamente.

No era asunto suyo, ni tampoco debería tomarle importancia a un simple sirviente novato.

Aunque hermoso y atrayente.


Cuando James cerró la puerta a sus espaldas tuvo un irremediable deseo de gritar mil obscenidades en distintos idiomas. Con las dos manos sobre su boca camino lejos de la habitación de Riddle.

- Lord endemoniado.- gruño.- ¿Íntimamente, tal vez?- repitio usando un tono parecido al de su nuevo...señor.

Y al girar por el pasillo se quedo paralizado ante la visión que tenia delante. Un Sirius inconsciente flotando sobre la alfombra roja del suelo y delante de él con la varita en alto iba otro hombre joven, de estatura pequeña, y vestido de negro.

Las palabras se le quedaron atascadas a James en la garganta.

- ¿Se..?- empezó a decir. Severus se dio cuenta, giró los pies y analizo a James de pies a cabeza.- ¿Señor?

- ¿Conoces a este...- miro a Sirius con frialdad.- hombre inconsciente?

James inhalo aire aliviado y reunió toda su valentía.

- Es mi compañero.- "y amigo del alma".- ¿Ha hecho algo malo?

- Entrar sin permiso a mi habitación.

- Hemos empezado a trabajar hoy en el castillo.- Severus alzó la barbilla.- Si recuerdo bien, él es el sirviente encargado de su cuarto.

- Oh. Solo ha sido un desafortunado cambio de información.- James apretó los labios. "Malditos Slytherins"- Le llevaré a la enfermería. Mis desmaius suelen ser muy potentes.

- No se tome la molestia, señor.- Severus se quedo de pie viendo como el sirviente tomaba al pelinegro de las axilas para bajarlo del aire.- Lo haré yo.

- ¿Seguro?.- James asintió despacio.- Está bien. Mañana me disculpare apropiadamente con él. Después de todo ha sido mi culpa.- se giro con pies de plomo y luego retrocedió.- Ah, si. Gracias...

James no dejo que el asombro acaparara su cara.

- James, mi señor.

- Gracias, James.- y se fue por donde vino.

- ¿Que les ocurre a los Slytherin?- escupió.- Parecen...normales.- cabeceó.- No. Las apariencias engañan.- y miro a Sirius desmayado en el suelo.- ¿Que clase de auror eres tú? Perro de segunda.- le dijo a sabiendas de que no le oía.

James pensaba en aparecerse en las habitaciones pero sabia que era demasiado arriesgado mostrar magia en un castillo lleno de mortifagos. Además que los sirvientes tenían reglas limitadas sobre sus poderes dentro de su lugar de trabajo a menos que fuera en defensa de la vida. Para suerte de James apareció Amos, pálido y con las gafas sobresaliendo de la punta de la nariz, que al ver a James y a Sirius inconsciente volvió en sí.

- Ayudame, Amos.- le dijo James agarrando el brazo de Sirius.- Llevemoslo a las habitaciones antes de que alguien más nos vea.

- ¿Que le ha ocurrido?- le interrogo exaltado.- ¿Fueron ellos?

- Esta inconsciente porque el señor de su habitación no tuvo más remedio que hacerlo. ¿Que demonios le habrá dicho?- masculló James. Amos negó con la cabeza.- Pasar desapercibidos y un cuerno. El primer dia y todo está yendo del revés.- Empezaron a tirar de Sirius hasta las escaleras de los sirvientes. James se limpio el sudor de la frente.

Amos le miró.- ¿Hablas tan bien por ti?

Potter afirmó con la cabeza.- Me conoces bien.- rió quedo.- Yo y mi bocaza. Tendré que controlarme de ahora en adelante. ¿Que tal te fue con Lady Arabella?

Diggory reprimió un escalofrío.

- Temo que dentro de poco seré deshonrado, James.- Este se le quedo mirando.- Y no solo físicamente. ¿Sabías que te pueden violar con los ojos? Ella exhala pura sexualidad. He tenido que estar alejado unos metros prudentes mientras me explicaba las tareas que debía realizar. Ahora entiendo lo que me dijo la señora Molly.

- No creo que sea para tanto, Amos.- dijo inseguro.- Protege tu "varita". No te descuides, amigo. Los Slytherins son de cuidado.

Y Amos asintió para volver a su trabajo de llevar a Sirius por las escaleras. Consiguieron no dar muchos cabezazos a Sirius con los escalones y de paso no caerse con el peso del Black encima de ellos. Apenas llegaron a la puerta de la habitación de Sirius cuando otras tres puertas fueron abiertas abruptamente. Eran Remus, Peter y Lily.

No tardaron en alarmarse al ver a Sirius siendo arrastrado por James y Amos.

- ¿Que ha ocurrido?- Remus no tardo en coger a Sirius por los tobillos.- ¿Habeís estado jugando, James?

- ¡Por supuesto que no! Yo no...-Remus levanto las cejas.- Bueno si. Pero este no es el caso.

- Entremos antes de que nos oigan.- les aviso Lily mirando a su alrededor.- ¡Vamos!

Peter hecho un hechizo silenciador alrededor del pasillo antes de entrar.

Echaron a Sirius sobre el colchón de su cuarto y rodearon la cama.

- Ha sido su nuevo "señor"- les informo James.- No he querido alarmarme demasiado rápido. Despertemos a Sirius para que nos cuente su parte del incidente.

- Eso ha sido muy sabio de tu parte, James.- soltó Remus antes de exaltarse por unos golpes en la puerta.

James los miro a todos para avanzar hacia la puerta. Tomo el manillar con fuerza y giro despacio.

- Soy Nivalis.- La voz de Arthur resonó en sus oídos con un alivio feroz.- Vengo con Remo.

"¿Y Rómulo?"- pensaron los Merodeadores.

No tardo en arrancar la puerta de su lugar de origen y jalar el cuello de sus camisas para que entraran.

Los dos observaron el cuerpo tendido de Sirius.

- Os ha ido tan bien como a nosotros, ¿no?- bromeó Fabian destensando la espalda.

- ¡Ah! Estoy harta.

Lily invoco un vaso de agua y echo el líquido sobre el rostro de Sirius.

- ¡Por merlín!- chillo Sirius al despertarse tan rudamente.- ¡Loca!

- ¡Perro tonto!- le soltó de vuelta.

James se abalanzo sobre Sirius con un gruñido feroz.

- ¡Perro de segunda!- Sirius amplio los ojos.- ¡Dime por todo lo que mas quieras! ¿¡Que le hiciste al Lord ese!?

- Cálmate, cornamenta.- murmuró Sirius. Y luego un brillo recordatorio llego a sus ojos- ¡El muy maldito me hechizo!

- Ahora te das cuenta.- Peter se golpeo la cabeza.- Recuerda, canuto. Dinos lo que ocurrió para saber que medidas tomar con ellos.

Sirius se sentó en la cama seguido de un receloso James.

- Entre en su habitación y lo primero que hice fue examinar su cuarto.- Amos le paso un pañuelo para que se limpiara la cara húmeda.- Gracias, amigo.- Paró para limpiarse el rostro para impaciencia de los Merodeadores, y prosiguió.- Y descubrí otra habitación que resultó ser su laboratorio, pero esta protegida con hechizos innombrables. Iba a intentar analizar que tipo de hechizos eran cuando la varita de mi "señor".- dijo con burla.- Severus Snape se clavo en mi cuello.

- ¿Que clase de auror eres tú?- le preguntó Arthur a Sirius con sorna. Este le fulmino.- Debiste tener mas cuidado.

- El muy....apareció de la nada. Ni siquiera había oído sus pasos.- Sirius echo la cabeza para atrás, y susurro para sí.- No oí sus pasos.

- ¿Y te hechizo?

Sirius se rasco la cabeza avergonzado esperando unos segundos para contestar a la pregunta de Lily.

- En realidad me exigio que le dijera quien era.- contesto.- También que buscaba en su habitación. La verdad es que estaba demasiado alterado. Parece ser muy celoso de su intimidad. Y yo estaba tan confuso que le...intente seducir.

- ¿¡Que!?

Los Merodeadores rodaron los ojos con exasperación.

Solo a Sirius se le ocurriría seducir al enemigo.

- Puede ser un maldito mortífago, pero si no lo fuera ya me lo hubiera llevado a la cama.

- Sirius.- suspiró Frank entrando por la puerta y sorprendiendo a los de la habitación.- Perdón.

- Ya estamos todos.- Fabian se adelanto unos pasos, insonorizó el cuarto de nuevo y habló con voz seria:- Al parecer Sirius no es el único que se ha accidentado. Gideon podrá compartir el regaño de James.- El aludido masculló entre dientes.

- ¿Como?- se adelantó Amos atento a sus palabras.

- El plan de entrar sigilosamente nos ha explotado en la cara.- Remus gimió.- Gideon está inconsciente en la enfermería del castillo por intentar frenar una caída. Y lo peor de todo es descubrir a quién salvo...- tosió incómodo.

- ¿Quién?

- Al entrenador oficial de Slytherin.

Los Merodeadores gimieron al unísono totalmente rendidos.

¡Malditos Slytherins!

Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).